ISABEL 3 ( Erika)

La precoz Erika, le narra a Isabel su relación con tres negros de la localidad y como se convirtió en su esclava sexual.

ISABEL 3 (Erika)

A la mañana siguiente, la sirviente fue a despertar a Isabel diciéndole que tenía una visita, una jovencita, que estaba en la piscina. Isabel salió rápidamente y se sorprendió al encontrar a Erika bañándose desnuda, cuando la niña vio a Isabel, salió rápidamente de la piscina y le dio un beso muy sensual.

Isabel se maravilló de la belleza de la niña, con un cuerpo adolescente y desplegando una gran sensualidad, su pubis apenas mostraba una pelusa morena y no parecía tan joven como era, sin embargo, era bastante menor que ella, pensó que tal vez las niñas danesas se desarrollaban más rápidamente que las latinas.

--Hola Isabel, espero que no te incomode que me bañe en tu piscina, pero con tanto calor no lo resistí, ja, ja. —

--Absolutamente Erika, es tu casa, y dime, ¿qué te trae por acá? —

--Nada en especial Isabel, te vi  ayer y pensé que podríamos platicar de cosas interesantes—Respondió la niña con la mirada de la que hace una travesura.

Erika se sentó en una mecedora y con toda desfachatez abrió las piernas y se empezó a tocar el sexo excitándose visiblemente y empezó a masturbarse sin importar de su compañía. Isabel no sabia que hacer al verla en esa posición a la vista de la servidumbre, pero ella pareció inalterable.

--Sabes Isabel, hoy en la tarde voy al barrio de mis amigos negros, ¿no gustas acompañarme?, te aseguro que te va a resultar una experiencia muy excitante—

--¿Te refieres a los negros que te acompañaban en el club nocturno anoche?, por cierto, que me parecieron bastante mayorcitos para ti —Le contestó Isabel sin ocultar su sorpresa.

--Si, los mismos, sabes…uno de ellos, Lothar, es mi novio…o, más bien mi amante, lo conocí hace ya varios meses y me enamoré de él, es maravilloso y yo soy su esclava cada quince días—

--¿Cada quince días? —

--Si, como te has de imaginar, mis padres no consentirían que anduviera con él, pero cada dos semanas invento que salgo con una amiga a una casa en las afueras, pero en realidad la paso con el y sus amigos. No te imaginas la de cosas que me ha enseñado, si tienes tiempo te relato como ha sido mi aventura con ellos. --

Isabel  estaba sumamente interesada, así que mando traer algunas bebidas y se aprestó a escuchar la historia de la niña precoz:

--Mira, hace varios meses, caminando en la zona prohibida con Pierre, fue cuando le conocí, de inmediato me atrajo muchísimo, su corpulencia, su negrura, su fealdad todo eso despertó en mi un gran morbo y me hizo que no me importara nada y fui yo la que lo abordé, al principio no me hizo caso pues estaba yo muy niña, pero se dio cuenta de que no importaba gran cosa mi edad, para no hacerlo largo, antes de terminar el día ya me había ido a su casa y estábamos follando como dos bestias en celo, desde entonces, me convertí en su esclava sexual, no quería salir de su casa y que me estuviera follando, me enseñó muchas cosas y yo disfrutaba cada vez más, me enseñó a follar por el culo y por la boca, su semen se convirtió en mi adicción, adoraba su cuerpo y le lamia cada centímetro, aprendí a meterle la lengua por el culo ya que eso le calentaba mucho y se le empinaba cada vez que se lo hacía, cada semana experimentábamos algo diferente, me hice adicta a todo lo que salía de su cuerpo, me gustaba que me escupiera en la boca, incluso, cada vez que iba a mear, yo estaba a su lado rogándole que lo hiciera en mi boca.

Un día, estando acostados después de follar, entraron los dos amigos que viven con él, yo me ofusqué un poco, pues estaba completamente desnuda y oliendo a sexo, cuando se dio cuenta de mi vergüenza, me agarró fuertemente de la cara y me dijo que si quería seguir viéndolo tenía que hacer con sus amigos todo lo que hacía con él, pues tenían un pacto de compartir todo, yo, al principio estaba un poco recelosa y molesta, pero me entró miedo de que me fuera a dejar. Así que le dije que haría todo lo que él quisiera, desde entonces, fui la esclava sexual de todos y yo gozaba cada vez más siéndolo.

Ellos gozaban ordenándome hacer cosas cada vez más sucias y degradantes, me obligaron a que, cada vez que fueran al retrete tenía que limpiarles el culo con la lengua…al principio me dio un poco de asco y Lothar, al darse cuenta, me empezó a azotar, después de eso le tomé gusto…ahora gozo mucho haciéndolo.

Después de varias semanas decidieron que era tiempo de hacer otras cosas más bizarras, así, un día, metieron a la casa tres vagabundos todos sucios y se divirtieron ordenándome hacer con ellos las cosas más obscenas y sucias, les lamia los pies después de hacerles caminar en la suciedad, lamí sus vergas llenas de esmegma de varios días, bebí sus meados y también les metí la lengua en el culo mierdoso y ni que decir de que me follaran por todos lados. —

Isabel estaba visiblemente excitada con el relato de Erika, sus ojos destilaban lujuria y la niña

se dio cuenta de la morbosidad que le provocaba.

--¡Pero, Erika!, como es posible que te degrades hasta ese punto, pero continua por favor dime todas esas cosas asquerosas que te hicieron hacer—

--Me gusta Isabel… cada vez que lo hago, gozo al sentirme degradada, pero eso no es todo, unas semanas después, a Lothar se le ocurrió algo. Llevó un perro grande y me dijo que debía hacer con el perro lo que hacia con ellos, porque el perro era su amigo. Yo al principio me negué, pero me ató con una cadena y me empezó a azotar las nalgas hasta casi sangrar, yo le imploré y le dije que haría de todo como el quisiera, ¡Quien iba a pensar que después me gustara tanto!, ja, ja. Desde entonces cada vez me ponen a mamársela y ya me folló el coño y el ano, y ¡ME ENCANTA!, también me dijo que, si bebía los meados de ellos también lo debería hacer con los del perro, y también le limpio el culo cada vez que caga. —

--Cuéntame eso con detalle Erika, me da mucho morbo, ¡mírame!, ¡Tócame!, siente como estoy mojada por lo que me cuentas, dime como se la mamabas—

Erika, entusiasmada por la calentura de Isabel, acercó su mano y empezó a acariciar su sexo mientras con voz muy baja siguió con el relato.

--Te explico… cuando llegaron con el perro, todavía no estaba empitonado y me dijeron que tenía que excitarlo, como yo no sabía cómo, me dijeron que me recostara en un colchón que previamente habían colocado en el piso, luego esparcieron aceite en diferentes partes de mi cuerpo, la boca mis senos y especialmente mi vulva que ya estaba hinchada de la excitación, luego soltaron al perro que se puso a lamer entusiasmado el aceite, eso me enardeció, especialmente cuando lamio mi coño que ya estaba lleno de mis líquidos junto al aceite, luego, lamió mi cara y me dijeron que sacara la lengua para que besara al  perro, esto fue muy morboso, pues sentí como la baba del perro caía en mi boca…

--Ooo, Erika, que excitante, dime ¿te bebiste su baba? —

--Si… como si fuera la de mi amante, esto los puso muy calientes, entonces me hicieron ponerme en cuclillas mientras uno de ellos sostenía al perro y acercaba su culo a mi cara, alzando su cola me dijeron que lo besara como le hacía yo a Lothar, así que acerque mi boca y me puse a lamer su culo, todos se estaban masturbando con el espectáculo y yo cada vez estaba más encendida y empecé a meter mi lengua ..

Isabel estaba al borde del paroxismo escuchando a la pequeña y empezó a frotar su clítoris desesperadamente mientras le decía.

--¡Dime cuanto le metías la lengua!, Dime a que te sabía—

--Si, siiii…le metí la lengua todo lo que pude, y después le sacaron la verga entre las patas, debajo del culo y empecé a lamerlo como loca, tragando todos los chorros de semen que echaba la pobre bestia, no te imaginas como gocé—

--Todo esto es extraordinario querida Erika, no sabes el deseo que tengo de experimentar algo así. —

Erika continuó con su relato.

--Después, como vieron que era muy guarra, quisieron aprovecharme para ganar un dinero, pues la verdad es que son muy pobres, yo les dije que contaran conmigo, si querían venderme lo podían hacer. Cada semana llevaban dos o tres hombres que les daban dinero y les gustaba ver a jovencitas haciendo marranadas, lo hacíamos en la casa de Lothar, estos cada vez eran mas exigentes, una vez llevaron tres enanos…eran horribles y sucios, no te puedes imaginar lo asqueroso de su aspecto…Lothar y sus amigos querían ver cómo me follaban de todas las maneras, en un momento tenia a los tres dentro de mi ocupando mis tres agujeros, también llevaban perros a los que lamia el culo y se meaban encima de mí. Eso les dio la idea de usarme como retrete humano… ¡MIRAME!, en varias sesiones fui retrete de esos hombres y de los enanos o la escoria que llevaban.

--¡Eeerika!, eres una marrana!, pero me excitas, dime más, que otras porquerías te hicieron hacer—

--Una vez llevaron un tazón lleno de semen, olía más fuerte que lo habitual…me hicieron beberlo todo…después me dijeron que era semen de varios perros que recabaron durante la semana—

--Me hubiera gustado besarte después de degustar tal manjar ja, ja. --

--Hoy en la noche van a ir unos japoneses que ya han ido anteriormente, son muy sucios y degenerados, yo creo que durante quince días previos no se bañan para que yo les limpie con la lengua, también les gusta azotarme y a veces llevan hombres sucios para que me follen. ¿Por qué no me acompañas Isabel?, te gustará—

--Si ya lo creo, pero Pierre quedo de pasar por mi—

--Bueno será otro día, espero que goces bastante con Pierre—

--Creo que es una prueba para mí—Respondió Isabel sonriendo.

--Entonces, espera algo muy emocionante—Dijo Erika con una sonrisa maliciosa.

Continuará…