IS.01x01.Piloto - Un Mundo Nuevo

Hola, bienvenidos sean ustedes a mi primer relato ficticio, espero sea el primero de muchos, este lo he titulado ISLA SOBREVIVIENTE, cuenta la historia de… bueno, mejor no les digo detalles, solo léanlo, estoy pensando seriamente en convertirla en una serie, ojala les guste es una extraña mezcla de ficción post apocalíptica y degenere sexual, ojala les agrade toda la sarta de perversiones que soy capaz de imaginar,  antes de iniciar, quiero decirles que aunque este capitulo no es tan "fuerte" como pudieran ser algunos mas, tiene en sus personajes mucho potencial sexual y degenere a desarrollar, comenzare con algo ligero, para poco a poco ir aumentando el tono de los capitulos, algo mas, eh decidido ir agregando capitulos conforme vea el interes de los lectores, espero sus comentarios ya que en base a si comentan o no mis relatos es como decidire ir escribiendo mas o no. Estos relatos aunque son imaginarios y quiza no sean del todo del agrado de ustedes los hago con mucho morbo (principalmente) y cariño para ustedes, de modo que si no dejan comentarios entendere por ello que apestan y que no tienen interes en ellos.

Dejenme sus comentarios, para mi vale tanto un "gracias" como media cuartilla de comentario, o un "this shit sucks" como alguien que pudiera corregir la trama si es que un dia me equivoco, o si alguien me sugiere algo para un siguiente capitulo, me interesan mas que nada sus comentarios, asi sabre (lo reitero) si mis relatos interesan o solo estoy perdiendo mi tiempo...

ADVERTENCIA…

EL RELATO SIGUIENTE CONTIENE PALABRAS ALTISONANTES MISMAS QUE PODRIAN SER OFENSIVAS PARA ALGUNAS PERSONAS, DE TIPO SEXUAL, VIOLENTO, RACISTA Y DE OTROS TEMAS QUE PODRIAN SER TABU O DE TIPO INMORAL.  ASI MISMO PODRIA SER DEMACIADO FUERTE PARA ALGUNAS PERSONAS, SI NO ERES DE MENTE ABIERTA Y O EN ALGUN MOMENTO DE LA TRAMA NO LLEGAS A TOLERAR LO QUE SE DESPRENDE SE RECOMIENDA DEJAR DE LEER.

ESTE RELATO ES IMAGINARIO, NO REFLEJA DE NINGUNA MANERA LA MANERA DE PENSEAR O DE SER DE LA AUTORA, MISMA QUE SE DESLINDA DE CUALQUIER MAL USO QUE PUDIERAN DARLE A SU OBRA…

CAPITULO 1 UN MUNDO NUEVO

Y ya era lunes… como odio los lunes, a pesar que la semana inicia los domingos, los lunes son los días más inútiles de la semana, pero, ¿Qué más da? Si no existiera el lunes seguramente el martes seria quién ocuparía su lugar y así sucesivamente hasta quedarnos sin días de la semana.

Hacía un calor sofocante, raro para la temporada del año, cincuenta años después de la gran crisis seguíamos casi en la oscuridad, no hacia frio, pero tampoco calor, los ancianos del consejo decían que la temperatura era agradable a comparación de los años de la gran crisis o los anteriores a él.

Yo era una jovencita, tenia doce años, estaba en la edad en la que mis padres próximamente me entregarían en matrimonio, yo era la mayor de la familia seguida de mi hermano menos de un año menor que yo y mi pequeña hermanita de 9 años, debo admitir que mi infancia corrió rápido, apenas había empezado la escuela y ya estaba comprometida, debo admitirlo, no me gusto la idea, pero mi madre me convenció diciéndome que estaría bien, me habían prometido con el Alcalde del pueblo. El Alcalde era un viejo rabo verde, llego un día después del fallecimiento del anterior alcalde, Don Rodrigo, quien había muerto a consecuencia de una enfermedad cardiaca, muchos suponen que fue mientras cogía con su secretaria, pues su anciana mujer hacía años que no lo complacía. Así fue que Don Erasmo llego al pueblo como Alcalde, elegido por el Rey de la “Isla Sobrevivientes” (así se llama nuestro hogar ahora).

Para que puedan comprender lo difícil de la vida tendría que contarles cosas que a mí no me constan, solo les diré que tras la gran crisis hubo una extinción masiva, muerte, genocidio y cosas terribles, el mundo quedo reducido a solo nuestra gran Isla que no llega a poder ser llamada continente.

Entonces los Martel tomaron sus riquezas y poblaron esta isla, se proclamaron monarcas de ella y comenzaron a expandir si dominio en ella. El dominio estaba dividido en cuatro zonas, la Norte, la Centro, la Sur y por su puesto la Capital, cada una se dividía en pueblos menores donde existía un Alcalde, las zonas estaban a cargo de un Feudo que dominaba e imponía la ley del Rey. Los Martel impusieron sus leyes, las cuales estaban por encima de todas las leyes de la Isla. “El mundo se ha vuelto primitivo” decía mi bisabuelo que apenas y podía caminar y hablar, el nos contaba como antes los antiguos habitantes de la tierra habían vivido con las libertades que ahora no se tenían como la de elegir a los gobernantes, a mí en lo particular me pareció tonto, no imaginaba como el pueblo podría si quiera el pensar en imponer su ley, y lo sé porque si los pocos habitantes del pueblo apenas podíamos ponernos de a cuerdo en cosas tan simples como las organizaciones de nuestras festividades, ¿imaginan tener que elegir a alguien para gobernarnos a todos?, ¡imposible!.

Ya me había hecho a la idea de casarme con Don Erasmo, el era un viejito no muy alto, a decir verdad casi de mi misma estatura, apenas diez centímetros más alto que yo, su escasa cabellera era canosa, y con facilidad me quintuplicaba la edad, yo dudaba que el pobre pudiera algún día tener una erección. Cuando llego a cubrir la vacante del Alcalde se organizo una verbena popular, mi familia estuvo presente, nos vestimos con las ropas más elegantes que teníamos, pues la ley obligaba a que cada jefe de familia debidamente registrado en el ayuntamiento debiera de presentar a su familia personalmente cuando un alcalde nuevo llegase. Cuando toco el turno de mi familia Don Erasmo saludo a mi padre, y a todos nosotros, de algún modo quedo impresionado por mi belleza, el mismo no se inmuto en admitirlo:

-          “Que bella hija tiene usted, señor…”

-          Zaragoza, - respondió mi Padre y agrego mientras me miraba fijamente: - le agradecemos el cumplido-  yo agradecí también respondiendo un tanto tímida, nunca ningún hombre me había alagado de ningún modo:

-          Me honra Don Erasmo, que detalle- entonces me sonrojé

-          Tu niña es muy simpática Zaragoza- respondió Don Erasmo y agrego: -  tienes una familia muy bella y completa, incluso un varón para continuar tus tradiciones, tienes mi bendición para cualquier cosa que necesites, me gustaría que mañana a primera hora te presentaras para charlar de negocios, te ofreceré algo que no podrás rehusarte, será de gran valor para tu familia.

-          Me honra mi señor, mañana mismo a primera hora del día lo visitare, no lo dure.

Mi padre y mi familia partimos a casa, al día siguiente papa partió a primera hora para entrevistarse con Don Erasmo, volvió ya muy tarde y con una copas de más a anunciar con bombo y platillo que me había prometido a Don Erasmo en matrimonio y que tras mi boda con el nos brindarían un título de nobleza y tierras en el pueblo para trabajarlas o hacer de ellas lo que mi padre deseara. Mi madre fue feliz con la noticia de saber que nuestro futuro estaba prácticamente resuelto, pues al adquirir las tierras mi padre podría heredarlas a mi hermano, yo estaría casada con un Alcalde al cual poco tiempo le quedaría de vida y al morir heredaría sus bienes y riquezas, y siendo nobles mi hermana podría ser prometida a algún otro caballero noble de alguna otra casa afortunada, sin duda que habíamos salido de la pobreza en un golpe de suerte. Yo llore toda la noche, ¿Cómo era posible que ni si quiera me preguntaran si deseaba casarme con un anciano decrepito?, ni lo conocía, y además ¿Como podría amar a ese sujeto tan anciano?, mi abuelo compartió mis ideas pero mi padre era por ley el jefe de la familia, así que no pudo evitar que mi matrimonio se consumara.

Y en fin, ya era lunes y me preparaba para la noche de bodas, Don Erasmo estaba ebrio, apenas podía caminar, se recostó en la cama y me pidió que lo ayudara a desvestirse yo obedecí, estaba obligada, ya era su mujer, me dio miedo de pronto que al desvestirlo su miembro saliera erecto y firme, sabía que eso significaba que me haría suya, esa idea no me hacía sentir cómoda…

-          Mi señor- le dije cuando termine de desvestirlo

-          Dime pequeña Florecilla

-          No sé qué hacer, tengo miedo – le respondí casi llorando, el respondió:

-          No tienes que hacer nada, solo desnúdate lentamente, quiero verte por completo, y quiero que todas las noches me permitas verte mientras mis ojos vean.- yo obedecí, me desnude tímidamente, el sonreía al verme como me desnudaba poco a poco y al tiempo que me cubría con los brazos mis genitales y mis pequeños senos.

-          No tengas miedo jovencita- me dijo y añadió:- no perderás tu inocencia con un viejo acabado como yo, te contare algo- dijo al tiempo que se recargaba en la lujosa cabecera dorada- quiero que te sientes a mi lado, toma mi flácido miembro, notaras que apenas puede mantenerse firme y que no es capaz mas de darle placer a ninguna otra mujer, ni si quiera a mi mismo.- yo obedecí, tome su verga con mis dos manos, en efecto apenas podía sentirse vivo, casi no respondía al contacto de mis manos y era más que obvio que con su casi flácida verga sería incapaz de romper mi himen y quitarme la inocencia, además el pobre hombre apenas podía moverse lentamente.

-          Dígame entonces su historia mi señor- dije al tiempo que acariciaba su miembro con delicadeza, sentía por él una enorme lastima, a pesar de ser viejo no tenia edad para ser impotente, el comenzó entonces su historia:

-          Cuando era joven, un poco más que tu padre quizá, fui a la guerra con mi país, la crisis era extrema, tú lo sabes, dos o tres bombas nucleares y quedaba muy poco mundo para pelear por él, así que el cesaron los ataques de ese tipo, ¿cómo no?, ya se había destruido gran parte de la tierra, pocos sobrevivieron al hambre, y  a las tormentas radioactivas en la guerra, los que se salvaron se refugiaron en esta isla, los Martel invirtieron en ella y la volvieron fértil, muchos otros sobrevivientes como yo, si no quedaron mutilados o deformes quedamos aquejados por otros males, en mi caso este pito maldito y flacido, quiero que sepas algo mi niña, a pesar que esta verga no se pone dura mas, la sensación de placer aun la tengo. –al decir esto Don Erasmo se estremeció un poco, de pronto un espeso liquido blancuzco salió de su verga, había escuchado de eso, era su semen, pero jamás había visto algo así, me sorprendí tanto de ver como esa lechita salía a chorros, tanto que me salpico la cara y el cuerpo, Don Erasmo sonrió satisfecho y dijo: - no puedo satisfacerte a ti mi niña, pero te diré una cosa, mientras te mantengas doncella y me des satisfacción a mi tendrás todo lo que desees sea lo que sea. – Mis ojos brillaron cuando me dijo eso, me levante de un brinco y lo abrase recostándome en su pecho, olía a anciano, sí, claro, pero a un anciano limpio aseado y un tanto oloroso a alcohol, pero me había dado la mejor noticia de mi vida, ahora no tendría que dejar mi virginidad, al menos no mientras el viviera, pero me daba la esperanza de saber que después de su muerte podría ser libre de amar a quien yo deseara.