Intercambio Suegro con Nuera y el hijo conmigo
Recibió durante esa mañana la nuera a propuesta suya, la penetración de padre e hijo al mismo tiempo pero por diferentes agujeros, mientras yo con un enorme consolador los provocaba frente a ellos metiéndomelo y alternando cavidad
Un matrimonio amigo de mediana edad, al que había conocido años atrás en un club de intercambio y con el que aún mantenía una buena relación a pesar de la falta de mi exmarido con el que realmente coincidimos, me propone tras una cena con ellos , reactivar al padre de él, que tras haberse quedado viudo unos diez años atrás, no mantenía relación social y menos sexual con nadie, pues según contaba su hijo llevaba una vida de bohemio pues tras su jubilación solo salía de casa a nadar y caminar y un poco de pesca, pasando el resto de las noches siempre en casa o a veces con ellos .
Concretamos las cena sin que el supiera aquel trato y tras presentármelo me lleve una muy grata sorpresa, pues aquel apuesto viudo y jubilado se mantenía en un estado físico muy bien incluso una diría que esplendido, pues sus 67 años no parecían pesar sobre su cuerpo.
Rápidamente en la velada y con lo buen conversador que era, vi que era fans de la comida equilibrada y del deporte, por lo que no era de sorprender su físico tan bien cuidado, ya marcado por su blanco pelo típico de su edad, que para mí incluso le favorecía, pues tanto su cabeza como lo que se vislumbraba a través de su camisa siendo en su mayoría blanco y espeso producían en él un aspecto muy varonil.
Cenamos y fuimos a tomar tras la cena unos mojitos, a los que el casi se niega a tomar, pues era tanto su afán de cuidarse con el alcohol, que apenas consumía aunque esa noche ya llevaba algo de vino y ahora andaba por el segundo combinado.
La conversación fuimos llevándola por nuestro terreno donde una no paraba de insinuársele y provocarlo con mucho tacto, diciéndole entre risas que lo iba a llevar a una playa nudista conmigo para una poder lucir ligue, lo que provocaba en el que se fuera soltando y desinhibiendo llegando por momentos a cogerle su mano, respondiendo el con igual gesto incluso apoyando la misma en mis muslo con delicadeza.
Las copas estaban haciendo el efecto deseado, pues andaba el ya muy lanzado y más cuando tras ir caldeando la conversación, le confesamos que nosotros nos conocíamos gracias a un encuentro en un club de intercambio con que había ido con mi difunto marido.
No quedo sorprendido de esto pues dijo que sospechaba que su hijo y su nuera allí presente los frecuentaban pues siempre tuvo de ellos una imagen muy liberal, llegando a afirmar que años atrás había ido incluso con su difunta mujer a playas nudistas, aunque ella era más remisa a eso.
Vi que aquello llevaba buen camino por lo que nos trasladamos a mi ático a tomar en mi terraza las ultimas copas pues vivía muy cerca de allí y así no andábamos con coche.
Ya en él, y tomando un combinado me propuse dar un paso más, al igual que su hijo y nuera que comenzaron entre ellos con calentoñas para provocarlo y pasar una a la acción.
No hizo falta más pues tras llamarlo a la barra del mini bar a que me ayudara a reponer hielo en las copas, me roce con el provocándolo y notando que no se retiraba de mi lado, pues sorprendentemente puso una mano sobre mi cintura y me beso cariñosamente.
No se daba cuenta de que su hijo y nuera lo estaban viendo a través de los ventanales abiertos y que daban a la terraza, pasando una rápidamente a la acción y besándolo ahora lujuriosamente, pues le metí la lengua rápidamente en su boca y note que el la buscaba incluso hizo lo mismo con la suya.
Nos dimos una sobada de besos y manoseos allí mismos los dos que lo puso ardiendo, pues aunque había notado su bulto duro con los roces, realmente lo note fue cuando mi mano lo agarro y lo sobo fuertemente.
Ya no estaba pendiente de su hijo ni nuera o era tanto la excitación que tenía que quizás se había olvidado andaban allí, pues tras sobar mis pechos a través de mi blusa, saco uno de ellos y lo mordisqueo con premura y deseo.
Se le notaba estar falto de sexo pues parecía querer acelerarlo todo, aunque una fue calmándolo para que aquello durara y fuera bonito.
El dándose cuenta me dijo, perdona Tere, pero uno lleva tanto tiempo sin hacerlo que perdí el tacto, pasando una a la acción más fuerte, pues desabrochándole el cinturón y los pantalones, me agache tras la barra y comencé a mordisquear aquel enorme bulto que pedía lo liberaran de aquellos slip.
Él dijo- cuidado que está mi hijo y mi nuera mientras suspiraba y respiraba entrecortado cuando una ya le había bajado el slip y chupaba aquella bonita y sorprendente vieja polla que sin ser de las más grandes que había comido y tenido, sus 18 o 19 centímetros de rico grosor venoso la hacían muy apetecible.
Tenía para su edad sorprendentemente los huevos muy recogidos y pegados a su base, siendo estos de un tamaño considerable pues me encanto sobarlos con mi mano tan contraídos a su cuerpo.
Entraron su hijo y nuera al salón pues decía hacia fresco fuera, cuando el intento cómicamente intentar ocultarse y zafarse de mi rica mamada al verlos, pues andaba tan excitado que se había olvidado de ellos.
El hijo rompiendo el hielo total, le dijo; tranquilo viejo, disfruta que Tere es un encanto de mujer y te va a poner al día, que tenía ganas de verte con esa cara tan feliz y que quitaras la otra de amargado.
Él me tenía agarrada por mi cabeza mientras una no cejaba en la rica mamada, cuando ya casi a nuestro lado su nuera descaradamente miro para ver aquel paquete, diciendo: ummmmm no sé yo quien está disfrutando más si Tere o tu padre, pues menuda herramienta tiene mi suegro.
Pasaron ellos al sofá y tras desnudarse rápidamente ambos comenzaron también con sus juegos sobre el mismo, haciendo rápidamente un acrobático 69 que provoco al viejo, pues al notar una que él estaba a punto de correrse, preferí parar y darle de comer coñito a ver como se desenvolvía en ese sentido.
Era un maestro consolidado, pues me puso a mil por hora rápidamente, llevándomelo al sofá junto a su hijo y nuera para sentarme y abriendo las piernas le dije que continuara con la comida.
Se puso de rodillas sobre la alfombra y continúo con aquella majestuosa cena, mientras su hijo a su lado lo imitaba comiendo el gazapillo de su mujer.
Esta se corrió rápidamente provocando a una junto con aquella experta boca y lengua que también me llegara mi primer orgasmo de una explosividad divina.
Por lo que casi al unísono imitamos ambas parejas las posturas , pasando ellos a sentarse velando armas, una pegada a la cintura dura y tersa y la de mi pareja recta al frente también dura y venosa y un poco más gruesa que la de su hijo.
La comimos a la vez antes de subirme yo sobre aquella vieja y gruesa polla que andaba falta de conejo, sorprendiéndome ahora su aguante, pues antes había estado a punto de correrse con mi mamada.
Me saco mi segundo orgasmo y esto lo encendió para levantar su cadera a cada movimiento mío, acelerando una ahora el ritmo antes de soltar dentro de mi agasajado conejo toda aquella leche encalostrada y abundante que inundo y empapo toda mi gruta.
Sus gemidos y respiración fueron fuertes y masculinos lo que encendió a su hijo y nuera que casi unos minutos después se corrieron también.
Fue el sacármela cuando se quedaba morcillona, pero una lo beso y le dijo,- déjamela dentro que me gusta tenerla así.
Besándome el ahora cariñosamente bajando a mis pechos y dando cuenta sabiamente de ellos.
La nuera cariñosa y picantemente, le dijo: Suegro menudo polvo le pego a Tere, estaba falta ehhh ya vi de donde saco los genes su hijo, menudos son ustedes dos.
Una para calentar más el ambiente, le dijo también:- Pues para el tiempo que llevaba sin practicarlo no se le olvido detalle y tuvo buen aguante y por lo que noto aquí debajo esto no afloja mucho, se mantiene durilla.
Hija si es que no paras de moverte ricamente y claro uno con el tiempo que hacia no mojaba así, a cualquiera se le baja, no sea se encoja y luego no se levante, replico el.
Nos reímos los cuatro ya liberados de cualquier corte y situación cuando su hijo con el que una ya había follado tiempo atrás, lanzo su mano para acariciarme mis pezones mientras aún seguía sentado sobre su padre.
Este riendo le dijo, “no las quieras a las dos para ti”, anda golfete tocas los de tu mujer que los tiene ricos también.
La nuera rápidamente salto continuando con el juego y le dijo: anda mira mi suegro que también le gustan mis melones, cogiendo esta la mano de él y llevándosela a sus pechos.
Miro al hijo como disculpándose que él no había sido, y este lejos de reprocharle le animo a que continuara acariciándolos.
Aquello parecía un entresijo de manos intercambiándose de sitio, cuando note que una de las manos de su nuera estaba sobando las pelotas del viejo pues aun la tenía yo ensartada dentro de mí.
La nuera sin cortarse un pelo, soltó:“ cariño me encantan los huevos de tu padre , que duros y gordos son” besando al hijo al instante toda ella provocada por el dulce masaje que andaba dándole .
El hijo ni corto ni perezoso le animo a comérselos si tanto le gustaban y si su padre lo dejaba, por lo que una viendo la fiesta que había montada, me desclave dejando al aire aquella preciosa y vieja polla que aún tenía impregnada parte de mis jugos y de su crema.
Sin apenas tiempo de reaccionar habíamos intercambiado los papeles y ahora andaba yo clavada en la dura estaca del hijo que como ya dije anteriormente ya había catado, mientras la nuera comía la tranca del suegro que con los ojos cerrados parecía querer no ver aquella lujuriosa fiesta, aunque los gemidos delataban que su joven nuera le estaba dando una rica mamada.
Me volteo mi pareja y tras comerme mi conejito un buen rato calentándome al máximo, me penetro al estilo perrito sacándome un orgasmo magnifico, mientras la nuera apoyada ahora sobre el sofá con el culo en pompa, iba a recibir la estocada del viejo, metiéndole este el duro rabo entre las piernas hasta alcanzar su conejito que perforo de una estocada.
Allí los cuatros nos explayamos unos buenos minutos formando coros de gemidos entre barítonos y sopranos hasta que las piernas del viejo comenzaron a doblarse cuando descargaba ráfagas de ya más fluida leche sobre el coñito de su nuera, que este antes había explotado en un orgasmo colosal por los gritos que soltó ella.
Provoco esto al hijo que quiso acabar apoteósicamente, por lo que la saco de mi conejito y comenzó una penetración por mi puerta trasera que hizo las delicias de los allí presente, sorprendiéndose el viejo que por aquel agujero entrara de aquella manera la polla de su adulto retoño.
Nos corrimos casi al instante los dos mirando una en ese momento como la nuera limpiaba con una dulce comida las ultimas gotas de la cabeza semirrígida de su suegro, que ya daba señales de aflojar aquel venoso pollon, aunque seguía zafada sobre ese par de huevos que la tenían enamorada y loca.
Quedamos los cuatro rendidos y nos fuimos duchando a turnos para liberar aquel calor y ardor que fluida en el ambiente así como limpiar todos aquellos fluidos que se habían derramado.
Les invite a quedarse en casa y así lo hicieron, durmiendo yo con el viejo en mi cama de forma acaramelada, pues andaba el con falta de compañía y no dejo de abrazarme durante toda la noche, aunque no hubo sexo hasta el amanecer.
Monte igualmente el sofá cama para ellos, y aunque no sé si follaron más en la noche, pues una durmió como una lirona con aquella buena compañía, si que lo hicieron por la mañana cuando mis gemidos al ser penetrada por atrás por aquel abuelo, los contagiaron y se presentaron en mi gran cama para continuar allí la fiesta, alargándose durante un buen rato aquella bacanal familiar conmigo de anfitriona.
Recibió durante esa mañana la nuera a propuesta suya, la penetración de padre e hijo al mismo tiempo pero por diferentes agujeros, mientras yo con un enorme consolador los provocaba frente a ellos metiéndomelo y alternando cavidad.
Cuando ella se corrió dos veces como una gacela en celo, pasaron a mis dominios aquellas dos armas de velar mientras la nuera ahora se repasaba con mi consolador.
Me llego rápido un órganos, siguiéndole el viejo que por mi estrecho ano andaba trabajando, inundando este de su pastosa y matinal nata, haciendo que el hijo no tardara en llenarme por delante, dejándome inundada sobre la cama por ambos lados de ese rico y liquido elixir.
Finalizamos el evento sexual del día con sendas mamadas entre la nuera y una, pero cambiando de pareja, pues adoraba el viejo que su nuera le comiera aquel pollon, mientras sobaba sus pelotas y más en presencia de su hijo, provocando yo en este una corrida de escándalo de la que di sobrada cuenta con mi boca, pues no deje gota que se derramara.
Nos fuimos a comer para reponer fuerzas tras ducharnos y vestirnos y concretar nuevos encuentros, sorprendiéndome entre risas el viejo, que decía se mudaba a mi casa conmigo.
Yo le dije que estaba encantada, pero con una condición, “me tenía que follar todas las noches antes de dormir y al despertar por la mañana”.
Acepto el reto diciendo si se veía apurado ya llamaría a su hijo o quizás tirara de alguna amigo si a mí no me importaba para ayudarle en esa grata faena…. Aceptando una aquel grato y placentero trato…..