Inocentes historias de exhibicionismo

Hola, en general soy una chica muy seria, nadie se imagina al verme mucho menos al tratarme de lo que puedo ser capaz, a veces hasta yo misma me sorprendo.

Tengo 23 años y estudio comunicación soy alta (1.73)de tez blanca y un cuerpo que solo podría describir en una palabra (cachondo). En mi universidad soy famosa por mis piernas y mis "pompis" mismas que me encanta lucir buscando siempre la ropa apropiada para este fin y debido a este ejercicio diario nació en mí el ya irresistible placer del exhibicionismo, de lo cual les relataré a continuación algunas breves anecdotas:

Me encanta ir de compras al supermercado llevando mallas y alguna playerita a la cintura para que deje ver completamente mis pompis que son verdaderamente todo un espectáculo digno de admirarse, el caso es que yo me divierto viendo disimuladamente como los hombres me siguen por los pasillos tan solo para ir viendo el movimiento de mis nalgas.

En ocasiones he ido a alguna tienda departamental llevando alguna blusa o palatzo muy escotado y sin brasiere ya ahí me paseo sola con un botón (el primero)desabotonado de modo de que si alguien se encuentra al lado de mí puede llegarme a ver un seno totalmente desnudo, ya en alguna ocasión haciendo esto un hombre se me acercó y me señaló la teta para que me diera cuenta que se me estaba saliendo.

En varias ocasiones, asistiendo al cine con mi novio y en completa complicidad con él al apagar la luz de la sala me abro la blusa que lleve dejando ver solo de frente mis tetas, de manera que si alguien sale de la sala yendo por el pasillo puede llegar a creer que vio lo que en realidad sí vio.

Otras veces también yendo en auto con mi novio llevo alguna playerita de tirantitos y me la pongo como si fuera un top bajándomela de manera que casi se me vean los pezones deleitando con esto la pupila de autobuses o camionetas que pasen a nuestro lado, otras veces nos hemos divertido deteniéndonos a preguntar a algún desconocido por la calle alguna dirección encontrándome yo con los pechos totalmente al aire.

Pero hasta el momento la que considero mi más grande locura es el que me hice un video donde voy gradualmente desnudándome hasta quedarme sin nada, bueno llevo unos tacones negros, grabado esto en un departamento vacío y contra un ventanal sin cortina, una vez hecho esto se me ocurrió hacer una copia en formato vhs y me fui a la salida de una secundaria para varones dejándolo sobre una banca y espiando hasta constatar que un chico lo tomó. Me encanta imaginarme la sorpresa del chico al averiguar su contenido y más aún que quizá más amiguitos de él ya lo hayan visto . Estoy segura que más de uno se ha masturbado viendo mis nalgas en ese video.