Inocencia caribeña, Pervertida -14-
Madre, hija, sirvienta y su nena... Después de la boda.!
Acababa de correrme en el coño de mi preciosa mujer.
Estábamos casados y Lizbella era mi esposa por derecho, disfrutábamos una luna de miel en el invierno de Suiza, en un hotel.
Tanto la Boda como el convite y festejos solo fue para las personas allegadas.
Y una de las condiciones de poder casarnos era que su nenita nos acompañase... y yo estaba encantado de ello.
Pamela vino al dormitorio de los recién casados, su mamá y su nuevo papá.
Lizbella como de costumbre estaba borracha después de tanto tomar y dormía junto a mi lado en el momento de aparecer la hermosa Pamela medio desnuda con un tanguita y una camiseta que le quedaba pequeña y dejaba sus enormes pechos rebosantes casi al descubierto.
papi, tengo que decirte una cosa- me dice mi pequeña y hermosa hijita.
¿Que ocurre nenita?-
Llevo dos meses que no me llega la regla..., creo que me preñaste.-
¿Y no es lo que querías?- le contesto...
si papito, pero te acabas de casar con mi mami... ¿ que vamos a hacer?-
Pues nada le faltara a esa criatura, pues viene de la chica que más deseo-
Mi hermosa y culona hija cambia su cara de preocupación y se abalanza hacia mi lado, sin importarle que su preciosa madre y mi nueva esposa esté a mi lado durmiendo.
Te amo papi- Me dice al tiempo que se recuesta en la cama donde estaba con su madre dormida.
Solo espero que sea una hembra y se parezca a mi- me dice sonriente.
Sea lo que sea se parecerá un poco también a su padre.-
Siiiiii, pero que sea una niña, que la vista y le de todo lo que no tuve yo...- En ese momento se agacha y me baja el bañador con el que dormía junto a su madre, y empieza a lamer suavemente la punta de la polla que empezaba a a hincharse...
Te voy a sacar más leche de la que le diste a mi mami, tengo ganas de bebérmela toda calentita- Me dice mi dulce hijita ansiosa de complacerme.
Mi hija, empieza a lamer la polla , hasta ponérmela dura y restregársela toda por sus mofletes, como me gusta verla.
Papito mío- me habla con su boca llena de mi carne-
Dime hija mia- Le respondo , dándome cuenta de la mirada morbosa que me pone al preguntar.
Quiero que despiertes a mi mami y le hagas mirar como me chingas...-
Pero mi nena, acabamos de casarnos..., y aunque acepte el incesto que tenemos, no creo que le guste.-
Dámelo papiiiii, me dijiste que yo era tu niñita, y me da igual la guarra de mi madre..., Tu eres mío, y esa Chingadera de tu esposa no me va a robar lo que deseo, aunque sea mi madre....-
El deseo de esa chica morena, mirándome mientras me pide algo tan morboso al tiempo que se deshace de su blusa y empieza a amasar sus enormes tetas... no me deja más opción que hacerle caso.....
Despierto a la madre de la niña dándole bofetadas en la cara, hasta que se espabile.
Mira esposa mia, fíjate bien lo guarra que se ha vuelto tu niñita...- Le digo mientras se espabila.
¿Que pingas me dices?... tengo sueño mi amor...- Me responde mi mujer.
Que la cochina de tu nena quiere follarme..-
Pues follatela bien duro, pero mi hija no te da.............- Y apenas puede seguir hablando con la mezcla de alcohol y pastillas que toma mi nueva esposa
Mi hija toma el control y empieza dándole una bofetada a su madre..
- Mira puta borracha, Vincent me ha preñado y yo voy a ser su mujer verdadera, aunque tú te hayas casado con el. Y no solo as a tener una nieta, sino que vas a ser nuestra puta cuando queramos.-
Lizbella en cuanto escucha a su hija Pamela se despeja e intenta abofetearla, en el momento de que su niñita le agarra la mano y le golpea con su mano libre.
- Sabes que mamita?... tu maridito es mío y va a tener a mi bebita... y tu solo vas a ser nuestra sirvienta..., Pues el deseo de él es el olor de mi coño y saborear mi culo más que nada.-
En la noche de bodas de mi esposa Lizbella, su hija preñada de mí terminaba por fin la dulce e inocente Pamelita, para descubrir lo pervertida en la que se había convertido.
Mi nueva esposa y madre de la niña apenas podía resistirse y tan solo observaba como me follaba a su hija una y otra vez, siempre delante de ella.
Me la folle corriéndome en su coño, la follaba por su culo, y hacía que su madre me chupara la polla con sabor al sucio culo de su hija hasta correrme en su boca.
- Eres una puta desgraciada- Os odio a los dos... Decía la madre de la niña mientras le perforaba su delicioso ano, pues la niña amaba ser penetrada por su culo y tenerlo bien abierto.
Después de la luna de miel que pasamos mi esposa y la amante de su hija en Suiza, volvimos a casa. Donde el rol de mujer y amante hija se había cambiado.
Mi hija y amante se había convertido en la ama de la casa y mi esposa Lizbella tan solo era la madre de la niña que me follaba cada día ...
- Ayyyy si mi papito. Rómpeme el culo, como a mi me gusta, - Me decía mi nena, mientras le penetraba y daba por culo mientras mi esposa y la madre de la pervertida de su niña hacía la comida.
Hacía que mi esposa me lamiera el ojete mientras su hija se atragantaba con mi verga. Justo en el momento de correrme le echaba la leche en las enormes tetas de su hija, y hacía que mi esposa las lamiera y se tragase el semen.
- MmmmMmMM , me encanta ver a mi mamita lamerte.- Me decía mi jovencita hija, mientras su madre chupaba toda la lechita.
Estaba establecido que la mujer de la casa no era mi esposa, sino mi nueva hija, Lizbella pasaba la mayoría del tiempo o borracha o sirviendo las necesidades de su nena o las mias.
En una tarde que fuimos a la playa, estábamos Lizbella, Pamela, y las sirvientas Yanira y su niñita.
En un momento mientras las dos jóvenes estaban bañándose en la playa, Yanira la madre de Laliana, me susurró al oído, estando al lado de mi esposa, que grabara en vídeo a su niña.
En ese momento saqué de la mochila el teléfono y empecé a grabar, donde mi hija y la nena de la sirvienta salían de la playa mojadas en bikini.
- Nenitas, quitaros el bañador y mostrar vuestros cuerpitos.- Les decía mi rellenita sirvienta, donde mi mujer haciendo caso omiso y sacando una lata de cerveza, le daba igual lo que hiciera...
Las dos jóvenes riéndose y mirando que estoy grabándolas con el teléfono, no dudan en despojarse de los bikinis que las cubren...
Voy grabándolas mientras se desnudan, pues nadie más hay en la cala de la playa donde fuimos.
- Lalita, mi niña, agáchate que el señor te haga buenas fotos de tu bollito lindo.
En el momento de que su madre la mandase su hija no dudó en hacerle caso, y se puso de píe agachada abriéndose bien su culito para que la grabase.
En ese instante mi hija con sus enormes tetas, las apoyo, en su nueva amiga y sirvienta, haciendo una imagen de culo abierto y gordos pechos para el recuerdo.
- Señora, ¿no le importa que me coma la polla de su esposo mientras mira vicioso a nuestras niñas?-
Mi esposa, ni le hace caso a la sirvienta y hasta le d igual, pues se abre otra lata de cerveza mientras nos deja hacer...
Mi nena es demasiado mandona y al ser más fuerte coge de la cintura a la hija de Yanira, para acercarme la a mi, haciéndola ponerse en cuatro, apoyando sus manitas en la arena y ofreciéndome el culito de la niñita...
No solo eso, sino que su propia madre apoya sus manos en las nalgas de la hija para dejarlas bien abiertas y mostrarme el coñito y el agujerito de la nena ala,altura de mi cara.
Le doy unas cachetadas en ese pequeño culito y empiezo a comermelo, por un lado sujetando mi hija a la pequeña Lalita, mi esposa mirando y como si no le importase, y la madre de la criatura, abriéndome ese ojete para penetrarle bien mi lengua dentro de la hija.
Ayyy que rico te come el señor.- Le decía Yanira a su nena.
Ese culito te lo va a follar mi papito bien rico...- contestaba mi nena en voz alta para que lo escuchara su mami.
Mientras la madre de esa nenita flaquita de coño y culo sonrosado, le daba nalgeadas para ponerme más cachondo.
Mientras metía mi lengua en el anito de la nena de la criada, su madre me lamía la polla hasta hacerme correr.... y mi hija Pam, se exhibía con su cuerpo desnudo chupandose los pezones de sus gordas tetas, para hacerme venirme viendo su escultural cuerpo.