Inicios de juventud ii

Para entender y disfrutar del relato hay leer el anterior. Será una serie… no tengo claro de cuantos….

Soy un maduro bisexual de 60 años, me gusta comer, lamer (un placer sentir como va soltando jugos y derritiéndose en tu boca, pasarle la lengua por toda la raja, chupar el clítoris y los labios…. un verdadero manjar…), y follar coños. Pero también me gusta, chupar y lamer pollas, chuparlas, ensalivarlas, que te follen la boca, poner la lengua sobre el glande cuando se van a correr para que la leche se quede bajo la lengua y luego escupir la corrida, nunca me he tragado ninguna. Leche solo he saboreado la mía, del resto la he recibido en la boca y la he escupido. A pesar de que me gusta saborear pollas, no me gustan los tíos, me gustan las pollas, los tíos no. No me beso con tíos, las pocas veces que lo he hecho ha sido en mis inicios, de joven, y en tríos con mujeres y sus parejas, un poco obligado, o forzado, porque a ellas que si les gustaba ver a dos tíos besándose. He tenido muchas experiencias en mi larga y dilatada vida, he follado, me han follado… hombres, mujeres, tríos… de todo un poco y voy a contar algunas de ellas en una serie de relatos que iré publicando para el disfrute de los lectores.

Físicamente soy un hombre normal, 177cm, unos 80 kg, con una polla normal de 17 cm. pero que siempre ha funcionado muy bien…

Unos días más tarde conocí al tío Julián, es tío de Nieves, el primero que se la folló y la envició en el sexo. Veníamos de regreso del campo y se ofreció a llevarnos en su furgoneta, un vehículo grande, cerrado de 5 plazas, 2 delanteras, una butaca central de 3 plazas, y lugar de carga en la parte trasera. Yo me senté en la parte de atrás y Mario ocupó el asiento delantero derecho, entre los asientos delanteros había un hueco que permitía acceder a las plazas delanteras con comodidad.

Tras los saludos de rigor nos invitó a subirnos a la furgoneta y le preguntó a Mario por mi.

-          ¿Quién es el chico que te acompaña?

-          Es el primo Toni, el hijo de la tía Manuela, - dijo Mario.

-          Si, si me acuerdo de ella, ¿No sabía que tenía un hijo tan mayorcito? ¿Ya está en edad de disfrutar? ¿No crees?...

-          Si ya hemos hecho algunas cosas juntos, le gusta disfrutar. Es bueno y aprende rápido…, - dijo Mario.

Yo me mantenía callado y no abrí la boca más que para dar las buenas horas al subir al vehículo. En esto ya estábamos llegando a la casa de Mario y el tío le dijo.

-          Mañana voy a ir a la finca de la playa, por si te apetece ir y llevas al primo. Seguramente haré noche por si se lo quieres decir a tus padres…, seguro que lo pasaremos muy bien. Trabajaremos un rato, luego nos damos un baño y jugamos un rato en la cala que hay tras la finca. Sabes que aquello es muy solitario, inaccesible y nadie nos molestará.

-          Vale, se lo diré a mis padres ahora. Seguro que no ponen ningún impedimento.

-          Pasaré a recogeros a la 7 de la mañana, hay que madrugar para aprovechar la mañana y adelantar algo de trabajo, luego baño en la playa y diversión.

-          Ok, estaremos preparados a las 7.

-          Hasta mañana, - dijo el tío Julián, parece que todo el mundo lo llamaba el tío Julián, costumbres delos pueblos.

-          Hasta mañana, respondí yo.

Entramos a la casa de Mario y le dijo a la madre que nos había traído el tío Julián y que no había invitado a ir con el a la finca de la playa y a quedarnos una noche en la finca.

-          No te olvides de decírselo a tu padre por si tiene algo previsto para mañana o pasado. Por mi parte no hay problema pero tú padre es quien tiene la última palabra.

-          Tranquila que se lo digo cuando llegue, fue la respuesta de Mario. Vamos a ducharnos para luego ir a dar una vuelta.

-          Si os ducháis juntos ahorraréis agua, - dijo la tía.

-          Vale nos duchamos enseguida.

Pasamos por la habitación del primo, cogimos ropa limpia, y nos metimos en el baño. Mario cerró la puerta mientras decía.

-          Vamos a cerrar por si se anima la cosa…

El baño tenía un lavabo, un aseo y una ducha separada entre dos tabiques donde cabían tres o cuatro personas tranquilamente, era muy amplia, con una norme alcachofa en el techo.

Nos desnudamos y nos metimos en la ducha los dos a la vez. Mario abrió el agua y comenzamos a mojarnos en lo que nos salpicábamos con el agua y nos empujábamos uno al otro. A los pocos minutos cerró el agua y comenzamos a darnos jabón, comenzamos de forma individual pero Marío me agarró la mano y me dijo.

-          Enjabóname la polla.

Comencé a enjabonarle la polla en lo que el me enjabonaba la mía, estábamos empalmados los dos y comenzamos a pajearnos mutuamente. Mario acercó su otra mano a mis nalgas y comenzó a sobarlas, me giró y cogiendo jabón de la botella de gel me lo puso en las nalgas mientras comenzaba a meterme los dedos, primero uno, luego dos, y a los pocos minutos el tercero. Yo ya estaba jadeando y cachondo perdido.

-          El jabón es muy buen lubricante, ya tienes el culito preparado para follarte.

Sin más me acercó la polla al ojete y comenzó a meterla, la sentí entrar abriéndome a su paso, entraba suavemente y no me producía molestias, si me sentía lleno a su paso por mi interior. Cuando la tuve toda dentro me abrazó por detrás y comenzó a moverse follándome el culo con ganas. Me apretaba los pezones, me cogía de las caderas, volvía a abrazarme, estuvo así unos minutos hasta que me cogió la polla y comenzó ha hacerme una paja. Sus envites eran cada vez más rápidos y abrió agua y para quitarnos el jabón en lo que seguía dándome por el culo y paseándome cada vez más rápido.

-          Aprieta el culo cuando te corras, yo ya estoy casi a punto de correrme. – me dijo al oído.

-          Yo también estoy a punto de acabar.

Incremento el ritmo de la paja y de la follada. No tardé en comenzar a largar leche en lo me hacía contracciones cerrando el culo. Podía sentir los espasmos de su polla y como se iba derramando en mi culo.

-          Así, así, sigue, aprieta el culo…, que gusto enano, que gjusto…, ,mientras me llenaba de leche.

Cuando terminó de correrse me mantuvo abrazado con fuerza y la polla dura latiendo en mi interior…

-          Que gusto me ha dado follarte… tienes un culito cerradito y duro que me da un gusto enorme.

-          A mi también me gusta que me folles, me gusta sentir tu rabo dentro, como me llena y como entra y sale cuando me bombeas con rapidez.

-          Vamos a terminar de quitarnos el jabón y a vestirnos, que si tardamos mucho mi madre va a pensar que nos estamos pajeando…

Me la sacó y comenzamos a quitarnos el jabón y a salpicarnos con el agua. Al momento estábamos secos y vestidos. Salimos del baño y fuimos a la cocina a degustar la merienda que nos había preparado la tía. Merendamos y, tras decir adiós a la tía ,nos marchamos a dar una vuelta. Estuvimos con un grupo de amigos de Mario en la plaza y regresamos temprano a la casa para hablar con su padre.

El tío ya estaba informado de la invitación del tío Julián y no puso objeción de ninguna clase.

-          Ayudad al tío y comportaros, que el viene con cierta frecuencia a ayudarme a mi también en el campo, aquí colaboramos y nos ayudamos todos. Es la única forma de sacar el duro trabajo del campo adelante.

-          Tranquilo que, como siempre, le ayudaré en todo lo que necesite, y el primo también que para eso va con nosotros. Trabajaremos lo que haga falta, también nos dijo de ir a la playa a bañarnos.

-          Me parece bien, pero tened cuidado y no os metáis donde haya profundidad, que aunque sabéis nadar la mar es muy traicionera cuando tiene olas….

-          Tranquilo que sabes que yo no lo suelo hacer y al primo no se lo permitiré… yo le cuido….

-          Quedamos en eso, ya le preguntaré al tío Julián como os habéis portado…

Nos levantamos temprano y al poco rato, unos minutos antes de la 7, ya estaba el tío tocando la pita ante la casa. Subimos a la furgoneta y arrancó camino de la finca, en la afueras del pueblo cogimos un desvío por una pista de tierra en dirección a la finca de la playa.

-          ¿Quieres conducir? – le dijo el tío Julián al primo.

-          Si claro, sabes que me encanta conducir, tengo que aprender para poder sacar el carnet el próximo año. Ya estoy ahorrando para ello del dinero que consigo cuando voy a trabajar con algún vecino. No lo he sacado antes porque no necesito coche, ni tampoco tengo dinero para comprarme uno, pero es bueno tenerlo por lo que se pueda ofrecer. Algún trabajo o lo que sea…

Mario se sentó sobre el tío y continuamos la marcha hasta la finca, al rato pude notar como Mario se levantaba un poco y el tío metía la mano entre el culo del primo y su entrepierna para colocar la polla. Se ve que se había empalmado y le estaba molestando en la posición que la tenía. Todo eso sin parar el vehículo fue algo que hicieron en un momento.

-          ¿Tú no sabes conducir? - Me preguntó el tío Julián, ¿Te gustaría aprender?

-          No, no sé conducir, no me han enseñado nunca…

-          Deja al chico un momento para que coja el volante y se vaya acostumbrando al movimiento de vehículo.

El primo se volvió al asiento del lado derecho mientras yo me acercaba al asiento del conductor. Observé el enorme bulto que tenía el tío en los pantalones y me acerqué un poco temeroso.

-          Ven, siéntate aquí, mientras se ponía las manos en las muslos cerca de su entrepierna.

Me senté sobre su bajo vientre y cogiéndome con las manos me arrastró lo necesario para el rabo me quedara encajado entre las nalgas. Dio unos acelerones y frenazos, en lo que se reía diciendo.

-          Esto es para que sientas bien las sensaciones de lo que vas a conducir. Hay que conocer todo lo que se va a manejar. Por ahora ocúpate del volante ya tendremos tiempo de que aprendas a accionar la palanca de cambios….

Comenzó a acelerar y seguimos camino de la finca, el tío me iba indicando como mover el volante en las curvas…

-          Más lento, despacio, así apártate de las piedras grandes que hay en el camino, no hace falta mover tato el volante, con un poco ya gira y va donde lo necesites. – decía el tío, mientras una de sus manos se acercaba peligrosamente a mi polla que se estaba empalmando, me la acarició por sobre del pantalón el tiempo que me dijo.

-          Parece que se anima la cosa…

-          Si tiene motivos para animarse, - dije, en lo que miraba al primo Mario que se sobaba la polla por sobre el pantalón viendo lo que el tío hacía conmigo. Este seguía sobando mi polla que estaba cada vez más dura.

-          Ya estamos llegando, - dijo el tío en lo que señalaba unos muros que se veían a pocos kilómetros. La finca estaba murada y vallada alrededor, donde no había muro había vallas y solo se accedía por la puerta de entrada o a través del mar, desde la playa se podía acceder también por una ladera pronunciada que tenía un pequeño camino que bajaba haciendo eses.

Llegamos a la puerta de la finca, yo me moví al asiento trasero y el tío se bajó a abrir la puerta, la abrió, entró el vehículo y lo paró al lado de una pequeña edificación que había al borde de la ladera que tenía acceso a la playa. Bajamos las cosas del vehículo y el tío dijo.

-          Vamos a la playa a relajarnos un rato, no es cuestión de comenzar a trabajar con los instrumentos tan duros, - dijo mientras se agarraba la polla con la mano sobre el pantalón, aquello marcaba un trozo de pollón que daba temor, que grande y gorda parecía…

Bajamos por el camino a la playa y al llegar abajo comprobé que era un pequeña cala con una playa pequeña de arena negra y rodeada de unos acantilados de por los menos 30 metros. Allí solo se podía acceder por el mar, por los lados era imposible acceder.

Comenzaron a desnudarse y yo les seguía, se lo quitaron todo y los ojos se me iban a la enorme polla del tío, grande y gorda a más no poder… que pedazo de polla se gastaba…

-          ¿Te gusta?

-          Nunca había visto una tan grande… y que gorda es… es enorme…

-          Ven tócala… cógela fuerte que no muerde…. quítate todo que aquí no viene nadie, nadie nos va a ver… esto es un lugar idóneo para pasarlo bien sin miedo a miradas ajenas…

Me acerqué a su lado y cogí la polla con mi mano, el me agarró la mía y comenzó a acariciarla…

-          La tienes durita… se ve que estás cachondo, que te gusta coger una polla grande y gorda como la mía. ¿Ya te ha follado el primo?... parece que si,… ¿Te ha gustado? ¿Has sentido placer con su polla en el culo?…

Mientras me acariciaba el culo y metía los dedos entre las nalgas…, el primo se había puesto al lado y me puso la polla en la mano. Ahora tenía una polla en cada mano, si la del primo me había parecido grande, la del tío era enorme….

-          Vamos al agua a lavar los instrumentos. Bien lavados con agua del mar tienen un sabor delicioso – dijo el tío mientras seguía pugnando con sus dedos para meterlos en mi culo,

Llegamos al agua y nos metimos hasta que los llegaba por el pecho, lavamos bien las pollas y regresamos unos metros hasta que nos llegaba por las rodillas.

-          Chúpame la polla me dijo el tío, lamela toda, desde la punta hasta el tronco, pásale la lengua… si, así… ahora el capullo, lámelo y chúpalo… Cómele el culo – le dijo al primo.

El primo comenzó a lamerme las nalgas, la canal del culo y a pasar la lengua por el ojete, me lo estuvo lamiendo un rato e intentando meter la lengua, entretanto yo se la chupaba al tío le lamia el capullo, me la metía en la boca. Tenía que abrir la boca al máximo para que me entrara todo el capullo, poco más pasaba ya que era muy gorda y no cabía…

-          Lámeme los huevos… chúpalos… mételos en la boca… lo fui haciendo según me indicaba. Los lamí, los chupe de uno en uno. Los dos juntos era imposible meterlos en mi boca… El primo seguía jugando con mi culo y ya me tenía ensartado y fallándome con un dedo. El tío me dio un fuerte azote en las nalgas y le dijo al primo.

-          Métele los dedos,,, ábrelo bien… fállalo con lo dedos…

Yo seguía con mi trabajo, chupando la polla, lamiendo los huevos… metiéndolos en mi boca… sorbiendo el capullo e intentando meter la lengua en el caño de la polla, se lo abría con la lengua y le lamía dentro con la punta… notaba en la punta de la lengua la suavidad del caño y como se abría para dejarla pasar un poquito mi lengua viciosa… El tío metió dos dedos en mi ojete y le dijo al primo.

-          Fóllatelo, ya está bien abierto… métele la polla… a ver como mueve el culito la putita…

El primo me arrimó el capullo y comenzó a meter la polla… sentía como me iba abriendo y como entraba con fuerza en mi culo… me abría en canal el muy cabrón, la fue metiendo poco a poco, pero con fuerza, la tenía dura como un hierro candente, notaba el calor y la dureza de su polla entrando hasta el fondo… cuando hizo tope comenzó a darme con fuerza, metía y sacaba la polla cada vez más rápido y dándome con ganas.

-          ¿Te gusta putita? ¿Te gusta como te mete la polla el primo? Mueve el culito… anda.. disfruta… muévete pequeña putita…

Mientras me daba unos azotes que me gustaban a pesar de que me daba con ganas… las nalgas la tenía escociendo del castigo al que me estaba sometiendo… el primo comenzó a darme más rápido a la vez que resoplaba como una locomotora…

-          uuuffff…. Uuuuffff, me voy a correr…. Te voy a llenar el culito de leche enano… ME CORRO…. ME CORRO…

Comenzó a largar corros de leche caliente en mi culo mientras entraba y salía con rapidez… luego comenzó a bajar el ritmo hasta que se quedó con la polla metida hasta el fondo abrazándome fuerte…

-          Qué corrida… que gusto enano… cada día me gusta más darte por el culo…

-          Ya estás bien abierto y lubricado… ahora te toca con una polla de verdad… vas a ver las estrellas cuando te la encaje toda…

El primo se salió de mi interior y el tío ocupó su lugar tras de mí. Me escupió varias veces en el culo, metió los dedos para lubricarme bien,

-          Se ve que te echo unos buenos chorretones de leche en el culito. estás bien mojadito. Abre que voy – dijo poniendo el capullo en el ojete.

Comenzó a empujar y yo notaba como me abría el ojete, me estaba doliendo horrores y no acababa de entrar el capullo. Me soltó un azote...

-          Ábrete, abre el culo… si no lo abres bien te va a doler más. Yo inspire con fuerza e intenté relajar los esfínter... al momento noté como el capullo traspasaba al puerta y se colaba dentro… UUUUFFFFFF, gemí, UUUUFFFFF….

-          Aguanta putita, aguanta, ya entró el capullo, el resto será más fácil…

Con un golpe de caderas me metió media polla de golpe… me encogí del dolor e intente escaparme. No me fue posible, ya tenía metido un buen trozo y me tenía sujeto por el vientre con uno de sus brazos, no tenía escapatoria.

-          Aguanta putita, aguanta, no seas mimoso que te va a gustar… verás como en un  momento pedirás más… va otro trozo… que cerradito estás, como me aprietas la polla… como vamos a gozar…

En un par de empujones más me la clavó toda… yo sudaba y resoplaba, me sentía lleno como nunca, era más gorda y más grande que la del primo. Intentaba relajar el ojete para no sentir tanta presión en el, pero era imposible, no podía relajarlo, era muy gordo lo que tenía dentro. Poco a poco comenzó a moverse en mi interior, la sentía cada vez con mayor intensidad, gracias a que estaba bien lubricado con la saliva y la leche del primo, resbalaba con suavidad, aunque me sentía super abierto, era suave el roce de la polla en mi interior.

-          Ya estás listo para follarte… comienza a mover el culito… fóllate a tu aire… primero despacio y luego ve incrementando el ritmo… muévete… así, si, que gozada, que culito más estrecho tienes cabrón… muévete… muévete rápido… dale… venga… dale rápido.

Mientras comenzaba a moverse y a darme con ganas, entre pollazo y pollazo me soltaba algún azote… me dolía, pero también me gustaba… joder como Follaba el cabrón. Podía sentir sus huevos dándome golpes por detrás, en los muslos, contra los míos, nunca llegaban al mismo lugar debido al impulso que le estaba dando a la follada… a los pocos minutos comenzó a resoplar y a moverse más rápido.

-          YA VIENE, YA, YA, SI, SI, ME CORRO… ME CORRO… TOMA POLLAAAA… TOMA POLLAAAA

Me estaba metiendo unos embates con la polla que me dolía horrores, a pesar de lo lubricado que tenía el culo este no estaba tan habituado a follar con una polla de ese calibre y me dolía…

-          TOMA LECHE… TOMA LECHE...

Cada vez que decía, toma leche, me soltaba un chorretón de leche en mi interior, estaba entrando a los más hondo mientras iba largando chorros de leche caliente en mi culito… al final se paró abrazándome con fuerza mientras me la tenía metida lo más que podía. Intentaba meter más, pero era imposible, la tenía toda dentro y por mucho que empujara no entraba más… al par de minutos fue aflojando la presión y comenzó a sacar la polla… esta ya se había desinflado un poco y salió con más suavidad de lo que entró….

-          Qué boquete te ha quedado, ahora si que no vas a tener problemas cuando te follen, tienes el culito super abierto, gozarás un montón con las pollas normales y sufrirás menos con las pollas gordas. Estás bien dilatado y sin roturas, hemos hecho un buen trabajo con tu culito…

Mientras me iba pajeando hasta hacerme correr, ya estaba a punto y no tardé ni medio minuto en comenzar a largar leche, me dolía al culo al contraerlo de lo abierto que lo tenía… joder, como duele, pensaba. Que abierto me han dejado…. Esto no se va a volver a cerrar… en cada contracción sentía los esfínteres doloridos.

Esa esa noche me tocó a mi follarme al primo, para ayudarlo a recibir, lubricándolo bien con mi corrida, la polla del tío. Pero a mi no me volvió a follar ninguno de ellos. Mi culo estaba demasiado dolorido como para que me lo tocasen.

Aquí terminan mis vacaciones en el pueblo. El día antes de mi marcha, estuvimos un rato con Nieves y volví a saborear su coño, se lo lamí y chupe hasta la saciedad… se corrió varias veces en mi boca en lo que el primo la follaba desde atrás, yo arrodillado comiéndole y lamiéndole el coño mientras Mario se la metía. Omito los detalles ya que creo que no tiene sentido repetir algo similar a lo he contado en los relatos anteriores…

Autor: Vicioso60t

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