Inicios de juventud

Los inicios de un joven en unas vacaciones de verano en un pueblo vecino junto a su primo Mario y una amiga intima de Mario. Primeras pajas, toqueteos y enculada...

Soy un maduro bisexual de 60 años, me gusta comer, lamer(un placer sentir como va soltando jugos y derritiéndose en tu boca, pasarle la lengua por toda la raja, chupar el clítoris y los labios….un verdadero manjar…), y follar coños. Pero también me gusta, chupar y lamer pollas, chuparlas, ensalivarlas, que te follen la boca, poner la lengua sobre el glande cuando se van a correr para que la leche se quede bajo la lengua y luego escupir la corrida, nunca me he tragado ninguna. Leche solo he saboreado la mía, del resto la he recibido en la boca y la he escupido. A pesar de que me gusta saborear pollas, no me gustan los tíos, me gustan las pollas, los tíos no. No me beso con tíos, las pocas veces que lo he hecho ha sido en mis inicios, de joven, y en tríos con mujeres y sus parejas, un poco obligado, o forzado, por ellas que si les gustaba ver a dos tíos besándose. He tenido muchas experiencias en mi larga y dilatada vida, he follado, me han follado… hombres, mujeres, tríos… de todo un poco y voy a contar algunas de ellas en una serie de relatos que iré publicando para el disfrute de los lectores.

Físicamente soy un hombre normal, 177cm, unos 80 kg, con una polla normal de 17 cm. pero que siempre ha funcionado muy bien. Dos o tres polvos en una tarde o en una noche nunca fueron un problema para mí, en ocasiones incluso más de tres… todo depende de la situación, el momento, el morbo… muchos factores que te llevan a disfrutar del sexo hasta no poder más…. Alguna vez he terminado con la polla hinchada de tanto mete y saca, vamos que al par de horas al ir a mear decir: “jo, si estuvieras siempre así”, menudo pollón gordo tengo ahora. Lamentablemente al día siguiente ya volvía a su estado normal, y perdía el grosor que le daba un aspecto de pollón gordo…

Comenzaré por mis inicios en las relaciones sexuales. Como casi todo el mundo comienzas con las pajas, los consejos de los amigos, alguna paja compartida con los más cercanos, donde nos tocábamos unos a otros entre dos o más, y alguna paja en grupo. Luego vinieron los roces con chicas, besos, caricias, tocamientos, lamidas… y con algún amigo cercano, pajotes, mamadas y  alguna enculada mutua o reciproca, dar y recibir, recibir y dar….

Un verano hace muchos años, más de cuarenta, me encontraba de vacaciones en la casa de los tíos Juan y María, en un pueblo vecino al mío, donde solía pasar algunas semanas de vacaciones todos los años desde la niñez. Tenían un hijo, el primo Mario, que tenía unos años más que yo y más experiencia en cuestiones sexuales, tanto con chicos como con chicas.  Siempre que iba de vacaciones dormía en su habitación, el año en que sucedió lo que voy a relatar a continuación desde los primeros días y por las noches al acostarnos, siempre me preguntaba por como llevaba lo del sexo, si ya había tenido relaciones con chicas, si había tocado tetas y coños, si me pajeaba con los amigos… a los cinco o seis días de estar en su casa, una noche me dijo ven que te voy a enseñar como, frotarte y jugar con una chica, como la puedes calentar y luego follártela. Comenzamos a jugar y a frotarnos con los pantalones cortos o de deporte con los que solíamos dormir, como si estuviéramos frotándonos con una chica, él me iba indicando como debía de moverme para sentir y que me sintieran. Con los frotamientos podía sentir su polla dura frotándose directamente en mi muslo, se le había salido, o la había sacado, por la pernera del pantalón y la frotaba directamente contra mi muslo. La mía, que no me la había sacado la tenía entre mi vientre y el pantalón, frotándola en su bajo vientre. Estuvimos un rato con el jueguecito, empalmados los dos y con las pollas lubricando a tope, sentía mi muslo todo mojado del precum que estaba largando su polla, la mía lo largaba en mi vientre y en el pantalón. Mario no tardó mucho en quitarse los pantalones mientras me pedía que hiciera lo mismo. Comenzó a pajearse lentamente, tenía un trozo de rabo más grande y gordo que la mía, por lo menos 18 o 19 cm. La mía tiene unos 17 y no es tan gorda.

-          ¿Has cogido la polla de otros chicos?

Yo no sabía que contestar ya que me daba apuro.

-          NO te preocupes, me dijo, eso es normal, yo lo hago continuamente con varios amigos y lo pasamos muy bien.

Al momento me cogió la mano y la llevó a su polla, yo comencé a pajearle en lo que él me pajeaba a mí. Sacó un trapo de debajo del colchón y me dijo:

-          Aquí nos tenemos que correr para que mi madre no encuentre rastros de leche mañana.

Al momento estábamos largando leche sobre el trapo, lo dejamos todo lleno de chorretones, lo cogió, lo cerró y dobló de forma que no se derramara la la leche y lo volvió a meter bajo el colchón. Ahí terminó nuestra primera paja compartida, hubo bastantes más, tanto en su habitación como en otros lugares y más variedad de acción que iré contando más adelante...

Un día que estábamos jugando a las cartas, en una tienda cerca de su casa, Nieves que atendía la barra vino a sentarse con nosotros.

-          Vamos a aprovechar ahora que no hay nadie, dijo.

Mario comenzó a jugar con la chica, le pasaba la mano por el pecho y le apretaba la tetas.

-          Que tetas más ricas tienes, me las dejas para jugar con ellas un ratito.

Yo estaba alucinando de que se comportaran así delante de mí, pero se ve que tenían mucha confianza y era algo normal para ellos. Al momento el primo se había sacado la polla y le pidió a la chica que se la tocara.

-          Hazme una paja…

yo veía la mano de la chica que no conseguía abarcar aquel trozo de carne con su mano como  se la meneaba y le acariciaba el capullo, Aunque no tenía confianza con la chica, la había visto otros años pero casi ni había intercambiado cuatro palabras con ella, saludos y poco más cuando había pasado a buscar algún encargo de mi tía María. Pues eso, aunque estaba cortado y un poco sorprendido por la situación, me atreví a acariciar el otro pecho de la chica, siempre por sobre de la ropa, me sonrió y me dijo

-          ¿Te gustan mis tetas?

-          Si, mucho, le dije.

-          A ver que tanto te gustan, enséñame la polla, a ver como la tienes.

Me saqué la polla y la cogió con la mano que tenía libre, la otra la tenía ocupada con el rabo del primo Mario.

-          La tienes durita… te va a gustar la pajita que te voy a hacer… te vas a correr de gusto en un momento…

Mientras me pajeaba cada ve con más rapidez. Una mano del primo estaba bajo de su falda y le acariciaba el coñito por sobre de las bragas.  Ella movía las manos y nos acariciaba o pajeaba las pollas, mientras él le metía mano en el coño. Le apartó la braga hacía y lado y le metió los dedos en el coño, primero uno, luego dos… y yo entretanto le sobaba las tetas. La chica estaba disfrutando con las caricias y el sobeteo y cada vez le imprimía más velocidad a las manos.

-          Como sigas así va a hacer que nos corramos enseguida, le dijo el primo.

-          Coge papel y dale también al chico que no tenemos mucho tiempo, no tardará en venir alguien y no podré seguir dándoos placer…. Os tenéis que correr ya….

Mario me pasó un trozo de papel del que se usaba para envolver las cosas y al momento me estaba corriendo en el papel, largué la leche a chorros, salía a borbotones como nunca lo había hecho… nunca me había pajeado una chica y estaba como una moto… emocionado y desesperado por correrme. Nieves fue suavizando las caricias a mi polla en lo que incrementaba la velocidad en la paja al primo, no tardo mucho en correrse mientras aceleraba las caricias al coño de la chica. Le había metido dos dedos y la estaba pajeando con fuerza…la chica se movía rápidamente mientras Mario le daba cada vez con más rapidez….

-          Me voy a correr… cabrón como sabes hacerme gozar… me corro….

Se quedó quieta un momento, como en trance mientras Mario le sacaba los dedos del coño y se los chupeteaba,

-          Me encantan tus jugos.

-          Primo, pásale la mano por el coño y saborea sus jugos…

-          Hazlo con cuidado que acaba de correrse y lo tiene muy sensible….

Yo acerque mi mano y le pasé los dedos por el coño encharcado, me los empape bien y me los llevé a la boca…

-          ¿Te gustan? Me preguntó ella

-          Si saben muy suave, no los había probado nunca.

-          Otro día te los daré directamente en la lengua, verás que gustazo…

-          Eso es un placer superior…, dijo el primo.

-

Llegó alguien a la tienda y tras colocarse bien las bragas se levantó  de la mesa para ir a atender.

Volved a la tarde, sobre las 8:30 a ver si a la hora de cerrar no hay nadie y podemos jugar otro rato…

-          Vámonos, dijo el primo,

Salimos del local para irnos a su casa, nada más llegar la tía nos mandó a llevar la comida al Tío Juan al campo, puso comida para que nosotros comiéramos con él y le ayudáramos. Llevamos la comida, comimos con el tío, y le estuvimos ayudando en las tareas del campo. Se nos hiso bastante tarde y, ya de regreso, el primo dijo que ya no podríamos ir a ver a Nieves.

-          Ya va a tener la tienda cerrada y no es cuestión de estarle tocando sin saber si puede estar la madre o el padre por allí… no hay que levantar sospechas.

-          A ver si mañana podemos acercarnos sobre las 20 horas y ver si se puede quedar sola para disfrutar un rato con ella… que seguro estás deseando comerle el coño y saborear sus jugos directamente del coño… es algo sublime…. Un placer superior…

-          Mira como se me ha puesto la polla de estar pensando en Nieves…

-          Vas a tener que ayudarme con esto enano.

En ocasiones me llamaba enano, no por la estatura, era más bien por la diferencia de edad, me dijo, mientras me enseñaba el bulto que se le había formado en el pantalón.

-          Ven por aquí que hay un buen sitio para pasar un rato sin que nadie nos moleste….

Estábamos cerca de la entrada de una cueva donde ya en alguna ocasión nos habíamos estado pajeando, entramos y comenzamos a pajearnos.

-          Chúpamela enano, me dijo mientras me cogía del cuello y me agachaba la cabeza hasta dejarme la polla rozando los labios.

-          Abre la boca y no me la muerdas…. Pásale la lengua…. Échale saliva y saboréala….

Me la fue enterrando en la boca, me la metía casi hasta que me atragantaba… yo tosía y me la sacaba medio asfixiado…

-          hazlo bien ¿Nunca has chupado una polla?

-          No, es la primera que me meten en la boca…

-          Pues aprende hazlo suave, abre bien la boca y no la roces con los dientes…

-          Cuando te llegue a la garganta déjala pasar, no intentes bloquearla… de que pase ya no te atragantas.

Me costaba acostumbrarme a que me la metiera toda, no podía y al final desistió de follarme la garganta.

-          A ver ese culito… me dijo en lo que me metía la mano bajo el pantalón buscando mis nalgas.

Comenzó a pasar la mano entre los cachetes de las nalgas, la retiró y pronto noté como un dedo mojado en saliva pugnaba por entrar en mi ojete. Di un pequeño rechazo por la sorpresa….

-          Estate quieto, ya verás como te va a gustar… mientras comenzaba a meterme el dedo en el ojete… lo metía y lo sacaba, le ponía más saliva y lo volvía a meter…

-          A ver que tal un segundo dedito… y me ensartó un segundo dedo…. Sentía como me abría y me molestaba…

-          Sigue chupando que el culito hay que suavizarlo bien… no lo cierres… relájalo y déjame entrar… luego será todo mucho más fácil…

Me estuvo dedeando un rato hasta que creyó que ya estaba listo para encularme.

-          A ver como te portas ahora… echa bastante saliva en la polla para que esté bien lubricada, entrará más fácil…

Me baja los pantalones, me los quita, y me pide que me acueste boca abajo sobre unas hiervas secas que alguien había puesto allí y hacían de cama. Me acosté en la cama de hiervas secas y al momento el primo se metió entre mis piernas, me las abrió, me escupió en el culo y comenzó a meterme un dedo, me volvió a escupir y me metió otro dedo, al momento lo vi escupirse la polla y me la acercó al ojete. La sentí en la puerta, comenzó a frotármela en la raja del culo y a presionar en el ojete, el roce de la polla me gustaba y me estaba poniendo como una moto, en nada me la estaba clavando, le costó meter el capullo, me dolió un poco, pero soportable, debe ser que dilaté bien y no opuse resistencia a la invasión. La notaba como se abría paso en mi interior, un trozo de carne dura, muy dura y caliente, que me había invadido en mi interior, me dolía, o molestaba un poco, pero aguanté hasta que me la metió toda.

-          Ya está toda dentro… te has portado como un campeón… en un momento comenzarás a disfrutar de mi polla en el culo, enano…

Se echó sobre mí, quedándose quieto un momento, luego comenzó a moverse despacio, sentía su polla dura dentro de mí y como se movía atrás y adelante lentamente, lo hacía despacio y cada vez sentía más gusto de estar lleno de ese trozo de carne caliente que me invadía. Creo que, cuando lo recuerdo, hoy en día todavía siento esa sensación de placer, ese trozo duro y caliente en mi interior, que me llenó de sensaciones desconocidas y muy placenteras. Fue la primera vez que me encularon y lo disfruté desde el principio, solo ligeras molestias que no empañan para nada el gustó que recibí.

-          ¿Te está gustando enano?

-          Me molesta un poco, me siento muy lleno… y creo que no resbala bien…

La sacó escupió varias veces en mi culo y me la volvió a meter.

-          A ver ahora… seguro que ya entra y sale mejor…

-          Si, creo que sí, ya me molesta menos…

-          No hay nada como estar bien lubricado para que te la metan y sientas gusto de ser enculado…

Aquel trozo duro y caliente que se movía en mi interior cada vez más rápido me daba con ganas…

-          Hay que abrirte bien para que luego puedas disfrutar mejor y sin molestias o dolor. Ya no te dolerá cuando te vuelva a encular…

No tardó mucho en correrse, pude notar los chorros de leche caliente que me estaba echando dentro, uno, dos, tres, cuatro, con cada chorro me la clavaba hasta lo más hondo, que gustazo, unos cinco o seis chorros de leche y luego se quedó quieto sobre mí diciéndome:

-          Espera unos minutos que ahora te va a gustar más….

Al par de minutos comenzó a moverse de nuevo ahora estaba super lubricado con la cantidad de leche que me había metido y, la verdad sea dicha, el placer era mucho mayor. Me la sacó poniéndose de rodillas me pidió que hiciera lo mismo, me levanté y me arrodille delante de él, enseguida me la volvió a meter y ahora me daba cada vez más rápido a la vez que me cogía la polla y me hacía una paja, que gusto sentía, la polla del primo perforándome y abriéndome en canal y la paja cada vez más rápida, me hizo correr enseguida. Me corrí en su mano y en el suelo, mientras contraía el ojete, nunca había sentido tanto placer, no sé cuántos chorros de leche solté, pero nunca me había corrido con tanta leche y tanto gusto.

-          Así, aprieta el culo, que gusto cabrón, apriétame la polla, ordéñame.

Seguía follándome cada vez más rápido y acercándome la mano a la boca me dijo,

-          Lame tu leche, verás que te va a gustar, la leche de macho es muy sabrosa.

Comencé a lamer sus dedos y a saborear mi leche, la verdad no sabía mal, descubrí un nuevo placer, muchas veces en mis pajas posteriores e incluso hoy en día, sigo saboreando el placer de lamer mi leche. El seguía dándome polla hasta que se corrió de nuevo dejándome el culo lleno de leche otra vez, mientras no paraba de pajearme, no tardé en volver a correrme de nuevo, apretando y contrayendo el culo, cerrando el esfínter, mientras le apretaba la polla….

-          Que bien aprietas el ojete… será una buena putita… como voy a disfrutar enchulándote enano… que bien lo vamos a pasar en los próximos días…

-          ¿Te ha gustado?

-          Si, uuufffffff, si, algo diferente…. Duele pero gusta… Nunca me la habían metido….

-          Tampoco había chupado una polla nunca… lo más alguna paja compartida con algún amigo…

-          Pues verás que bien lo vamos a pasar…

Nos vestimos y seguimos camino de la casa del primo, al llegar nos dimos una ducha y nos fuimos a su habitación a leer comics. No comentamos nada de lo sucedido, quedó como algo que habíamos hecho y ya está.

Tendrá continuación, pasaron más cosas ese verano les seguiré contando en próximos relatos. Para comentarios y demás, contactar con el siguiente mail:

Autor: Vicioso60t

Email:vicioso60t@gmail.com