Inicio de una amistad en el cine
De como los novios de ellas se enamoran ellos.
Hará unos meses fuimos al cine con mi novia Mary y la hermana Lucy. Acompañada por su novio Leo.
La peli de lo mas aburrida, por lo que en lugar de dormirme decidí salir de cualquier modo.
-Mary voy al bathroom, estoy un tanto descompuesto, en cuanto me reponga regreso.-
-Si, anda Luis que te mejores.-
Me lavo las manos y cuando me bajo el pantalón, no tiene cierre relámpago ni botones, es sin bragueta, así me lo compró mamá, siento una deliciosa palmada en las nalgas, me vuelvo y es Leo.
-Vine a acompañarte Luis, aburrida la película, aquí al menos se ven buenos traseros.-
Se ríe y me acaricia de nuevo, mirando el chorro dorado que brota de mi polla.
-Y de verga estás también bien dotado cuñado.-
Dicho esto último se pone a mear a mi lado en el mismo WC.
Observo 17 cm de carne en casi erección.
-Vos Leo, no se como estarás de culo, pero si se te para la pija seguro llegas a 20 cm.-
-Si querés Luis te lo enseño ya.-
Cierro el habitáculo, no sea que entre un inoportuno e interrumpa la exhibición.
Leo se desabrocha el cinturón, se baja los lienzos y hermoso lo que se deja ver.
Buenas nalgas y mejores muslos, algo velludos, para mi gusto, pero se me vino tieso el pene.
Soy bisexual, pero en la relación homo prefiero gozar de pasivo, si mi ocasional pareja lo pide puedo obrar de activo, mas si es un efebo.
-Creo que mejor está mi trasero, al menos para mi gusto, en cambio tu verga Leo me gusta y mucho.-
-Si queres chupamela Luis, dame una mamadita rápida.-
Me agaché, en tanto con una mano me pajeaba le mamé el pene a Leo, acabamos enseguida, él en mi boca, yo en el piso.
-Aquí mejor lo dejamos Luis, cuando despidamos a Mary y Lucy podemos seguir con lo NUESTRO ¿sí?.-
Le asentí con un escueto, sí, saboreando aun su semen, nos subimos los lompas, salimos uno después el otro, nadie había entrado, nos lavamos la cara con agua fría, un beso a lo rápido y regresamos a ver el aburrido film.
Con las novias en su casa, un poco de franela con ellas en el palier de su edificio, quedamos recalientes Leo y yo.
-Luis vamos a mi departamento, no hay nadie, salvo nosotros dos, allí podemos charlar de lo nuestro, ¿vamos?.-
-Con gusto Leo, me quedó incompleto aun lo del baño del cine, ¿a vos?.-
-La verdad que me da ganas de conocerte mas profundamente Luis, esas nalgas de macho me apasionaron apenas te las vi.-
-Bien Leo, son para tu disfrute, a tu pija quiero sentirla en mi hoyo.-
Volamos prácticamente a su departamento.
Como ambos amamos el besaculo, en la ducha en tanto nos explorábamos dejamos los anos relucientes, de todos modos el chorro del bidet completó la higiene.
Aun mojados meta besos estuvimos, ya en el lecho me le prendí a los 20 centímetros, el me lamió el ano con lo que imploré algo mas "consistente" dentro de el.
No es mi primera vez, además el consolador me ha logrado una complacencia de esfínteres que le permitió a Leo gozarme sin forro.
Me poseyó de principio a lo perro, luego me le senté en el mástil, de cara a el.
Leo me llenó el culo de leche y yo largué el semen en mi barriguita.
Por supuesto que cuando sacó el ya fláccido pene de mi culo, me lamió prolijamente el abdomen hasta la última gota, me besó, con lo que compartimos mi néctar.
Desnudos, yo corriéndome su eyaculación de mi ano, sentí el placer de que se deslizara por mis nalgas hacia mis muslos. Leo me secó con una toalla y fuimos a tomar algo en la cocina. Preparamos unos mates en tanto nos contamos nuestros inicios sexuales.
-Te diré Luis que tampoco es mi primer coito anal, sin forro prefiero hacerlo, mas cuando es un culito bien amaestrado como el tuyo.-
-Leo amen del consolador que me calma los nervios, en mi adolescencia con mi primo Julián gozamos de nosotros desde que se nos paró la pija. Vivíamos en el campo y el granero era nuestro nido de amor. Hasta una vez nos observó hacerlo un peón, adulto él, que nos cogió de novela. Nos dejaba el culo ardiendo pero gozamos mucho con él-
-Mi caso también ocurrió en familia, mi hermano mayor apenas le di pie me cogió, desde entonces supe lo que es bueno, después el me pidió que lo penetrara y me gustó mas ser activo que pasivo, pero podemos probar si a vos te gusta hacerlo, también a mi me agradaría que me dieras, sería mas placentero que me poseyeras vos también.-
Dejamos de matear y Leo fue mío, si bien su velludo trasero no es de los que más me excitan, le di placer, gritaba como condenado, debimos poner música, después se disculpó, del escándalo que había hecho. Es que sus esfínteres son estrechos y le entra con algo de dificultad pese a la lubricación a dedo en abundancia que le practiqué. De modo que entiendo su preferencia de actuar de macho en el homo sexo.
Actualmente siempre que dejamos a Mary y Lucy, Leo y yo nos amamos. Pasamos las noches de placer mas excitantes que con las hermanas.
Rara vez lo follo a el, de allí que dice que soy su segunda novia.