Iniciandonos los dos

Empecé a curiosear por el chat, al tiempo de casarme, cuando la rutina y la monotonía apareció en la relación con mi esposa.

Videos porno, paginas de cams, y el chat. De todas ella, la última es sin duda mi preferida.  De vez en cuando (muy de vez en cuando) coincidía con alguna mujer en situación similar a la mía y allí, si podía hablar con franqueza, y sin miedo sobre nuestros  gustos.

Me encantaba escuchar (leer más bien) a esas mujeres, y comprendía a la perfección sus situaciones.   Uno de esos días donde el trabajo me permitía ocupar mi mente en estas cosas, entre en un chat, y conocí a Alba.

Tenía 42 años, era una formal casada, madre de dos hijos y esposa ejemplar.

Era ama de casa, por lo que pasaba bastante tiempo sola. Además su marido era viajante por lo que aun se sentía más sola si cabe. Vivía en una ciudad cercana al centro de España, relativamente cercana a la mía.

Tras los primeros días, de charlas educadas sobre nuestras respectivas vidas, fuimos entrando en detalles sobre nuestras respectivas parejas.  Así supe, que su esposo la satisfacía plenamente en la cama, pero q mentalmente, hacía tiempo que se sentía bastante vacía. Tenía sexo, buen sexo pero en el día a día….. fracasaba.  No hacían nada distinto desde hace siglos, y eso de un fin de semana especial…… tampoco la llenaba. Al fin y al cabo solo era cambiar de sitio. No bastaba con eso.

Por supuesto trataba de indagar mas sobre sus gustos, pero se cerraba en banda, en gran parte por la vergüenza q sentía, pese a la creciente complicidad que teníamos.

Tras media docena de fotos que nos enviamos, accedió a regañadientes en buscar una excusa en casa, que justificara la compra de una webcam. Y el mismo día que la compro, nos vimos.  Tras las típicas tonterías  trate de quitarle hierro al asunto de la cam, para que no se sintiera peor, sino como algo normal.  Días después, la poníamos sin pudor ni vergüenza. Ya no se cortaba, ni estaba rígida al conectarla.

Un buen día, llegó bastante más tarde de lo que en ella era costumbre. Al conectarse me contó que había ido de compras pues comenzaban las rebajas.  Apartándose de la webcam, me mostro dos grandes bolsa llenas de cosas q había comprado.  Había ropa para toda la familia, incluyendo por supuesto algo para ella. Además de un par de blusas, confesó haberse comprado ropa interior.  Con algo de timidez, me la enseño. Era un par de conjuntos de braguita y sujetador a juego negros dentro de una preciosa cajita. Dijo que esperaba que le quedaran bien.

Así que mi comentario, ya sabéis cual fue.

-          Póntelos y así lo vemos. Si no te quedan bien, aun llegas a cambiarlos antes de que cierren.

-          Ahora? Dijo ella no muy convencida.

-          No mujer, si quieres te los pones el año que viene, no te jode.

-          Vale, ahora vengo, voy a ver cómo  me quedan.

Salió de la imagen de la webcam, y me quede esperando unos minutos.  Al rato, apareció envuelta en una batita.

-          Qué tal?. Te quedan bien?.

-          Uno de ellos, si. Es para diario, así que tampoco pretendo gran cosa. El ultimo es algo mas especial. Y tampoco estoy muy segura de cómo me queda.

-          Muéstramelo y te doy mi opinión.

En ese momento, su cara cambió. No puso cara de contrariedad, ni de vergüenza ni de enfado. Simplemente, se le fue la sonrisa de la boca, y bajo la cabeza. Esperó así un poco……. Un poco más……. Como pensando.  Y sin levantar la cabeza siquiera, se levanto. Aparto la silla donde estaba sentada, y de golpe desabrochó el nudo de su batita, y se la quito.  No puso los brazos apoyados en sus caderas en pose exhibicionista.   Los llevo detrás de su espalda, y allí los dejó.

Mentiría si no reconociera que la miré, bien mirada.  Pero mi cabeza estaba en sus reacciones. No había duda de que mis ligeras sospechas, se confirmaban.

A Alba, le encantaba obedecer.

-           Que cabrona eres, tía.

Pasaron unos segundos, hasta que se atrevió a levantar la vista. Y al ver eso de cabrona……. Me respondió.

-          Por qué dices, eso?

-          Pues porque te queda de lujo.  Parece hecho a medida.  Es sexy, sin ser vulgar, cómodo sin llegar a ser un conjunto de abuela……..  No se….. creo q es perfecto.

-          De verdad te gusta cómo me queda?.

-          Si claro. Estas perfecta.

Cuando leyó esto último, volvió a su estado anterior. Es decir, alejada de la cámara, con las manos en la espalda. Pero estaba vez, si me miraba. Como expectante ante lo que dijera a partir de entonces.

-          Estas depilada?

-          Si, totalmente. Me dijiste que te gustaba así, verdad?.

-          Sí, me parece precioso si se lleva depilado.

-          Me apetece verlo, pero …………. Mejor  no.

-          Vale, dijo ella sentándose delante de la  pantalla. Ahora ya no veía su cuerpo, solo un poco de sujetador y su cara………….la cual, no sabría definir  a la perfección.  Entregada, excitada, avergonzada, sumisa, cachonda……….. no sé.  Pero desde luego, tenía un poco de cada cosa.

Tras sentarse, y dudando de cómo debería de continuar la conversación, continué.

-          Vuelve a bajar la cabeza, Alba.

Por su rostro deduje, que ni por asomo, ella esperaba eso.  Puso cara de extrañeza, pero de inmediato, volvió a bajar la cabeza.  Acto seguido, su sonrisa me decía que estaba disfrutando.

-          ¿Disfrutas estando así?

-          Si

-          ¿mentalmente?. O también físicamente?.

-           Ambas. Dijo tras dudarlo un segundo.

-          Estas muy excitada?

-          Tras subírsele los colores, respondió con un escueto….. SI

-          Ahora alba, antes de responder a la siguiente pregunta, por favor, tómate un poco de tiempo para pensar la respuesta, vale?.

-          Si, dime.

-          Alba,  ¿quieres seguir por este camino?.

-          Si, dijo sin pararse a pensarlo ni un solo segundo.

-          Llevas mucho fantaseando con ser una sumisa?

-          No sé. Solo sé cómo me siento. Y me siento como nunca. Y me siento así, sobre todo por ti, por la tranquilidad, que me das, por la confianza. Y porque siento que no tengo que pensar, que lo haces tú por los dos. No tengo que pensar en mis deseos, porque los adivinas antes que yo. Si me paro a pensarlo, me muero de vergüenza. Pero sabes, hasta esa vergüenza, me excita. Y me excita, porque veo que también te excita a ti.

-          Te gusta sentirte así de zorra?.

-          Ahora, con la cara roja de la vergüenza , respondió:  Tú qué crees?.

-          Creo que te gusta un millón de veces más, de lo que te esperabas.

-          Pues eso.  Sabes mas de mi , que yo misma. Y no veas lo que me jode.  Me gusta, pero también me jode. Llevo tiempo deseando dejar de sentirme solo como una buena madre  y esposa. Y me apetece sentirme mujer. Me apetece q me deseen, pero que me deseen de verdad. Tanto como para perderme el respeto.

No quiero que malinterpretes mis palabras, julio.

-          Tranquila, se lo que quieres decir. Te apetece poderte comportar como desees, y además de eso, notar que eso es justamente lo que puedes hacer. Sin miedos ni tabus, verdad?.

-          Si, es exactamente eso.

-          Es algo, como esto. Mírate. Casi desnuda, excitada, sumisa, deseándolo todo…….. y sobre todo muy feliz.

-          Siiiiiiiiii. Asi es.

-          Te apetece que te vea desnuda?.

-          No lo sé , julio. Tu deseas verme desnuda?.

-          Alba……..responde a lo que te pregunté.

-          …… Sí , cerdo, sí. Claro que deseo que me veas desnuda. Eres muy cabrón por hacérmelo decir.

-          Resulta bonito que lo digas.

-          Entonces, me quieres verme desnuda?.

-          Quieres tuuuuuuuuu.  De lo que quiero o no  quiero….. no estamos hablando ahora.  Apaga la webcam, y hablaremos mañana. Se está haciendo tarde, y tu familia no tardara en llegar. Te espero mañana……. Sobre la hora de siempre.

Hasta mañana  alba

Para no alargarme mucho….. lo dejo aquí y cuando tenga un poco de tiempo, continuare para contaros lo que siguió sucediendo con  Alba, vale?.  si me quereis comentar algo........ julio1975julio@hotmail.com