Ingresando a La Agencia de Modelos
Esta es la historia de la iniciacion a la que con el mayor placer me someti para pasar a formar parte de la mayor agencia de modelos de mi pais.
Quiero contar mi experiencia al ingresar a la famosa agencia de modelos en la que trabajo ahora (al menos es famosa en mi país) que fue a la vez mi rito de iniciación a un mundo que no deja de parecerme maravilloso aunque deba esconderlo en el mayor de los secretos.
Ya hacia tiempo que yo deseaba formar parte de su staff pues sabia que era la agencia mas grande, que mas trabajos daba, donde era sencillo hacerse famosa, y en consecuencia ganar mas dinero. Confiaba en los halagos que siempre recibía mi figura alta y rubia y en el famoso versillo que tanto me repetían de que yo realmente me veía como una modelo y que rezumaba elegancia.
Así que aquella tarde me puse mi mejor conjunto de blusa y falda larga y ceñida, tacos, maquillaje y todo lo necesario para que a pesar de mi joven edad me viese como una dama seductora y sofisticada. Por la mirada de admiración que note en la recepcionista cuando entre a la oficina, confirme que había logrado mi objetivo. Debía entrevistarme con Nilda, la dueña y gerente de la agencia.
Tras un rato de estar aguardando a que me atendiera note que la recepcionista realmente me miraba mucho y sus miradas no dejaban de tener una cierta carga que me incomodo un poco. Me miraba con cierto fuego que en realidad antes solo había notado en muchachos. La recepcionista usaba el cabello corto y tenia unos muy bellos ojos verdes, realmente poseía una figura privilegiada y carita de niña por lo que me sorprendía que ella misma no fuese modelo. Cuando volví a notar que me miraba le sonreí y ella devolvió la sonrisa en forma muy simpática por lo que de pronto la incomodidad que sentía se convirtió en una especie de sentimiento de estar siendo halagada por la admiración de aquella chica tan bella.
Al poco rato me pidió que pase a la oficina de Nilda. Esta se encontraba hablando por teléfono muy enérgicamente tras un escritorio al final de la amplia habitación. La recepcionista me pidió que me siente en un sofá que allí había y me ofreció algunos bombones y algo de jugo que estaban sobre la mesita:
Come los bombones y tomate el jugo (Me dijo), lee algunas revistas y si la señora Nilda tarda no dudes en levantarte y caminar un poco, todo esto es en realidad un test para ver como comes, te mueves y comportas mientras esperas, así que no dudes en mostrar tus ademanes mas encantadores.
Yo le di las gracias por la advertencia y mientras empezaba a hojear una revista di un mordisco a uno de los bombones, que resulto estar extraordinariamente bueno. La habitación estaba decorada con muy buen gusto, abundaban veladores, pinturas y espejos, estos últimos me llamaron la atención pero supuse que toda modelo se pasa mucho tiempo mirándose a si misma así que no pensé mas en el tema.
Algo de música suave sonaba en el ambiente pero la vos de Nilda se imponía sobre ella. Nilda era una mujer en sus treinta y se veía mucho mas hermosa en persona que lo que yo había logrado prever por sus imágenes en prensa, también se notaba mucho mas ese aire de mujer decidida y dominante que la caracterizaba en forma tan tajante. Tras un rato de verla de reojo hablar y estudiar sus gestos y tonos de voz, quede convencida que era una mujer fascinante a la que difícilmente podría dejar de obedecer.
Cuando había comido algo así como el cuarto bombom y acabado mi vaso de jugo, Nilda se acerco y me saludo. Su perfume me embargo, era una fragancia que no conocía pero resultaba sumamente agradable. Note con cierta sorpresa que ese aroma me parecía incluso atrayente.
Para ese momento yo me estaba sintiendo un poco extraña pero no sabia a que atribuirlo. La salude lo mejor que pude pero ella casi no me dejo hablar, se sentó exactamente en frente mío y me miraba de una forma muy particular aunque carente de todo interés, de hecho, parecía que miraba a través de mi. Pronto me di cuenta de que no podía dejar de mirarla y que el sonido de su voz estaba penetrando muy profundamente en mi y era lo único a lo que yo estaba atendiendo, de hecho, casi no percibía el significado de sus palabras, pero la cadencia con la que hablaba se me estaba gravando como una canción. Parecía que la habitación estaba borrándose y solo existían ella y su voz. En un momento dado se levanto y me dijo que tenia que hacer una llamada pero que la espere allí mismo. Volvió al escritorio y al teléfono. Al pararse su perfume volvió a impactar mis narices y ahora decididamente me encanto.
Tome un poco mas de jugo y me di cuenta de que algo no estaba yendo bien. Me sentía muy liviana, un poco eufórica y mi piel empezaba a parecerme casi electrizada. Las cosas parecían empezar a suceder muy lentamente.
Creo que pase así casi veinte minutos mientras Nilda hablaba. De pronto ella se incorporo una vez mas, apretó un botón y casi todas las luces de la habitación se apagaron. Quedamos en una semipenumbra que me resulto especialmente confortable. Entonces me dijo:
-Jazmín (su tono de vos volvía a ser muy particular), quiero que me escuches muy atentamente, con mucha, mucha atención....(se volvió a sentar frente mío y a mirarme de aquella extraña manera).....atended muy bien mis palabras y no pienses en nada mas, simplemente atended lo que yo digo y acéptalo,....aceptar lo que yo digo te garantizara el éxito en el modelaje y eso es lo que vos queres ¿Verdad?.
Respondí casi como un autómata que si. La verdad es que estaba empezando a sentirme como un autómata y esta sensación se intensifico porque Nilda no paro de decirme en ese extraño tono que si yo hacia todo lo que ella decía seria muy feliz y en realidad yo quería hacer todo lo que ella diga. Luego me empezó a hacer repetir sus palabras muy lentamente, para demostrarle que la estaba entendiendo.
No tengo idea de cuanto tiempo pase así pero pronto me di cuenta de que mi futura jefa me estaba haciendo algo. Pero me estaba sintiendo muy bien, muy relajada, en realidad quería seguir sintiéndome así y La Señora me aseguraba que obedecerla era la forma de sentirme cada vez mejor.
En un momento dado me dijo:
-Jazmín, escucha muy bien esto y acéptalo con tranquilidad porque todo lo estoy haciendo para que ingreses a esta agencia....(Un si Señora de mi parte respondió sus palabras)....los chocolates que comiste y el jugo que tomaste contienen narcóticos para que seas mas sumisa, la música que estas escuchando contiene mensajes subliminales y lo que he estado haciendo durante las ultimas horas es hipnotizarte muy lentamente......todo esto te hace sentir muy bien y realmente quieres obedecer todos mis deseos....ahora voy a proceder a hipnotizarte totalmente y vos te vas a entregar en forma absoluta.....solo desearas cumplir mis ordenes....empezaras a quedarte dormida, contare de 10 a 1 lentamente y cada vez tendrás mas sueño, te sentirás mas relajada, te sentirás sin voluntad propia, me escucharas y harás cuanto yo diga.
Por supuesto que yo había escuchado lo que me dijo y entendía de que hablaba. No obstante me sentía liviana y contenta y aunque algo dentro mío parecía pedir socorro, ese pequeño germen de miedo me parecía agradable de sentir, pues me daba cuenta de que ese miedo estaba creciendo y que sin embargo Nilda tenia ya poder sobre mi y que yo no podría escapar aunque estuviese aterrada. Me di cuenta de que aquella hermosa y poderosa Señora me estaba esclavizando y lo hacia cada vez con mayor intensidad pues no paro de hablarme y de hacerme repetir sus instrucciones. Yo estaba ya en un profundo trance pero era conciente de lo que pasaba, y sentía una muy rara mezcla de emociones. Estaba dormida o en trance pero sentía muchas cosas: mi corazón latía a prisa, mis piernas estaban temblando y sin que yo sepa porque, sentía como mi sexo se hinchaba y mojaba. Hubiera deseado apretar fuertemente mis muslo uno contra el otro para intensificar el placer, pero en verdad me di cuenta de que mi voluntad me había abandonado totalmente y ni siquiera era capaz de decidir eso por cuenta propia.
La Señora no paro de repetirme como yo la amaba y deseaba que ella haga conmigo lo que se le antojara y del placer enorme que yo sentiría cada vez que tuviese contacto con ella. Finalmente me explico lo profundamente enamorada que estaba yo de ella y yo me di cuenta de que realmente era así y que siempre la había amado, que siempre la había soñado como mi protectora, mi patrona, mi madre, mi ama, mi amor.
Entonces me dijo que iba a besarme en los labios y que yo notaria que era el beso mas bello que había recibido jamás, que mientras me besaba yo la amaría cada vez con mas fuerza he iría despertando muy lentamente, cuando estuviese totalmente despierta recordaría todo esto y desearía que ella me hipnotice siempre que quisiera, para lo cual solo tendría que pedírmelo y yo entraría ya en trace.
Acerco su rostro al mío y me beso con una ternura extraordinaria. Su perfume me embriago y su piel me conquisto totalmente. Fue de verdad el beso mas bello que sentí desde entonces y ella no paro de hacérmelo disfrutar, pues fue un beso muy, muy largo que empezó con un roce de labios y finalmente cuando yo estaba ya totalmente fuera del trance se convirtió en una sensual y paradisíaca danza entre nuestras lenguas para pasar luego a los chupones, volver a las lamidas y repetir. a los tiernos roces.
Nilda se sentó a mi lado y me hizo acostarme con mi cabeza apoyada en su falda, mirándola a ella. En esta posición empezó a acariciarme por sobre la ropa lo cual me lleno de descargas de placer. Dios, realmente yo estaba disfrutando de sus caricias. Sentía mi concha ardiendo y mis pezones ya me dolían de lo erectos que los sentía bajo la ropa.
-No puedes correrte hasta que yo lo diga ordeno La Señora y yo note sorprendida que mi cuerpo casi por explotar la obedecía, haciendo que el orgasmo que empezaba a llegar se frene y mi vagina arda con mayor fuerza...parecía ya casi doloroso y sin embargo me estaba encantando.
Entonces ella me acaricio el rostro, toco mis labios con un dedo al que yo chupe con verdadera pasión. Ella entonces se quito el saco, desprendió su camisa, bajo un poco un lado de su sostén y allí yo tenia a milímetros de mi rostro un ancho y redondo seno con pezon firme y una aureola oscura gruesa.
Aquella teta tenia un olor particular y agradable que no quise dejar de sentir mientras le chupaba el dedo.
-Jazmín (me dijo ella), vos sos mi bebe y yo soy tu mama. Yo te alimento y por eso me queres con toda tu alma. Vas a chupar ahora mi teta y vas a desea hacerlo siempre. Realmente vas a ser muy feliz de chupar mis tetas.
Acto seguido apretó muy suavente los lados de mis labios e introdujo su teta en mi boca.
Dios mío aquello fue divino.
Yo mamaba como una bebita pequeña .Mis labios succionaban aquellos pezones y mi nariz se deleitaba de su aroma a teta. No tenia leche pero por favor como yo deseaba poder algún día beberla. Realmente yo no podía parar de hacerlo y ella me miraba sonriendo mientras acariciaba mi rostro. Yo no parpadeaba, solo chupaba aquella deliciosa teta mientras miraba la cara de mi amada Señora llena de gratitud por darme de probar aquel manjar.
Mientras mamaba me di cuenta que estaba emitiendo gemidos de placer y que mis piernas y brazos habían perdido toda su fuerza.
Ella me aparto con suavidad y me pidió que me pare. Mi lápiz de labios había quedado gravado en torno a su pezón. Con mucha lentitud me quito la pollera, los zapatos y las medias. Cuando mi sexy tanga quedo a la vista me tomo de las caderas y me miro con verdadero deseo directamente a la concha. Mi tanga estaba húmeda a rebosar y yo sentía que el calor en mi sexo directamente me quemaba. La Señora se paro tras de mi y me acaricio las nalgas. Entonces nos vi en el espejo que estaba frente nuestro y me di cuenta de lo bellas que nos veíamos, desee que hubiese cámaras tras los espejos y filmasen todo aquello para que este amor se gravase para la eternidad.
Entonces La Señora se agacho y muy lentamente bajo mi tanga al suelo y me la quito. El olor de mi concha empezó a llenar el ambiente pues estaba extraordinariamente excitada. Ella se incorporó de vuelta y olfateo el aire con los ojos cerrados:
-Que olor mas bello (me dijo y lamió lentamente mis oídos).
Yo solté un gemidito de puro gusto y entonces ella deslizo su mano entre mis nalgas y palpo directamente mi ano con sus dedos. Eso me hizo gemir mas. Me tomo del hombro y empujándome con el dedo que tenia en mi culo me hizo subirme a una mesita y mirar a la pared que quedo a centímetros de mi cara.
Conmigo sobre la mesita mi culo quedaba casi a la altura de su rostro por lo que no dude de lo que ella haría a continuación. Con mucha habilidad y siempre desde atrás ella tomo mi concha en una mano y acerco su lengua directamente a mi ano.
Empezó a lamerme el culo.
Jamás imagine que podía sentir tanto placer en aquella parte de mi cuerpo. Si antes estaba enamorada ahora ella era mi Diosa. Su lengua me llenaba de electricidad desde el ano. Empecé a mover mis caderas y a agacharme cada vez mas para que su lengua entre cada vez mas profundamente en mi culo. Empecé a gemir mas fuerte y entonces ella directamente paso a chuparme. Mis piernas temblaban. Yo era de ella, para ella.
En ese momento paso algo que no esperaba. La recepcionista entro a la oficina.
Primero nos ignoro y fue a dejar unos papeles sobre la mesa.
Luego se quedo mirándonos desde el escritorio.
Yo me veía en el espejo y sabia que era hermosa y mis boca abierta de placer, la ligera baba que me caía de las comisuras de mis labios y mi culo al aire moviéndose como ofrenda a mi amada Señora se me antojaba lo mas sensual que había imaginado jamás, pero no podía dejar de sentir vergüenza. Casi sin saber porque mire a la chica con suplica y le dije:
-Socorro....(yo no paraba de mover mis caderas y mi lengua en torno a mis labios y a pesar de eso agregue)....por favor ayúdame....me están violando.
Pero el placer de aquella boca entre mis nalgas realmente me dominaba y empecé a chuparme el pulgar y gemir aun con mas fuerza mientras bajaba la vista al suelo y deseaba que me trague la tierra.
Aquella delicia estaba durando bastante cuando volví a mirar a la recepcionista, la cual se había quitado también la falda y las medias y ahora se masturbaba con la muy sexy bombacha puesta mientras nos miraba. Mi mirada se clavo en sus ojos y ninguna de las dos dejábamos de mirarnos mientras nos abandonábamos al placer.
-Claro que estas siendo violada me dijo la chica sin dejar de mirarme-...te están comiendo el culo para prepararte porque después la Señora va a penetrarte analmente. ....te va a doler y te va a gustar demasiado....cuando lo haga quedaras definitivamente convertida en su esclava.
De pronto mi Señora paro y yo me volví a mirarla con suplica.
-Romina ordeno a la recepcionista-, quítate la bombacha y ven aquí.
Romina se quito la ropa interior y quedo desnuda de la cintura para abajo, como yo misma lo estaba. El aroma de su sexo llego hasta mi. Por favor, que bien olía aquello, realmente me estaba gustando.
La Señora quito su mano de mi concha y metió uno de sus húmedos dedos en la boca de Romina, esta cerro los ojos, dejo caer los brazos a los lados y chupo con deleite aquel dedo empapado de mi fluido vaginal. Ver aquello casi me hizo explotar, gemí del puro golpe de placer se produjo desde mi vagina al ver aquello.
Yo aun seguí de espaldas con mi culo hacia ellas. La Señora toco mi concha que se abultaba bajo la línea de las nalgas y Romina acerco aquella divina carita suya a mi sexo y empezó a lamer con avidez.
Grite del pacer pero pronto la Señora subió a donde yo estaba y se apoyo contra la pared. Mientras Romina chupaba mi concha ella me abrazo con cariño y empezó a besar mis labios. Ho Dios, aquella dulce boca estaba llena de mi propio olor. Pero entonces mientras estaba con mis ojos cerrados sentí algo suave contra mi rostro y un olor fuerte y poderosamente penetrante subió desde mi nariz a mi cerebro que venció completo para inmediatamente bajar hasta mi concha y hacer que la sienta ya latir con espasmos que si bien placenteros no podían ser un orgasmo aun simplemente porque mi ama había ordenado a mi cuerpo que lo postergue. Aquel olor espeso y marino provenía de la bombacha de Romina que la Señora sostenía contra nuestras narices para que la oliéramos mientras nos besábamos.
Reuní algo mas de voluntad y suplique a mi Señora que me dejara acabar pero ella se negó y apretó la bombacha contra mi nariz, justo la parte que hacia contacto con la humedad vaginal de Romina. Yo gemí descontrolada mientras movía mis caderas hacia la boca de la chica cuya deliciosa concha ahora olía. Abrí mi boca en un acto involuntario y la Señora metió aquella bombacha en ella para luego cerrarme la boca.
Dios. Tener aquella prenda intima, empapada de olor y sabor a sexo de otra mujer, en mi boca, me pareció la experiencia mas hermosa de mi vida.
Entonces la Señora empezó a decirme cuanto me gustaba el olor a concha y tenia toda la razón del mundo. Me dijo que yo era lesbiana y además era su lesbiana pero me permitiría probar otras conchas. Entonces me ordeno que suplique para probar concha y yo empecé a rogar por concha con una desesperación muy sincera.
Entonces ordeno a Romina que pare y empezó ella misma a desnudarse de la cintura para abajo.
¿Cómo describir el aroma que ella despedía?, ¿Cómo explicar lo mas maravilloso que jamás hayan percibido mis sentidos?. Mi Señora se sentó en el sofá con la piernas muy abiertas y me ordeno que yo chupe su concha.
Es lo mas rico que he probado nunca. Literalmente yo no podía parar de beberme su jugo . Sentía mis piernas y brazos reblandecidos y que toda yo se resumía a una hambrienta boca que ingería todo lo que podía del sexo también femenino de su Señora. Ella mientras tanto se deleitaba besando los labios de Romina con un ardor que no dejo de llenarme de celos, pero yo entendía ya que era su esclava y que simplemente debía acatar su voluntad.
Ella tuvo varios orgasmos y yo a pesar de mi boca casi entumecida no deseaba parar. Pero al parecer ella ya extenuada me dijo que acabe y al instante sentí mi concha explotar. El placer fue tan intenso que literalmente dolió. Caí al suelo gritando y cada espasmo me retorcía como anguilas eléctricas. Fue una sensación extraordinariamente fuerte que duro un rato muy largo y que acabo por dejarme absolutamente sin fuerzas y sin pensamientos, tirada en la alfombra sin ningún control sobre mi cuerpo.
Fue el orgasmo mas arrebatador que pude sentir jamás y consumió tanto de mi que quede al instante dormida. Instintivamente me puse en posición fetal y pensé que me moriría del placer pero lo acepte porque moriría llena de felicidad.
Mas tarde cuando desperté aquello continuo y la promesa de Romina se cumplió: La Señora se puso una prótesis y me penetro analmente por primera vez en mi vida. Fue maravilloso y me permitió ingresar a la agencia, ganar mucho dinero y estar cerca de mi Señora a la que amo con todo el corazón.