Infiel por primera vez parte 1

Jamás pensé en que le sería infiel a mi esposo

Mi nombre es Nanci, tengo 30 años, me considero una mujer que trata de cuidar su cuerpo, para lo cual hago natación y gimnasio. Llevo 8 años de casada y tengo un hijo de 4 años..

Soy maestra desde hace más de 10 años, pero siempre había trabajado en colegios particulares hasta hace un año que decidí realizar mi examen para tratar de ganarme una plaza en una primaria de gobierno, afortunadamente me quede, desafortunadamente estaba la escuela a una hora de mi casa, cosa que si me creaba cierto conflicto, ya que tenía que dejar más tiempo a mi hijo al cuidado de mi madre,, ya que mi esposo también trabaja, y para poder realizar un cambio a una primaria más cercana a mi domicilio tenía que estar de dos a tres años trabajando en la plaza  ir me habían asignado.

Mi trabajo hablaba por mí, y rápidamente me gane a la directora de mi escuela, al grado de contarle que todo me parecía muy bien a excepción de la distancia al trabajo, ella prometía averiguar si podía hacer algo al respecto.

El último viernes de cada mes no hay clases para los niños, ya que nos dan asesorías de supervisión en una escuela designada, el supervisor era un hombre un tanto atractivo, alto, delgado con el cabello un poco canoso y de unos 55 años, a algunas de mis compañeras les atraía este hombre. Las asesorías eran de 1:30 a 6:00 pm, es decir el mismo horario que teníamos de trabajo.

Cierto viernes cuando termino las asesorías en supervisión me disponía a retirarme, se me acerco él supervisión y me pidió que me quedara un momento, porque necesitaba platicar conmigo. Me dijo que la directora de mi escuela le había comentado mi situación de la distancia de mi trabajo con respecto a mi domicilio, me dijo que era algo complicado hacer un cambio antes de los dos años, pero que él podía interceder por mí para lograrlo, que tenía que meter unos documentos y que estaba seguro de que lograría a más tardar en dos meses realizar el cambio de plaza, estaba muy feliz, era la mejor noticia que podía haber escuchado, solo que necesitaba que el próximo viernes le firmara unos documentos y además le anexará mis documentos personales para iniciar el trámite, le dije que él me dijera la hora y yo iría a supervisión a buscarlo, me dijo que prefería invitarme a comer, cambie totalmente mi semblante y le dije en tono de reclamo porque no podía ser en su oficina, me respondió que iba a ser muy sincero conmigo, no es fácil conseguir el cambio, que él tendría que pedir unos favores y que aunado a eso el hecho de que una vez realizado el cambio ya no me volvería a ver, porque también mi supervisión cambiaría, que por lo menos le aceptará una invitación a comer para despedirnos, termino diciendo que no le contestara nada ahorita, que lo pensara y le llamara.

Salí y me fui a mi casa un tanto desconcertada, no sabía si contarle a mi esposo o de plano mandarlo a volar y es qué desde que me case nunca volví a salir con ningún hombre a solas, llegue a mi casa y el sábado por la noche cuando ya estábamos acostados mi esposo y yo, decidí contarle lo que había pasado, pensé que se pondría enojadísimo, pero para mi sorpresa cuando termine de platicarle me dijo que pensaba hacer, le dije que por supuesto no saldría con él, y me volvió a preguntar porque no?, le respondí que yo no me prestaba a esas cosas para conseguir algo, él me dijo que lo pensara muy bien porque realmente no me había insinuado nada, solamente salir a comer con él, después de eso me comenzó a besar y termino haciéndome el amor y cuando estábamos en el acto llego a preguntarme si me gustaba Fernando el supervisor, le respondí que no, volvió a insistir para que le dijera la vedad, lo notaba súper excitado y acabe respondiendo que era atractivo pero hasta ahí, sentí como creció más y me lo hizo con más fuerza, creo que no le desagradaba la idea de que saliera con otro.

El domingo ya no dije nada, pensé en llamar a Fernando el lunes y decirle que gracias por el favor pero que no saldría con él, cuando mi esposo volvió a tocar el tema diciéndome que por él no había ningún problema si salía con Fernando, que era mucho más lo que ganaría que lo que perdería, me dijo piénsalo y le pregunté si en verdad no se molestaría que saliera con él, me dijo que no, es más que le llamara para confirmar que iría con él.

Llame a Fernando estando mi esposo presente, porque quería escuchar la conversación, cuando escucho que era yo se puso feliz él supervisión, le confirme que iría a comer con él, pero que solamente podría ser después de las 6 de la tarde que era cuando yo terminaba mi jornada laboral, me dijo que no había problema por eso, ya que había hablado con la directora para que el próximo viernes me dejara salir a las 3 de la tarde, me moleste un poco porque él estaba seguro que aceptaría salir a comer.

Me dijo que también había una película que anhelaba ver y que, si podía ir con él al cine, le refute que el trato era solo comer, mi esposo se me acerco al oído y me dijo que aceptara, que no pasaba nada y acabe cediendo.

No estaba del todo convencida y estuve algo distante con mi esposo por la situación, y el lunes durante el camino pensé en llamar a Fernando y cancelarle, pero entrando a mi salón estaba en mi escritorio un enorme arreglo floral con una nota en un sobre, entró una compañera al tiempo que leía la tarjeta, era mi mejor amiga y le tenía mucha confianza, me pregunto si eran las flores de mi esposo y le conté lo que me había propuesto el supervisor y que las flores me las había enviado él, le conté que mi esposo me había dado permiso de salir con Fernando y ella me dijo, no seas tonta amiga, si tienes el permiso de tu esposo, aprovecha, además está muy guapo él supervisión y mira el detalle que te trajo, se dio la vuelta y se fue.

Ya no le llame a Fernando, el me llamo a la hora de mi comida y le agradecí por las flores, pero que consideraba que no estaba bien que me enviara eso, y que se podía prestar a malas interpretaciones, ya que todos sabían que era una mujer casada, el me respondió que solo era un pequeño presente, sin darme cuenta se fueron 20 minutos platicando con él, le dije que ya me tenía que ir.

No le platique a mi esposo de las flores, al día siguiente al entrar a mi salón nuevamente encontré un regalo, está vez no estaba a la vista, era una caja de chocolates, y la tarjeta decía “gracias por aceptar salir conmigo”, nuevamente a las cuatro de la tarde me volvió a llamar para preguntarme si me habían gustado los chocolates, le respondí que me volvían loca pero que no era necesario que hiciera todo esto, nuevamente platicamos por teléfono cerca de 15 minutos, nada de esto le contaba a mi esposo.

El día miércoles llegue nuevamente A mi salón, pero esta vez no encontré nada espere con ansias las cuatro de la tarde no sé por qué, pero ese día no me llamo tampoco. El día jueves nuevamente al entrar a mi salón, no encontré una bolsa grande, me di cuenta que dentro había unas zapatillas altísimas, una blusa blanca en la parte de enfrente, una minivestido, medias, y ropa interior (un brasier negro de media copa, y una tanga de encaje). A las 4 me volvió a llamar y le dije que porque me había enviado eso, me respondió que si por favor podía usar esa ropa el viernes, le dije que no estaba bien, que nunca había salido así vestida ni con mi esposo, termino diciéndome que lo considerara.

Llego el viernes y termine de bañarme, seguía dándome vueltas en la cabeza si usar lo que me había comprado Fernando, o usar un traje sastre, hasta que mi esposo se me acercó para preguntarme si la cita seguía en pie, le contesté que sí, me volvió a preguntar que usaría de ropa, le dije que el traje sastre negro, me dijo que con ese parecía monja y comenzó a reír un poco, me moleste y le dije que entonces le daría una sorpresa, el salió de la recámara y a las 12 del día estaba lista para irme al trabajo, cuando baje y me vio casi se le salen los ojos, pensé que me reclamaría por querer salir así vestida, pero fue todo lo contrario, me dijo que estaba bellísima y que el supervisor se quedaría impactado, me coloqué un saco para tapar un poco lo sugerente de la blusa y me fui al trabajo, antes mi esposo me dijo que ese día le tocaba trabajar y que pasaría a dejar al niño con su mama (él trabaja como trailero).

Al igual que mi esposo, mis compañeros de trabajo se quedaron impresionados al verme así vestida, la verdad al principio me sentí algo incomoda, hasta que mi amiga se me acercó y me dijo que estaba muy guapa y que había causado furor en la escuela. Sinceramente tenía mucho tiempo de no sentirme así, fue entonces que decidí quitarme de complejos y de culpas.

Fernando llego puntual a las tres de la tarde salí del escuela y ya me estaba esperando afuera en su auto, como todo un caballero y bajo y me abrió la puerta del carro no sin antes decirme que estabas muy guapa y que me agradecía mucho el haber aceptado salir con él y además usar la ropa que me había regalado, yo solamente le sonreí y subía su auto.