Infidelidad: cosas comunes... y placer sin igual

Cosas Comunes de la Infidelidad, y Relato de Una experiencia sexual, inolvidable:

II Cuento por mi persona, REAL igual al anterior.

Llevo dos años y medio felizmente casado, aunque desde hace ocho meses a la fecha, mi relación con mi esposa ha declinado un poco, sin embargo, considero que no es nada del otro mundo, nunca pensé en estar únicamente con mi esposa sexualmente, sin embargo creí que no valdría la pena tener a alguien más, ya que me podría traer consecuencias no deseadas, a no ser que fuera una relación relámpago, que me permitiera estar con alguien mas y no tener problemas, no quería precisamente enamorarme, mas bien disfrutar el momento.

Esto fue lo que paso: hace cuatro meses, llame a mi mamá para saludarla, al hablarle, me dijo que había recibido una llamada de una antigua amiga mía y me dio su número telefónico. De inmediato la llame muy emocionado, esta antigua mía estaba enamorada de mí, mas yo nunca le puse atención, en el tiempo de conocernos yo tenia novia y no me llamaba la atención, bueno la llame y con una gran voz de alegría me contesto cosa común Uno: Hablas con tu pareja, y le eres casi indiferente, en cambio hablas con un amante en prospecto o en calidad, y sentís una gran diferencia, esta persona esta feliz y emocionada de hablar contigo.

Quedamos de juntarnos a tomar un café y platicar que había sido de nuestras vidas en casi dos años de no vernos, y bueno llego el día. Yo me arregle muy bien y estaba puntual en el lugar de reunión, de pronto llego ella y me dejo con la boca abierta, estaba cambiadísima, parecía modelo. Cosa común numero dos: Sales con tu pareja, y te da igual la ropa que te pones, si sales con un extraño, no descuidas el más mínimo detalle. Nos pusimos a charlar y me contó que se había casado al igual que yo, que se había ido a vivir a otro país, pero que estando aya, su esposo le había sido infiel, por lo que decidió regresar con su familia a nuestro país, en platica y platica se nos hizo tarde, por lo que nos despedimos y quedamos de vernos otro día.

Para mi mala suerte no tenía vehículo ya que acababa de vender mi carro y aun no había comprado otro. Así que ambos nos fuimos a pie de regreso a nuestras casas. Cosa común numero tres: Con tu pareja no eres nada cortes o detallista, con un extraño pareces él más caballero o dama de los cuentos de antes. Al llegar a mi casa solamente pensaba en la próxima vez que nos veríamos, y pensaba que definitivamente algo iba a pasar, lo sabia por la forma en que ella me miraba, al igual ella pienso que lo podía percibir, mi mirada fija en sus ojos, el deseo que sentía por ella era obvio.

PARTE ERÓTICA DE LA HISTORIA: Si sigo como hasta ahora creo que los aburriré, debido a que los que leemos estas historias nos excita o gusta leer historias peladas, así es que allí les va...

En la segunda cita yo no pensaba en nada mas que cogermela, hacerla mía, y de esa forma que vengara ella la infidelidad de su esposo y yo saciar mi deseo carnal, Nos reunimos como lo anterior vez, empezamos a platicar y de pronto yo me acerque a ella para besarla y ella acepto, nos estuvimos besando por un gran rato, ella me confeso que me deseaba, que lo había hecho desde que me conoció, y que yo nunca le correspondí, y que ahora años después y estando casados, no le importaba era un sueño hecho realidad y bueno para mi también, ese día por falta del vehículo pinché no pudimos ir a un motel, en mi casa estaba mi esposa y en la de ella su esposo, por lo que se tuvo que postergar la ocasión , al siguiente día, le preste un carro a un amigo mío, pase por ella para ir a almorzar, y luego de almorzar nos empezamos a besar nuevamente, yo dentro del vehículo empecé a desabrochar su blusa, viendo dos grandes tetas que sentía como que me llamaban por mi nombre, luego desabroche su pantalón y vi que cargaba una tanga que ya no pude resistir mas, le dije que fuéramos a un motel y ella accedió de inmediato, al llegar allí mi mente solo pensaba en SEXO y mi verga solo quería clavarse en su vagina una y otra vez, hasta hacerla terminar, sabia que su esposo era un negro de raza y que media mas o menos 1.80 metros, por lo que me llevaba la delantera en cuanto a tamaño de miembro pensé, sin embargo mi cuerpo solo quería complacerla, tenia una meta: ser mejor que su marido en la cama o morir en la lucha, al llegar al hotel, nos desvestimos rápidamente, con destreza, la acosté en la cama, acariciando sus piernas, hasta llegar a su vulva, allí lentamente me acerque cargue sus piernas con mis brazos, y empecé a acariciar su vulva con mi lengua, sus genitales eran diferentes a los que yo hubiese visto, su clítoris era casi nulo, nada pronunciado, su vagina era pequeña, empecé a succionar, y a pasar mi lengua lentamente de arriba abajo sintiendo como se humedecía de placer, y a sentir gemidos y caricias en mi espalda lo cual me decía que iba por buen camino, seguí así un buen momento hasta que la oí desfallecer de placer, su vagina estaba literalmente empapada, luego de eso empecé a acariciar sus piernas nuevamente hasta llegar a sus pies, al llegar a sus pies empecé a acariciarlos y a pasar mi lengua por ellos, note una sonrisa de felicidad y placer en ella, dándole vuelta lentamente acaricie su espalda caderas y cuello, empecé a besar la parte trasera de sus oídos, después de unos minutos, calcule que estaba nuevamente lista para recibir mas placer, así es que regrese de nuevo a practicar sexo oral, pero esta vez introduciendo mi dedo en su vagina, debido a la humedad este resbalaba con gran facilidad, por lo que procedí a introducir dos dedos, sentí como casi prende fuego de placer, y yo también al verla tan excitada, después de unos momentos pude sentir como terminaba nuevamente en mi, después de esto no besamos, de repente ella bajo hacia a mí diciéndome que ahora era su turno, me empezó a hacer sexo oral, con gran pericia debo decirlo, aunque la verdad a mi me gusta mas hacer sexo oral, que el que me lo hagan, pero bueno la pase muy bien, aunque no termine en ella, luego de un buen momento cambiamos de posición, quedando en el llamado 69, esta vez introduje mi dedo en su ano, notando en ella únicamente, un escalofrió de placer, y sintiendo que con mas ganas, acariciaba mi miembro, luego pase mi lengua por sus nalgas, posteriormente, estaba listo para la penetración.

Ella se recostó esta vez, tímida como dándose cuenta hasta ese momento de nuestros actos, yo tenia la verga súper parada, que sentía que se desprendía de mi cuerpo, lentamente la introduje en su vagina, Guauuuu... que sensación su vagina realmente era estrecha, pequeña o yo no se pero sentía cada roce de mi verga en su vagina, se la metí hasta el fondo una y otra vez, cada vez con mas fuerza, luego cambiamos de pose nos pusimos en cuatro, en donde yo no dejaba de admirar su rico anito, seguimos cogiendo, nos pusimos de lado, luego ella encima de mi, luego otra vez de lado y de repente, como un gran chorro a presión termine, dando un gemido de placer, vaya sino.

Hacer el amor sin olvidar detalle, estaba valiendo la pena; aunque en lo personal realmente gozo el dar placer a mi pareja, es decir el verla excitada. Lo cual hace que me excite yo mas, y así gozar de las relaciones sexuales,

Bueno no tengo la verga grande, ni ancha, aunque tampoco pequeña, tamaño promedio podría decir, pero estaba orgulloso, cuando esta chica me dijo que no se esperaba realmente lo bien que se la estaba pasando junto a mi, Había vencido a mi oponente su marido!...

Después de esto nos fuimos a bañar, nos seguimos acariciando, al regresar la penetre nuevamente hasta terminar, de pronto vimos la hora nos teníamos que ir, y así lo hicimos, a la semana fuimos al cine, luego a su casa, y pensando con la verga no con la cabeza, me la volví a coger esta vez, por el culo y la pusa... Empecé a cogermela por el culo cuando acariciando su ano, con mis dedos me dijo que podía hacer de ella lo que quisiera, al nomás oír eso le di vuelta, le pase la lengua por el ano, le metí el dedo en la vagina, y luego en su ano, aprovechando la humedad, coloque la verga en su hoyito y presione, sin embargo no era suficiente era dificultosa la entrada, previendo que le podía doler y arrepentirse deje de empujar. Jale rápidamente una crema, que había en su mesa de noche, la unte y empecé a darle masaje en el cuerpo, luego al llegar a sus nalgas, las abrí lentamente empecé a acariciar su ano con mi dedo, ya humectada, me agarre la verga con la mano, la coloque en su hoyito y adentro, se la metí una y otra vez, y otra. Guauuuu, hasta terminar.

Esa fue la ultima vez que cogimos, luego de ese días no vimos un par de días mas y terminamos la relación debido a que estaba esperando bebe de su esposo, que había regresado de viaje, y ahora vivía con ella, y no quería seguir así conmigo, yo opte porque era lo mejor también tomando en cuenta, que su marido era militar y un paso en falso y bien me podía matar, o mandar a matarme, ya que pertenece a un grupo paramilitar en mi país.... Llegue a darme una gran colgada de esta chava, aunque solo cogimos un par de veces y salimos durante 21 días… Me dolio terminar con ella, pero en fin… La pase muy bien mientras pude.! Espero que les haya gustado... Les deseo suerte... Herberthx.

Cosa común 4: No nos duele gastar en un amante, ni chupando con los cuates pero con la esposa somos agarrados.

Cosa común 5: Por lo regular, La amante o amante, nos trata de lo mejor, en cambio en la casa no

Cosa común 6: Los momentos para ser infieles, mas comunes, son cuando estamos peleando con la pareja.

Cosa común 7. Cuando somos infieles, estamos felices… Con excepción claro de los que metierón las patas y tienen clavos, o los descubiertos, o también de los indecisos…. En fin.. Ser infiel y terminar bien o estar claros en lo que se quiere y tener sexo sin inhibiciones y sin compromisos. QUE RICO!...

Espero les haya gustado mi experiencia… herberthx..