Increible mujer

Me llamo Javier tengo 35 años soy soltero me gusta mucho el sexo, no tengo pareja estable pero si que tengo ligues, supongo que debe ser por que estoy bastante bien dotado, mi polla mide 24 cm y es bastante gordita.

Una de mis fantasías era hacer un trio con una pareja por lo que puse varios anuncios en Internet ofreciéndome a parejas no dio mucho resultado pero un día entre en un chat de sexo y por casualidad entable conversación un una pareja que buscaba un hombre dotado para hacer un trio.

Ese día hablamos bastante y luego seguimos en contacto a través de correos donde pude enviarles una foto mía, era una pareja de 45 años el quería ver como su mujer disfrutaba con otro pero el no participaría, no era lo que yo buscaba pero para empezar no seria mala idea.

Después de varias llamadas de teléfono quedamos en conocernos en persona, nos vimos en un bar, el se llama Juan y ella Ana, el parecía mayor de 45 sin embargo ella si que aparentaba la edad que decía esta muy bien físicamente por lo que me gusto bastante, ese mismo día quedamos en ir a su casa.

Al llegar a la casa el ambiente era bastante frío ya que tanto para mi como para ellos era una cosa totalmente nueva a Juan se le veía muy excitado por lo que fue el quien empezó a romper el hielo.

Juan: se me ocurre que podrían estar solo un rato para que vayáis intimando por que no se dan una ducha los dos juntos.

Yo: me parece buena idea y a ti Ana

Ana: a mi también.

Pasamos al baño Ana y yo ella estaba muy nerviosa por lo que me desnude y luego la desnude a ella nos metimos en la ducha y nos empezamos a enjabonar uno al otro a media que los minutos pasaban ella y yo nos fuimos calentando hasta que ella perdió la vergüenza que tenia y me tocaba la polla con bastantes ganas.

Salimos de la ducha nos secamos y fuimos al dormitorio donde estaba Juan sentado en un sillón desnudo tocándose la polla que no era nada grande mas bien pequeña, yo iba con mi polla dura como un cañón.

Juan: bueno parece que ya os vais conociendo, ya sabes Ana no tienes limites puedes hacer lo que quieras.

Ana: gracias mi amor te amo.

Esas fueron las últimas palabras que Ana intercambio con su marido mientras estuvimos los dos en la cama, yo empecé con los preámbulos metiendo mi cabeza entre sus piernas y comenzándole a dar una comida en el coño mientras ella hacia lo imposible para tragar mi gorda polla, al principio su mamada era tosca hasta que le empezó a coger la media y al cabo de rato la comía con mucha mas maestría que al principio, no tardo en tener su primer orgasmo con la comida de coño que le estaba dando, hasta que me aparto mi cabeza de entre sus piernas yo estaba tumbado boca arriba cuando ella se cogió mi polla y le puso un condón, se subió sobre mi apunto mi polla a su coño y se lo empezó a meter dentro de su vagina que estaba bastante mojada, yo mire hacia donde estaba Juan y se estaba limpiando con un pañuelo la corrida que había tenido viendo a su mujer clavarse mi polla, pero no quitaba ojos de nosotros.

La mitad de mi polla estaba dentro de ella yo me movía muy despacio mientras ella gemía de gusto, hasta que se dejo caer y entro toda dentro, empezando a subir y bajar al principio muy despacio hasta que el movimiento se hizo frenético sus tetas saltaban al ritmo del movimiento, como tragaba polla el coño de Ana su vagina estaba muy apretada por lo que sentía cada centímetro en mi polla.

Cambiamos de posturas varias veces hasta que la puse a cuatro patas y le empecé a bombear por atrás en su coño mientras le metí un dedo en su culo, eso la hizo volver loca y estallo en un fuerte orgasmo.

Ana: para para que ya me he corrido Javier.

Yo: espera un poquito mas a que llegue yo.

Ana: uffffff no puedo mas para ohhhhhhhhh no sigue sigue que me viene otro que gustazo.

Yo: si si yo también me corro ahhhhhhhhhh

Explotamos en un soberbio orgasmo los dos a la vez, nos tumbamos en la cama Juan no decía nada su polla seguía flácida desde que se había corrido casi era diminuta.

Juan: te ha gustado cariño.

Ana: si mi amor ha sido increíble no se como te voy a agradecer esto.

Juan: ya me lo has agradecido con aceptar esto.

Estaba en silencio oyéndoles sus agradecimientos.

Juan: bueno Javier a ti también te lo agradezco y espero que esto sea el comienzo de una buena amistad.

Yo: bueno espero que ahora participes tu también Juan.

Juan: yo no bueno si te parece Javier a mi me gustaría quedarme a solas con mi esposa.

Yo: ok captado me marcho ya tienen mi teléfono si queréis nos vemos otro día.

Me vestí de ellos y me fui, iba a mi casa muy satisfecho de follar con esa mujer que me había encantado, pasaron un par de semanas cuando recibí una llamada era Ana, que me pedía que fuera a su casa a las 6 de la tarde y eso hice, al llegar ella me abrió la puerta.

Yo: hola Ana como estas

Ana: con ganas de que me des otra buena follada.

Yo: y Juan no esta.

Ana: no el no sabe nada de esto y es mas no quiere que nos veamos mas tu y yo

Muy poco más hablamos nos metimos en el dormitorio y me la estuve follando mas de una hora, me corrí dos veces y ella alguna mas que yo, intente varias veces cogerla por su culo pero ella no quiso, aunque lo intento una vez pero le dolía, por lo que desistí del intento. Al terminar de follar me dijo que me llamaría otro día pero que esta vez nos veríamos en mi casa.

A los tres días me llamo y quedamos en mi casa, le di mi dirección, tuve que salir del trabajo con el pretexto de que me encontraba mal. Al llegar ella me esperaba en el portal subimos a mi piso y pasamos directamente al dormitorio la follada fue increíble ella cada vez estaba más caliente y me pedía que la follara sin parar, hasta que llego la hora de coger su culo esta vez ella fue quien me lo pidió.

Ana: Javier quiero que me lo hagas por el culo hoy.

Yo: como quieras Ana pero te va a doler, será mejor que te pongas un poco de crema.

Le puse crema en la entrada de su culo mientras ella estaba a cuatro patas ella fue quien cogió mi polla y la puso en la entrada de su culo yo empuje y entro un poco el resto lo fue metiendo ella poco a poco hasta que mis huevos quedaron pegados a sus nalgas una vez así ella empezó a moverse y joder que culo mas rico me estaba cogiendo hasta el punto que mis embestidas fueron descomunales su culo ya era todo mío, me corrí muy a gusto y ella también lo hizo ya que se estaba frotando su coño con sus dedos, terminamos exhausto.

Ana: bueno Javier me tengo que ir dentro de una hora llega Juan espero verte pronto.

Yo: y Juan no sabe nada de esto

Ana: no ni tiene que saberlo es mas la culpa de que yo este aquí es de el, al principio me dijo que si me gustaba podríamos seguir contigo o con otros pero creo que ya ha satisfecho su curiosidad y ahora no quiere pero ya es tarde.

Yo: a mi me da igual seguir viéndonos pero no quiero problemas

Ana: no te preocupes que el no se enterara.

Nos veíamos dos o tres veces a la semana y cada encuentro era mejor que el anterior ella me pedía cosas que yo no me podía imaginar en una mujer, una vez me pidió que le metiera mis dedos en su coño hasta el punto que se los metí todos poniendo mi mano en forma de cono y cuando me di cuenta le había metido el puño, ella estaba junto a la cama con un pie sobre ella por lo que miraba como mi mano le entraba en el coño se corrió como una perra y digo corrió ya que le salió mucha cantidad de liquido de su coño, eso le empezó a pasar siempre que me la follaba de pie y le encantaba ver como le salía ese liquido de su vagina.

Varias veces me dijo que iba a dejar a su marido y que se vendría a vivir conmigo, pero yo le decía que no hiciera eso que yo solo era un capricho para ella que no había amor solo sexo, ella estaba obsesionada conmigo pero la convecina y volvía siempre a su casa.

Mi fantasía de follarla con otro hombre se fue incrementado se lo decía a ella pero ella me decía que solo follaba conmigo y su marido por que no le quedaba otro remedio. Un día puse un anuncio en internet buscando otro candidato para follarla si que ella lo supiera concerté una cita en mi casa con otro tipo, ella al llegar y ver a otro hombre se lo supuso de inmediato y accedió joder le dimos polla a diestro y siniestro cuando la penetramos los dos a la vez ella casi se desmaya de gusto el hombre no estaba tan dotado como yo pero si que aguantaba tanto como lo hacia yo, al terminar el folleteo el hombre se marcho y yo la volví a follarla.

Desde ese día cada vez que puedo busco hombres para follar con ella y ella disfruta como un zorra incluso hemos estado tres con ella y nos deja a todos con la polla seca, su marido no sabe nada de lo nuestro llevamos cuatro años viéndonos incluso lo hemos hecho con otra mujer y ha sido increíble verla como lo hacia con la chica y desde hace unos meses nos dedicamos profesionalmente a esto ahora no trabajo ya que los ingresos que obtenemos son bastante elevados y me estoy planteando que deje a su marido ya que la demanda cada vez es mayor.