Humillado delante de su suegra(II)

Continuación del relato anterior

-Es increible-exclamó mi suegra-este mierda está aquí atado, vestido de puta y tiene una erección! Menudo pervertido estás hecho imbécil.

-¿Quieres ver la pollita que tiene el señor importante?-pregunto mi mujer a mi suegra-Ya verás que es bien poca cosa, de verdad.

-No, no, noooo, por favor cariño, te lo suplico, en piedad, no me hagas esto!-lloriqueé otra vez-haré lo que quieras pero no me desnudes delante de mamá, por favor, eso es demasiado, ten piedad, nooo!.

Recordé todas las discusiones que tuve con mi suegra, subidas de tono, en las que yo me acabé imponiendo y ahora me imaginaba expuesto a su ira y su venganza. Por eso no me importó degradarme y suplicarle a mi mujer su perdón. Algo empezo a ablandarse porqué le preguntó a su madre:

-¿Que te parece mama, crees que ya ha tenido su merecido?

-Ni hablar hija mia, lo que vamos a hacer va a ser divertirnos de lo lindo con este mierda y convertirlo en la mujer de la limpieza. Vas a ver tu, mariconazo.

Y sin añadir nada más, mi suegra me bajo las bragas bruscamente, hasta medio muslo, dejando mi polla al aire bamboleando ridiculamente. Antes de que pudiera ni siquiera quejarme, una durísima bofetada en mi pene me dejo sin aliento, bofetada a la que siguiero varias más. Mi polla iba de un lado a otro mientra mi suegra se regodeaba en cada palmada

-Toma por maricón, toma por nenaza, esta por pervertido, esta por mierda-

A lo que yo respondia suplicando patéticamente y pidiendo perdon.

-Perdóneme, me duele, no me peque más por favooor...

Como tenia los pies libres, intenté escabullirme del severo castigo pero mi mujer me lo impidió. Agarrandome los cojones, me obligo a arrodillarme y con otra brida que tenia preparada, me ató los tobillos. Ahora no solo estaba con la polla a la vista y las manos a atadas a la espalda sinó que me encontraba de rodillas, con los tobillos atados, a merced de esas dos mujeres que empezaban a vislumbrar un futuro muy divertido a mi costa.

-Mamá, toma el móbil i sacale unas cuantas fotos. Lo quiero tener bien agarrado por los cojones.

-Encantada hija-respondió ella-Mírame bien imbécil!

Bajé la cabeza para evitar la foto pero mi suegra me propinó una patada en los cojones que me hizo aullar de dolor, momento que aprovecho para sacarme unas cuantas fotos de los más comprometedoras

-Mira imbéci-dijo al tiempo que me enseñava una de las fotos.

Se me veia perfectamente, las medias, las bragas a medio muslo, las manos atadas. Dios mio-pensé-esto no tiene arreglo.

-Atiende mierda-dijo mi mujer-te voy a explicar lo que vendrá a continuación.

-Vas a ser azotado con el cinturon hasta que digas en voz alta y clara que eres un maricón y que darias lo que fuera por chupar una polla de verdad y que te follen como a una puta. Mamá se encargará de grabarlo en video, para la posteridad, ¿entiendes?

No respondí, no  podia. Baje la cabeza dispuesto a no darles esta satisfacción. Solo faltaria un video como este para arruinar mi vida.

-Voy a por un arnés, mama.

-¿un que?-preguntó mi suegra

-Ya veras, ya. Mientras guardo las fotos, te lo dejo todo para ti.

-Con mucho gusto, niña.

Mi suegra se me quedó mirando en silenció durante un buen rato. Yo era consciente de mi desnudez y de mi ridículo prostrado de rodillas a sus pies. No me atrevi a levantar la cabeza.

-Mirame maricon- ordenó con voz autoritaria.

Levanté la cabeza, atemorizado y me cruzó la cara de una bofetada.

-Me encanta humillarte putilla, me encanta verte aquí en el suelo y darte de hóstias hasta que se me caiga la mano, te voy a dejar la cara como un tomate y me voy a poner muy cachonda. ¿Te has enterado mierda?

-zaaaas-que si te has enterado pedazo de mierda-exclamó mi suegra

-si, si, si, perdóneme, lo siento, no lo volveré a hacer, se lo ruego, pero no me pegue

-jajajajaja, así me gusta, que supliques. ¿Te acuerdas de la discusión del verano pasado?. Pues toma!

-zaaas, toma puta, zaas, toma pichacorta, zaaas

-Eso, llora mariquita, humillate más si eso es posible, zaaas, otra más.

Lloré como un bebé, y supliqué como el patetico ser en que me estaba convirtiendo a marchas forzadas

-Jajajajaja-mi mujer entro en el comedor con el arnés colocado-veo que te estas desahogando mama.

-Pués si, ya le tenia ganas yo a este pedazo de mierda. No me digas que te lo follas con eso-pregunto mi suegra al ver el arnés.

-Si, hace ya tiempo que no es bueno ni para follarme, solo me pide que lo folle yo y luego me chupa el coño. La verdad es que ya empiezo a tener ganas de follar como dios manda.

-No me extraña hija, viendo lo que hay.

-Bueno-dijo mi mujer-vamos a preparar la confesión del reo, jajajajajaja

Me puso unas pinzas en los pezones, sabe que no puedo soportar mucho rato este tormento.

-Charlemos un rato, vamos a dejar que el dolor le pueda antes de darle al cinturon. Quiero que el video se vea y se oiga clarísimamente.

Me dejaron allí, ignorándome, mientras ellas se enfrascaban en sus planes de futuro

-Mañana por la mañana me lo envias a casa, a primera hora-dijo mi suegra.

-Vale. Bueno, creo que el mierda ya está a punto-respondió mi mujer. La verdad es que hacia rato que me retorcia y gemia intentando llamar su atención. Los pezones me dolian muchísimo.

-Atiende puta y recuerda: te voy a azotar haste que digas en voz alta y clara que eres un maricón y que darias lo que fuera por chupar una polla de verdad y que te follen como a una puta. Mamá, prepara el móbil.

Empezó mi castigo, mi mujer me azoto con dureza en el culo, la espalda, los muslos. Intenté resistir pero no pude y mirando al móbil que tenia mi suegra grité:

-Siii, soy una puta marica, lo reconozco, siii, necesito polla, soy una chupapollas.

Y así seguí, arrodillado, viendo la sonrisa de mi suegra mientras grababa mi confesión...

Mi mujer detuvo el castigo, cortó la brida que me ataba los tobillos y me obligó a recostarme sobre la mesa, encima de los platos llenos de comida. Sin lubricarme, me penetró duramente y me folló con violencia.

Mi suegra me agarró el cabello y me giró la cara para verme bien y la aplastó sobre la mesa.

-Mira el señor importante como es follado por mi hija como una puta de carretera, jajajajajaja. Toma imbécil. Com me gusta humillart, jajajajaja

Me escupíó en la cara y me abofeteó un par de veces. Finalmente, mi mujer se cansó de follarme, me desató las manos y me las volvió a atar, esta vez, delante.

-Ahora, como señal de sometimiento a tus dueñas, te vas a pajear ahí, de rodillas y mirando a mamá, ya que tanto te gusta, mamón.Vas a ser castigado hasta que te corras, así que mas vale que te des prisa, que no tenemos todo el dia.

Y dicho estó, mi mujer recuperó el cinturón y reinció el castigo en el culo y la espalda, mientras mi suegra me abofeteaba una y otra vez. Me costó horrores correrme, en parte por la verguenza y en parte por el castigo al que me veia sometido. Finalmente me corrí a los pies de mi suegra. No podia imaginarme nada más humillante para mí, aunque ahora sé cuan iluso fuí de pensar que eso era lo peor que podia pasarme.

Mi mujer aplastó mi cara sobre mi semen y le dijo a su madre que reposará los pies sobre mi cabeza.

Así quedé un buen rato, de nuevo ignorado por ellas, hasta que mi mujer me desató y me ordenó que retirara la mesa y lavara los platos.

-Cariño, ¿puedo taparme?-pregunté avergonzado

-Ni lo sueñes, iras con la pollita al aire y las bragas a medio muslo. Pobre de ti que se te caigan mis bragas. ¿entendido?.

-Si cariño.

-I no me llamés cariño nunca más, imbécil. Me llamarás señora, ¿estamos?

-Si señora-contesté cabizbajo

(continuará)