Hotel todo incluido

Un fin de semana en un hotel incluido se convirtió en un trio improvisado.

Mi nombre es Jose y aprovechando que tenía varios días de vacaciones invité a mi mujer a un hotel todo incluido durante 3 días. Mi mujer se llama Laura, es morena de piel y pelo moreno también por debajo de los hombros. Sus ojos son marrones y tiene una sonrisa muy bonita. Ella es rellenita pero sin estar gorda, con unos pechos redonditos (talla 95) y unos pezones duritos y marrones. Tiene las caderas anchas y un culito respingón que es lo que más me gusta de ella. Tiene la piel muy lisa y le gusta vestir sexy. Yo soy delgado pero fibrado por el deporte, un poco más alto que ella.

Un día antes de ir habíamos fantaseado con la posibilidad de grabarnos un vídeo porno en la habitación del hotel mientras hacíamos el amor para luego vernos, una experiancia que nunca habíamos realizado. La primera noche nos pusimos manos a la obra y nos dió mucho morbo hacerlo mientras nos sentíamos observados por la cámarar que habíamos colocado enfrente de la cama en un mueble. Cuando terminamos de hacerlo y nos duchamos nos pusimos a ver el vídeo y nos gustó, pero se veía algo lejano y a veces el cuerpo de alguno de nosotros tapaba la acción. Yo le comenté a mi mujer que hubiera sido mejor si alguien nos hubiera grabado mas cerca y moviendo la cámara segun la postura que adoptaramos. Mi mujer me dijo que estaba de acuerdo pero que eso le daría mucha verguenza, que en ese caso debía ser alguien desconocido. Yo le propuse que en los proximos días en el hotel si encontraba a alguien que le generara confianza para hacer eso me lo comentara, que yo estaría dispuesto.

Al día siguiente bajamos a la piscina a disfrutar el día de calor que hacía. Nos pusimos en una hamacas cerca de la piscina y mi mujer se quitó el vestido, quedandose con un bikini que la parte de abajo le cubría la mitad de sus nalgas y la parte de arriba apenas le tapaba los pezones, dejando al descubierto casi la totalidad de sus pechos que dibujaban un canalillo muy sugerente. Cuando estabamos descansando en las hamacas mi mujer se dió cuenta de que habían muchas mujeres tomando el sol con los pechos al aire, por lo que me preguntó si no me importaba que se quitara la parte de arriba. Yo le dije que me parecía buena idea e incluso le ayude dejando sus redondos pechos al aire. Algunos hombres que habían al lado se quedaron mirando fijamente cuando vieron los pechos de mi mujer dando pequeños botes al liberarse de la parte superior del bikini.

A los 10 minutos nos estabamos quedando dormidos en la hamaca cuando se escucho la voz de un hombre gritando: "partido de waterpolo, quien se anima?". Era uno de los animadores del hotel, no muy alto, moreno con ojos claros y muy musculado. Mi mujer y yo lo miramos y como mi mujer no es muy amante de los deportes le fuí a decir al chico que nosotros no jugábamos, pero de repente mi mujer gritó: "nosotros jugamos". Me quedé algo extrañado que quisiera jugar, pero más extrañado me quedé cuando me cogió por la mano y empezamos a caminar detrás del chico sin haberse puesto mi mujer la parte de arriba del bikini. Nos juntamos unas 9 personas para jugar el partido y el animador se animó a jugar para poder ser 5 contra 5.

Cuando empezó el partido mi mujer y yo estábamos en el mismo equipo y el animador en el otro equipo. Yo intentaba pasarle siempre la pelota a mi mujer para que no dijera que no se la paso pero ella tardaba mucho en pasarla y siempre alguien terminaba quitándole la pelota. En el otro equipo había una chica también sin la parte de arriba, con unos pechos mas pequeños que los de mi mujer pero muy apetecibles. Cada vez que yo intentaba quitarle la pelota aprovechaba y le tocaba un poco sus nalgas bajo el agua. La verdad es que estaba mas pendiente de esa chica que de mi mujer porque cada vez que mi mujer recibía la pelota enseguida el animador la rodeaba y conseguía quitarle la pelota. Según iva pasando el partido me comencé a dar cuenta que cuando el animador la rodeaba para quitarle la pelota cada vez tardaba más en arrebatársele, por lo que estaban varios segundos pegados. En el forcejeo veía como él apretaba su cuerpo por detrás contra las nalgas de ella, y sus pechos daban varios botes. Esos pechos muchas veces eran objeto de caricias por parte del monitor en su intento por quitarle la pelota.

Cuando terminó el partido nos dirigimos a las hamacas y nos secamos para ir al amuerzo. Una vez en el comedor le pregunté a mi mujer si le había gustado el partido y ella me dijo que le gusto mucho, incluso repetiría según ella. Incluso me comentó que cuando el animador la rodeaba notaba como su miembro se clavaba entre sus nalgas y cada vez se iva poniendo mas grande y duro, además de aprovechar y tocarle muchas veces sus pechos. Me dijo que eso le había puesto muy cachonda y que incluso llegó a tener un amago de orgasmo de lo morboso de la situación. Yo me quedé asombrado y le comenté que a mi también me había puesto un poco cachondo la otra chicha que tenía los pechos al descubierto. Nos reímos los 2 y no le dimos más importancia.

Cuando terminamos de almorzar, volvimos otra vez a la piscina. Le pregunté a mi mujer si quería una copa y cuando fui al bar-piscina a pedirlas el animador ahora estaba trabajando de camarero. Fue muy amable conmigo y cuando le dije a mi mujer que ahora el chico estaba de camarero me dijo si podía ir ella a pedir la siguiente ronda. Cuando nos bebimos la siguiente ronda Laura se puso el pareo sin ponerse la parte de arriba, por lo que se le transparentaban sus pezones ya que el pareo era casi transparente y por debajo solo le tapaba la mitad de su culo. Cuando llegó a la barra veo que empieza a hablar con el animador. Estuvo hablando con él unos 10 minutos hasta que volvió con las bebidas. Laura me dijo que había hablado varias cosas con él y que aprovechando que terminaba de trabajar a las 6 de la tarde, le invitó a darse un baño en la piscina con nosotros. Yo le dije que me parecía perfecto.

Cuando dieron las 6 el chico que se llamaba Jorge llegó a donde nosotros estábamos y estuvimos un rato hablando. Jorge nos comentó que iva un segundo al baño y laura aprovechó y me dijo: ¿te acuerdad que digimos que sería que alguien nos grabara mientras lo hacemos? Pues quiero que sea Jorge". En un primer momento me quedé sin saber que hacer, pero luego pensé que sería buena idea ya que no nos conoce y parecía buen chico. Cuando Jorge volvió le invitamos a subir al apartamento y una vez allí le comentamos la idea. Al principio dijo que le daba verguenza y que no sabía si sacaría bien el video. Pero finalmente accedió. Jorge estaba solamente con su bañador slip y se senytó con la cámara delante de nuestra cama en un sillón. Laura y yo comenzamos a bersarnos y ella me tumbó boca arriba en la cama. Me empezo a besar desde la boca bajando hasta el bañador que me lo bajo en un segundo. Agarró mi pene y empezó a mamarmelo. Ella estaba a 4 patas de espaldas a Jorge que grababa todo su precioso culo desde atrás. Yo subí un poco la cabeza y me di cuenta que estaba tocándose por encima del bañador. Le ponía cachondo la escena de Laura a 4 patas y sus pechos colgado sobre mi barriga. De repente laura se subió sobre mi polla y empezó a cabalgar con mucha fuerza. Le dije a Jorge que no se estuviera quieto, sino que se acercará y buscara otros ángulos parra que el vídeo saliera mejor. Jorge se acercó y se puso de pefil a nosotros, de pie al lado de la cama. estaba muy cerca de Laura, y ella no dejaba de mirar su paquete que cada vez crecía más debajo de su bañador. Ese paque estaba apenas a 6 cm de la cara de mi mujer. De repente cierro los ojos y cuando los abro veo que ella le ha bajado el bañador y esta mastubando la polla de Jorge mientras me sigue cabalgando. Laura me mira y con una cara muy cachonda me pregunta: ¿puedo? yo estoy muy excitado y le contesto que sí. Ella empieza a mamar esa polla mientras pasa sus manos por las abdominales trabajadas de Jorge, quien graba toda la escena desde arriba. En ese momento mi mujer se levanta de mi cuerpo y tumba a jorge sobre la cama, poniéndose a 4 patas y dejando todo su culo delante mía. Yo no espero que me diga nada y empieza a follarla muy fuerte mientras ella chupa la gran verga de Jorge que sigue grabando todo. A los minutos me corro de una manera bestial y Laura grita de placer. Cuando saco mi verga de su interior ella se sube de cuclillas encima de Jorge, quien me pasa la cámara. Cuesta un poco que le entre toda porque era un poco más grande que la mía, pero en apenas unos segundos ya está ella dando saltos encima de él. Así están un rato hasta que Jorge la tumba boca arriba quedando su vagina al borde de la cama. Abre sus piernas y comienza a darle una comida de coño espectacular. laura no tarda en llegar otra vez a otro orgasmo, tras lo cual el le levanta y le junta las piernas y comienza a follarla sin piedad. Los gritos de placer de Laura retumban en la habitación y cuando Jorge está a punto de correrse le saca su pene y lo pone entre sus tetas, corriéndose de manera espectacular entre los pechos de ella. Paramos la cinta y le pregunto a Laura si le ha gustado. Ella me dice que ha sido fabuloso pero que no puede caminar hasta el baño para ducharse. Al oir esto le digo a jorge que me ayude y entre los dos la llevamos en brazos hasta la bañera. Allí la tumbamos y empezamos a ducharla entre los dos, enjabonándola por todo su cuerpo, deteniéndonos bien en sus pechos, nalgas y coño. Ella al darse cuenta que nuestras pollas comienzan a ponerse duras otra vez empieza a chuparnóslas mientras le terminamos de enjabonar y la bañamos. Cuando terminamos de bañarla la llevamos otra vez a la cama con nuestras pollas muy tiesas debido a sus mamadas y empezamos a follarla otra vez, pero esta vez los dos al mismo tiempo, corriéndonos esta vez los dos al mismo tiempo sobre sus nalgas.

La experiencia le gustó tanto a mi mujer que el último día antes de irnos repetimos la experiencia con nuestro animador Jorge.