Hotel

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Todo pasó en un fin de semana cualquiera en el cual se suponía que solo íbamos a ir unos días fuera de la ciudad. Mi mamá (una mujer en sus cuarentas, caderona, bustona, de cabello castaño y piel morena clara) y yo (adolescente en plena etapa hormonal) teníamos que alcanzar a mi papá en un hotel en la playa donde tenia un congreso por parte del trabajo.  El es empresario por lo cual viaja mucho y nos deja largos periodos de tiempo solos a mi madre y a mi, por esta razón ella a veces se sentía que el la estaba descuidando.

Salimos el viernes por la mañana al aeropuerto, mi mamá estaba emocionada por ver a mi papá, a mi realmente me daba igual, nunca fui muy cercano a el. Al subir al avión comencé a sentirme un poco mal, no estoy muy acostumbrado a las alturas y detestaba la idea de tener que subirme a un avión. Mi madre al percatarse de mi nerviosismo me observo por unos  momentos y dijo

-Te sientes bien te vez algo pálido

*Ahora que lo mencionas estoy un poco asustado

-Tranquilo amor, recuerda que es mas fácil morir en un carro que en un avión

*Oh gracias, eso me consuela mucho -dije con sarcasmo

-Cierto, no fue un buen consuelo, mejor acuéstate sobre mi a ver si te tranquilizas con eso

Me tomó de la cabeza y me bajó hacia sus piernas acostándome sobre sus muslos y para mi suerte ella traía puesto un vestido azul muy entallado y corto que los dejaba al descubierto. Eran grandes y cálidos, y su piel tan suave, no puede evitar fantasear un poco con ellos antes de caer dormido, también pensé en lo tonto que era mi papá al desperdiciar el pedazo de mujer que tenía como esposa por estar en el trabajo.

Dos horas después de que me dormí me despertó una pequeña turbulencia que me alteró completamente, yo ya pensaba que en cualquier momento se iba a caer el avión. De nueva cuenta mi mamá me volteó a ver y al verme asustado me abrazó colocando mi cabeza a la altura de sus pechos. En ese momento ya no sabia que me hacía temblar más, la turbulencia o darme cuenta que mi mamá era una mujer realmente excitante. Metí aun más mi cabeza entre sus grandes pechos, según para demostrarle mi miedo pero realmente lo que quería era estar frente a ellos y frotarlos con mi rostro pero justo cuando estaba en mi deleite sonó en las bocinas la voz del capitán diciendo que a la costa a donde nos dirigíamos estaba apunto de ser azotada por un huracán que al parecer desvió su trayectoria original y que por esta razón el avión no podía tocar tierra ahí. A mi mamá no le gusto para nada la idea, tenia meses que no veía a mi papá y ahora por este contratiempo iba a retrasar más su encuentro.

Nos desviaron a una ciudad dos horas al sur de donde se encontraba mi padre, mi madre intento buscar otra aerolínea que siguiera sacando vuelos a aquella ciudad pero todo fue en vano, todas le dijeron que los vuelos se reanudarían en 3 días, tendríamos que quedarnos en en esta ciudad hasta que pasara el huracán.

Salimos del aeropuerto y le hablamos a mi padre pero su numero de celular como el del hotel se encontraban fuera de servicio, seguramente el huracán estaba causan la fallas en la transmisión.

Era inevitable tendríamos que buscar un hotel para hospedarnos hasta que los vuelos se reanudaran.

*Hay que buscar un hotel mamá

-Si, no vamos a tener otra opción, el problema es que no traigo demasiado dinero

*Por qué?

-Yo no esperaba que tuviéramos que hacer una escala antes de llegar con tu padre, si hubiera teléfonos en donde esta tu papá le hablaríamos para que me depositara dinero

*Entonces que vamos a hacer? -pregunte con desesperación

-Tranquilo, si traigo el suficiente dinero para hospedarnos en un hotel de baja calidad y comer estos días

Tomamos un taxi que nos llevo a un hotel a 10 minutos del aeropuerto, el lugar estaba lleno de prostitutas lo cual incomodaba a mi mamá. El hotel era un edificio de cuatro pisos muy viejo, bastante descuidado con un letrero en luces de neon que decía "La Joya", por dentro me hizo reír el nombre, como era posible que se llamara así ese lugar siendo tan horrible. Por un momento mi mamá dudo en entrar pero no podíamos pasar toda la noche buscando hoteles, se nos iría el poco dinero en pagar taxis.

Entramos a la pequeña recepción y nos atendió un anciano que se encontraba en las mismas condiciones que el edificio, seguramente era el dueño. Mi madre le pregunto si tenia habitaciones disponibles a lo que el anciano asintió con la cabeza.

*Cuanto tiempo la necesitaran -dijo el anciano- una o dos horas.

-Le pagare dos días

*Dos días -después me volteo a ver el anciano y continuo- lo comprendo joven, con una mujer tan rica como esta yo también aprovecharía la mayor cantidad de tiempo posible

-Qué rayos esta diciendo, el es mi hijo

*Lo siento mucho señora, no pensé que usted fuera su madre, entienda que aquí normalmente vienen usted sabe... nada mas acompañantes

Mi madre estaba tan furiosa que se quería ir a otra parte, pero le recordé que no teníamos dinero para andar rondando la ciudad en busca de otro hotel. La logre convencer, pago el hospedaje por dos días (por si terminaba antes la tormenta) y subimos a nuestra habitación con las maletas. Nos había tocado la habitación 3 en el segundo piso, cada piso tenia dos habitaciones, era un hotel bastante pequeño.

Al abrir la puerta nos encontramos con una habitación muy pequeña, las paredes estaban forradas por un papel tapiz blanco bastante sucio y con un poco de humedad, había una pequeña televisión y un tocador con un espejo que estaba estrellado de una esquina, al fondo estaba una puerta la cual era del baño. Pero lo peor era que solo había una cama  y era individual.

-No es posible esto, esto parece un set de película de terror y para colmo solo tiene una cama.

*Relájate mamá

-Como quieres que lo haga, ya viste en que lugar vamos a dormir, bajare a la recepción a pedir otro cuarto

Bajo y luego de dos minutos regreso a la habitación, ahora se veía más molesta.

*Que pasó?

-El maldito anciano me dijo que no tiene más habitaciones, que en todas tiene huéspedes, de seguro que son puras putas

*Tranquila mamá no resolverás nada así mejor ya hay que acomodarnos aquí

-Pues si, me iré a tomar una ducha a ver si así me puedo relajar un poco

Ok**

Cuando ella entro al baño yo comencé a sacar algunas cosas de las maletas para acomodarlas en el tocador. Al terminar me recosté en la cama y prendí la televisión que estaba justo enfrente,  cambiaba los canales en busca de algo interesante que ver y cuando estaba a punto de apagarla al no encontrar nada que fuese de mi agrado me tope con un canal porno. Quien iba a pensar que en un hotel de tan baja calidad tuviera contratado un canal porno, supongo que eso nunca puede faltar en los hoteles de paso.

Mientras lo veía me acordé de lo que pasó en el avión cuando mi madre me colocó sobre sus piernas y después me colocó contra sus pechos. Me imaginé que ella era aquella mujer de la película, casi podía ver su cara de placer mientras la penetraban y oír su voz pidiendo más. Me comencé a frotar mi pene pensando en todo ello cuando de repente se dejo de escuchar  el agua de la regadera, mi mamá estaba a punto de salir del baño, cambié el canal y traté de controlar mi respiración que ya estaba algo agitada.

Salió de baño envuelta en una pequeña toalla que apenas si tapaba su pubis y que apretaba bastante su cuerpo

-Hace mucho calor no bebé

*Si, algo

-Y vamos a tener que dormir juntos y con el tamaño de la cama estaremos muy pegados, lo mejor será que me ponga algo ligero

Me dio la espalda y después se desamarro su toalla dejando en libertad sus enormes pechos, yo me sorprendí al ver esto y por un momento pensé que estaba totalmente desnuda pero me equivoque ya que traía puesta unas braguitas negras que se le metían en la raya de su culo. Aun así la escena era sorprendente, observar su torso y sus piernas totalmente desnudas por donde se deslizaban aun algunas gotas de agua y por un momento pude ver uno de sus senos con su obscuro pezón. Me empezaron a pasar mil cosas por la cabeza, quería tocarla, apretar sus pechos, abrir ese enorme culo para introducirle toda mi verga, pero no lo podía hacer, ella era mi madre y eso no era normal. Se coloco su bra y después un camisón negro semi transparente con el que prácticamente parecía estar desnuda, me volteo a ver justo al terminar de vestirse y me dijo

-Perdón por cambiarme enfrente de ti pero ya no quería regresar al baño, no es muy lindo que digamos, espero no haberte incomodado bebé

*No hay ningún problema mamá -dije tartamudeando-

-Seguro, porque te noto algo raro

*Si, seguro -para estos momentos mi pene estaba ya como una roca-

-Ok pues ya hay que dormir

Se metió a la cama y yo tratando de que no se diera cuenta de mi erección le di la espalda y trate de ya no pensar en ella para poder relajarme y dormir. Pero eso solo funciono en ese momento porque a mitad de la noche me desperté sintiendo una presión en mi verga, abrí los ojos para ver porque motivo sentía esto y me encontré con la espalda de mi mamá. Mierda me debí de haber volteado dormido y ahora tenia mi verga encajada en su culo y por el calor yo solo traía un bóxer puesto. No quería ni moverme para no empeorar más la situación, aguarde así algunos minutos pensando en la manera de sacar mi verga sin que sintiera algún movimiento brusco hasta que se comenzaron a escuchar sonidos extraños atravez de la pared. Eran gritos de mujer junto con gemidos diciendo "Ahhhh si papito métemela más a fondo" "Sigue por favor no te detengas", trate de seguir quieto pero empece a sentir algo raro en mi pene, POR DIOS, MI MADRE ESTABA FROTANDO SU CULO CONTRA MI VERGA , su respiración comenzó a agitarse a tal punto que estaba apunto de jadear. Ella continuo aumentando la intensidad del movimiento hasta que paso lo peor (o lo mejor), mi verga salio disparada del bóxer, yo ya no podía más, no entendía porque mi madre estaba haciendo esto, nunca la vi actuar como una puta. Mi cuerpo se empapo de sudor frió, mi pene para ese momento ya estaba sobre su coño, sus braguitas se encontraban  completamente mojadas por los jugos de su sexo al punto de que ya hasta mi verga estaba húmeda.

En aquel momento perdí la cabeza entre los gritos de la otra habitación y el contoneo del culo de mi madre, ya no me importó que fuera mi madre, solo quería follarla y oírla gritar. Rodee la cintura de mi madre con mi brazo y metí la mano en su braga para frotar un poco su clítoris. Ella reacciono con un pequeño grito pero no opuso resistencia, continué masajean

do su

hinchado

clítoris mientras trataba de encajarle más mi verga en su coño, sentía como su braga se mojaba aun más.

Era obvio MI MADRE QUERÍA SER FOLLADA ESA NOCHE POR MI y se lo iba a cumplir. Sin avisar saque mi mano de su braga, quite las cobijas que cubrían nuestros cuerpos y me coloque enésima de ella. Mi madre no emitió ningún sonido solo me observaba mientras abría sus piernas y le quitaba su húmeda braguita dejando su peludo coño al aire. Empecé a lamer su entre pierna y a succionar toda la miel que se deslizaba por sus muslos. Mientras yo hacia eso mi madre se quito el camisón y como pudo se arranco el bra para dejar sus hermosos melones de fuera, COMENZÓ A ACARICIARLOS Y A PELLIZCAR SUS ENORMES PEZONES .

Cuando termine de lamer su coño subí a la altura de su cara y ella me dijo

-HAY QUE ENSEÑARLES LO QUE REALMENTE ES GRITAR DE PLACER

Me acostó a un lado de ella y se montó sobre mi, bajo su manos por mi pechos rasguñandome y al llegar a mi verga lo tomó firmemente y se lo llevó a la boca. La mamaba rápidamente mientras frotaba su clítoris con la otra mano.

-Te gusta bebé

*Me encanta mami

-Que bueno mi amor y aun falta lo mejor

Subió su rostro y me beso dejando caer un poco de saliva en mi boca lo que me prendió aun más, MI MADRE ERA TODA UNA GUARRA, Y AUN NO LO HABÍA VISTO TODO.

Al terminar de besarme busco en la cama sus braguitas, al encontrarla las palpó un poco y me dijo

-Que sucia está y tu hiciste que la dejara así ahora tendrás que limpiarla

*Como?

-Abre la boquita bebé

Le hice caso a mi madre y la abrí, al instante ELLA INTRODUJO SU BRAGA IMPREGNADA POR SUS JUGOS EN MI BOCA

-La quiero bien limpia, lame cada centímetro de ella bebé, ahora si le enseñare a esa puta como se debe gritar

Agarró mi verga que ya estaba hasta palpitando  y la metió en su coño, mientras lo hacia cerro los ojos y soltó un gran grito. Estaba bastante apretadita, supuse que llevaba meses o quizás años sin que nadie se la follara , porque el único que podía hacer eso era mi padre y el nunca estaba en casa.

Su cuerpo se contoneaba sobre el mio, sus pechos rebotaban de arriba a abajo con cada embestida que daba contra mi. Su coño estaba derritiéndose, era sorprendente la cantidad de jugo que estaba saliendo en ese momento, algunas gotitas bajaban por mi verga dejando mojado mi vello púbico.

-AAAAHHHHHH DIOS MIOOO!!!!

Saque las braguitas de mi boca después de saborear todo los jugos de mi mamá y le dije

*Continuamos mami

-SI POR FAVOR, SIGUE PENETRANDO A MAMI

*Mamá me corro!!

-Haz lo que tu quieres bebé

*Pero dentro de ti?

-Lléname con toda tu lechita, como yo lo hacia cuando eras bebé

Unos segundos después solté cinco grandes chorros dentro de su coño, ella soltó un grito que se debió haber escuchado en todo el hotel.

-Ahhhhhh muy bien, ahora tienes que limpiar tu desastre amor.

Me tomó por el cabello y me bajo hasta su coño del cual comenzaba escurrir toda mi lechita combinada con sus jugos

-Usa tu lengüita

*Pero -conteste con duda de hacerlo-

-Hazlo te va a gustar

Lamí lentamente todo lo que escurría de su coño y tenia razón me encantaba la sensación que me provocaba hacer algo tan morboso como tomar mi propio semen. metí mi lengua hasta lo más profundo de su coño recogiendo cada residuo. Al terminar guarde un poco en mi boca y antes de besar a mi mamá lo escupí dentro de su boca

-Eres un guarro hijo

*Al igual que tu mamá

-Para la próxima dame un poco más de tu lechita

*Claro, pero lo vamos a volver a repetir

-Por supuesto amor, después de esto siempre te voy a necesitar

*Y papá?

-Olvídalo, hay que quedarnos tu y yo solos, créeme que contigo no me importaría vivir en este hotel para siempre.

Continuara...