Hombre lobo xiii – zigor

HOMBRE LOBO XIII – ZIGOR

Todos los que estaban reunidos en la entrada del palacio fueron llevados por el rey hasta la sala del trono, ordenando no ser molestados por absolutamente nadie.

_ Por favor señoritas, siéntense – les dijo el rey cediéndoles el asiento.

_ Ulises, gracias por tu amabilidad, pero así estamos perfectamente – respondió Julissa.

Las demás hermanas asintieron el enunciado de la mayor.

_ Entonces en ese caso, me sentaré yo – dijo el rey sentándose.

Las hechiceras se ubicaron a los costados del rey, Julissa y Melissa a su mano derecha mientras que Safira y Samira a su mano izquierda; los demás se encontraron frente a ellos mirándolos con toda la atención del mundo.

_ ¿Ahora ya podemos empezar? – habló fastidiando Cirlo.

_ Cirlo no seas impaciente, espera - le regañó Roderick.

Julissa tomó la palabra.

_ Bien ha llegado la hora de hablar; algunos de ustedes el nombre de Zigor les parecerá nuevo, a otros no tanto, pero aun así no saben el origen de toda esa maldad, de la persecución a aquella raza que él tanto odia – dijo ella.

_ Ni me lo digas, al menos quisiera saber porque estuvo a punto de matarme – dijo el lobo.

_ Por favor, no interrumpas – reclamó Melissa.

Julissa volvió a tomar la palabra después de su hermana.

_ Bien, hace miles y miles de años los hombres lobo inicialmente fueron creados como bestias salvajes sin conciencia, parecía un hibrido entre una persona y un lobo, pero más agresivos y con mucha más fuerza; muchos años después, el Dios supremo de todo el universo, vio que estás criaturas podían ser útiles para proteger la tierra así que dotó a una de estas bestias con un veneno y permitió que se transmitiera a un ser humano creándose así el primer hombre lobo propiamente dicho, una persona que sería mitad hombre y mitad lobo.

_ Los hombres lobo, al ser también seres humanos, tenían conciencia para saber la diferencia entre el bien y el mal. Muchos de ellos sin saberlo cumplían con su propósito, proteger a la humanidad, se mezclaban entre los seres humanos y convivían pacíficamente con ellos.

_ Luego al querer reproducirse se dieron cuenta que las mujeres comunes y corrientes, morían en el parto de sus hijos, fue así que nosotras la Rase, desde nuestras posiciones de privilegio, fuimos enviadas a la tierra para poder alumbrar a los hijos de ellos, sin embargo, ellos no podían tener ningún tipo relación sentimental con nosotras, ni sexual fuera de los fines reproductivos, es por eso que comenzaron a tener relaciones entre ellos mismos.

_ Con el pasó de los años todo iba perfectamente bien como lo planeado por el Dios supremo, pero solo uno no estaba conforme para lo que fue creado, ese licántropo, era un pariente tuyo Roderick.

Roderick al escuchar eso se sorprendió y los demás apuntaron sus miradas hacía él.

_ ¿Pariente mio? ¿Pero cómo es posible? – preguntó él con sorpresa.

_ Basil era su nombre, él era hermano de tú bisabuelo. Basil era un hombre muy soberbio y ambicioso, no soportaba la idea de que, ellos tendrían que estar al servicio de las personas, y ocultar lo que eran, él creía que su poder era para algo más grande, llegó a tener la idea de que los hombres lobo tenían que dominar en la sociedad, trató de convencer al alfa de sus ideales, pero no le hicieron caso, después este, se iría de la manada para comenzar a llevar sus planes a cabo.

_ Quiso iniciar su propia manada, pero no era nada fácil controlar a hombres lobo adultos, es por ello que raptaba niños, pues era mucho más sencillo dominar la mente de los niños.

_ ¿Y eso que tiene que ver con Zigor? – preguntó interrumpiendo Cirlo

_ La próxima vez que interrumpas, te vas – advirtió Melissa.

_ Es aquí donde entra Zigor. Desafortunadamente Basil cometió uno de los actos que para ese tiempo ya estaban prohibidos. Rapto a una muchacha, la violó y cuando esta dio a luz, murió.

_ Esta chica resultó ser la hija de Zigor.

Todos se quedaron en completó silencio.

_ En el siglo XIII, Zigor no era como lo conocemos hoy en día, es más, su nombre era Yago, él era un amable campesino y un ferviente creyente de la fe cristiana, el creía sin dudar en Dios, y amaba también a su esposa, pero había algo que le faltaba y por lo cual su familia estaba incompleta, un hijo.

_ Yago le oraba siempre a su Dios por este hijo tan deseado, y después de unos años cuando rondaba los cincuenta, su esposa por fin logro darle una hija, pero lamentablemente, su mujer falleció en el parto, el parto fue mortal para ella pues por su edad era peligroso, de todos modos, Yago, nunca dejo de creer en Dios.

_ Bautizó a su hija con el nombre Camelia, y la crio con mucho amor, la bebé era la luz de sus ojos, y nunca más se volvió a comprometer por dedicarse completamente a su hija.

_ Pasaron los años y la nena se volvió una señorita muy guapa, de cabello castaño y atributos bastante desarrollados para sus quince años, llamando la atención de muchos jóvenes que Yago se encargaba de espantar, pero para su mala fortuna, se toparon con Basil.

_ Por ese entonces en la mente de Basil rondaba la idea de tener sus hijos propios, pero no podía ir con las Rase, la única opción eran las mujeres comunes.

_ EL hombre lobo se cruzó con ella un día que estaba en el pueblo con su padre, de inmediato puso sus ojos en la muchacha pues era muy guapa; los siguió hasta su casa en muy cerca al bosque y los observo durante algunos días.

_ Una tarde mientras Yago estaba juntando algo de leña para su fogón, se cruzó con una anciana, la mujer de la tercera edad era una vidente conocida por la zona.

_ Buenas tardes – saludó Yago atentamente.

La mujer pasó de largo y no respondió.

El hombre se dispuso a seguir su camino, pero la mujer hizo que parara cuando por fin le habló.

_ El peligro ronda en tu casa – dijo ella.

_ No entiendo señora, ¿Qué quiere decir?

_ Veo sangre y muerte en tu familia, alguien los está asechando para hacerles mucho daño.

Yago se mostraba incrédulo.

_ Y no importa si se van del pueblo, el mal los seguirá hasta que logre obtener lo que desea.

_ Disculpe, señora, no se de lo que está hablando, pero aun así fuera verdad lo que me dice, pues le digo que mi Dios me protege siempre y no dejara que nada malo suceda, así que con permiso y que pase buena tarde – dijo él muy serio.

_ Ya estas advertido – le dijo ella.

Yago caminaba hacía su casa, las palabras de la mujer resonaban, pero él se encomendaba a Dios, sin embargo, la imagen de su hija pasó por su mente, apresuró más el paso y corrió hasta llegar a la cabaña.

_ Papá que sucede – preguntó ella .

El padre al ver a su hija tranquila, se excusó.

_ No nada hija, solo que …. Olvídalo.

_ Bueno está bien – contestó Camelia.

El día transcurría con normalidad, pero no se podía quitar las palabras de aquella mujer.

Pasaron pocos días y Yago enfermó. Mientras guardaba reposo, su hija se encargaba de todo, incluso de hasta cortar la leña, claro que al no poseer la fuerza de un hombre le era más complicado.

Un día mientras Camelia cortaba leña, Basil apareció. Camelia se asustó un poco pues el hombre tenía una muy mala apariencia.

_ ¿Disculpe quién es usted? – preguntó la chica.

Basil no respondía, solo la miraba fijamente.

Camelia comenzó a retroceder lentamente, sintiendo temor.

_ Por favor váyase – pidió.

Pero Basil no hacía caso, es más, a cada paso que ella retrocedía, él avanzaba.

_ Váyase de este lugar – dijo ella amenazándolo con el hacha.

Sin embargo, él estaba decidido a llevársela. La tomó a la fuerza, la muchacha comenzó a gritar.

Yago quien estaba descansando se despertó por los gritos de su hija, y como pudo salió a ver lo que estaba sucediendo.

El licántropo ya se estaba alejando con su hija a espaldas como si de un saco se tratase.

_ Papá – gritaba desesperada ella.

Yago también se asustó mucho, tomó el hacha que estaba en el piso.

_ Suelta a mi hija mal nacido – dijo incrustándole el hacha en su brazo derecho.

Basil voltea y mirándolo con una mirada aterradora lo arroja violentamente. Este se transforma en hombre lobo ante la mirada incrédula de Yago y desaparece velozmente en el bosque ante la mirada atónita del padre y los gritos desesperados de su hija.

Yago se levantó y corrió detrás, pero nada pudo hacer, su hija se había ido.

Basil se la llevó una cueva donde la violó y luego la encadenó para que no se escapara, la pobre Camelia, no tenía la oportunidad de escapar, a los pocos días de las violaciones ella resulta embaraza, el crimen del hombre lobo se había cometido.

Yago invocaba el nombre de Dios, pero no obtenía respuesta, con el pasar de los días iba abandonando su fe.

Pasaron los nueve meses y Camelia empezaba a tener contracciones, sola y encadenada comenzó a dar a luz, pero el dolor de ese parto era inusual, distinto al de un parto normal, ya que el bebé mientras iba naciendo desgarraba las entrañas de la madre, finalmente nació en un charco enorme de sangre, pero Camelia ya había muerto, sus partes íntimas quedaron totalmente destrozadas.

Al regresar Basil encontró al bebe y el cuerpo de la chica, los separó pues aún estaba unido al cordón umbilical y se lo llevó, al rato volvería por el cadáver y de la manera más cruel lo dejó en la puerta de la casa de Yago.

Yago al sentir movimiento fuera de su casa, salió a ver, lo primero que visualizo fue a Basil sonriéndole, luego este le haría un gesto para que baje la mirada, el padre hizo caso y lo que vio lo dejo en shock.

Se sentó en el suelo, tomó a su hija en su regazo y comenzó a llorar desconsoladamente, sintiendo que Dios lo había abandonado.

Pasó toda la tarde llorándole al cadáver de Camelia hasta que se quedó sin lágrimas, se levantó y la llevó adentro de casa para vestirla y realizarle un funeral digno.

Una vez arreglándola la envolvió en una manta y cavó un hueco enorme cerca de la cabaña, la depositó con cuidado, y la cubrió de tierra, sintiendo el más fuerte de los dolores, su alma y su corazón estaban destrozados.

Desde ese momento solo esperaba la muerte, a sus 65 años, y sin su hija, ya no quería seguir viviendo, así que se dio al abandono, no comía, bebía muy poca agua y poco a poco su cuerpo desfallecería.

Su voluntad y sus ganas de vivir estaban por los suelos, hasta que cierto día algo muy tenebroso sucedió.

Como todos los días iba a visitar la tumba de su hija a llorar su dolor, quedándose profundamente dormido luego del llanto, de pronto un hombre completamente vestido de negro le dirigió la palabra.

_ He visto tu dolor, y el deseo ferviente de volver a ver lo que más amas.

Yago levantó la mirada y solo vio unos zapatos negros, levanto más la cabeza y aquel hombre no tenía rostro, así que asustado se echó para atrás.

_ ¿Quién eres? – le preguntó.

_ Primero dime ¿acaso no quieres volver a ver a tu hija?

El hombre miró la tumba y sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas.

_ Yo puedo hacer que regrese a la vida, incluso a tu esposa que murió dándola a luz.

Yago devolvió la atención al extraño.

_ Debe estar bromeando

_ Yo nunca bromeo.

_ Por favor, si puedes hacer eso ayúdame – le dijo Yago casi rogando cambiando su actitud.

_ Todo tiene su precio.

_ Te doy lo que sea.

_ ¿Hasta tu alma?

Yago estaba tan perdido, sin esperezas y desprovisto de su fe, que no dudo en aceptar.

_ Te doy todo hasta mi alma.

Aquel hombre se convirtió en una serpiente y grotescamente entró a la boca de Yago deslizándose por su garganta hasta matarlo.

En otro plano el alma de Yago caía a un vació muy oscuro y el gritaba, hasta que se detuvo como si hubiese tocado el fondo, pero en realidad se encontraba en otra dimensión.

De la nada un bestia infernal emergió de la profundidad.

_ Acabas de hacer un pacto conmigo – le dijo la bestia.

_ ¿Como?

_ Al momento de aceptar darme tu alma a cambio de la vida de tu hija y esposa.

_ Pero y el hombre de negro.

_ Él es solamente uno de mis sirvientes.

En el fondo totalmente oscura, aparecieron la hija y la esposa de Yago, sonrientes.

_ ¿Las quieres con vida otra vez? – preguntó

_ Si es lo que más deseo.

_ A cambio debes servirme fielmente y yo te las daré en recompensa, y no solo eso, sino que te dotare de todos los poderes para que destruyas a quien le hizo eso.

Yago cegado por las ganas de ver a su familia y su sed de venganza, termino por aceptar sin dudar.

_ Si acepto todo lo que sea.

Automáticamente al aceptar, Yago despertó en la tierra, y una llamarada de fuego cayó sobre él, sin quemarlo, sino que esa llama era el poder que él diablo le estaba otorgando.

_ Después de eso se cambió el nombre a Zigor, cuyo significado es castigo.

_ Luego con el tiempo se dedicó a buscar a Basil, pero nunca lo encontró, sin embargo, se ha dedicado toda su existencia a destruir a los hombres lobo.

_ Que historia tan terrible – dijo Dariel.

_ Pero no es justo, que hayamos pagado todos por ese crimen – comentó Roderick.

_ No importa eso ya, lo que importa es pensar en cómo lo detenemos – dijo el rey.

_ Detenerlo será muy difícil, sin embargo, hay una forma – soltó Julissa.

_ ¿Cuál? – interrogó Roderick .

_ Atravesando su corazón – respondió.

_ Pero como sería posible eso – preguntó Italec.

_ Eso será pan comido – exclamó Cirlo arrogantemente – ¿Tanto problema solo por eso?

_ Solo un pariente de Zigor puede hacerlo – dijo Melissa rápidamente.

_ A estas alturas, ellos ya están muertos.

_ No todos – le respondió Melissa.

_ Tú, Roderick también compartes la misma sangre que Zigor.

Nadie podía creer lo que estaban escuchando.

Julissa relató otra parte de la historia de no conocían.

_ Luego de que Basil cometió el crimen, el alfa de la manada que formaba parte tu bisabuelo, lo encontró y lo asesinó junto con el todo su clan, a excepción del hijo que había engendrado con Camelia, tuvo compasión de él y lo llevaron a la manada, posteriormente tú abuelo y él se enamoraron y nació tú padre y sus hermanos y creo que ya sabes lo que eso significa – contó Julissa.

_ Yo soy pariente de Zigor también – dijo sorprendido Roderick.

_ Entonces yo también lo soy – dijo incrédulamente Italec.

_ Así es muchachos por lo que aún tenemos una esperanza - habló Julissa.

La reina hizo su aparición en medio de la conversación.

Reina: _Exijo una explicación de todo esto.

Rey: _ Hey muchachos cúbranse.

Todos se llevaron sus manos a sus genitales, intentando cubrirse, pero Julissa, hizo que a todos les aparezcan túnicas sobre su cuerpo, dejando a la reina sorprendida.

Rey: _ Cálmate amor, luego te explicamos

Reina: _ No puedo esperar más, todo esto parece sacado de una pesadilla.

Philip: _ No mamá, todo es completamente real.

Reina: _ Pero hijo te vi besándote con ese chico, eso no puede ser real, tú te vas a casar y me vas a dar nietos y ….

El príncipe se acercó a Italec y le tomó de la mano, desencajando el rostro de la reina.

Philip: _ No mamá, eso también es real, Italec y yo tenemos una relación.

La reina no pudo contener las lágrimas.

_ ¿Por qué no lo dijiste antes? – preguntó - ¿Ulises tú lo sabias?

_ Tenía miedo y si, papá si lo sabía.

_ ¿Miedo de que?

_ Que no me aceptaran y me condenaran a la muerte.

_ Jamás hubiese hecho eso – dijo la reina acercándose.

_ ¿Eso quiere decir que no tienes ningún problema con eso?

_ Claro que no, mi niño, te esperé con ansias cuando supe que estaba embarazada ¿cómo he de querer tu muerte? – le dijo abrazándolo.

_ Mira mamá, aunque ya conoces a Italec, quiero presentártelo como mi novio.

_ Muchas gracias Italec, desde hace mucho tiempo no veía a mi hijo tan feliz y muchas gracias también por salvarme, de no ser por ti, hubiese muerto. Ambos tienen mi bendición.

Italec y el príncipe se miraron felices y se abrazaron.

_ ¿Pero tu matrimonio? ¿Lo vas a cancelar?

_ No mamá, de eso hablamos luego.

_ Está bien.

_ Bueno ahora, quiero yo agradecer a Cirlo e Italec, enserio, les agradezco infinitamente.

_ No agradezca señor, es nuestro deber – contestó Cirlo.

_ Como recompensa, Cirlo que nombro nuevamente general.

Cirlo se alegró por la noticia, pero no lo demostró.

_ Muchas gracias mi rey.

Y a ti Italec te vuelvo a dar permiso para que estés con mi hijo, y además te entregó su mano en matrimonio.

_ ¿Está hablando enserio su majestad? – preguntó Italec.

_ Estoy hablando muy enserio.

Ni bien escucho eso, Italec se arrodilló y volvió a pedir a Philip matrimonio, quien aceptó gustosamente, y se besaron, en medio de aplausos de todos.

_ Pero antes, tengo que darte el estatus para que puedas casarte con mi hijo, así que mañana mismo te nombrare caballero, y no te vas a poder negar.

_ Para mi sería todo un honor.

A la mañana siguiente a primera hora todos estaban listo para escuchar el nombramiento, toda la corte del rey se había congregado para presenciar el evento.

Desde su trono de pie invito primero a Roderick, Dariel, Italec y a Cirlo, para sorpresa de todos pues inicialmente solo era Italec.

El alfa se arrodilló en delante del rey, y este habló.

_ Estamos aquí reunidos para honrar a estos hombres, pues sus acciones y servicios para con el reino así lo ameritan.

El rey tomo un cetro.

_ Jura Roderick jura defender los preceptos del reino, jura dar la vida al servicio de nuestra causa.

_ Lo juro con toda mi alma - respondió Roderick.

_ Ahora es primer miembro de la recién instaurada Orden Secreta de la Luna y solo su sangre sellara este pacto – dijo poniendo una espada en horizontal.

Roderick cerró su mano en la espada y corrió su mano creándose un corte y así tocó el cetro de su majestad.

_ Yo le nombro Sir Roderick Di Wolf, servidor del gran Rey – dijo ubicando la espada en el hombro derecho.

_ Y caballero líder de la Orden Secreta de la Luna – termino diciendo con la espada en el hombro izquierdo.

Luego siguió Italec, Dariel y por último Cirlo, colocándoles a todos el titulo Di Wolf.

_ Este es el único título que podrás tener porque aun así te cases con el príncipe, la reina será otra – dijo Cirlo molestando a Italec.

_ No empieces hijo de puta – contestó Italec.

_Papá, felicidades – dijo acercándose Tomy.

_ Felicidades, Italec.

_ Gracias, Tomy, eres un chico muy lindo y amable – le contestó Italec mirando a Cirlo.

Cirlo vio algo en la mirada de Italec que no le gustó.

_ Ni lo pienses maldito, con mi hijo no te metas – le advirtió.

Italec no le hizo casó y se fue.

Finalizada la ceremonia llegó el momento de un pequeño festín todos disfrutaban del momento.

Italec aprovechó un descuido de todos y se acercó al pequeño Tomy.

_ Hola Tomy.

Tomy se puso nervioso.

_ Hola – respondió tímidamente.

_ Me preguntaba si no quisieras dar una vuelta.

_ Pero estamos en la celebración.

_ A mí me parece aburrida.

_ Bueno, sí, es lo mismo de siempre.

_ Ya ves, entonces ¿vamos.?

_ ¿No se molestará el príncipe?

_ No para nada, no tienes por qué molestarse.

Tomy dudó un poco, pero a las finales aceptó.

Salieron del castillo y caminaron, el chico iba muy tímido, al contrario de Italec quien iba muy sonriente.

_ Me pareces un poco más grande.

_ ¿Enserió Tomy?

_ Si pareces de un poco más.

_ mmm bueno y tú a mí me pareces un chico muy atractivo.

Tomy se ruborizo mucho y se puso muy nervioso.

_ ¿De verdad? – preguntó el chico apenado.

_ Claro, y te lo voy a demostrar.

Italec llevó al muchacho al jardín del reino y se escondieron entre unos arbustos muy grandes y ahí lo besó muy apasionadamente.

_ Ves y a mi pene también le gustas – dijo llevando la mano del chico a su miembro.

Italec tenía todo el control de la situación así que saco su pene para enseñárselo a Tomy.

_ Mira te das cuenta, ¿No te parece bonita?

_ Si, esta bonita.

_ ¿No la quieres probar?

Tomy no respondía.

_ Si quieres no respondas, solo hazlo – le dijo haciendo que se arrodille en el pasto.

Tomy quien ya era experto mamando la verga de su padre, aplicó ese conocimiento para chupar la de Italec.

Primero saboreó y jugó con el glande, para luego metérselo entero hasta el fondo, y así estuvo por un largo rato hasta que se cansó.

_ Ya ves como si te gusta – dijo subiéndose el pantalón.

EL hombre lobo no se quiso quedar así, es por ello que convenció a Tomy de llevarlo a su casa, y en la misma cama que dormía con su papá se acostaron para tener sexo.

Italec penetraba por detrás a Tomy quien gritaba como una perrita en celo.

Mientras tanto en palacio Cirlo se daba cuenta de la ausencia de su hijo y de Italec, y automáticamente se le vino la sonrisa lujuriosa que Italec le había dado, decidió buscarlo, pero no lo encontró.

Comenzó a captar su olor que lo llevó afuera del palacio y posteriormente lo dirigió hasta su casa, en ese momento imaginaba lo peor.

Italec ya por correrse saco la verga del culo de Tomy y se la puso a la altura de la cara arrojándole todo el semen, el chico por su lado se masturbaba acostado.

En ese preciso momento entra Cirlo tumbándose la puerta y los encuentra infraganti, Tomy le limpiaba los restos de semen con la boca.

_ Te voy a matar malnacido.

Italec sonreía victorioso.

_ No quisieras iniciar una pelea en delante de tu hijo.

Cirlo se calmó un poco.

Italec salió de la cama y pasando muy cerca de Cirlo, le dijo:

_ “Ojo por ojo”

Italec sintiéndose como un campeón salió de la habitación.

MUCHAS GRACIAS POR SU PACIENCIA, ACERCANDOSE AL FINAL DE TEMPORADA.

sexualesr@gmail.com