Hombre lobo x - la humanidad de Cirlo

Historia gay de ciencia ficción con criaturas y bestias de leyenda. Contenido explícito de sexo, acción, incesto, aventura y más

HOMBRE LOBO X - LA HUMANIDAD DE CIRLO


¿No te pudiste controlar? – regañaba Roderick a su sobrino.

Por favor tío no empieces – respondió Italec.

Joder Italec le faltaste el respeto al rey con ese comportamiento siguió diciendo Roderick .

Ya tío, sé que no debí

Lo bueno que el rey no se molestó, creo que le gustó ver las transformaciones – agregó Dariel calmando los ánimos.

Igual, prácticamente pasó por encima del rey.

Cirlo quien caminaba a unos metros de ellos se metió en la conversación.

Déjalo en paz Roderick, los niños son así de impulsivos, ya aprenderá con un buen par de golpes – dijo Cirlo con la intensión de molestar a Italec.

Italec otra vez quiso lanzarse contra el general, pero le príncipe lo detuvo.

Italec por favor ya basta contrólate – le sugirió en forma de reclamo.

Juro que algún día te voy a matar, y lo disfrutare como no tienes idea – amenazó Italec acercándose y mirando directamente a Cirlo.

Cuando llegue ese día espero que seas certero porque si fallas, el que va a disfrutar matarte seré yo – le contestó Cirlo plantándole cara.

Hey, ya basta, mejor sigamos que alguien puede venir y vernos – dijo Roderick

Siguieron su camino, pero llegaron a un punto donde se detuvieron y el príncipe les hizo esperar para traerles algo con que cubrirse.

Mientras esperaban, el ambiente se tensaba, Italec y Cirlo se odiaban a muerte, era muy evidente.

El príncipe llegó con unos trajes de soldado que le había alcanzado una criada, se los pusieron y cada uno comenzó a irse por su lado, pero el príncipe detuvo a Italec.

_ Tíos vayan yendo que ya los alcanzo luego – les aviso Italec.

Los tíos de Italec se sonrieron.

_ Que pase buen día príncipe – dijeron despidiéndose.

_ Igualmente muchachos.

_ Y bueno, ahora usted su majestad porque me detiene de esa manera – preguntó Italec pícaramente.

Ya lo veras, tu solo sígueme – respondió Philip.

Caminaron un tramo muy largo pues el palacio era demasiado grande, llegaron a un pasadizo enorme y posteriormente entraron a una de las habitaciones, que era del príncipe, una vez ahí dentro Philip cerró la puerta con seguro.

_ Wao tu habitación es más grande que la cabaña donde vivo – dijo Italec sorprendido.

Efectivamente aquella recamara aparte de grande también era muy lujosa, los enchapados en las paredes eran de la mejor calidad, los muebles de la madera más fina, y ni que hablar de la cama enorme que estaba en medio de la habitación con un dosel de lino blanco finísimo.

No me digas que me has traído para lo que estoy pensando.

– respondió el príncipe lujuriosamente y arrodillándose ante Italec.

Philip bajo el pantalón que llevaba su novio y la verga salió rebotando, el príncipe no esperó ni un segundo más y se la metió a la boca, directamente hasta el fondo ante los ojos eyectados de placer del lobo.

Los ojos azules del príncipe lo miraban lagrimeando y muy rojos mientras daba la mamada casi hasta quedarse sin respiración, luego Italec tomó de los cabellos de Philip suavemente invitándolo a ponerse de pie y se besaron compartiendo la saliva y el sabor de la verga.

Caminaban mientras se besaban hasta tomarse con la cama, Italec mando al príncipe a ponerse de perrito sobre la cama porque le iba a ofrecer un riquísimo beso negro.

El lobo rompió aplicando una ligera fuera el pantalón de su novio, y se arrodillo a chuparlo, el príncipe hacía gestos de placer con el rostro mientras se quitaba la camisa que llevaba puesta, Italec mientras seguía devorando ese culo, se arrancó la camisa y la arrojó a un lado.

El ano del príncipe palpitaba y ya estaba listo para ser penetrado, Italec se puso de pie y su verga quedo a la altura de la entrada, y aplicando un poquito de fuerza metió el glande de golpe, haciéndole dar un gritito a Philip, luego la verga se deslizo lentamente hasta llegar a la base y ahí se quedó quieto un momento.

Recorría con las manos la espalda de Philip y propinándole dos nalgadas lo empezó a embestir de manera intensa, el príncipe recibía complacido mordiendo las sabanas y gimiendo muy despacio.

Italec sacaba su pene y lo volvía a meter entero hasta chocar con la próstata de su pareja, esa acción hizo que a Philip recorriera un espasmo por todo su pene haciéndolo erizar todo su cuerpo.

Se sacaron toda la ropa restante y subieron a la cama, el príncipe quebró bien la cintura y con el torso pegado a la cama, Italec arrodillado detrás de él lo penetro fuerte y haciéndolo delirar. El lobo como todo macho disfrutaba del placer de su pareja; se detuvo y comenzó a moverse en círculos como tratándose estirar más el ano.

Cambiaron de posición, esta vez el príncipe se acostó en la cama boca abaja, Italec encima de él, besándolo con el pene conectado en el ano, besaba la boca, la nuca, parte de la espalda, mientras su pelvis se movía con forma de ola, Philip no podía estar más que extasiado de la rica follada que le estaba dando su enamorado.

Luego de unos minutos, las piernas Philip se posaban sobre los hombros de Italec, la pose del misionero era su preferida pues se miraban a los ojos mientras follaban, los ojos claros y pardos del lobo miraban fijamente a los ojos azules de su príncipe, gotas de sudor comenzaron a aparecer en sus frentes, los cabellos dorados del lobo tapaban un poco la visión, pero él seguía, no había nada que le incomodara pues ya estaba próximo a acabar.

Con unas embestidas más, el pene del macho comenzó a expulsar su esperma dentro del recto del chico, quien, habiéndose estimulado su próstata, eyaculó sobre su abdomen dando un apasionado beso.

_ A sido genial – comentó Italec jadeando .

_ Moría de ganas porque me cogieras así – respondió Italec.

_ Por mi lo haría todos los días.

_ Encantado te complacería en todo.

_ Lástima que no estoy cerca de ti siempre.

Philip se quedó pensando unos segundos lo que dijo Italec.

_ Eso se puede arreglar – comentó el príncipe – Tú solo déjamelo a mí.

Luego de ello los muchachos se asearon y se quedaron acostados platicando, Philip acostado en el pecho de su hombre e Italec abrazándolo.


Justo al mismo instante en que Italec y Philip iban a su habitación, Cirlo y la pareja conformada por Roderick y Dariel, salían del castillo sin dirigirse la palabra.

Cirlo en el camino se encontró con una joven hija de uno de sus subordinados en el ejército esta lo saludo y se entretuvieron conversando.

El alfa y su omega siguieron su camino.

_ Italec y el príncipe no pierden el tiempo – comentó Dariel .

_ La juventud es así.

_ No creo, tu no tienes esa edad y quieres estar cogiendo todo el día – respondió Dariel.

_Y tú que no quieres – dijo Roderick.

Ambos rieron, llegaron por un lado de las caballerizas y Roderick con un movimiento rápido hizo entrar a Dariel y luego entro él.

_ ¿Qué haces Roderick? Aquí no, espera a llegar a casa.

_ Eso sería en la noche y no quiero esperar – le decía mientras le besaba el cuello.


Cirlo y la joven iban caminando sin rumbo, entregados a una sencilla conversación, aunque el general no era de ese tipo de personas, sino que había observado los atributos de la chica y llamó su atención.

_ Cuánto has crecido Diana

_ Solo un poco señor,

_ En cambio yo, me estoy poniendo viejo.

_ No como cree, es más hasta lo veo más joven que antes.

_ Es que me he tomado algunas vacaciones – mintió Cirlo.

_ Entonces porque no le da un descanso a mi padre – dijo a muchacha.

Ambos rieron por la broma.

_ Y dime ¿Cuántos años tienes?

_ Yo tengo 20 años señor.

_ Muy joven, y por cierto también muy hermosa.

_ Muchas gracias señor usted tamb…..

_ No por favor Diana, no me digas señor, dime Cirlo, nada más, acaso no dices que luzco joven también.

Diana sonrió.

_ Bueno Cirlo, tú también te ves muy guapo.

_ ¿enserio Diana?  O ¿me estas mintiendo para quedar bien?

_ No señor estoy hablando enserio.

_ Qué bueno saber que aun soy atractivo para las chicas.

_ ¿Por qué te parezco atractivo verdad?

Diana se sonrojó.

_ ¿Qué pasó? ¿Te comieron la lengua los ratones?

_ No Cirlo, es que me dio vergüenza responder, pero si me pareces atractivo.

_ ¿de verdad?

_ Si y mucho

_ Bueno Cirlo, creo que ya nos desviamos mucho.

Estaban tan entretenidos por la conversación que no se dieron cuenta que habían llegado a un estacionamiento de coches de la época.

_ SI me doy cuenta, pero ya que estamos aquí ¿no te gustaría mirar los autos?

_ Claro me encantaría – respondió la chica.


Por su lado Roderick y Dariel estaban entregados a su excitación, se habían desvestido completamente, Dariel estaba agarrando a una columna de manera de madera poniendo el culo en pompa mientras era penetrado violentamente por su macho.

El omega aguantaba los gemidos para que no sean escuchados por nadie, pues corrían el riesgo de ser encontrados.

_ Ay si amor, rómpeme el culo – le rogaba Dariel.

_ ¿si? Así quieres que te lo rompa perra – le dijo Roderick embistiéndolo con todas sus fuerzas.

_ Ah, ah, ah, sí así, que rico – contestaba jadeando.

El pene de Dariel chocaba con la columna producto de las fuertes embestidas. El pasivo mordía la columna apretando bien los dientes dejando marcas en la madera.

De un momento a otro Dariel perdió la resistencia en las piernas, resbalándose un poco, pero Roderick lo sostuvo, apresando su cuello con su brazo y lo siguió follando, todo esto solo en presencia de los caballos.


Diana con las tetas al aire y arrodillaba chupaba la verga de Cirlo, lo hacía tan bien que parecía que tenía una vasta experiencia.

La tomaba una porción de cabello haciéndole una especie de moño, para manipular la cabeza y guiar la mamada, la chica se agarraba los senos sobándolos.

Párate – le ordenó Cirlo.

La llevó hacía una mesa de metal y arrojo al piso lo que había, la invitó a recostarse abriendo las piernas de par en par, dejando al descubierto una vagina joven y muy rosaba, bastante bien depilada como le gustaba al general.

Primero recogió con su lengua los fluidos vaginales y besó los labios como si de una boca se tratase, Diana gemía muy despacio, luego los comenzó a chupar primero suave y después succionaba, para pasar finalmente al clítoris.

Cirlo se puso de pie y escupiéndose la verga penetró la vagina de la joven, que se expandía al sentir el pedazo de carne de macho, Diana comenzó a gemir más fuerte, pero el general la cayó poniéndole una mano en la boca.


Dariel ahora se encontraba en cuatro, en un montón de paja, y Roderick por detrás haciendo lo suyo, pero tomándolo del cabello y jalando hacia él la cabeza de su pareja.

Roderick lo estaba follando de manera tan salvaje que perdieron la noción de donde estaban, y olvidándose también de tener cuidado de ser descubiertos.

Roderick sacó el pene del ano, dejando una gran abertura e hizo chupar a Dariel con todos los fluidos anales, eso les encantaba a los dos, lo ponía más morbosos y con ganas de más.

Lo sostuvo de la cabeza con las dos manos para que no se escape y le taladro la garganta hasta traspasarla bruscamente, Dariel evidentemente se sentía asfixiado pero la excitación aumentó.


Diana de pie, le dio la espalda a Cirlo, y él coloco la punta de su verga en la entrada de la vagina, entro resbalando y chocó con la pared del útero, pasó sus manos por delante y se aferró a los senos de la chica mientras su cabeza estaba pegada a su espalda.

El ritmo era frenético, el general era muy bueno en la intimidad con las mujeres y se comportaba como un completo macho, esta jovencita no iba a ser la excepción, se iba a llevar la mejor experiencia de su vida así se lo prometió Cirlo.


Roderick se acostó y Dariel se sentó encima de él, introduciéndose su pene sin dificultad, inclinándose para besarse de vez en cuando.

Tras unos varios minutos más en esa posición ambos eyacularon, pero fueron tan sonoros en sus gritos que un soldado que pasaba por ahí los escuchó.

El soldado se acercó, y entró despacio para no alertar a los que estaban dentro, cuando entró lo que vio, lo horrorizo, puesto que dos hombres teniendo relaciones sexuales en la época era algo no que se podía permitir.

_ Pecadores, asquerosos – le gritó el soldado.

Roderick y Dariel se levantaron del suelo exaltados.

_ Esto es inaudito, tendrán que pagar por esto – dijo.


EL acto entre Diana y Cirlo ya había terminado, el general le deposito varios mililitros de semen en la vagina de la chica, que salió chorreando por las piernas.

_ ¿te gustó? – preguntó Cirlo.

_ Demasiado.

El ego de macho se elevó en Cirlo.

_Bueno ya sabes donde vivo si quieres más, pero no tienes que decirle nada a nadie.

_ Como crees, será nuestro secreto – dijo la chica acercándose a él para besarlo.

Cirlo rechazó el beso.

EL hombre se terminó de vestir y salió del lugar, la chica se retiró después.


El soldado salió de las caballerizas con la intensión de buscar a algún superior suyo para informar lo sucedido, pero a lo lejos visualizó al general y fue donde el inmediatamente.

Haciendo el saludo respectivo, el soldado comenzó a contar todo lo sucedido.

_ Señor, vengo de las caballerizas y acabo de ver la más asquerosas de las abominaciones.

_ ¿Qué es lo que viste soldado? Habla claro y sin rodeos.

_ Dos hombres estaban teniendo sexo entre ellos.

La noticia llamó la atención del general.

_ ¿Identificaste a los pervertidos?

_ Sí señor, se tratan de esos dos que el rey trajo al palacio. Hasta asco me da pronunciar su nombre.

_ Aún siguen allí

_ Sí señor.

_ Entonces llévame con ellos.

Cirlo y el soldado fueron a las caballerizas, encontró a la pareja a medio cambiarse y se les plantó enfrente, el soldado quedó en su tras.

_ Veo que lo que me decía el soldado era verdad, dos hombres infringiendo la ley.

_ Cirlo, nosotrosssss…

_ Silencio – dijo Cirlo callándolo a Roderick.

_ Mi general, debemos informar al rey para que sean ejecutados en público como la ley manda.

_ Así es soldado tienes mucha razón, en este reino no se permiten ese tipo de relaciones asquerosas que van en contra de las leyes de su majestad y las leyes de Dios – dijo Cirlo – Pero haré algo mejor.

Roderick y Dariel no despegaban los ojos de encima a Cirlo.

_ Soldado deme su espada – ordenó Cirlo.

El soldado obedeció.

_ ¿Señor los va a matar usted mismo? – preguntó entusiasmado el soldado.

_ Así es soldado, usted y yo eliminaremos estas lacras, pero antes quiero hacerle una pregunta

_ Si claro, dígame señor.

Cirlo inició una ronda de preguntas mientras daba vueltas alrededor del soldado.

_ ¿Usted tiene esposa?

_ Sí señor.

_ ¿Hijos?

_ ¿A qué viene todo esto señor?

_ Usted responda soldado.

_ Bueno, sí señor.

_ Niños o niñas.

_ Dos niños y una niña.

_ y si sus hijos, cuando crezcan usted mismo los encontrara teniendo sexo con otro hombre, ¿usted qué haría? ¿Lo denunciaría?

_ Pero señor no entiendo.

_ Le dije que responda soldado, y responda con la verdad.

_ Está bien señor, sinceramente, yo mismo lo golpearía hasta matarlo, porque me avergonzaría que la gente sepa que soy el padre de una abominación de esas.

Tras esas palabras Cirlo se detuvo en frente del soldado, estiro la espada viendo su filo y sin pensarlo dos veces atravesó su corazón.

_ Nooooooo, Cirlo – gritaron Roderick y Dariel

Cirlo se acercó al odio del soldado y dijo muy bajito.

_ A un hijo se le acepta y se le quiere tal y como es, los tuyos no van a extrañar a un padre como tú.

Cirlo retiró la espada y el soldado cayó muerto. Los demás no escucharon nada de lo que Cirlo dijo.

_ Cirlo, ¿Qué hiciste? – le recriminó Dariel.

_ ¿Acaso eres tonto o qué? No ves que lo acabo de matar.

_Pero, no debiste, hubiéramos encontrado otra manera de persuadirlo – le gritó Roderick.

_ Y como lo pensaban hacer, ¿invitarlo a tomar té?, además, lo hubiesen pensado antes de tener sexo justo aquí.

_ No necesitábamos de tu ayuda, nosotros hubiéramos podido solucionar esto – le dijo el alfa.

Cirlo rio.

_ ¿Ayuda? Son unos idiotas si piensan que lo hice por ustedes, si maté a este hombre fue por hacerle un favor al rey, porque si todos en el reino se hubiesen llegado a enterar, el rey hubiera quedado en vergüenza, él los trajo hasta aquí vendiéndolos como los mejores ¿no recuerdan?.  El rey trajo guerreros, no un par de maricas.

La respuesta de Cirlo parecía descabellada.

_ Ahora ocúpense de esto, me iré a descansar – les dijo tirando la espada ensangrentada.

Cirlo salió del lugar para ir a su casa, la pareja comenzó a recoger el cadáver sintiéndose culpable por la muerte del soldado.

Cirlo no sentía ningún tipo de remordimiento por la acción que acababa de cometer, era de carácter frío, calculador y sin escrúpulos, capaz de hacer cualquier cosa que a él le parezca bien así sea algún acto escalofriante tal cual como había sucedido, sin embargo, no todo era así con Cirlo, había alguien que era capaz de sacar lo mejor de él que escondí a la perfección y ese era Tomy, su hijo.

Con Tomy era todo distinto, si bien al principio cuando Cirlo se dio cuenta que su hijo tenía distinta manera de comportaste a otros niños, se volvió frio con él, y lo trataba muy mal cuando apenas era solo un niño pequeño, pero no era porque lo deseara, sino por el intento desesperado de cambiarlo, pero no pudo, por más que lo obligaban a hacer cosas que hacían los chicos, Tomy no quería, se alejaba y se aislaba, estaba todo el tiempo en casa, Cirlo y su fallecida esposa se rindieron y lo ignoraban en todo, hasta que finalmente un día todo cambió, despertando en Cirlo un amor que nunca había sentido, ese amor incondicional, que lo hizo transgredir la relación que tenían.

Al llegar a casa Cirlo encontró a su hijo con una espada.

_ ¿Qué haces con eso campeón?

_ Intentando practicar con la espada papi

_ Pero si mal no recuerdo a ti no te gustaban hacer esas cosas.

_ Si lo sé, pero también te recuerdo que tú y mamá me obligaban, por eso no me gustaba.

_ Ya veo, ¿entonces ahora si quieres aprender?

_ Si papá, quiero aprender para ser algún día como tú.

Cirlo se acercó y abrazando levanto a su hijo del suelo.

_ Me llenas de orgullo, mi amor – dijo dándole un beso en los labios.

_ Gracias papi – dijo Tomy.

_ Bueno no puede esperar si quieres empezamos ahora mismo – sugirió Cirlo.

_ Si papá es buena idea.

Cirlo se sacó la camisa y se dirigió con su hijo al jardín de la casa.

En ese momento el general le enseño las reglas básicas de como luchar con espadas, así también como movimientos básicos, terminando cansados y sudados.

_Venga campeón, démonos un buen baño – dijo Cirlo con las gotas de sudor recorriendo su frente.

_ Está bien papá – respondió jadeante.

Entraron en la casa, pero primero tomaron agua en la cocina.

_ Papá

_ ¿qué cosa bebe?

_ Yo, este…mmm, bueno…. No, nada ya me olvidé.

_Hijo, no me mientas, dime que cosa sucede.

Tomy tomó un poco de ire

_ mmm es que hace una semana que no me follas y tengo muchas ganas.

Ni bien escucho la palabra follar, el pene de Cirlo comenzó a levantarse.

_ ¿de verdad quieres?

_Claro papá, llevo deseándolo ya toda la semana, ¿por qué no quería?

_ Bueno tu sabes que con lo que pasó conmigo no se pudo, y luego con lo de tu madre pensé que quisieras superar primero eso, no quise ser imprudente.

_ No papá para nada, más al contrario pensé que después de tu transformación, ya no querías hacerlo conmigo.

Cirlo rio un poco.

_ Hemos confundido todo.

_ Así parece.

_ Entonces hay que darnos un baño primero.

_ A mí me gustaría hacerlo así.

La erección de Cirlo ya no se podía contener en el pantalón y se marcaba bastante.

_ Veo que tengo un hijo muy cerdito – dijo el hombre caminando hacía su hijo .

Se besaron con mucho deseo y lujuria, Cirlo se bajó el pantalón y presionó la cabeza de su hijo como señal para arrodillarse a chupar verga.

Tomy tomando el pene de su padre lo olio primero los huevos con sudor encantándole el aroma, lamiéndolos y luego hizo lo mismo con las ingles, olfateo la verga y se pudo dar cuenta que su padre había sido deslechado momentos antes, pues tenía el clásico olor.

_ Papito, ¿A quién te has follado? – dijo Tomy dándole besitos a la verga.

_ Mi amor, no se te escapa nada – respondió Cirlo acariciándole el cabello.

_ Me vas a decir

_ Fue una muchacha, hija de alguien del ejército.

_Ya veo, pero se le olvido limpiártela bien – dijo lamiendo el glande.

Cirlo se estremeció al instante.

_ Si hijo así parece.

_ ¿Y de casualidad te la chupa tan bien como yo? – le preguntó el chico empezando a devorar de a pocos la verga de su padre.

El niño mamaba la verga con maestría, lo que hacía con la boca a su padre lo enloquecía.

_ Ahhh, ooohhh, No amor, tú la chupas más rico – dijo aprisionando la cabeza de su hijo.

La cara de Tomy quedó pegada en los vellos púbicos de su papi, aspirando su aroma, un hilo de saliva caía al suelo, luego lo soltó y el chico tomo aire.

Cirlo hizo girar a su hijo y este se apoyó en la mesa de la cocina, le arrancó el pantalón y hundió su cara en el culo de Tomy, el culito olía a sudor, pero no era un sudor rancio y feo, era placentero y lamió, chupaba el ano hasta dilatarlo por la excitación.

El padre se puso de pie preparado para penetrar, pero como el hijo no era de su altura, el hombre tuvo que flexionar un poco las rodillas para que el pene pueda encajar perfectamente en el ano, uno vez la punta colocada en la entrada, comenzó a meterla muy lentamente y despacio para que no le doliera, cuando logró entrar completamente todo el pene Cirlo besaba con pasión la espalda de su hijo, y tomaba las gotas de sudor que por ella recorrían.

El hombre tomó con sus manos ambos lados de la cintura y penetraba contundentemente, sacando más de un gemido de su hijo que se encontraba disfrutando con el torso pegado a la mesa.

_ No sabes lo rico que se siente Tomy – comentaba Cirlo jadeando.

_ ¿Mejor que el culo de una mujer, papito? – preguntaba Tomy.

_ Mucho mejor, aunque esta sensación es única, las mujeres no dan el culo – respondió Cirlo metiendo de uno solo su pene haciendo gemir fuertemente a su hijo.

Cirlo era completamente heterosexual y le encantaba tener sexo con mujeres aunque amaba follar con su hijo, sin embargo, en cuanto a sensación el culo de su niño ganaba solo por poco.

_ Nene ahora brinca en la verga de papá – dijo Cirlo acostándose en el piso.

Tomy se sentó en el pene de su padre, brincando conforme le ordenó, el chico tenía las piernas abiertas lado y separándose las nalgas para una mejor penetración, el sudor recorría todo su cuerpo, y aumentaba más la temperatura corporal.

Cambiaron de posición, esta vez quien estaba acostado en el suelo era Tomy y su padre lo penetraba piernas al hombro, luego Cirlo separó las piernas con sus manos, después pegó su cuerpo al del chico, besándolo mientras él movía la cintura y empuja su pene hasta el fondo. La pequeña verga de Tomy quedó aprisionada entre el abdomen de su papá y el suyo siendo de esa manera estimulada hasta que eyaculó entre gemidos.

Al sentir como su ano apretaba Cirlo sintió los espasmos que avisaban que ya estaba pronto a correrse, pero no lo haría dentro, sacó el pene del interior de su hijo y tras unas cuantas jaladas se corrió dándole de mamar leche caliente a su padre.

El adolescente tragó el semen y limpió bien la verga de su padre, el sudor de Cirlo caía sobre su cara, posteriormente el hombre se acostó al lado de su hijo en el suelo.

_ Papi, me encanta hacer esto contigo.

_ A mí también hijo, me fascina.

_ Pero ¿a ti te gustan las mujeres verdad?

_ Si bebe, me gustan las mujeres.

_ Pero si te gustan las mujeres, ¿por qué te gusta tener sexo conmigo?

_Porque eres mi hijo, y te amo, solo que desde un tiempo para acá expreso mi amor de una forma poco convencional.

Tomy comienza a sollozar.

_ Hey campeón, ¿Qué sucede? ¿Por qué lloras? – le preguntó Cirlo a su hijo atrayéndolo a su pecho.

_ Papi es que a mí sí me gustan los hombres – dijo el Tomy con sus lágrimas cayendo en el pecho de su padre.

_ Hijo no llores por favor, y no te preocupes que yo ya lo se.

_ No me vas a pegar.

_ ¿Estás loco? Jamás te lastimaría.

_ Es que cuando era niño si me pegabas porque decías que era marica.

_ Si lo se mi amor, pero no sabes cuanto me arrepiento, en ese momento yo no estaba listo para aceptarlo, pero te juro que, si te amaba, solo que a mí me criaron de una forma en que si expresas tus sentimientos eras débil, mi papá siempre nos trató así y por eso yo lo hacía contigo, te pido otra vez que me perdones bebe.

_ Yo ya te perdoné hace mucho tiempo papá – respondió el chico – Pero entonces no tienes problema con que yo sea así.

_ No hijo, yo te amo tal y como eres.

_ Gracias papá, te amo mucho.

_ Yo también te amo hijo

_ ¿Papá, pero enserio ya lo sabías?

_ Hijo mio de verdad que eres muy inocente – le dijo sonriendo – Bebe te vengo haciendo el amor dos años, y lo disfrutas como una mujercita, ¿crees que a pesar de todo esto no me he dado cuenta que te gustan los hombres?

Tomy verdaderamente era un niño muy inocente, era totalmente obvio y solo él creía que su papá no se había dado cuenta.

_ Hijo ya tú me has compartido tu secreto, yo también tengo algo que contarte.

_¿También tienes un secreto?

_ Si hijo, escúchame.

_ Si papi.

_ Tú sabes que me gustan mucho las mujeres, pero no te voy a negar que aparte de ti, de vez en cuando he mirado el culo de algún jovencito y me lo querido follar.

_ ¿Enserio? ¿Y se te viene alguien a la mente?

_ El príncipe, ese niño está muy lindo, si me lo follaría.

_ Si papá el príncipe es muy guapo – confirmó Tomy – Pero ¿a él no le gustan los hombres o sí? Deberías intentarlo para saberlo, tú también eres un hombre muy guapo, nadie se resistiría a ti.

_ Es que el príncipe tiene novio.

_ Entonces, si le gustan los hombres, eso no me lo esperaba.

_ Así es hijo – dijo Cirlo – Ahora pasando otro tema, quiero que me prometas algo.

_ Si papá lo que tú quieras.

_ Nunca le digas a nadie lo que hacemos entre nosotros.

_ No te preocupes papi, eso lo he sabido siempre.

_ Ahora otra cosa, tampoco tienes que decir que te gustan los hombres.

_ Si papá también se eso.

_ Y, por último, nunca pero nunca, reveles lo amoroso que soy contigo, si llegaras a hacerlo, alguien podría usarlo para hacernos daño.

_ Te lo prometo papá, nunca diré que eres el mejor papá del mundo, y que me haces muy feliz.

_ Ese es mi campeón hermoso, gracias mi vida, te amo con toda el alma.

Cirlo se derretía por su hijo, y Tomy también por su padre.

Tras unos minutos de silencio Tomy se quedó dormido en brazos de su padre, Cirlo se levantó con cuidado y cargándolo en brazos lo llevo hasta la cama, acostándose junto con el protegiéndolo entre sus brazos.

De pronto luego de unos minutos Tomy despierta con dolor intenso y con el cuerpo ardiendo, despertando a su padre.

_ Hijo, ¿qué pasa? – preguntó Cirlo preocupado.

_ Me duele mucho papá, y me quema todo el cuerpo – respondió Tomy quejándose fuertemente.

Cirlo se preocupó demasiado y no sabía qué hacer, camina de un lado a otro en la habitación, pero no se le ocurría nada, y a su mente se le vino un flashback del día en que se convirtió; - estaba el tirado en el suelo moribundo cuando Italec lo atacó, sentía su cuerpo arder acompañado de un inmenso dolor, igual que su hijo-.

_ Sera posible – se dijo él mismo.

Tomy se estaba convirtiendo en hombre lobo ya que se tragó el semen de su papá, y como Cirlo no sabía controlar ese detalle, sus fluidos salieron con la carga del veneno responsable de la transformación.

Quería ayudar a su hijo, pero no sabía como hacerlo, pensó en solo dejar que el proceso solo siguiera su curso, pero no sería justo ya que, si bien Tomy le había comentado a su padre que algún día el también quisiera convertirse, no estaba consciente de que manera iba a hacer.

Llegó a su cabeza la idea de pedirle ayuda a los demás lobos, pero su orgullo no lo dejaba, sin embargo, su amor de padre lo quebrantó y de inmediato salió a buscarlos, trepo con facilidad la muralla del reino y llegó al bosque, se transformó para correr mucho más rápido y poder llegar en cuestión de minutos.

Al llegar entró con agresividad a la cabaña encontrándose solo a Dariel.

_ Hey, se toca la puerta – dijo fuertemente Dariel.

_ ¿Dónde están los demás? – preguntó.

_ No están, Italec se quedó en el castillo con el príncipe y Roderick fue a buscar algo comida al bosque.

_ Perfecto, necesito que me ayudes.

_Y tu porque querrías nuestra ayuda.

_ Créeme que no place hacerlo, pero no tengo opción solo sígueme.

Cirlo salió primero segundos más tarde lo hizo Dariel.

Ambos se transformaron; el lobo gris y el blanco corrían a gran velocidad, atravesaron nuevamente las murallas y fueron directo a la casa de Cirlo, ahí lo llevo directo a la habitación de su hijo, quien se gritaba del dolor.

_ Él es mi hijo Tomy, no sé qué le sucede – dijo Cirlo

Dariel inmediatamente se dio cuenta que Tomy se estaba transformando.

_ Él tiene el veneno en su organismo, se está transformando, pero ¿Cómo? Si no tiene ninguna mordida, el otro método es a través del contacto sexual pero no creo que tú o ¿sí?

_ Sí, yo mantengo relaciones sexuales con él.

_ Joder eso no me lo esperaba.

_ Puedes ayudarlo o no.

_ Lo siento Cirlo, no hay forma solo deja que siga su curso, le va a doler más sí pero no se puede hacer nada.

Tomy cada vez guitaba de dolor, y su piel se le estaba empezando a poner morada.

_ Debe haber alguna forma.

Dariel tenía la piedra de su collar en la mano, y recordó las palabras de Julissa.

_ Ahora que lo pienso si la hay dame un momento.

_ Dímelo.

_ Déjamelo a mí.

Dariel siguió las instrucciones de Julissa.

_ Gardeno – dijo deseando estar en ese lugar.

Automáticamente Dariel desapareció ante la mirada asombrada de Cirlo, y apareció en Gardeno.

Se entrevistó con Julissa y esta lo recibió gustosa.

_ Dariel, que sorpresa, pasó algo, y ¿Roderick? – dijo Julissa.

_ Julissa, ahora no hay tiempo, necesito de tú ayuda por favor.

_ Si Dariel, dime ¿Qué necesitas?

_ Sígueme y veras.

_ Julissa leyó la piedra de Dariel y se transportó al lugar donde estaban.

Cirlo se quedó atónito.

_ Cirlo, ella es Julissa, luego te explico quién es ella –dijo Dariel.

_ Jullisa él es Cirlo

_ Mucho gusto – dijo Cirlo.

_ Vaya esto sí que es un problema – dijo la hechicera.

_ ¿Puedes ayudar a mi hijo – preguntó el padre preocupado

_ Sí, pero ¿Comó sucedió?

Todos se quedaron callados.

_ Yo tuve sexo con él.

_ Mmm ya veo.

_ ¿Hay solución? – Preguntó Dariel.

_ Sí, afortunadamente cuando es con semen es mucho más sencillo a cuando es con sangre, estará muy bien rápidamente.

_ Perfecto – comentó Cirlo

_ Qué alivio – dijo Dariel.

Julissa con sus poderes hizo aparecer una copa y recitó unas palabras en su lenguaje, se acercó a Tomy y se la dio de beber.

_ En unos segundos, comenzara a vomitar el veneno.

Y así fue Tomy casi sin fuerzas acercó su cabeza al filo de la cama y arrojó una sustancia plasmática de color plateado.

_ ¿Eso es todo? – preguntó Cirlo.

_ No todavía, como parte del veneno ya está en el torrente sanguíneo vas a tener que sacarlo.

_ Pero ¿Cómo?

Jullisa levantó la muñeca del muchacho y con una daga le hizo un corte en la muñeca.

_ Ven acércate, y tómala – ordenó al hombre

Cirlo tomó la muñeca de su hijo.

_Ahora pon tus labios en el corte, y siente, la sangre tiene un sabor diferente densidad a la del veneno, te vas a dar cuenta fácilmente.

El general hizo lo que Jullisa le indicó, comenzó a saborear a la sangre y muy deprisa sintió el sabor.

_ Ahora succiona.

Cirlo comenzó a succionar hasta que saco el veneno.

_ Ahora trágatelo.

El hombre pasó el veneno e hizo gestos de desagrado.

_ A ¿qué sabe?

_ No sabría decirlo, tal vez un sabor metálico y amargo, pero quema parece como ácido.

_ Es que prácticamente es un ácido, eso es lo que hace que sienta ese ardor en todo el cuerpo, es una sustancia muy corrosiva.

_ Entonces, ¿ahora ya estará bien? – Preguntó Dariel.

_Aún falta algo por hacer.

Jullisa hizo aparecer nuevamente una copa y se la dio de beber al muchacho.

_ Esto es para que los tejidos que destruyo el veneno se regeneren, en uno o dos días estará como nuevo – afirmó la hechicera.

_ Muchas gracias Jullisa, eres genial – agradeció Dariel.

_ Gracias – dijo secamente Cirlo.

_ Descuiden, fue un placer – respondió amablemente -  Dariel enséñale a Circo todo sobre lo que debe saber de su raza.

_ Si Jullisa, yo me encargo.

_ Bueno me despido, me saludas a Roderick y a Italec - finalizó diciendo la hechicera y desapareció.

Cirlo fue hasta la cama donde estaba su hijo durmiendo, sin dolor, lo acomodó muy bien y lo cubrió con sábanas, dándole un beso.

_ Vamos a la sala – dijo Cirlo saliendo por la puerta

Una vez ahí le ofreció un vaso de whisky, Dariel aceptó y se sentaron en el sofá.

_ ¿Cuéntame sobre la mujer que vino? – pidió dándole un sorbo a su trago.

Dariel le comenzó a contar todo sobre Jullisa, sus hermanas y Gardeno. Cirlo estaba muy sorprendido con la información que recibía, pero obviamente no lo demostraba.

_ ¿Y todas son igual de hermosas que ella?

_ Si son muy bellas.

_ Joder, me gustaría meter mi polla ahí – comentó riendo Cirlo tomándose toda la bebida de su vaso.

_ Espera, entonces ¿te gustan las mujeres y los hombres? considerando que te follas a tu hijo.

_ Me gustan los coños, y el culo de mi Tomy, no he follado con otros hombres.

_ Ah vale entiendo.

_ ¿Ahora cuéntame sobre los hombres lobo?

Dariel se tomó el tiempo de contarle absolutamente todo y se quedaron hablando por horas sobre el tema.

_ Entonces ya sabes, antes de volver a follarte a su hijo primero controla tu cuerpo, siente como fluye el veneno y que tu cerebro de la orden para que no sea expulsado con el semen.

_ De acuerdo.

Eran poco más de las seis de la tarde, el sol se estaba ocultando, Dariel decidió retirarse, se puso de pie, pero Cirlo velozmente se abalanzo contra él arrinconándolo contra la pared.

_ Ahora que traes – preguntó enojado Dariel.

Cirlo tomándolo del cuello y haciendo presión le dijo.

_ No comentes con nadie, ni siquiera con tu familia, sobre lo que viste aquí.

_ ¿Sobre qué cosa? Que eres un papá amoroso y preocupado, Qué tienes un lado bueno por lo menos o que te coges a tu hijo – dijo Dariel sarcásticamente.

Cirlo lo miraba a los ojos y luego a los labios.

_ Solo no digas nada.

Cirlo se acercó bruscamente su boca a la de Dariel y lo besó con fuerza, el omega recibió el beso, moviendo sus lenguas dentro de sus cavidades, era un beso con mucha carga de lujuria haciendo erectar los penes de ambos.


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