Hola preciosa:

Alguien me ha enviado al correo esta carta, diciéndome que debo publicarla en la sección de todorelatos, por que a quien está dirigida sabe que es lectora de mis escritos. Cumplo órdenes

Hola preciosa:

Te sorprenderá que te escriba esta carta, por que aún no hemos disfrutado de conocernos; espero que en los próximos días o semanas podamos hacerlo, no te arrepentirás, te lo aseguro. En las líneas que siguen voy a informarte de mis propósitos.

Mi nombre es...., bueno, no importa demasiado; creo que estarás más interesada en saber que te conozco desde hace tiempo, y tu a mi no, al menos eso creo. Te he visto tantas veces pasear por la plaza, por el parque, por la calle. A veces me he sentado en una cafetería a esperar tu llegada cuando salías de algunos lugares que he ido coleccionando, saboreando un café con licor, y pensando en nosotros, abrazados, sudorosos, con tiempo para jugar largo e inolvidable.

Eres hermosa, al menos para mi. Quizás no seas una belleza al uso, pero tienes algo diferente al resto de las mujeres que he conocido, y han sido muchas. Tal vez tu inocencia, o tu simpatía, o tu misterio. Tu pelo, tu sonrisa, tu mirada; no lo sé, pero desde que te miré por primera vez, quedé fascinado por tu autenticidad. Desde entonces no he podido dejar de observarte desde hace meses, y lo he intentado, te lo juro.

Sin más dilación, vayamos al grano, o mejor dicho a lo que tu ya te imaginas. Quiero que nos veamos pronto, te deseo y necesito estar contigo, por que temo llegar a obsesionarme y cometer una locura por ti, o contigo. No sería la primera vez, pero eso forma parte de mi pasado y hace ya tanto tiempo.

Estoy seguro de que te gustará estar conmigo, soy ese hombre con el que has soñado tantas veces tener a tu lado; pero te advierto que a pesar de que sienta algo parecido al amor contigo, no voy a enamorarme. Solo voy a acostarme, a follarte sin piedad, como una bestia hasta agotarnos, y esperar lo suficiente para comenzar de nuevo.

Te he estudiado, se lo que quieres, lo que deseas; he visto como te masturbas, no me preguntes como, pero me costó una pasta, y se como lo haces, y yo seré la realización del personaje de tus orgasmos solitarios. Se que te gusta..., el ritmo, la presión, el ambiente. Conozco tus sueños, y tus frustraciones, desde aquel desafortunado incidente, del que no te hablaré por que soy un caballero.

Lo he pensado tantas veces que ya parece que lo he vivido, pero vamos a disfrutarlo juntos una sola vez y me iré, aunque sé que me recordarás siempre. Te lameré y succionaré tu clítoris como un poseso. Te clavaré mi polla hasta donde no ha llegado ninguna. Te someteré a mis caprichos y te guiaré hasta el paraíso con las embestidas que siempre anhelaste cuando pensabas en alguien como yo, mientras follabas con otros.

Bien, muñeca, ¿te gusta que te llame así?, ¿verdad?. En unos días, no te diré cuantos, un repartidor llamará a tu puerta y te entregará un sobre, y un ramo de rosas. En el sobre encontrarás una dirección y una llave. Allí te estaré esperando, puedes asistir por tu propia voluntad o no, tu decides. Si no vienes, te enviaré otra carta más adelante, y otra, hasta tres, que te llegarán de la misma forma.

Si no aceptas me decepcionaré contigo y entonces, pasaremos al plan B, que prefiero no descubrirte por ahora, pero será mucho peor para los dos, sobretodo para ti. Pero no hablemos de cosas desagradables cuando estamos a punto de disfrutar de un día inolvidable. Ponte guapa. Te sienta muy bien ese vestido, el último que te has comprado. Un beso por adelantado.