Hola amigos

HOLA AMIGOS

Les relato una experiencia que he deseado desde siempre que aunque no se ha hecho realidad no pierdo la esperanza de que así sea.

Trabajo en una oficina, como jefa de una sección y ya existe la comidilla de que soy mujer de mi jefe directo que es verdad, pero aún así todo mundo me guarda mucho respeto.

Me gusta mucho mi amante, ya que con el experimento muchas cosas ricas que había olvidado en la vida, pero el siempre es una persona muy ocupada y no siempre puede complacer mis apetitos sexuales, así que con regularidad me masturbo, sobre todo cuando me deja muy cachonda y caliente y no me puede coger.

En días pasados estaba en la oficina escribiéndome con el y excitándonos mutuamente, haciendo planes para salir de la oficina y sentarnos a conversar cuando saliéramos para poder darnos una rica sesión, sin embargo la bruja de su mujer lo fue a buscar a la oficina a la hora de salida y me quede con mi calentura.

Ente a la página de todo relatos y comencé a leer y a ponerme más caliente de lo que ya estaba, sudaba y estaba totalmente mojada.

Aunque no tengo una oficina cerrada, tengo una sección de mi oficina para mi sola y como casi no había nadie decidí quitarme los interiores. Ese día estaba en falda a la mitad de pierna y me sentía más libre.

Cuando llegue al baño comencé a tocarme y estaba muy excitada, me paré frente al espejo y me metía el dedo, estabas muy entretenida en tocarme y meterme el dedo que no escuche que alguien venía, cuando sorpresivamente se abre la puerta.

Era el Gerente General, un hombre joven de 36 años, guapo, atractivo, blanco y de una estupenda personalidad. Algunas veces ya me había masturbado pensando y teniendo una fantasía mental con el, pero nunca me imagine que me encontrara en una situación como esa. Quede fría e inmóvil.

Yo tenía una pierna subida sobre el mostrador y la falda sobre el pecho, con el dedo totalmente adentro de mi vagina y estaba sudando copiosamente, con una cara de lujuria que me mataba. Mi vagina se reflejaba perfectamente en el espejo y desde la puerta que se abrió se contemplo el panorama perfectamente.

El cerró la puerta instintivamente y yo me baje la falda rápidamente, trate de acicalarme y salir.

Cuando salí el estaba esperándome para cerrar la oficina y yo fui directo a mi escritorio tome mis cosas y no sabía como salir, la cara se me caía de vergüenza, en ese instante pense en renunciar. Me sentía fatal. Coño que digo.

Lo primero que dijo fue lo siento, perdóneme por abrir la puerta pensé que no había nadie, yo contesté, perdóneme usted, es que me estaba revisando algo que tenía.

El sonrió muy levemente, lo que me hizo entender que no se había comido el cuento y me dijo no hay problema, no se preocupe, nada ha pasado y yo no he visto nada.

Le conté que me sentía un poco apenada y se me quebró la voz, el me tomo de la mano y me dijo que no me preocupara, que el entendía que las personas eran adultas y que aveces las cosas solo sucedían y trato de consolarme y yo rompí en llanto cerrado, la verdad me sentía muy mal.

Le dije voy a renunciar no puedo trabajar con usted y mirarlo a la cara y en ese momento me llevo a su oficina, me sentó y me conversó tratando de consolarme.

Se me acerco y me abrazo y en ese momento temblé. Aunque estaba muy apenada, también seguía muy excitada.

Yo correspondí el abrazo y seguía llorando cuando sentí su mano rozar mi culo y eso me éxito mucho, ahora yo no sabía que hacer, seguía llorando como una tonta y mi jefe me abrazaba ahora un poco mas evidente y me apretaba contra su cuerpo.

Yo correspondía el abrazo, como el de alguien que consuela, pero nuevamente sentí su mano sobre mi culo, ahora con menos discreción.

Me pregunto al oído, ¿te estabas masturbando verdad?….y entre sollozos le conteste si y eso me da mucha vergüenza.

El me dijo no importa yo también lo hago…guardo silencio por un segundo y luego pregunto ¿te viniste?…le dije no…usted interrumpió y ambos soltamos leves risas.

En ese momento ya tocaba mi culo con ambas manos, sobre mi falda y comenzó a subirla poco a poco, yo temblaba y no sabía que hacer pero no me moví.

El siguió con el juego de sus manos, hasta que toco la piel de mis nalgas, creo que me corría sola de sentir esas manos en mi culo.

Me preguntó nuevamente a mi oído….¿te gustaría terminar?….y le conteste si….

Entonces sentí su mano sobre el ojo de culo jugueteando con mi entrada del ano. Yo instintivamente abrí mis piernas para dejarlo que pudiera tocar mejor, pero me empujó sobre su escritorio, estaba medio sentada sobre el escritorio cuando el se agacho y metió su cabeza entre mi entre pierna.

Como no tuve tiempo de ponerme mis interiores, estaba sin nada, no podía creer que el gerente me estuviera mamando, ummmm que rico, ya no lloraba, ahora gozaba el rico roce de su lengua sobre mi clítoris, me acomode, abrí las piernas y el arrodillado frente a su escritorio saboreaba mi clítoris que se mojaba mucho, me corrían por las piernas la saliva y mis jugos.

Loe escuchaba meter su legua dentro de mi como un cerdo que come algo, se desesperaba, lo hacia bien y duro, me estaba muriendo de placer y de sorpresa, no podía creerlo, coño me estaba corriendo en su boca.

Ya yo agarraba su cabeza y lo empujaba dentro de mi con fuerza y el me comía el coño, me lo mordía suavemente y yo estaba jadeando de placer, le decía que rico, no pare, siga por favor que me vengo, así el decía así te gusta, yo si así me gusta siga.

Me corrí un par de veces más y estaba super caliente, el se detuvo y se puso de pie y yo rápidamente me acerque a su pantalón, que se le veía un enorme bulto, ya lo había visto antes. Ya anteriormente me había fijado en su bulto debajo del pantalón y se veía muy bien.

Ahora tenía la oportunidad de averiguar que había y así lo hice, baje sus pantalones y su calzoncillo y me brincó su miembro.

El es circuncidado así que lo que vi primero fue su cabeza, rosada y peladita de un buen grosor, no muy grande, pero lo suficiente para hacerme gozar como loca.

Rápidamente me metí aquella verga en la boca y comencé a chuparle su miembro mientras él estaba parado.

Miraba desde abajo a su cara y el me miraba con ternura, asombro y lujuria, me decía que rico lo haces, así pasamos como 10 minutos, le tocaba los huevos y le chupaba, subía por su glande y el gozaba.

Me tomo de los brazos y me incorporo, me subío sobre el escritorio y me hizo abrir las piernas y allí no titubeo. Me dejo entrar aquel miembro dentro de mi, yo sudaba y gemía como una loca, estaba a punto de estallar y comenzó un rico movimiento dentro de mi. No tarde mucho en correrme, me la metía duro con fuerza y seguía trabada por esa pinga dura y gruesa, me empujaba, ya estaba corriéndome nuevamente.

Me hizo pararme y recostar mi pecho contra el escritorio, me abrió las piernas y desde atrás me introdujo nuevamente aquel miembro. Me agarró por la cintura y me hacia moverme contra el, estaba gozando, mi falda sobre mi cintura y sus pantalones entre sus piernas y el arremetía con fuerza, me rozaba ahora el clítoris y sentía sus huevos golpear contra mi culo, que rico.

No decía nada solo gemía y me corría nuevamente. No sé por que entre aquel entusiasmo se me escapó decir de por el culo….no se como se me salio aquella frase, pero el la tomó muy a pecho. Me daba vergüenza que supiera que me gustaba también por el culo, pero el no se hizo esperar, me saco su miembro que estaba totalmente mojado por mis líquidos y me lo puso sobre el ojete del culo.

Sentí aquel falo caliente entrar sin misericordia por mi pequeño ano y me hizo soltar un grito.

Cuando lo hubo metido todo me pregunto ¿así y yo solo conteste más duro.

Pobre de mi culo, ese hombre arremetió contra ese culo como quien quiere borrarlo me la metía y sacaba con mucha fuerza, tanto que me dolía un poco pero nada de querer parar, el seguía y yo gozaba, con mi mano libre me tocaba el clítoris y aumentaba mi sensación que belleza.

Me corría de nuevo y mi ano tenía contracciones que hacían la sensación de aquella verga adentro mucho más placentera.

Me la saco y me hizo sentarme sobre la silla que están al frente de su escritorio, me puso la verga sobre la boca y yo me la metí instintivamente.

Se la saco y la sobo muy duro y nuevamente me la metió en la boca, en ese momento sentí una descarga de su cargamento de semen. Que cosa más sublime, una leche espesa, pero muy abundante, que casi me ahoga, me corría leche por las comisuras de mis labios, pero el no sacaba nada esa verga de mi boca mientras descargaba su leche. No me quedo de otra que tragar. Sentí que era la mejor champagne del mundo.

Pase mi lengua por su miembro en busca de residuos de leche para poder tomarla, ambos sudábamos copiosamente, hasta que el perdió rigidez del miembro. Yo estaba exhausta.

No dijimos nada, nos vestimos y despedimos como si nada. Me sentía fenomenal, ahora me cogía a mis dos jefes y no lo sabían entre ellos.

Al día siguiente recibí un aumento de salario y deje de preocuparme por la vergüenza, sabia que no me despedirían de mi trabajo y ahora tenia a mis jefes a mis pies.

Espero y deseo que este sueño se haga realidad un buen día y poder tenerlos a los dos juntos en la misma sesión.

Saludos desde Panamᅅ.