Historia inedita pero real (2)

Inicie este relato hace 3 años pero por circunstancias de la vida (Un divorcio) no he podido escribir nada mas hasta ahora. Bien con muchos mas ánimos y después de mi cura sentimental vuelvo con ese relato que inicie hace tanto tiempo. Dejo aquí el enlace por si alguien quiere leerlo para seguir el hilo de esta historia.

http://www.todorelatos.com/relato/32387/

Después de esa noche y de mi primer beso con Silvia, a partir de ese momento me pidió que le llamara Sergio y a me llamo por mi nombre Sonia.

Me desvestí y volví a ponerme mi uniforme, mientras lo hacia me pidió que me dejara puesto la ropa interior, Sergio se quedo con la que había llevado antes de cambiarme. Seguí haciendo las rondas que me correspondía, al caminar notaba en tacto en mis piernas de las medias y el roce del pantalón eso me ponía a mil. y mucho mas el recordar lo que me había dicho después de su beso. Acabamos nuestra jornada, durante ese tiempo apenas me había dirigido la palabra, se acerco a mi para invitarme a un café, fuimos juntos a la cafetería de la esquina. Y después de preguntarme si me había sorprendido me invito a su casa.

Vivía relativamente cerca. Era un apartamento pequeño, pero muy funcional. Al entrar en su casa me dijo que fuese al baños asearme y alcanzándome una bolsa , me dijo

Cuando acabes cogé lo de la bolsa y usa todo lo de su interior. Emplea todo el tiempo del mundo te espero fuera.

Asentí con la cabeza y entre en el baño. Mire en la bolsa y no me lo podía creer estaba todo lo que me había puesto esa noche mas cremas de belleza, maquillaje, perfume y una crema depilatoria.

Primero de todo me depile por completo no dejando ni un solo rincón. Me volví a vestir como lo había hecho por la noche.

Una arreglada del todo, vestida, maquillada y perfumada. Me mire al espejo, pude ver a la mujer que había llevado dentro, me sentía mujer, guapa y deseada por un hombre. Salí del baño, llame a Sergio y este mi invito a ir hacia su habitación. En cuanto entre en su habitación. Allí estaba Sergio se había vestido también con ropa de hombre. Me tendió la mano invitándome a ponerme a su lado, así lo hice. Me senté a su lado tomando su mano me acerque a el y nos besamos. Juntamos nuestros labios con leves besitos hasta fundirnos en un apasionado beso en el que se entremezclaron nuestras leguas. El sabor de nuestros labios mezclado con el carmín nos excedía aún mas. Mientras nuestras lenguas se juntaban en una sola.

Sus manos, desabrochaban mi blusa mientras con mi muslo sentía lo duro que la tenia! Como puede ser pensé. Era tan grande y firme y daba un placer infinito solo de imaginar que era para mi pero como es que la tenia. Por fin me despojo de la blusa y al ver mi hermoso sostén de encaje no pudo evitar abalanzarse y morderme los pezones, mientras con una mano intentaba desabrochar mi sostén yo me dejaba besar.

Me tenia desnuda, cuando casi despierto del trance y comencé a desnudarlo, podía ver perfectamente a que se debía su erección llevaba un arnés con una polla descomunal debajo de sus bóxer que realmente era en que había llevado yo por la noche. Nos pusimos de pie a la orilla de la cama, y mientras yo le sacaba su exquisita arma para darle una buena sesión de besos, el deslizo sus dedos hacia mi miembro, húmedo mientras que con la otra mano me sobaba las tetás y daba pequeños pellizcos a mis pezones.

Empecé por besarle el glande y poco a poco lo introducí en mi boca que estaba tan sedienta cuando el me propuso hacer el 69. Sin dudarlo nos acostamos en la cama el debajo y yo me monte dejando mi miembro en su cara, no pude evitarlo pero estaba tan mojada que tenia un pequeño hilo de flujo escurriendo al ver eso me calentó demasiado y sin pensarlo dos veces se la mamaba con fuerza mientras el se tragaba todos mis jugos y lamía sin cesar mi glande e introducía su lengua alternando con sus dedos dentro de mi culo que entraban sin problemas debido a la humedad de mi sexo. Yo introducía mi mano debajo de su arnés para llegar a su clítoris, palpando con los dedos pude descubrir que llevaba puesto uno con una dobles polla que estaba ensartada en su concha. Eso me calentó aun mas.

Así estuvimos, dándonos el mejor sexo oral por unos 20 minutos.. cuando el sintió que casi me venia nos apartamos porque me dijo que quería clavarme, quería sentir lo caliente de mi culo y quería poseerme. Sin pensarlo dos veces se subió y empezó a meter la puntita.. poco a poco, me dolía pero no me importaba despacio para luego cuando yo ya no podía y le gritaba que me la metiera toda, me la metía profundamente y fuerte. Siempre me cogía con fuerza, cambiamos de posición, me subí y comencé a cabalgarlo.

Me encantaba estar arriba de el.. podía venirme con facilidad y el me ayuda porque con su dedo frotaba con intensidad mi polla. Una vez que tenia yo mi orgasmo y que lo mojaba mas de lo que estaba me volteaba y me la metía como de a perrito en esa posición le gustaba porque me sentía mas y así podía yo apretarlo. Me daba unas embestidas que me hacían gritar de placer sintiendo toda su verga dentro de mi.

Seguía el mete saca mete saca tan duro y tan fuerte que no tardo mucho en gritar, síntoma de que se venia y al mismo tiempo me propicio un orgasmo descomunal. Sentí mi semen caliente caía en su pecho mientras mi ano se contraía. Terminamos y después de un breve reposo.. nos dispusimos a seguir amándonos.

A las poca semanas me traslade a su apartamento. Me compre mucha ropa nueva con la ventaja que la podía seleccionar sin vergüenza en el trabajo. Le decía a Sergio lo que deseaba y como mujer lo compraba. Me lo traía a casa donde con toda la impaciencia del mundo de ambos me lo ponía y estrenábamos. En cuanto entraba en casa me transformaba en la mujer de la casa teniéndolo todo a punto para mi hombre que hacia otro tanto.

Un año después de aquello, seguíamos estando juntos. Era mi hombre y yo su mujer.