HIJOS DE LA GRAN PUTA 1º parte

Presentación de los hijos de la gran puta.

Mi nombre es Andrés, soy madrileño y soy mulato. Voy a contaros nuestro caso sexual incestuoso con el fenómeno sexual que es mi madre, Eva.

Esto lo hago con su consentimiento y supervisión. Eva tiene ahora 50 años y es una mujer ninfómana, necesita sexo constantemente desde que era pequeña, o sea que ha nacido para follar.

Y como le dedicaba tantas horas al día al fornicio pues tuvo que elegir como profesión, eso, es una puta vocacional y disfruta con su trabajo, por ello yo y mis hermanos le llamamos “la gran puta” por lo que nosotros somos los hijos de la gran puta. Además desde los 40 debido a la proposición de un productor es estrella del porno.

Eva tiene cuatro hijos, cada uno de un padre diferente:

A mí me tuvo con tan solo 15 años cuando ya llevaba cuatro trabajando y claro por mi color supo que era de un nigeriano que se la folló y que nunca supo más de él. Yo estoy casado y tengo un hijo, mi mujer es negra y sabe el lío que llevamos con mi madre. Soy ingeniero y mi mujer también pero americana y trabajamos en una multinacional. Dice mi madre que me parezco mucho a mi padre en el físico, robusto, grande y con un pollón descomunal.

Después, a los 20 años Eva volvió a quedar preñada en un descuido y tuvo a mi hermana Pepa, al igual que su madre, esta es blanca pero no tiene ni puta idea quien fue el padre. Mi hermana también está casada, es maestra de primaria y actualmente está preñada de su marido.

El tercer hijo de mi madre se llama Adán, nombre que le puso en honor a su padre, el cual fue quien la dejó preñada por capricho de ella, o sea que es su  hijo hermano. Mi hermano Adán tiene 25 años, está soltero y aun estudia y ha salido con una lívido y potencia a mi madre, siempre está empalmado y echa chorros de leche cada vez que eyacula. Vaya huevos que tiene.

Y por último tenemos a María, una adolescente delgada, rubia y chiquita. Digo tenemos porque al putón de mi madre a sus 35 años se le antojó estar preñada por mí, su propio hijo, por lo que María es mi hija hermana. La niña ha salido a mi madre en su ninfomanía aunque ha desarrollado muy tarde y tiene un cuerpo muy infantil, por ejemplo no tiene tetas apenas, solo unos pezones siempre tiesos y duros. María ya está en el instituto.

Nosotros, los cuatro hijos, nos hemos criado viendo a mi madre follar y somos también muy salidos. Todos nos tiramos a nuestra madre pero nunca nos hemos atraído sexualmente entre los hermanos, con la excepción de la pequeña que como es como su madre se folla a todo lo que pilla delante incluido sus dos hermanos, a mi hermana mayor la respeta porque sabe que no le gusta.

Últimamente trabaja mucho pues además de putear hace pelis porno donde siempre hace de madre MILF rodeada de jovencitos.

Descripción de la gran puta

Mi madre a sus cincuenta años es una mujer muy desvergonzada y alegre, como digo una gran puta. Tiene la suerte de que ha ganado y gana mucho dinero con su oficio y a sus hijos nos ha tenido siempre bien atendidos, aunque para muchos nos ha educado de una forma libertina y perversa llenándonos de sexo, cosa que ninguno de los cuatro se lo hemos reprochado.

Cuando no está trabajando está de ocio, con sus amigos o con sus hijos.  En casa no hace nada, se lo hacen todo asistentas que tiene contratadas.

Sus hobby aparte del sexo es ir de marcha y al gimnasio, nunca ha querido tener pareja formal pues es demasiado libre para ello. El amor se lo damos su familia.

Como ya he dicho es ninfómana, además le gusta todo del sexo desde lo más suave hasta lo más guarro, pero lo más espectacular es su cuerpo, un cuerpo que parece que ha sido diseñado para atraer a los hombres y muchas mujeres. Mucha gente piensa que su cuerpo está retocado mediante cirugía estética, pero ni mucho menos, es su puta genética.

La verdad es que parece salida de un cómic erótico, de esos donde exageran bastante los atributos sexuales de las mujeres. Lo tiene todo, y si no atentos a la descripción:

• 1,77 de estatura, 80 kilos de peso.
• Pelo negro aun  sin canas.
• Piel blanca.
• Cara muy guapa, con unos ojos negros y una boca grande, labios gordos y una lengua roja, larga, gorda y jugosa.
• Muchas curvas exageradas, las medidas son 120-60-120
• Las tetas evidentemente muy grandes, respingonas y siempre llenas de leche como si tuviese lactancia, la verdad es que la tiene permanentemente con sus hijos y clientes.
• Unos pezones tan grandes como dedos pulgares con unas aureolas oscuras que destacan en su piel blanca  y unos pezones negros y duros.
• Cintura de avispa
• Caderas anchas con un culazo enorme
• Unos muslos en forma de conos largos y a sus 50 años aun tersos.
• Unas pantorrillas gorditas que acaban en unos pies pequeños para su estatura.,
• Un pubis súper peludo negro, donde hay pelo hay alegría dice ella, pero la parte de abajo se la depila para que se vean bien su vulva. por cierto leva la axila derecha sin depilar con largos pelos negros y la izquierda depilada.
• Con respecto a sus agujeros, tiene un coño como  una fuente en el sentido de lo grande que es y de lo que chorrea. Vulva protuberante con unos labios gordos y salientes. Clítoris gigante, tan grande que se hace pajas como los hombres.
• Un ano tan flexible que le cabe dentro de todo.
• Rellenita, exuberante, jamona, sin barriga, llena de curvas obscenas.

¿Se puede pedir algo más? Imaginadla.

Breve curriculum de Eva.

Hija de una familia humilde, de padre carpintero y madre limpiadora.

Desde pequeña se le veía su afición por el sexo. Al llegar la pubertad era ya una mujerona que destacaba entre todas sus amigas, y además un zorrón. Ella dice que le picaba mucho el coño y necesitaba machos, así empezó a follar prematuramente con todos los chicos del barrio.

A los catorce años se encapricho de su padre que dice que estaba muy bueno y se salió con la suya seduciéndolo y teniendo la suerte de que él era un salido sin escrúpulos que le ponía follarse a su hija a escondidas.

A esa edad ya tenía un cuerpazo, y parecía mayor de edad, la muy golfa decidió dejar los estudios y ponerse a putear con el consentimiento de su padre.

A los quince tuvo su primer hijo, yo.

A los veinte preñada de su segundo hijo pervirtió a su propia madre y la hizo cómplice de sus correrías con su padre. Sus dos primeros hijos fuimos criados por nuestros abuelos mientras ella hacia carrera de putón de lujo.

Cuando los dos primeros hijos éramos más mayores, se independizó de sus padres, aunque aún siguen yendo por casa para follar con ella de vez en cuando. Contrató a sirvientas y se instaló en una casoplón donde no se cortaba ni un pelo follando con sus clientes delante de sus cuatro hijos y las sirvientas.

Al llegar a la madurez, sobre los cuarenta, la lívido le aumentó todavía más y necesitaba que cuando llegaba a casa de trabajar, sus hijos de puta siguieran dándole placer, metiéndole todo lo que podíamos en su coñazo. A veces también las sirvientas. De este modo nos pervirtió a todos y nos convirtió en unos salidos.

Fue cuando por aquél entonces se atrevió a hacer porno llegando a ser una actriz muy demandada por su voluptuoso cuerpo y por estar dispuesta a hacer de todo tipo de sexo.

A sus 50 es una experta en todo lo referente al sexo, le va todo y se corre como una loca llegando a orgasmear montones de veces al día. Le gustan los jóvenes, los viejos, los machos, las hembras, los animales, dar de mamar, los gangbangs, el incesto, el fisting, y las guarrerías escatológicas.

Viste de una forma muy descarada destacando sus encantos que tanto atraen a los hombres. Nosotros nos hemos criado con eso de forma que no sentimos vergüenza cuando nuestros amigos y familiares nos hablan de lo buena que está o lo puta que es.

Todos los días procuramos darle una vuelta los dos mayores que estamos casados para satisfacerla. Los dos pequeños siguen viviendo en su casa y la gran puta de vez en cuando monta orgías con los colegas de mis hermanos o con los amigos de mis abuelos de manera gratuita.

Es incansable, obscena, descarada y desvergonzada. Le dan tres leches que la critiquen.

DOMINGOS DE LUJURIA, PRESUMIENDO DE MADRE.

Desde hace años mi madre descansa de trabajar los domingos y nos los dedica enteramente a sus cuatro hijos, bueno la verdad es que nosotros nos dedicamos a satisfacerla durante todo el día.

El domingo pasado por ejemplo:

Llegamos los cuatro a su habitación a eso de las diez y media de la mañana, ella no se levanta de la cama en todo el día, nosotros le llevamos la comida.

Entramos en su gran dormitorio y la vemos totalmente en pelotas follandose su hinchado coño y su abierto culo con dos grandes dildos. Los mete y los saca hasta el fondo y al hacerlo salen chorritos de caldos de su coñazo que caen en las sábanas impermeables de su cama.

Eva: vaya por fin venís ya hijos de puta. Estoy despierta esperándoos desde las ocho y me he puesto tan cachonda que he tenido que recurrir a mis pollones de plástico.

Andrés: mamá, nos dijiste que no te molestáramos hasta las diez y media.

Eva: ya, pero es que anoche me acosté más pronto porque el cliente que tenía lo dejé no en poco tiempo.

Pepa: venga zorra, deja de meterte esos consoladores que primero hay que desayunar.

Eva obedece a su preñada hija pero para fastidiarla se saca los dildos y se los tira a la cara llenos de flujos.

Pepa: mamá, no seas puerca, que vamos a comer.

Eva: vale, perdona, pero antes ya sabéis, lavaros las manos en el fregadero de mamá.

Mi madre abre sus muslazos y con las manos se estira los labios del coño ofreciéndolo para que uno  a uno metamos nuestras manos en su coñazo lleno de caldos refregándolas contra sus paredes y dejándonoslas limpitas pero con olor a coño que no veas. Así le gusta a mi madre que desayunemos.

Mi hermano pone una gran mesa bandeja al lado de la cama para desayunar. Pero antes mi madre nos pide que nos desnudemos:

La primera en hacerlo es mi hermana pequeña que sólo lleva puesto una camiseta, debajo de la cual nos enseña su delgado y pequeño cuerpo de niña sin tetas a sus 15 años. Tiene el chochito depilado y los pezones ya erectos la muy calentona.

Después me desnudo yo, quitándome los vaqueros y la camiseta dejando colgando mi pollón  negro aun flácido que me llega a la mitad de las piernas. Mi madre intenta echarle mano pero me retiro diciendo que tenga paciencia que hay que desayunar.

A continuación mi hermano Adán que se quita los pantalones cortos y la camiseta dejando al aire su cuerpazo atlético y su polla siempre empalmada mirando hacia arriba.

Por último mi hermana Pepa se quita su vestido premamá quedándose en bragas y sujetador, mi madre le ayuda quitándole el sostén especial que lleva dejando al aire sus tetas gordas llenas ya de leche y sus pezones negros y gordos. Ella se saca las bragas dejando a la vista un peludo conejo repleto de pelos por todas partes.

Eva: niña, va siendo hora que te depiles el coño, que ya mismo vas a parir.

Pepa: ya lo sé mamá pero ya tendré tiempo de tener el chocho al aire, ahora me lo dejo con pelos como a ti te gusta.

Eva: si, la verdad es que me pongo burra lamiéndote la pelambrera y chupándote los pelos del culo que huelen a gloria.

Después desayunamos bastante y nos fumamos un cigarro todos menos Adán que no fuma. Una copita de champan y a follar.

Empieza mi madre agarrando a Adán por sus gordos huevos y tragándose su polla hasta el fondo de su bocaza.

En seguida la mi ninfómana hermanita se amorra a su  coño bebiendo los permanentes jugos de su puta madre, le encanta su  sabor.

Mi madre se tiende en la cama y abre sus piernas al límite, mi hermana Pepa y yo cogemos uno de sus cantaros y nos ponemos a beber leche de sus pezonazos como si fueran biberones.

María: joder mama, ya se te ha puesto la pipa empalmada, me la como…..

Eva mientras le mamamos sus grandes tetas apretándolas para ordeñarla con una mano me agarra el cipote morcillón y empieza a jugar con él girándolo como un ventilador. Y a mi hermana Pepa le soba la barriga primero para después tirarle de los pelos del coño.

Adán se amorra a una de sus piernas sobando sus gordos muslazos y chupando su pie y tobillos.

Eva: Pepa, siéntate en mi boca que me encanta comerte ese chocho peludo de preñada que tienes.

Así hace mi hermana suspirando de gusto.

Pepa: joder madre, que honda me metes la lengua guarra.

Con su mano libre la madre le agarra la polla a mi hermano Adán y le pajea, enseguida el puto semental empieza a lanzar chorros de semen mojándonos a todos. A la vez la vieja se corre en la boca de su niña rubia.

Pepa: ostias madre, ya empiezas a correrte lanzando chorros, de aquí a que termine el día dejarás la habitación inundada.

En cuanto acaban de correrse mi hermano y mi madre, mi hermana María con la boca chorreando flujos dice:

María: mamá, vamos a ponerle a Andrés el cipote gigante.

La verdad es que yo tengo un nabo grande como los negros pero tiene una peculiaridad, cuando siguen estimulándolo mucho y me excitan cada vez más, mi polla sigue creciendo, creciendo, y engordando. Hinchándose de sangre a veces entre las dos haciéndome guarrerías han conseguido llegar a ponérmela a 60 ms de larga y 18 de diámetro.

Hoy mi madre me ha puesto su coñazo en la boca echándome leche de sus tetas mientras mi hermanita me ha metido el puño en mi culo y con la otra mano me soba el capullo hinchado llegando a meterme un dedo dentro. Eso me pone a mil, pero no ha llegado a 60, sino a 40 cms de estaca que una vez dura ha aprovechando mi madre para hincársela en su interminable vagina. Cuarenta centímetros de pollón en su vientre. Ella puede con más.

Pepa por detrás le mete el brazo en el ojete abriendo sus dos nalgas gordas. Mi madre vuelve a correrse con la larga lengua fuera.

Eva: agggh, me reventáis cabrones, me corro otra vez.

María y Adán aprovechan para escupirle todo lo que pueden dentro de su boca. Al orgasmear salen chorros de leche de sus gordos pezones sin ni siquiera tocarse.

De esa forma empezamos, con una gangbang para mi  madre, luego a lo largo de todo el día, hasta las doce nos vamos turnando los cuatro follando a mi madre sin dejarla descansar ni un ratito. Come mientras la follamos.

Una hora cada uno de sus hijos gozando de la más puta de todas las putas, del cuerpo perfecto para gozar. Yo la empalo con mi pollón por la boca haciéndole vomitar pues casi le llega al estómago.

Mi hermana Pepa se mea en su boca bebiéndoselo todo.

Eva: por cierto hija, cuando vayas a parir quiero  que me duches con tu líquido amniótico, me encanta.

Mi hermano Adán se vacía en todos sus agujeros un montón de veces hasta que mi madre le deja los gordos cojones secos.

Y mi hermana pequeña, la zorra se tira con ella dos horas en vez de una, haciendo con su puta madre de todo. La niña se corre como loca cuando mi  madre la folla con su  largo clítoris el chocho y el culo y le pellizca fuerte los pezones mientras se babean las bocas.

Y así todos los domingos. Al final del día puede que haya tenido 30 orgasmos mi madre y la cama está llena de semen, flujos y meados.

Esta mujer no se cansa nunca.

continuará...