Hijo cuida de su madre
Un hijo cuida a su madre
De repente se origino un tumulto y se oyeron un montón de gritos, fuera del bar se monto una pelea, una de las muchas que ocurren en fiestas, yo estaba hablando con una chica, así que no hice mucho caso, hasta que un amigo desde la puerta grito:
- Lucas!!! es tu madre!!
me dio un vuelco al corazón y un subidón de adrenalina, no recuerdo bien lo que pasaron en esos 15 segundos, pero lo que vi saco la una bestia de mis adentros que la gente conocida se asusto. Un tío había empujado y pegado a mi madre, que estaba tirada en el suelo chillando e insultando histérica. Un amigo se metió y estaba pegando a otro tío, y el que le había pegado a mi madre era sujetado por un paisano, de la furia que tenia dentro fui directo a el y le pegue un puñetazo en la cara que le dejo desorientado, se echo hacia tras y le di otro que le tumbo, según se caía fui a darle una patada. Pero entre los vecinos me sujetaron y aunque lo intente no pude, mientras mi amigo daba buena cuenta del otro tío. Volví donde mi madre que estaba sentada en la acera llorando la abrace y diciéndole que todo había terminado.
Un payaso debió tocar el culo a mi madre, esta le pego un bofetón y ya se monto la marimorena. Acabamos en el centro de salud y poniendo una denuncia en comisaria, mi madre se llevo la peor parte con la pierna escayolada y un susto muy gordo.
Deciros que me llamo Lucas y tengo 26 años y mi madre se llama Asunción, pero siempre le llamamos Asun. Vivimos juntos desde que el capullo de mi padre nos abandono por otra mujer, pero gracias al buen puesto de mi madre y que la familia tiene varios negocios que dan dinero nunca nos ha faltado de nada. Mi madre aparte de ser la mejor madre del mundo, es una señora de cincuenta años que esta estupenda, siempre ha sido muy coqueta y de cuidarse mucho. Es una mujer que atrae las miradas de los hombres.... y de mis amigos, al principio me molestaba, hasta que tuve que asumir que tenia una madre que estaba “muy buena”.... como decían mis amigos.
Asun tenia una melena corta negra que contrastaba con su blanca piel. Tenia cara redondita con ojos claros y una nariz con “carácter”, mas bien grande pero que le daba un toque sexy, por lo menos a mi eso me parecía Era delgada con un cuerpo muy agradecido gracias al gimnasio, pero lo que no había conseguido detener era el paso del tiempo, y las caderas le habían ensanchado un poco. Tenia un pecho de tamaño medio con un culito generoso, y unas piernas estilizadas, si os digo la verdad mejor que con algunas chicas con las que me había acostado.
Era verano, y por culpa del incidente no pude marchar con unos amigos de vacaciones. Aunque mi madre insisto en que fuera, pero no me apetecía dejarla sola con mi tía Los primeros días andaba algo dolorida y fueron los peores, no lograba dormir bien todo lo ocurrido le había asustado y no le gustaba que la dejara sola. Me tuve que hacer cargo de ella, por suerte venia una chica a limpiar dos veces a la semana y mi atención se centraba en ella y en tener todo mas o menos ordenado. Lo mas pudoroso fue tener que ayudarla ha cambiarse de ropa, al principio pasamos mal rato los dos, estuvimos nerviosos hasta que se volvió una rutina. Con la pierna escayolada le tenia que ayudar a quitarse y a ponerse los pantalones, faldas o braguitas, la primera vez de la vergüenza miraba a otra parte por no verle el sexo, después de un par veces pase la mirada furtiva viendo los pelos que ocultaban la raja de mi madre, desde que era pequeño no la veía desnuda.
El tercer día se ducho ella sola, no quería que le ayudase por que decía sentirse una inútil, pero no le fue muy bien y salio malhumorada. Así que la siguiente vez que se ducho tuve que ayudarla. Salio con una bata de la habitación y con las muletas vino al váter donde se quito la bata quedando desnuda. La ayude a ponerse una funda especial que compre en una ortopedia para que no se le mojase la escayola y se metió en la bañera.
- Lucas, que ya puedo yo sola.- Dijo mientras cogía la ducha.
- Mejor te ayudo yo.- Insistí
Regule la temperatura y con un chorro muy fino mientras ella estaba recostada y con la pierna en alto apoyada en el borde fui mojando el cuerpo con cuidado. Empece por los hombros, pasando por los pechos y bajando por la tripa, le moje ligeramente el sexo y pase a la pierna. Para que no salpicara le pasaba la mano por el muslo, mientras inconscientemente le hacia un masaje. Cogí el gel me eche en una mano y se lo pase a mi madre. Mientras yo lo pasaba por la pierna ella se lo restregaba por el cuerpo, llegue al muslo pero en cuanto tuve el sexo cerca pare. Y entonces tuve una de las escenas mas eróticas de mi vida, se bajo la mano al sexo y se limpio un poco. Me dio un cosquilleo por el cuerpo que me puso nervioso, creo que mi madre noto mi nerviosismo y sin decir nada le pase otra vez el agua para quitar el jabón, no se si mi imaginación me jugo una mala pasada pero me pareció ver que los pezones se le habían puesto duros, cuando llegue con el agua al sexo, se volvió a pasar la mano para quitar bien el jabón y después volví a pasar la mano por las piernas. Estaba como un flan,, la mano me tembló un poco mientras yo intentaba disimular.
- Ahora pasame la esponja por la espalda.
Le ayude a incorporarse, se puso de espaladas y frote suavemente la espalda, cuando la esponja se secaba la volvía a mojar y seguía Lo que mas me gusto fue frotar el culo viendo moverse la carne a cada pasada. Le eche jabón a la esponja y le jabone la espalda, ella para acomodarse se apoyo contra la pared dejando el culo ligeramente salido y no se por que se me ocurrió mojar otra vez la esponja con el jabón y estrujarla mientras caían las gotas por el trasero de mi madre, vaya culo!!! tenia mi madre. Termine de aclararla y le ayude a salir de la bañera, mientras mantenía el equilibrio le pase una toalla para secarse, a duras penas se manejaba así que le tuve que secar la espalda y la pierna.
- Ahora me ayudas a echarme crema para el cuerpo?
- Si claro...
- Coge ese bote marrón y vamos al cuarto.
Así hicimos, ella fue desnuda con las muletas y yo detrás Se sentó en la cama y se dio crema por las tetas para luego bajar por el vientre. Luego tuve que darle yo por la pierna, comencé desde el pie y fui subiendo con las dos manos por la pierna, hasta llegar al muslo y no se si fue inconscientemente pero llegue hasta la ingle llegando a notar los pelitos del sexo. Luego me puse tras ella y le toco el turno a la espalda.
- Mucha gracias hijo!! que suerte tenerte en casa.- Dijo alegremente.
- Tu lo que necesites, pide....
- Ayúdame ha vestirme.- Dijo guiñando un ojo.
Tanto a ella como a mi nos gusto, mi madre me pedía que le bañase todos los días, cosa que a mi me encantaba poder pasar mis dedos por su cuerpo. El vivir una situación tan intima nos fue uniendo, teníamos mas confianza y nos contábamos cosas que antes ni se mencionaban, me alagaba diciendo que era un caballero y muy bueno y que era el hombre de la casa. Yo también la piropeaba, diciendo lo guapa que se levantaba por las mañanas, y que era una suerte tener una mujer así de madre. He decir también que algunas noches me masturbe pensando en ella, era el centro de mis fantasías eróticas Así pasaron tres semanas, el ultimo día antes de ir al medico se encontraba de muy buen humor, comenzó a bromear que alguna amiga suya ya le gustaría estar en su situación, yo le respondía que era hombre de una sola mujer, mientras reíamos Al ayudarle a entrar en la bañera le di un cachete diciendo:
- Venga señora, dese prisa!!
- Uy!! no pegues el culo gordo de tu madre.
- Que dices de gordo!!, ya le gustaría a muchas mujeres mas jóvenes tener ese culo.
- Que cosas dices tonto....
Continuamos hablando entre bromas mientras yo la bañaba, hasta que cogió la ducha y me empapo de agua, soltando una carcajada.
- Seras.... cabrona...
- Oye!! un respeto a tu madre.- Dijo entre risas.
Me levante para quitarme la camiseta mojada y aprovecho para mojarme el calzoncillo mientras seguía riendo.
- Eres mala!- Le dije en broma.
- Anda quítate la ropa, que te vas a enfriar.
Me quite la camiseta, y luego el calzoncillo quedando completamente desnudo. Fijo su mirada en mi polla que la tenia algo gruesas y dijo:
- Hacia años que no te veía desnudo....
- Pues yo a ti desde ayer.- Le corte.
- Si, la verdad que conoces todo mi cuerpo a la perfección... venga métete a la bañera.
Me senté detrás de mi madre, me abrí de piernas y ella se acomodo en mi torso y desde atrás le mojaba el pecho y la tripa, mientras apoyaba la cabeza en sus hombros. Podía sentir su respiración, nuestras bocas estaban muy cercas eso hizo que la polla se me pusiera medio erecta, mi madre al notar mi miembro en su espalda se le endurecieron los pezones. Cogí la esponja para jabonar, le pase por el torso rozando los pechos, luego baje directamente al vientre y tras jugar un poco volví a echar el gel y moje la esponja. Puse mi mano a la altura de su barbilla, estrujando la esponja le empape las tetas de jabón mientras ella se manoseaba y restregaba el jabón, sin darse cuenta se abrió de piernas, y repetí la jugada, yo le tiraba el jabón y ella se pasaba la mano. Se acabaron las risas, los dos disfrutamos en silencio, esta vez la que estaba algo nerviosa fue ella, pude sentir como le temblaba el cuerpo.
La paja de esa noche fue especial, estaba tan excitado que no podía dormir y tuve que hacerme otra paja, mi madre no se me iba de la cabeza, deseaba poseer su cuerpo. Pero no era el único, ella también tuvo una noche placentera, mojo las bragas mientras dormía A la mañana siguiente me disponía a ayudarla y como todos los días, fui a quitarle las bragas que se resistieron por los flujos que se le habían secado pegándose en su vello. En cuanto le retire la prenda vi que estaba manchada de un liquido blanco reseco y el olor fuerte del sexo llego hasta mi nariz, hasta a ella le llego el olor y paso un mal rato. Después de ayudarla a vestirse, me fui al váter a dejar en la cesta de la ropa sucia la braga, y no pude resistir a olerla, “mmmmmm”, “que bien huele” pensé
En el medico que le dijeron que ya le podían quitar la escayola, tenia que tener cuidado la primera semana, pero ya estaba bien. Desde que salimos de la consulta mi madre se dio cuenta que mientras conducía el coche iba serio, “ya no podría bañar a mi madre” pensaba....
- Que te pasa cariño?- Pregunto mientras me acariciaba el pelo.
- Nada.-Respondí seco.
- Cuéntame anda....
Tras un rato en silencio hable:
- Estas ultimas semanas he estado muy a gusto contigo, cuidándote y todo eso.
- Cariño, tu madre sigue aquí, no se va a ir a ninguna parte.
- Ya... pero ya no me necesitas.
- Ahora te necesito mas que nunca.
Esas palabras me dieron un vuelco al corazón, no respondí intentaba no distraerme mas de lo necesario mientras conducía.
- Como te has portado ha sido estupendo, te has portado como un hombre. Me has cuidado y me has mimado, me has hecho sentir especial. Se que puedo contar contigo, y tu por supuesto puedes contar conmigo.
No sabia si esas palabras iban con segundas intenciones, mi mente calenturienta interpretaba lo que que yo quería escuchar.
- Por mi culpa te has quedado sin vacaciones, había pensado en marchar los dos juntos de vacaciones unos días, que te parece?
- Genial mama!! a donde?
- Había pensado ir a un hotel a la costa, te parece?
Todo cambio, estaba muy ilusionado en marchar y aprovechar los últimos días de vacaciones junto a ella. Cuando llegamos a casa, miro en Internet e hizo unas llamadas, en 30 minutos ya teníamos reserva de avión y hotel, no reparo en gastos, como dijo ella “eran unas vacaciones especiales y teníamos que disfrutarlas”. En dos días ya estábamos en el hotel, era un cinco estrellas, tenia de todo y la habitación era de las mejores. Muy amplia, con cama de matrimonio y una terraza separada por un muro de las otras para mantener la intimidad.
Bajamos al buffet del hotel a comer mientras planeábamos lo que íbamos hacer, a mi madre se la veía muy ilusionada, no paraba de hablar y reír Mientras hablábamos me cogía de la mano encima de la mesa, a mi me parecía raro sentir ese afecto en publico.
- Te has fijado hijo como nos miran?
- Te miran a ti mami, que esta muy guapa.
- No me llames mami, llámame por mi nombre.
- Te gusta mas?
- Si, estamos de vacaciones como una pareja mas, eeh? Lucas?
- Vale señorita Asun- Respondí con rintintin.
- Señorita no, señora. Que estoy con el hombre mas guapo.
Reímos al unisono, la complicidad era total, parecíamos mas una pareja que una madre y un hijo. Después de comer dimos una vuelta por el pueblo, no andamos mucho por que se cansaba con la pierna, así que paramos en una terraza a tomar un café.
- Lucas deja de mirarme así..
- Perdona, es que estas guapísima con ese vestido.
- Gracias!- Respondió sonriendo.
- La verdad que estas guapísima siempre, ha sido una suerte ver ese cuerpo tan bonito.
- Bueno este cuerpo va desmejorando con la edad.
- Yo creo que me gustan mas los cuerpos maduros que de las jóvenes, fíjate! Echare de menos el bañarte.
- Vivimos juntos Lucas, cuando quieras me puedes ayudar a bañarme, no tenemos por que dejar de bañarnos juntos. Yo sin escayola te podría bañar como cuando eras pequeño.
Me agarro de la mano y me dio un beso en la mejilla diciendo:
- Te quiero cariño, eres el amor de mi vida. Lo supe en cuanto te abalanzaste contra aquel cafre y después cuidaste de mi todo este tiempo, se que siempre estarás a mi lado. El tiempo pasara, tu harás tu propia vida, pero siempre me tendrás en casa para lo que necesites.
Las palabras de mi madre quedaron grabadas a fuego en mi mente.
- Yo también te quiero Asun.
Volvimos al hotel, el resto de la tarde la pasamos en la piscina, como mi madre todavía andaba algo torpe la tuve que ayudar un rato en el agua, aprovechando a tocar su cintura y caderas con el beneplácito de ella. Cuando subimos a la habitación para ducharnos y vestirnos para la cena, llamaron de recepción por una equivocación con la reserva, mi madre se fue duchando, a mi me dio rabia por que quería estar con ella, y baje algo malhumorado Tras 30 minutos de espera por fin me atendieron, arregle el asunto y volví raudo y veloz a la habitación, me encontré a mi madre ya preparada.
- Asun!! estas fantástica
Se había puesto un vestido negro hasta las rodillas que marcaba su silueta con unos zapatos de tacón a juego. Me acerque la cogí de la mano y le volví a repetir lo guapa que estaba, me respondió con un abrazo de agradecimiento, pude notar sus tetas contra mi pecho y el olor del perfume en mi nariz. Se retiro y me dijo.
- Te apetece que cenemos en la habitación? Una cena romántica?
- Perfecto!!.-Respondí entusiasmado.
- Date una ducha y ponte guapo para tu mujer.
Llamamos al servicio de habitaciones, pedimos un par de platos de picoteo y sushi. Para beber una botella de vino reserva y champagne. Mientras lo traían me di una ducha y me vestí para la ocasión, con unos pantalones cortos y una camiseta pegada al cuerpo. Nos montaron la cena en la mesa de la terraza, les dio una propina y nos sentamos abriendo a botella de vino.
- Hagamos un brindis.-Dijo mi madre mientras llenaba dos copas.
- Por nosotros?
- Si, por nosotros y nuestras vacaciones románticas
Juntamos las copas dimos un trago y comenzamos a cenar, fue un momento mágico, con una temperatura agradable bajo las estrellas y el sonido de la orquesta del hotel de fondo, con una hermosa mujer y una charla animada. Acabamos con la comida y casi toda la botella, a mi madre le entro la risa floja, no se si por el vino o por que estaba igual de nervioso que yo.
- Asun te han salido coloretes.
- Sera por el vino.-Respondió sonriendo.
- Te apetece bailar?
- Uy! que sorpresa Lucas!!- Exclamo- Sabes bailar.
- No mucho, pero contigo seguro que lo hago bien.
Me levante y le extendí la mano, acepto la invitación La agarre de la cintura y ella me paso las manos por los hombros, me costo coger el ritmo suave de la música pero con la ayuda de ella todo fue mas fácil Nos mirábamos a la cara serios, ninguno decía nada, sentía su aliento en mi cara. Me arme de valor y fui a dar un beso y justo en ese momento puso su cabeza contra mi pecho, sentí la calidez de su cuerpo contra el mio, en ese instante me sentí el hombre mas afortunado del mundo. La apretaba de la cintura contra mi cuerpo, buscando que sintiera mi bulto, incluso llegue a posar mis manos en su culo. Bailamos dos canciones sin decir nada, rozando nuestros cuerpos calientes hasta que ella me dijo.
- Lucas te quiero....
Se aparto, cogió la botella y la vació en las dos copas, me dio una y la otra se la bebió de un trago. Se apoyo en lo que era el muro del mirador del balcón del balcón, mirándome fijamente, esperando a que me acercase. También bebí de un trago la copa de vino y me acerque a ella.
- Te quiero Asun.
Le acaricie el rostro, le retire el pelo que ondeaba por el viento y acerque mi boca a la suya, hubo un momento de duda, nos quedamos a medio camino mientras sentíamos la respiración Junte mis labios con los suyos y le di un pico, le di un segundo beso que fue correspondido. El tercer beso que le di, abrió los labios sintiendo la humedad de su boca. Nuestras lenguas se rozaron sintiendo una calentura en el estomago que nunca me había tenido, nuestros cuerpos temblaban de la excitación mientras que le agarraba de la cintura. Nos besamos con dulzura y con mucho amor, después de cada beso nos mirábamos y nos provocaba una sonrisa tonta. Tras abrazarnos otra vez con una mano pase la mano por su pecho, con la yema de los dedos roce el contorno de las tetas, sentí como tenia los pezones duros, así que le apreté un pecho provocando un pequeño gemido. Baje la mano por su tripa hasta llegar a su sexo, volviendo a pasar con delicadeza los dedos, acaricie el sexo por encima del vestido consiguiendo que mi madre abriera las piernas y con las manos se subiera despacio el vestido hasta la cintura. Tenia las piernas abiertas, los muslo blancos y tersos, con un tanga con bordados donde se le veían los pelos. Me puse frente a su sexo para tocarlo con los dedos, mientras ella seguía sujetando con las manos la falda del vestido y había echado la cabeza hacia atrás sumisa recibiendo placer. Le agarre de los muslos metí la cabeza y le bese en el sexo, ella gimió mientras le comía el sexo por encima del tanga negro, el calor y el olor que desprendía me sobre excitaba. El tanga se le humedeció, no se si por mis babas o por sus fluido.... o por ambas.
Me aparto con la mano y sin dejar de mirarme camino hacia a la habitación, cuando llego a la altura de la puerta, se deslizo las tiras del vestido por los hombros y lo dejo caer, camino hasta la cama con los zapatos y la ropa interior, estaba de infarto, nunca había conocido a una mujer tan erótica y sensual Se sentó en la esquina de la cama abierta de piernas y apoyada con los brazos hacia atrás. Me arrodille , junto las piernas para quitarle el tanga y las volvió abrir, ante mi tenia la raja de mi madre abierta de par en par. La tenia brillante y muy mojada, metí la boca y le comí el coño mientras gemía y decía mi nombre.
- Lucas.... siiii......me vuelves loca... mmmm....
Le comía el sexo despacio, saboreaba cada liquido que salia de su raja, pasando la lengua por los labios vaginales, mordisqueando el clítoris y metiendo la lengua lo mas profundo posible. Cuando le chupaba la zona del clítoris y le metía un dedo era cuando mas gozaba.
- Mete el dedo... que me gusta..... mmmmm... como me pones......
Se agarro la piernas y puso el culo en pompa, le agarre del culo y le comí el ano mientras jugaba con el dedo. Cuando termine, me desnude y me agarre la polla tiesa con la mano, mi madre se incorporo y se soltó el sujetador, cogió mi polla y jugo un rato con ella. Se la paso por las tetas, mientras dejaba caer saliva a los pezones y deslizaba la polla. Acerco la boca y lamió el capullo, jugo un rato hasta que se la metió en la boca y tras jugar un rato dijo:
- Cuantas ganas tenia de chuparte la polla..... esta muy rica….
Mientras me comía la polla yo le tocaba una teta, las tenia algo caídas que le daban aun mas morbo, con unos pezones medianos y duros. Se deleito un buen rato, se la metía hasta al fondo y jugaba con su lengua, luego recorría la polla con su lengua y me chupaba los huevos.
- Mmmm... que caliente esta... como me gusta...-Dijo mientras me pajeaba con la mano y me miraba a los ojos.
No decía nada, a duras penas mantenía el equilibrio de la excitación. Ver a mi madre disfrutar de mi polla mientras me hablaba me volvía loco. Paro de chupar, se levanto y me beso en la boca, con una mano me indico que me tumbara en la cama, me puse boca arriba ella acerco su coño a mi polla y se lo restregó mientras gemía de placer. Nunca olvidare la primera vez que penetre a mi madre, se puso de cuclillas sobre mi miembro erecto, con una mano de abrió los labios vaginales y con la otra se ayudo a introducir la polla, note la raja húmeda y caliente mientras la polla se deslizaba con facilidad. Ver a mi madre abierta de piernas con los zapatos de tacón cabalgando sobre mi polla me haría tener una corrida enorme, su coño abierto de par en par mientras la polla se introducía y el vaivén de sus tetas me hacían agarrarme fuerte a la cama mientras gemia de placer. Mi polla se lleno del liquido blanco y viscoso del sexo femenino y ella no dejaba de jadear:
- Aaahh,,, sisisiii,,, aaahh... me corro... me corroooo....mmmmm
- Ahhh... yo también Asunnn.... yo tambien.....
Con un rápido movimiento, se quito de la polla y me puso el coño en la cara mientras se termino de masturbar y correrse gritando de placer. De su sexo salio liquido que me empapo la cara, yo me corrí de inmediato sin que me tocara y de la excitación puso mi cara en su coño saboreando los flujos Mi semen fue a dar a su espalda, al notar el liquido calentito, se echo la mano a la espalda y con el dedo cogió un poco, para después meterselo a la boca. Estábamos exhaustos, nos abrazamos mientras nos besamos y nos dijimos lo mucho que nos queríamos... pasamos un rato tumbados,mientras le acariciaba el cuerpo.
- Asun ha sido el mejor polvo de mi vida.
- El mio también cariño....
- Pero una cosa... no me he puesto condón...
- No te preocupes, que sigo tomando la píldora para la regla.
- Vale mejor.
No nos movimos de la cama en toda la noche, hasta dormirnos profundamente después de hacer el amor dos veces mas.