Hija insatisfecha

Una joven consigue por fin, a sus 30 años, cumplir un profundo "deseo insatisfecho"... Que su padre la embarace...

A mi hija la vino el periodo muy tarde, con lo que en ese momento era una larguirucha, que media 160 cm y pesaba 50 kg, sin ningun atractivo....

Sus amigas de su misma edad estaban más desarrolladas que ella y tenían mucho más éxito con los chicos, ella era el "patito feo" del grupo...

Mi hija, la pobre, ligaba menos que los gases nobles...

Todo ello contribuyó a que apenas quisiera salir y pasara mucho tiempo en casa oyendo música y bailando sola...

Yo soy traductor y trabajaba en casa y mi mujer era enfermera y trabajaba en una Residencia, con un horario por turnos, con lo que, dependiendo de sus turnos a mi me tocaban muchas veces todas las labores de la casa, incluido el cuidado de nuestra única hija, desde que nació...

Debido a esto, la había bañado o ayudado a bañarse muchas veces, con lo que había seguido muy de cerca el desarrollo de su cuerpo...

Esto había establecido un grado de confianza total entre mi hija y yo, de tal manera que según fueron pasando los años, ella seguía sin sentir ningún pudor en estar desnuda delante de mi...

Se desnudaba delante de mí con la misma naturalidad que lo hacia delante de su madre...

Ella a mi también me había visto desnudo muchas veces y de pequeña incluso nos duchabamos juntos, cosa que según había ido creciendo yo lógicamente había dejado de hacer...

Pero, aunque no nos ducharamos juntos, lo que sí compartíamos era el baño, porque era el único que teníamos, con lo que, esto unido a su falta de pudor, hacia que nos siguiéramos viendo muchas veces desnudos al entrar o salir de la ducha y entrar el otro al baño, para lo que fuera..

Incluso muchas veces, sobre todo en verano, cuando terminaba de ducharse y darse una locion que se dan las mujeres en todo el cuerpo, seguia haciendo sus cosas (secarse el pelo y recoger la ropa sucia) completamente desnuda, para, segun ella, dar tiempo a que su piel absorbiera la crema...

En este contexto mi hija había ido creciendo y yo conocía perfectamente su estado de desarrollo. En su caso, de falta de desarrollo...

Ese retraso en su desarrollo la había creado una serie de complejos que yo en todo momento trataba de hacer lo posible por ayudarla a superarlos...

Cuando por la noche nos sentábamos los tres o los dos en el salón a ver la tele, se acurrucaba a mi lado, yo la abrazaba y la llenaba de caricias, cosquillas y besos en la cabeza, frente y cara, cosa que a ella la encantaba y la hacia feliz...

Cuando oía la música de su tocadiscos, muchas veces iba a su habitación y bailaba con ella, suelto o agarrado, según fuera la canción...

Esto a ella también la encantaba y muchas veces cuando estábamos solos en casa, iba a buscarme para que bailará con ella alguna canción que la gustara especialmente...

En esa edad, cuando bailabamos agarrados y muy juntitos, que era como a ella la gustaba bailar los bailes lentos, abarcaba su cintura con un solo brazo, era muy delgada, sin nada de pecho ni de culo...

Ella se pegaba a mi, rodeaba mi cabeza con sus brazos, apoyaba la suya en mi pecho y dejaba que yo la llevara... se relajaba totalmente...

Esto fue creando un lazo de cariño, amor y dependencia entre nosotros, que nos uniría para toda la vida... no podíamos vivir el uno sin el otro...

Su madre, evidentemente también hacía todo lo que podia para animarla, la ayudaba en todas las cosas de mujeres, compraban ropa juntas, charlaba mucho con ella, vamos que tenian una muy buena relación madre hija, pero la relación de mi hija conmigo era mas intensa, mas intima...

Yo era su padre, su mejor amigo, su confidente y sobretodo, su complice...

A partir del momento que la vino la regla, su cuerpo comenzó a cambiar, echó algo de pecho y cogió algo de carnes, pero también pegó el estirón, con lo que una cosa neutralizo la otra y hasta los 18 años siguió siendo la larguirucha de siempre...

En esta etapa, hasta los 18, lo pasó muy mal, todas sus amigas se echaron amiguinos, menos ella...

Esto la hizo más retraida aun y la acerco mas a su mejor amigo, con el que siempre podia contar, el que siempre estaba alli para ella, el que no la negaba nada... su padre...

Y yo trate, por todos los medios, de llenar el vacio que la habian dejado sus amigas...

Ibamos al cine, unas veces con su madre y otras veces, las más, solos...

Jugabamos al padel, que nos encantaba a los dos, saliamos a correr juntos..., vamos que haciamos todo lo que puede hacer una pareja de amigos o... de novios...

Porque asi es como mi hija empezó a verme por aquellos, complicados años de su adolescencia... como su novio...


Un dia que llego muy enfadada, porque un grupo de chicos la habia vacilado, yo tratando de consolarla la abrace y comence a darle besos, como hacia muchas veces, pero esa vez, uno de mis besos, por causalidad, fue en sus labios... un piquito...

Mi hija me miró con sus ojos iluminados por la ilusión, supuse que ella pensó que la habia besado en los labios intencionadamente, la gustó y me pidio que la volviera a besar en los labios otra vez...

Yo nunca la negaba nada y esa vez no iba a ser la excepción, asi es que la volví a dar otro beso en los labios, esta vez conscientemente...

Ella lo recibió con los ojos entornados y los labios entreabiertos, fueron solo unos segundos de contacto de nuestros labios, pero para ella era su primer beso deseado y para mi un error, porque a partir de ese dia, cada vez que se presentaba la ocasion, me pedia que la diera un piquito y... yo nunca la negaba nada...

A partir de los 18 años su cuerpo empezó a cambiar..., fue cogiendo carne, carne bien distribuida... se llenó de curvas... tetas, culo, caderas... para convertirse a los 19 en toda una mujer...

Pero, a partir de los 19 no solo empezó a cambiar su cuerpo, sus hormonas también comenzaron a hacer acto de presencia...

No era ningun bellezon, pero por fin habia dejado de ser una larguirucha desgarbada y se habia convertido en una joven normal como las demas jóvenes de su edad...

Pero aunque ya estaba físicamente en igualdad de condiciones que sus amigas, ahora era a ella a la que no la apetecía ligar, no necesitaba hacerlo...

Para ella solo existia un hombre, el unico que nunca la había ignorado, que siempre habia estado a su lado... su Padre...

Evidentemente yo no tenia ni idea de esta forma de pensar de mi hija, pero no tadaria mucho en empezar a darme cuenta que algo habia cambiado en ella...

Nosotros seguiamos con nuestras costumbres como siempre, pero yo empecé a ser consciente que algo estaba cambiando y suponia que mi hija también, pero ninguno de los dos estábamos dispuestos a dejar de hacer lo que nos gustaba hacer y veniamos haciendo, en algun caso, desde hacía años...

Cuando nos sentábamos a ver la tele, ella seguia acurrucandose a mi lado y yo seguia haciendo lo mismo de siempre, pero ahora cuando la acariciaba y la hacia cosquillas, me topaba con sus tetas, tapadas por una ligera camiseta en la que se traslucian sus oscuros pezones y si acariciaba sus piernas ya no eran aquellas piernas flacuchas, eran unos muslos tersos y suaves...

Entre los besos en la cara, la cabeza y la frente, habian empezado a "colarse" piquitos, que cada vez eran menos piquitos y mas besos en los labios, que a ella le encantaban y a mi empezaban a "incomodarme"...

Una de las cosas que me acabó de convencer que ella era consciente de que algunas de las cosas que hacia conmigo no eran correctas, fue que cuando estaba su madre se cortaba y actuaba de forma distinta a como lo hacia cuando estábamos solos...

Con lo que nuestra complicidad se hizo mas manifiesta que nunca, ya que los dos actuabamos de forma muy distinta cuando estaba su madre que cuando estabamos los dos solos..

Cuando estaba su madre, ella actuaba como la niña mimosa y mimada por su padre, que habia sido siempre, mientras que cuando estabamos solo, cada vez mas, actuaba como la adolescente coqueta, provocativa y seductora en que se estaba convirtiendo...

Donde ese cambio se hizo mas evidente fue cuando bailabamos...

Cuando bailabamos un baile lento y la abrazaba, sentia sus tetas en mi pecho, y los "inocentes" besos del salon los trasladamos también a este entorno y aqui comenzaron a ser cada vez menos inocentes...

Con aquel "nuevo cuerpo" entre mis brazos y aquellos besos, mis hormonas tambien comenzaron a alterarse y tenia que hacer verdaderos esfuerzos para contenerme y no dejarme llevar por mis mas bajos instintos..., pero mi hija, cada vez me lo ponia mas dificil...

Era evidente que nuestra relacion padre-hija habia entrado en una fase distinta, mucho mas intima, mas agradable, pero también mas peligrosa...

Mi hija habia decidido pasar al ataque, ya casi sin ningun disimulo...

Yo ante esta situación, no tenia mas remedio que tomar una decision y dada la relación que tenia con mi hija desde siempre, no podia hacer otra cosa que seguirle el juego...

Decidí no tomar ninguna iniciativa por mi parte, no traspasar ninguna linea roja, pero disfrutar de todas las que mi hija decidiera traspasar...

Esto hizo mas evidente que nunca nuestra complicidad para vivir dos roles padre-hija distintos, uno, el normal, cuando estabamos los tres juntos y otro muy distinto cuando estábamos los dos solos...

Habia cosas que ya habian pasado a ser normales y habituales entre nosotros... La primera fueron los besos... Ya no habia prejuicios, nos besabamos como dos enamorados.. Con lengua y comiendonos la boca, cada vez que nos apetecia...

Nuestros bailes habian comenzado a ser unos verdaderos "lotes"...

A los besos apasionados que nos dabamos mientras bailabamos abrazados, añadimos que mi hija un dia me bajo mis manos de su cintura a su culo, yo se lo palpe y lo apreté contra mi...

  • ¿Te gusta mi culo papi?

  • Muchísimo cariño, tienes un culo precioso...

  • Pues es todo tuyo, puedes hacer con el lo que quieras.

  • Gracias mi niña... la conteste, mientras se lo magreaba ya sin ningun disimulo...

De esta manera fue como me corrí la primera vez con mi hija... Comiendome ella la boca, mientras yo con mis dos manos en sus gluteos la apretaba contra mi, restregando mi dura polla contra ella...

Mi hija habia llegado a la conclusión de que yo no tomaria ninguna iniciativa, pero que la seguiría en todas las que ella tomara (chica lista)... Asi que siguió por ese camino...

Otro dia en el salon, mientras nos besabamos, cogió una de mis manos y la metió debajo de su camiseta, yo comprendi inmediatamente lo que quería y comence a acariciar sus tetas dandole ligeros pellizcos en sus pezones, cosa que puso a mi hija como una moto...

  • ¿Te gustan mis tetas papi?

  • Muchísimo cariño, tienes unas tetas preciosas...

  • Pues son todas tuyas, puedes hacer con ellas lo que quieras...

Me respondió mi hija con lo que se convertiría en un mantra para los dos...

  • Gracias mi vida... ¿De verdad que puedo hacer lo que quiera con ellas?...

  • Lo que quieras Papi...

Pues... dicho y hecho, la quité la camiseta y me lancé a comerme aquel delicioso manjar...

Sus pezoncitos, ummmmm, que ganitas tenía de chuparlos con mis labios...

Se los chupaba se los mordía, sin apretar, a la vez que sobaba sus tetas con ambas manos...

Ni que decir tiene que los dos nos corrimos de gusto...

Mi hija era la primera vez que se corría conmigo y tuvo un orgasmo maravilloso...

Y en esa linea seguimos avanzando, o mejor dicho, mi hija avanzaba y yo la seguia...

Cuando cruzabamos una linea roja eso ya pasaba a ser parte de nuestra relacion y lo tomabamos como algo normal, con lo que el sobarle las tetas y el culo a mi hija habia pasado a ser algo habitual para mi...

Evidentemente eso habia disparado mi libido y tenia que hacer verdaderos esfuerzos para no saltarme mis propias normas, pero decidí aguntar, no forzar nada y seguir dejando la iniciativa a mi hija...

Su siguiente objetivo fui yo, bueno, una parte de mi... Jajaja..., Si, lo habéis adivinado... mi pene...

Estabamos en el salon comiendonos a besos, cuando note que mi hija estaba tratando de introducir una mano dentro de mis calzoncillos...

Inmediatamente la facilité la labor y su mano se deslizó hasta mis huevos... Ummmmmm, que gusto me dio sentir su mano acariciando esa parte tan sensible de mi cuerpo..., despues paso a mi pene, que estaba a tope...

Yo la dije con pelin de guasa...

  • ¿Te gusta el pene de tu padre, cariño?

  • Si Papá, me gusta mucho... Me contesto ella con una sonrisa complice...

  • Pues es todo tuyo mi niña, puedes hacer con el lo que quieras... Jajaja... Jajaja... Nos reimos los dos...

  • Pues voy a hacer algo que llevo mucho tiempo deseando hacer..

  • ¿Que es, cariño?..

  • Metermelo en la boca... Comermelo enterito...

Joder con mi niña, parece que se estaba espabilando a pasos agigantados...

Yo me deshice inmediatamente de todo lo que se interponia, me recoste en el sofá y con mi pene apuntando al techo la dije...

  • Toda tuya mi amor...

Mi hija la cogió con una mano, y tirando hacia abajo saco totalmente mi brillante prepucio...

Me miró con una sonrisa de oreja a ireja y para mi sorpresa y satisfacción me dijo...

  • Tu relájate y disfruta, Papá, no te preocupes de nada, cuando te vengan las ganas correte en mi boca, sin problemas... ¿Vale?...

  • Vale cariño mio, eres realmente increible mi niña...

Y sin mas, se metio mi pene en su boca y comenzó a darme la mejor mamada de mi vida...

Cuando sentí que me iba a correr, se lo dije y ella siguió chupando aun mas deprisa...

Comence a correrme en su boca...

Ella chupaba y tragaba, mientras lo que no la daba tiempo a tragar escurria por las comisuras de sus labios...

Siguio chupando un rato mas despues que termine de correrme, proporcionandome un placer añadido...

Bufffffff.. Que pasada...

Ella por supuesto tambien se habia corrido mientras me la chupaba...

Despues nos comimos a besos y pude probar el sabor de mi semen que aun tenia en sus labios...

El próximo objetivo estaba claro y yo lo deseaba tanto, como lo temía, porque no sabía como lo iba a abordar mi hija y sobre todo no sabía cómo iba a reaccionar yo.

Pero de momento mi hija parecía satisfecha con el actual estado de las cosas. Tenía unos orgasmo maravillosos y se sentía feliz...

Hasta que por fin un día se decidió... Su madre tenía una guardia de 24 horas, así es que teníamos todo ese tiempo para nosotros y eligió el mejor momento y el mejor lugar, la cama...

Cuando estábamos los dos en la cama, ella en bragas, ya la había quitado la camiseta y me estaba dando un banquete con sus tetas, cogió una de mis manos y la metió dentro de sus bragas...

¡Joder!... A mi me pillo por sorpresa, pero reaccioné inmediatamente... Mi hija por fin había decidido darme acceso a su mayor tesoro...

Metí mi mano hasta el fondo, apretando con el dorso para separar bien sus braguitas y con mis dedos comencé a inspeccionar aquel deseado rincón de su cuerpo...

Separé con mi dedo corazón sus labios mayores y menores y llegué a su agujerito, que estaba bien lubricado...

Introduje mi dedo en el suavemente varias veces y con el dedo mojado busque su clitoris y comencé a acariciarselo...

Mi hija comenzó a dar gritos de placer, se volvió como loca... Era la primera vez que alguien la acariciaba su chochito y sintió tanto placer que no lo pudo resistir y empezó a correrse en mi mano, llenandomela con sus abundantes jugos...

Entre jadeos me repitió su manta...

  • ¿Te gusta mi chochito Papi?

  • Si mi vida, muchísimo, estaba deseando que decidieras dejarme disfrutar de él...

  • Pues ya lo has conseguido, es todo tuyo y puedes hacer con el lo que quieras...

  • ¿De verdad mi vida que puedo hacer con el lo que quiera?...

  • Lo que quieras, lo dejo en tus manos, confío totalmente en ti, se que sabrás hacer lo que sea necesario para no causarme ningún daño...

  • Por supuesto mi vida, nunca haré nada que te cause daño o perjuicio...

  • Lo que si voy a hacer ahora es algo con lo que he soñado desde que empezamos estas nuevas experiencias, que nos causará placer a los dos, sin correr ningún riesgo...

  • ¿Que es Papá?..

  • Comerte tu precioso chochito...

  • Ummmmmmmm, pues cometelo Papá, es todo tuyo..

La quite las bragas, cogí una almohada y la puse debajo de su culo, me tumbé entre sus piernas, que ella habia abierto de par en par, levante sus piernas doblandolas por las rodillas y... Allí estaba, a centímetros de mi boca el chochito mas perfecto que había visto en mi vida...

Super lubricado por la corrida de hacia un momento.

Comence dandole lenguetazos suaves, separando con mi lengua sus labios mayores y menores, llegando a la entrada del agujerito... metí mi lengua hasta donde pude...

Mi hija sujetaba con sus manos sus piernas por las rodillas y no dejaba de dar gritos de placer...

Yo segui a lo mio.... Buffffff, que pasada...

Despues de lamer y puntearle su chochito con mi lengua, durante un buen rato, busque el clitoris y comence a lamerlo primero y chuparlo despues...

A mi hija esto la llevó al extasis, contrajo todos sus musculos y comenzó a tener un orgasmo escandaloso..

Gritaba como una loca, mientras su cuerpo convulsionaba por el placer... Ahahah ahahah...

Yo aproveche para meter mi lengua lo mas profundo que puede en su chochito, sintiendo en ella sus contracciones y recibiendo en mi boca el abundante líquido de su corrida...

Bufffffff esto me puso como una moto hasta el punto que si mi hija no hubiera tomado la iniciativa comprendiendo mi estado de excitacion, la hubiera clavado mi polla hasta el fondo de su chorreante coño, sin pararme a pensar en las consecuencias...

Pero mi hija, que no dejaba de sorprederme por su constante predisposición, se incorporó y tirando de mi hacia arriba me dijo...

  • Ahora te toca a ti Papá...

Se lanzó a por mi palpitante polla, se la metió en la boca y comenzó a pegarme unos increíbles chupetones...

A mi no me dio tiempo a reaccionar, simplemente en cuanto senti el calor y la humedad de su lengua en mi sobreexcitada polla, comence a lanzar chorros de semen dentro de su boca...

Mi hija tambien sobreexcitada siguio chupando y tragandose todo el semen que podia, ya que, dada la posicion, la mayor parte se le escurria entre sus labios...

Yo la agarré por la cintura y tire de ella hacia arriba, comprendiendo mi intencion, sin dejar de chupar mi polla, giró su cuerpo y metio mi cabeza entre sus piernas, quedando en posicion del 69, con su culo y su chorreante chochito a mi disposicion...

Mientras mi hija seguia a lo suyo, yo comence a hacerla de todo la pegaba lenguetazos de abajo arriba, parandome en el ojete de su culo, un hoyito brillante y perfecto, punteandolo con mi lengua, cosa que la producia como un cortocircuto, que la obligaba a sacar mi polla de su boca para lanzar gritos de placer...

Buffffff, esto a mi hija la produjo otro orgasmo que en la posicion que estaba lleno mi boca con sus jugos...

Mientras saboreaba su regalo, la correspondi descargando otra racion de semen en su boca, que en la posición que estaba poco pudo tragar y escurria por mi polla hasta empapar mis testículos...


Despues de esto ya solo nos quedaba la penetracion, con el peligro de poderla quedar embarazada, ya que no podiamos usar condon, porque mi hija era alergica al latex (Lo supimos porque un dia se puso unos guantes de lates de una caja que tenia su madre en el botiquin y tuvo una fuerte reacción)...

Esa era la unica linea roja que no habiamos traspasado aun y que los dos, sin decir nada, conscientemente sabiamos que no podiamos traspasar sin tomar algun tipo de medida...

Asi, nuestra relacion se convirtió en una especie del "Paraiso Terrenal" de la Biblia...

Podiamos "comer" de todos los "frutos", menos de la "manzana prohibida"...

Y eso haciamos, comíamos de todos los frutos, respetando la dichosa "manzana" ...

Pero en el sexo, hay momentos en los que resulta muy dificil mantener la cordura...

Y... un dia, cuando mi hija comenzó a a gritar de placer y a correrse en mi boca, debido al sexo oral que como tantas otras veces la estaba practicando, produjo en mi una sobreexcitacion tal, que por un momento perdí el control, trepe hacia arriba y busqué con mi ansiosa polla la entrada al "fruto prohibido"...

Cuando la tenia enfilada, antes de dar el empujón final y metersela hasta el fondo, de un solo golpe en su lubricado y palpitante chochito, mire la cara de mi hija y vi en ella la expresión de una hembra en celo deseando que su macho la preñara...

Fueron solo unos segundos de duda, pero los suficientes para que el sobreescitado macho se transformara en el responsable padre que bajo ningun concepto queria arruinar la vida de su hija quedandola embarazada...

Pero esos segundos se quedaron grabados en el subconsciente de mi hija, como un profundo "deseo insatisfecho", que algun dia tendria que satisfacer...

Minutos despues mi hija consiguió obtener con su boca el semen con el que un momento antes habia deseado ser inseminada por el macho que tenia entre sus piernas...


Esto me llevó a hablar con mi hija seriamente, sobre el riesgo que estabamos corriendo...

La dije que habia pensado hablar con su madre, para que la llevara al ginecologo y que la aconsejara el metodo anticonceptivo mas adecuado para ella...

Mi hija estuvo totalmente de acuerdo, se abrazo a mi y me dijo que estaba deseando sentirme dentro de ella...

Dicho y hecho, tan solo unos dias despues, saque el tema con mi mujer...

Hablamos sobre el cambio que habia experimentado nuestra hija en el ultimo año, que se habia convertido en toda una mujer, que sin duda iba a empezar a ligar con chicos, el peligro que ello suponia para nuestra "inocente" hija y que nosotros, como padres modernos que eramos, teniamos que hacer algo al resperto...

Mi mujer como enfermera que era, enseguida entró al trapo y dijo que hablaria con ella y la convenceria para ir a la consulta de una amiga suya ginecóloga, para que determinara el metodo anticonceptivo mas adecuado para ella y el momento adecuado para comenzar a tomar precauciones, ya que lo que mas tememos los padres, en esas edades, es un embarazo no deseado...

Vamos que no tuve que esforzarme mucho para conseguir lo que queria...

Y... dicho y hecho... Habló con nuestra hija y sorprendentemente para ella aceptó encantada ir a la ginecóloga...

Cuando mi mujer me contó la conversación con nuestra hija me dijo que por la forma que habia aceptado algo tan desagradable para una mujer como es ir al ginecólogo y mas la primera vez y a su edad, no tenia duda que habiamos llegado justo a tiempo, porque nuestra niñita estaba claramente predispuesta a tener sexo en cualquier momento...

Ya te digo, pense yo para mi... Jajaja

La ginecóloga la hizo una revision completa, que dio como resultado que estaba todo perfectamente...

Como metodo anticonceptivo les indicó que el DIU era el menos agresivo desde el punto de vista biologico, ya que evitaba la toma de medicamentos, aunque el mas desagradable, porque habia que colocarselo y en su caso, de momento no era viable, porque aun era virgen, asi es que, en principio tendria que recurrir a la "pildora" si pensaba mantener alguna relacion, fija o esporadica...

Y... Nuestra hija comenzó a tomarse la pildora...


Pero, tanto mi hija como yo, no queríamos hacer algo tan importante como "su primera vez" de cualquier manera...

Queriamos que fuera algo especial y para ello necesitábamos tiempo y tranquilidad, asi es que decidimos esperar al momento que consideraramos adecuado...

Al segundo mes de tomarse la pildora se nos presentó una ocasion unica, a mi mujer la habian invitado a un congreso de enfermería en Madrid durante un fin de semana...

Se iria el viernes por la mañana y regresaria el lunes, con lo que estaríamos practicamente tres dias solos en casa mi hija y yo... Biennnnnn...

Llegó el dia y mi mujer se marchó a su congreso...

Habia llegado el momento que tanto tiempo llevabamos esperando...

Acordamos que lo hariamos en su cama el viernes por la tarde después de comer y descansar un rato...

Nos lo ibamos a tomar con tranquilidad, teníamos muuuucho tiempo...

Despues de comer estuvimos viendo la tele como una hora y luego nos duchamos los dos juntos. Queriamos estar limpitos, para poder saborear nuestros cuerpos sin ningun problema...

Nos metimos en su cama los dos desnudos...

Mi hija estaba radiante, su cara denotaba un estado de felicidad y ansiedad, me miraba con ojos de deseo...

  • Papá te quiero, eres el hombre de mi vida y me hace inmensamente feliz que seas tu quien entre por primera vez dentro de mi...

  • Mi vida, no sabes la alegria que me da oirte decir eso...

  • Yo tambien te quiero, mucho, muchisimo, eres lo que mas quiero de este mundo...

  • Voy a tratar de entrar dentro de ti de la forma mas suave posible, si sientes dolor me lo dices y paro inmediatamente...

  • De acuerdo Papá, eres realmente unico...

Me acerque a ella y nos fundimos en un beso largo e intenso...

Comence a recorrer con mis labios todo su cuerpo... su cuello, sus orejas, sus tetas... Ummmmmm... esos pezones que me volvían loco, estaban duros como piedras... Bajé por su vientre, su ombligo y seguí bajando...

Mi hija jadeaba y lanzaba pequeños suspiros de placer...

Metí mi cabeza entre sus piernas, que ella abrio de par en par para mi, besé su chochito, abrí con mi lengua sus labios, los lami, meti mi lengua dentro de el, saboree sus jugos, lami su clitoris, lo metí entre mis labios y lo chupe con deleite...

Ahahahahah... Grito mi hija...

Senti como mi boca se llenaba con el flujo del orgasmo que entre gritos de placer estaba teniendo mi hija...

Meti mi lengua hasta donde pude dentro de su palpitante sexo, que me la succionaba con sus contracciones...

Ella habia agarrado mi cabeza con sus dos manos y la apretaba contra su chochito, como si quisiera meterme entero dentro de de el...

Mientras su cuerpo seguia teniendo los ultimos estertores de su maravilloso orgasmo.

Mi hija entre jadeos me dijo...

  • Buffffff... Papá... Que pasadaaaa... ha sido increible, creia que me moria de placer... te quierooooo...

Yo abandone su coñito, despues de dejarlo limpio a lametones y empecé a recorrer otra vez su cuerpo con mis labios, esta vez en sentido contrario...

Coloqué una almohada bajo su precioso culito, para tener un mejor angulo de penetracion, me metí entre sus piernas que ella tenia dobladas por las rodilla y abiertas de par en par, me apoyé en mis brazos, apunte mi polla, que estaba dura y tiesa como un palo, a la entrada de su lubricado sexo y mirando a mi hija a su preciosa cara, comencé a introducirme dentro de ella..., lentamente...

Mi hija me miraba con cara de placer y felicidad...

Si en algún momento la hacia daño lo notaria en su cara...

Me segui deslizando suavemente dentro de ella, centimetro a centimetro...

Mi hija comenzó a jadear y yo a sentir las contracciones de su vagina...

Pensé que este era el momento, aprovechando las contraciones y el flujo del orgasmo y de un solo golpe se la metí entera, hasta dentro...

Mi hija que hasta entonces estaba acariciando mi espalda con sus manos, tenso todo todo su cuerpo, clavó sus uñas en mi espalda y dio un grito de sorpresa, dolor y placer... Ahahahahah...

Yo al sentirme totalmente dentro de ella, me volvi loco de placer y comence a follarmela con una pasion incontrolable durante unos segundos...

Enseguida me tranquilice y fui disminuyendo el ritmo de mis embestidas, hasta volver a hacerlo lenta y suavemente... la sacaba casi entera y se la volvia a meter hasta el fondo...

Mi polla resbalaba en el estrecho y desvirgado chochito de mi hija, sin ningun impedimento, parecia hecho a su medida...

Ella entre jadeos me dijo...

  • Por fin te tengo dentro de mi... Papá...

  • Si mi vida y ahora voy a vaciarme dentro de ti, quiero que sientas como lleno tu chochito de leche calentita...

  • Siiiiiii, quiero sentirla dentro de mi, damela toda Papa..

Comencé a moverme rápidamente, di varias embestidas profundas y cuando vi que me corria, se la meti hasta el fondo, me quedé quieto y comence a descargar todo mi semen en lo mas profundo del cuerpo de mi hija...

Ella al sentir mi corrida, volvió a clavarme sus uñas en mi espalda, su cuerpo convulsiono y dando gritos de placer, comenzó a tener el orgasmo mas intenso y especial de su vida...

Los dos gritabamos como locos de placer, mientras nos comiamos a besos...

Nuestros cuerpos se fusionaron...

Era la vez que mas unidos habiamos estado en toda nuestra vida... literalmente...

Yo tenia 18 cm de mi cuerpo metidos dentro del cuerpo de mi hija y millones de mis espermatozoides navegaban por su utero buscando un ovulo que fecundar...

Un ovulo que no podrian fecundar, porque nosotros lo habíamos decidido asi...

Cuando nuestros cuerpos se relajaron por fin, yo sali de mi hija y me desplome a su lado totalmente agotado...

Ella con voz temblorosa aun, me dijo...

  • Gracias Papá por hacerme la mujer mas feliz del mundo, creo que pocas mujeres habran tenido una primera vez tan especial...

Yo comiendomela a besos la dije...

  • Gracias a ti mi vida por por concederme el inmenso placer de ser el primer hombre en entrar dentro de ti...

  • Te quiero y te voy a querer siempre...

Ni que decir tiene que durante los siguientes dias nos hartamos a follar de todas las maneras imaginables. ..

Mi hija lo unico que queria era tenerme el mayor tiempo posible dentro de ella y que llenara su chochito con mi leche calentita...

Lo habia deseado durante mucho tiempo y ahora queria disfrutarlo al maximo...


Desde el viernes por la tarde hasta el lunes por la mañana me corrí montones de veces en su chochito y ella tuvo tantos orgasmos que perdimos la cuenta, porque a veces tenia varios orgasmos seguidos o un orgasmo continuo...

Durante el siguiente mes, antes de irse a la universidad, solo tuvimos un par de oportunidades que, lógicamente, aprovechamos al maximo...

Estudio enfermeria, como su madre...

Durante esos años solo mantuvimos relaciones esporadicamente, aunque nuestro amor y complicidad se mantuvieron siempre intactos...

Terminó la carrera y comenzó a trabajar en la residencia universitaria que hizo las practicas...

Se relacionaba con sus compañeras y compañeros, pero nunca tuvo novio...

Sus amistades pensaban que era lesbiana...

Pero ella tenía muy claro lo que quería...

Sabía que me tenía a mi y no necesitaba ni quería ningún otro hombre...

Había decidido ser solo mía y de nadie mas...

Estando así las cosas y como si el destino lo tuviera todo previsto, cuando mi hija tenía 29 años, murio mi mujer de un IAM, a los 54 años...

Al quedarnos los dos solos, mi hija inició los trámites para conseguir plaza en el hospital que habia trabajado su madre y se la concedieron un año despues...

Asi es que se vino a vivir conmigo...

Ella con 30 años y yo con 55 iniciamos una nueva etapa en nuestras vidas...

En esta nueva situacion todo volvió a resurgir entre nosotros...

Desde el principio comenzamos a hacer vida matrimonial, dormiamos juntos y disfrutabamos del sexo como cualquier matrimonio...

Todo iba maravillosamente. Despues de lo que ambos habiamos pasado durante los ultimos años, por fin volviamos a ser felices...

De puertas afuera eramos padre e hija a todos los efectos..

De puertas adentro eramos un "matrimonio" feliz...

Hasta que un dia que estába practicando sexo oral a mi hija, cuando se corrió, subi como siempre hacia arriba para meter mi polla en su chorreante chochito, se la puse en la entrada y antes de meterse la hasta dentro, instintivamente, como si algo, o alguien me empujara a hacerlo, mire su cara y...

Vi en ella la misma expresión de "hembra en celo deseando que su macho la preñara", que habia visto, hace años, cuando estuve a punto de quedarla embarazada, antes de empezar a tomar la pildora...

Fueron los mismos segundos de indecision, pero esta vez no habia motivos para parar, así que de un solo empujón se la metí hasta el fondo...

Comencé a follarmela y en pocos minutos solté mi descarga de semen, que el avido chochito de aquella "hembra en celo" devoró con ansiedad...

Mi hija, al sentir mi descarga en su interior, tenso todo su cuerpo, apretó mi culo con sus dos manos, queriendo que la penetracion fuera lo mas profunda posible y comenzó a tener un orgasmo intenso, pero silencioso, raro en ella, que cuando se corria siempre gritaba de placer...

Sentí como aquella avida vagina, succionaba con sus contracciones hasta la ultima gota de semen de mi agradecido pene...

Mire aquella cara sonriente, que con su boca jadeante y sus entornados ojos, era el claro reflejo del deseo conseguido y la felicidad más completa. ..

Mi hija, sin decirmelo habia dejado de tomar la pildora, con el claro objetivo de conseguir ver cumplido su deseo mas profundo... Ser embarazada por el unico hombre que siempre la habia amado incondicionalmente... Su Padre...

Como buena enfermera, habia esperado el momento exacto de su ovulacion...

Y ese momento era, precisamente, el momento que tan intensa y felizmente estaba disfrutando hoy...

Así que esta vez mis espermatozoides si encontraron un ovulo que fecundar en el utero de mi hija...

La "hembra en celo" que mi hija habia llevado dentro durante todos estos años, desde aquel dia que deseó ser preñada y no lo fue, habia esperado el momento exacto para ver, por fin, cumplido aquel profundo deseo insatisfecho...