Herta me fué infiel

Herta me fue infiel

Soy un hombre casado con una mujer que aunque no tiene un cuerpo de modelo, es muy atractiva, de piel blanca, rostro bonito, ella es castaa, pero lo que mas resalta y llama la atencin en los hombres son sus voluptuosos y  grandes senos algo rosaditos que son impresionantes. Como yo, ella tambin es profesional con una vida social muy activa. Hace unos aos atrs descubr, no sin sentir dolor en mi orgullo de hombre ofendido, que mi esposa, durante nuestro matrimonio ha tenido muchos amantes. ｿCmo lo descubr?, en realidad creo que fue a partir de la ocasin que voy a compartirles.

En esa ocasin, le ped a mi esposa que me acompaara a una cena-baile, de la empresa en donde trabajo, y claro la invitacin era por cumplir, ya que ella casi nunca, por no decir nunca quera acompaarme a estos eventos. Acept y le ped que se arreglara, en otras palabras que se pusiera bonita para dar una buena impresin a mis compaeros de trabajo.

Esa noche, vi que se aplic especialmente en su arreglo. Se puso un vestido que dejaba al descubierto parte de su espalda y por delante un escote pronunciado (cosa que me sorprendi porque nunca antes haba usado un vestido as) que apenas cubra su brasier color carne que se confunda con el color de su piel y dejaba ver buena parte de sus pechos ya que tambin su sostn apenas le cubra los pezones y la unin de sus senos formaba un canalillo que cualquier hombre deseara poner all su lengua y quien sabe que mas.  Su vestido era de una tela tan fina, que se notaban sus pezones y lo grande de sus senos, la parte de la falda tena una abertura que le llegaba mucho mas arriba de la rodilla que al caminar dejaba ver parte de una de sus piernas, estaba muy sensual.

Salimos del departamento y pude notar como las miradas de los vecinos e incluso un amigo de ella que pasaba por all le clavaban los ojos en sus pechos y ella slo responda con una mirada coqueta, rpidamente abr la puerta del auto y me ofreci una visin impresionantemente bella de sus rosados grandes y bien formados senos. La verdad me senta excitado con mi esposa y pens decirle que mejor nos quedramos en casa para hacer el amor, pero rechac la idea.

Al llegar al evento, hice las presentaciones correspondientes y vi que mi Jefe el dueo de la empresa, miraba fijamente el cuerpo de mi esposa y mas aun sus pechos cuando esta se quit el abrigo. Un poco molesto por esa mirada insistente, decid tranquilizarme para no hacer nada que pudiera afectar mi trabajo.

Durante la cena not una pronunciada coquetera de Herta hacia mi jefe. Le sonrea y descaradamente le tocaba las manos y no haca esfuerzos por ocultar sus pechos cuando por descuido el escote de su vestido se abra. Yo estaba ah, pero como si no estuviera. Me daba la impresin de que algo debieron haberle dado en la bebida que la puso as. Estaban enfrascados en una intensa pltica y yo senta que estaba de ms. Sufr un golpe a mi ego. No poda hacer nada porque era mi jefe en otras palabras la persona crucial para mi contrato en esa empresa.

Despus de la cena, mi jefe se puso en pi y sin dirigirme la mirada me pidi bailar con mi esposa, con desdn y asumiendo de antemano que no haba duda de que bailara con ella. Me sorprendi que ella aceptar, ya que no le gustaba hacerlo. En la pista de baile, vi que la tom descaradamente de la cintura y poniendo su mano cerca a la desnudez de su espalda empez a moverse pegando su pelvis en el vientre de mi esposa. Sent la mirada comprensiva de los compaeros, el Jefe haca gala de su poder, acariciando delante de todos a mi esposa.

Sent una corriente de dolor, cuando este Jefe se acerc a su cara y empez a besarle el cuello y los lbulos de las orejas. Mi esposa, sin recato y sin importarle que estaba haciendo quedar en ridculo con mis compaeros, le rode su cuello con sus brazos. Ms dolor sent cuando observ que con movimientos sensuales, su vientre acariciaba el pene de mi jefe.

No pude resistirlo, sal un poco del lugar y me dirig al bao. All, me sent en unos de los cubculos y encend un cigarrillo pensativo y triste. No saba que hacer. En eso estaba, cuando entraron dos de mis compaeros que no se dieron cuenta que me encontraba ah. En eso palidec al escuchar sus comentarios:

Ya viste los senos de la esposa que tiene el maricn de Fredy?

S, cuao, est requsima y caliente la hembra esa. Por mi madre que yo no le perdonaba una buena cachada.

Puta, ni yo. Te fijaste en el vestido que trae? Con los movientos las tetas casi se le salen, no deja nada a la imaginacin. Est buensima. Si hoy no hay nada, me har unas pajas noms acordndome de lo buena que est.

La verdad me da lstima por Fredy, hasta se me par la verga noms de ver como se la est rozando el Jefe. ｿTe fijaste que la est poniendo sper caliente?

Si se ve que es una hembra putsima. De seguro se la va a tirar el Jefe antes de que se termine la fiesta.

Al salir los compaeros, sintiendo un coraje tremendo, volv al saln, decidido a llevarme a Herta a casa aunque fuera a la fuerza. Pero, me llev una sorpresa porque no estaba en la pista de baile. Nadie me supo decir en dnde estaba. La gente con pena me deca que la esperara, que pronto regresara, que seguramente estaba en el bao.

Sal a buscarla, pero me qued petrificado cuando vi que un pasillo contiguo a los baos de hombres, estaba mi Jefe y Herta. Ella tena las tetas afuera por encima del escote y el Jefe se las mamaba y acariciaba, mientras ella con la cabeza tirada hacia atrs y los ojos cerrados le coga de los cabellos. No puede ser, pens, ｿser capaz de tirarse a mi esposa, que hasta ese momento la consideraba una mujer fiel y recatada, casi a la vista de todos?

Me met al bao, sin atreverme a interrumpir la escena. Me senta mareado de impotencia y emociones encontradas. En eso, sent que la puerta se abri y entr mi esposa y mi Jefe a uno de los cubculos y con apresuramiento lo cerraron. Me qued boquiabierto, no poda pensar ni actuar, estaba paralizado de coraje y decepcin. La desgraciada ni siguiera me vio cuando se meti con mi Jefe en el pequeo espacio.

Me asom disimuladamente y con cuidado por encima del cubculo contiguo. Vi que mi esposa le acarici el pene. Escuch como mi Jefe le peda que se lo metiera a la boca - Vamos preciosa mtelo en tu boca Ella se resisti un poco pero mi Jefe le agarro de los cabellos y la inclin hasta introducirle su pene en la boca. Se lo empez a mamar, y pens que a m se resiste a mamarme la polla, siempre con pretextos . Se lo meta y sacaba y escuchaba los gemidos de placer. Sus Pechos eran acariciados y presionados por las manos del Jefe. Vi muy claro cuando los chorros de semen la inundaban, prcticamente se trag todo su contenido y solo pude ver grandes gotas blancas en sus finos labios. Mi jefe le bajo el cierre posterior del vestido y se lo baj hasta la cintura y rpidamente le termin de quitar el sostn por que sus senos ya los tena al aire bambolendose por los movimientos. Volvi nuevamente el Jefe a chuparle los senos mientras le deca... Herta que ricas y grandes tetas tienes .... Le levant la falda hasta la cintura y la sent en la tapa de la taza del bao, le abri las piernas, hizo a un lado su truza y enterr su cabeza en su vagina, desde ese momento empec a escuchar los gemidos fuertes de Herta, parecan que la estaban matando.

No ocult los gritos de su orgasmo. Claramente escuch que le comentaba que era la primera vez que senta un orgasmos tan intenso. Mi Jefe le pregunto si conmigo y ella qued callada por un momento como sintiendo remordimiento, pero luego hizo un movimiento con su cabeza y dijo, con l nunca. Palabras que me siguen taladrando mi orgullo de hombre.

Ahora te voy a penetrar hasta el fondo mamacita, que ricas tetas tienes todo el da las pasara chupndolas, dijo mi Jefe que otra vez tena el pene tieso. En la posicin que se encontraba mi esposa con las piernas abiertas, vi como el pene de mi Jefe se introduca lentamente en su vagina. Solt pequeos gritos de placer, uummmm ahhhhhh aummmm Quieres que siga mamacita?? Repeta mi Jefe... Siiiii siiiigueeee ummm msssss, msssss, ... Eeeso griiitaa noo teee coohbaas suelta todo ese placer que tienes, repeta mi Jefe.... Ahhhhhhh, tee siiieeento siiigueee asiiii no te deeetengaaaass no poda creer lo que escuchaba de los labios de mi esposa, conmigo nunca lo haba hecho.... que riccooooo, me encanta, me encanta voy a teeeerminaaarr, No le import a la muy puta si haba en ese momento hombres en el bao.

Cambiaron de posicin ella le dio la espalda apoyndose en la pared y observ que abra las piernas, El puso mas a un lado la truza de mi esposa y su pene erecto se perdi en las entraas de Herta. Me parecieron siglos, en mi interior deseaba que ya pasara el tiempo y yo, sin poder moverme me tragaba mi dolor.

Escuch como ella con gemidos alcanzaba su segundo orgasmo, seguido tambin por los jadeos de mi jefe que por sus palabras le dejaba todo su semen dentro de su vagina. Al terminar de follar, mi jefe sali primero diciendo que se quedaba con su brasier para recordar esas ricas tetas. Ella no demor mucho y sali. Al poco tiempo llegu, y vi a mi esposa algo nerviosa con una cnica expresin de alegra en el rostro. ｿDonde estabas Fredy? Te estuve buscando, me dijo. Qu descarada y perra, se vea. Qu cnico comentario me estaba haciendo, cuando todos saban que acababa de ser cachada por el Jefe.

Volvimos a casa. Se notaba claramente que no llevaba brasier, ella trataba de disimular entrelazando sus brazos para evitar el bamboleo exagerado de sus senos, ya que por lo grande que los tiene se nota inmediatamente cuando est sin ellos, slo traa puesto debajo del vestido su truza. Me dijo, Fredy me encantaron tus compaeros. Al llegar a casa, la busqu para comprobar su infidelidad, teniendo relaciones sexuales, pero ella se volte y me dio un amigable beso en la mejilla diciendo que esa noche ya estaba muy cansada.

Despus de esa experiencia empec a buscar y encontr ms y ms pruebas de sus infidelidades. Y claro ella pasaba ante los ojos de los dems como una mujer recatada y fiel.....