Hermanos adoptados

Hola, esto es un relato inventado, espero que os guste, ya me diréis cosas en los comentarios. Gracias por leerlo.

Al entrar en la pubertad me quedé huérfano y sin familia. Estuve un par de años con 2 familias de acogida. Y al final fui adoptado por una. Tuve un poco suerte porque ya contaba con 14 años. Era una familia la cual acogía a bastantes niños como yo. Fue con la última familia con la que estuve y decidieron adoptarme.

Era una familia bastante adinerada la verdad, y tenían una hija 4 años mayor que yo, o sea de unos 18. Era una familia fantástica y agradable y aunque fueran adinerados nunca me malcriaron ni a mí ni a su hija biológica y tampoco nos consentían todo lo que queríamos. Pasaron los años y pasaron una chica y un chico por esta casa con padres con problemas los cuales mi familia los acogía por un tiempo. Cuando cumplí los 16, mis padres estaban en proceso de adoptar a otro chico, llevaban ya bastante tiempo en el proceso y ya faltaba poco.

Este chico tenía 14 años, era de pelo negro corto, bastante delgado, y de estatura normal para su edad y de piel más bien blanca. Lo conocía de a veces que venía a mí casa a pasar unos días o nosotros íbamos a verle. Es un proceso que hacen a veces para que nos vayamos conociendo poco a poco entre el niño y la familia.

Llegó el día en que por fin venía para quedarse. Estábamos todos muy contentos, mis padres los que más y yo también por que me llevaba muy bien con él y tendría un hermano con quien hablar, jugar y esas cosas. Teníamos ya una cama en mi habitación para él. Podíamos tener una habitación propia cada uno, pero nosotros quisimos compartir.

Fue pasando el tiempo y se adaptó muy bien. Entre nosotros nos llevábamos muy bien y con nuestros padres adoptivos igual. Yo llevaba un tiempo descubriendo mi nueva sexualidad. Me estaba dando cuenta que me estaban atrayendo los chicos. Cuando ya tenía los 17 años, se lo dije a mi madre adoptiva, ya que me llevaba muy bien con ella y se lo contaba todo. Ella se lo tomó bien, ya lo sabía por eso se lo dije. Me dijo que si necesitaba cualquier cosa o contarle algo más que no lo dudase.

Fue pasando el tiempo. Cumplí 18 años, y mi hermano que se llamaba Adrián, al poco tiempo cumplió los 16. Se había convertido en un chico bastante guapo. Yo lo veía muy guapo pero si digo la verdad nunca pensé en tener sexo con él ni nada por el estilo. A veces me excitaba mirándolo y esas cosas pero al pensar que era mi hermano no le daba mucha importancia. Yo había tenido poco sexo con chicos solo pajas con algún compañero o alguna mamadas con alguno que había quedado. Ya que era un poco vergonzoso.

Pero un día cuando estábamos durmiendo me desperté. Sin moverme demasiado vi que Adrián no estaba en su cama, estaba sentando en la silla delante del ordenador. Desnudo, y masturbándose. Me asombró un poco, ya que a veces lo había visto pajeándose incluso antes nos hemos hecho pajas uno delante del otro, y si se quería hacer una por la noche se la hacia antes de dormir ya que tampoco me importaba y me parecía raro que lo hiciera medio a escondidas. Miré hacia la pantalla pero no pude ver bien que estaba mirando, se que miraba fotos pero no podía ver el que.

Me quedé mirando a mi hermano y la verdad me estaba excitando, verlo allí desnudo con su mano cogiendo su polla y subiendo y bajando sin parar. No tenía una polla grande pero estaba bien, le mediría empalmada unos 14 cm.

A sus 16 años aun era delgado, aunque un poquito fibrado, no mucho. Unas buenas piernas y porque no decirlo un culito respingón y apretadito. Yo estaba tapado con una sabana muy fina hasta el ombligo y sin camiseta ya que era casi verano. Metí la mano para sobar un poco mi polla pero lo dejé al rato, la verdad me la había puesto un poco dura. Al rato vi que se giraba y yo me quedé quieto haciéndome el dormido. Se puso mirándome y siguió masturbándose. No sabía si había oído que me movía o que me había visto despierto. Entre abrí un poco un ojo y vi que se masturbaba mirándome. Entre algunos susurros pude escuchar algo así como vaya cuerpo que tiene, quiero tocarlo. Al rato se corrió allí mismo delante mía. Se corría lo normal para un adolescente. Se levantó y se fue al baño a limpiarse. Yo estaba excitadísimo de ver a mi hermano hacer eso. Pero me quedé con la duda si se había masturbado conmigo o imaginado algo. Como no podía ver aun lo que había en la pantalla, me levante y fui a mirarlo. Mi sorpresa fue cuando vi que las páginas porno eran de chicos, besándose, chupándosela, o sea paginas gays. Me sorprendió bastante al igual que me puso cachondo. Nunca lo hubiese creído. Hasta hace poco había tenido una novia y siempre hablaba de chicas. Aunque podía ser para que nadie se diera cuenta.

Me acosté otra vez, y luego entró él, se puso la ropa interior y se acostó. Tardé en dormirme pensando en mi hermano. Hasta que al final me dormí.

A la mañana siguiente estuve un poco desconcertado. Pensé que igual había sido un sueño, pero fue muy real. Durante ese día pude notar que ahora miraba a mi hermano con otros ojos. Hubo un momento en que estaba yo en la habitación y él salió de ducharse con la toalla, cuando se la quitó no le quite la vista de encima, no paraba de fijarme en ese culito respingón que tiene y en esa polla que le colgaba. Tenía una buena mata de pelo encima de la polla. Y un poco en los sobacos. Por las piernas ya la iban saliendo algunos y por el ombligo algún que otro pelito suelto. Me estaba excitando solo de mirarle así que me puse ha hacer otras cosas para distraerme.

Esa noche, me quedé despierto hasta bastante tarde y no se levantó para nada. Al final me venció el sueño. Durante el otro día estuve pensado algo. Me venían muchas cosas a la cabeza. No me atrevía a decirle nada sobre esa noche. Pero pensé en decirle que me hiciera unas fotos con la cámara digital, con la excusa de que se las tenía que enviar a una chica (el no sabía que yo era gay). Ese día por la tarde cuando estábamos los dos jugando a la video consola aproveche el momento.

Yo: Adrián te sabe mal hacerme unas fotos, que tengo que enviarles algunas a una chica por Internet.

Adrián: ahh mira mi hermano que ha ligado por Internet.

Yo: jejeje, si algo así se puede decir.

Adrián: vale no hay problema, pero luego me ensañaras las que ella te envié no?

Yo: bueno bueno ya veremos eso ya se verá, toma la cámara pon te allí.

Me hizo algunas fotos vestido normal y luego me quedé sin camiseta y me hizo otras tantas.

Yo: Bueno ahora hazme alguna en ropa interior, con 2 o 3 basta luego ya veré que le envió.

Adrián: Ese Jaime (así me llamo yo), y luego alguna en pelotas no? – lo decía en broma en teoria.

Yo: No, eso ya no, aunque si tu me quieres ver desnudo me quedo para ti. – lo dije en plan broma también.

Adrián: no no hace falta.

Me hizo las fotos en boxers y las guardé luego en el pc. Pasó el día y llegó la hora de irnos a dormir. Yo me gire hacia la pared haciéndome el dormido, quería saber si se levantaría a mirar mis fotos y si se iba a masturbar. Aguante sin dormirme. Creía que ya no se iba a levantar. Hasta que oí que se movía y se levantaba, se sentó en la silla y encendió el pc. Yo me gire, me quede boca arriba en la cama y ya no quise moverme más y esperé un rato. Al rato empecé a escuchar murmullos de Adrián.

Adrián: joder como esta con ese boxer, se le marca mucho la polla. Joder no aguanto mas.

Se escuchó como se empezaba a masturbar. Giré un poco la cara y pude contemplar a mi hermano con los calzoncillos por debajo de las rodillas con la polla dura entre sus manos y masturbándose. Hice un poco de esfuerzo y pude ver que estaba viendo mis fotos, no muy bien pero pude verlo, ya que moví un poco la pantalla pero no demasiado para que no se notase. Yo no sabía que hacer, si solo mirarlo y dejarlo si levantarme o masturbarme en la cama mirándolo. Lo único que sabia cierto es que mirándolo mi polla se puso dura y mi excitación aumento cada segundo.

Ya sin dudarlo me levante silenciosamente, me acerqué sin hacer ruido y cuando él fue a mirar si yo dormía le sorprendí.

Yo: Adrián que haces despierto mirando mis fotos.

Adrián se asustó, sin saber que hacer y medio patoso se tapó la polla como pudo y cerró las fotos.

Adrián: Ja… Jaime, te has despertado.

Yo: si. Te estabas masturbando.

Adriá: si… pero no es lo que parece… sino… joder Jaime no se lo digas a nadie.

Estaba nervioso y no lloraba pero estaba muy asustado.

Yo: tranquilo Adrián no me he enfadado y tampoco se lo diré a nadie. Que pasa te gustan los chicos?

Adrían: si Jaime, pero no lo digas a nadie por favor.

Yo: que no, y que hacías mirando mis fotos.

Adrián: es… que.. tienes un buen cuerpo, y eres guapo y viéndote en boxers me pones mucho.

Yo: como? Como estoy ahora?

Me puse delante de él, ya no tenía la polla tan dura pero aun estaba morcillona, y se podía notar bastante. Adrián no podía quitarme la vista de mi cuerpo.

Adrián: si.

Yo: Te gustaría tocarla por encima.

Adrián: En serio me dejas?

Yo: Claro, venga prueba.

Con miedo fue acercando su mano, y la puso en mi paquete, y fue moviéndolo despacito. Me estaba dando mucho gusto.

Yo: Venga sácala que se que te gustará verla.

Me bajó los boxers hasta que salió mi polla. Y la cogió y la empezó a sobar. Mi polla erecta medirá unos 17cm .

Yo: La tocas muy bien, te gusta?

Adrián: si, es grande.

Yo: venga quita la mano de la tuya hombre.

Adrián: es que no es tan grande como la tuya.

Yo: que más da, ya te la he visto muchas veces, y eso no tiene nada que ver.

Se quitó la mano y salió su polla disparada para arriba. Me acerqué un poco y la empecé a sobar por encima. Adrián gimió un poco del gustito que le estaba dando.

Fui a por otra silla y me senté al lado suya.

Yo: y que mirabas en las fotos para calentarte.

Adrián: pues miraba tu paquete, tu culo y tu cuerpo.

Yo: ya veo.

Nos la estábamos sobando mutuamente.

Adrián: De verdad no te importa que sea gay, y que hagamos esto.

Yo: no, es que además yo también te tengo que contar un secreto.

Adrián: cual?

Yo: A mí también me gustan los chicos.

Adrián se quedo con la boca abierta, no sabía si se lo decía de cachondeo o de verdad.

Yo: es verdad, me di cuenta un poco antes de tu edad, y el año pasado se lo dije a mamá.

Adrián: lo sabe mamá?, yo no quiero que sepa que yo lo soy. Además aun no lo tengo claro.

Yo: ya ya tranquilo, pero reconoce que te gustan mucho, porque la otra noche te vi viendo paginas porno de gays.

Adrián: que dices, joder que vergüenza.

Yo: no pasa nada yo también las veía y la veo. Y has tenido sexo con chicos.

Adrián: que va, me da mucha vergüenza quedar con algún chico y con amigos con uno nos hicimos una vez una paja nada más. Y tú?

Yo: bueno algo, besos pajas y mamadas.

Adrián: joder ya es algo, ya me gustaría lo de las mamadas.

Yo: te gusta mi polla.

Adrián: si mucho, es grande.

Yo: la tuya no esta mal.

Adrián: es pequeña.

Yo: no hombre esta bien, y es guapa. Venga que te parece si nos pajeamos.

Adrián: vale.

Dejamos de sobarnos las pollas y nos empezamos a pajear el uno al otro. Se notaba que tenía experiencia en pajas, y que chico no tenía. Pero me encantaba como me lo hacía. Adrián hecho la cabeza para atrás y empezó a gemir. Le estaba gustando como se lo hacía. Al rato le dije.

Yo: o sea que nunca has probado una polla.

Adrián: no

Yo: te apetece, probar la mía, por que a mi me gustaría probar la tuya.

Adrián: joder que si, a veces he pensado en eso.

Yo: jajaja mira mi hermano que calentorro que es. Venga es toda tuya.

Adrián: Es la primera vez eh.

Yo: tu hazlo como sepas.

Se puso de rodillas delante de mí, yo abrí un poco más las piernas. Me la siguió pajeando un poco más. Luego se acercó a la polla y me lamió un poco la punta. Eso me daba mucho gusto. Lo mejor fue cuando se la empezó a meter en la boca. Que primero me chupaba la punta. Lo hacia despacio pero bastante bien. Poco a poco fue entrándole mas polla en la boca, era genial. Se notaba que le iba gustando cada vez mas chupar una polla. Yo con una mano le cogí de la cabeza para acariciarle, pero no le apretaba dejaba que el mismo se metiera lo que quería. No llegó a tragársela del todo, pero empezó a acelerar el ritmo frenéticamente. Yo no paraba de gemir de la excitación que tenia. Mi polla se puso lo mas dura posible dentro de la boca de Adrián, y él no paraba de chupar como un desesperado. Era genial, luego a la vez que me la chupaba me tocaba los huevos. Eso me provocó mas calentura. Adrián no paraba y seguía chupando. Mi cuerpo se estremeció a la vez que se arqueó mi cuerpo. Ya me iba a correr, fui a avisarle pero no me dio tiempo. Empecé a correrme en su boca. Creía que se la iba a sacar pero no fue así. Se empezó a tragar todo lo que pudo. Le cayó un poco al suelo. Se la sacó de la boca y se tragó el semen que tenía. El resto calló al suelo. Había sido una de mis mejores corridas. Cuando se lo tragó se acercó otra vez a mi polla y la chupo otra vez hasta que la dejo limpia.

Yo: veo que al final te gusta esto de chupar polla. Lo has hecho muy bien. Lo siento no me ha dado tiempo a avisarte.

Adrián: no pasa nada. Ha sido genial, me ha gustado. Lo que no me he atrevido a meterla entera.

Yo: eso da igual poco a poco.

Adrián: ahora chupamela tu, estoy desesperado por que me la chupes.

Yo: venga siéntate.

Le empecé a sobar un poco las piernas y luego la polla. La tenía mirando al techo, como un palo de una bandera. Era maravillosa, piel suave, no muy gorda, y unos 14 cm. La empecé a pajear suavemente, y él ya empezó a gemir de gusto. Luego acerqué mi boca le di algunos besitos. Con mi lengua la fui pasando por toda su polla de arriba abajo y luego le baje la piel y se la pasaba por el frenillo. Eso le hizo gemir mucho mas. Sin pensarlo me la metí en la boca y la fui chupando sin parar y ya con un ritmo mas o menos rápido. En seguida la tuve entera dentro de mi boca. Aceleré lo mas que pude el ritmo. Le empecé a acariciar los huevos. Los tenía bien gordos. Tendría que almacenar mucha leche allí dentro.

La excitación era máxima. No paraba de gemir y de decirme que no parase. Que lo hacía genial. Mi boca subía y bajaba por esa exquisita polla. La polla de Adrián se puso tensa así que supuse que se iba a venir, entonces el casi sin poder hablar me aviso. Yo aceleré el ritmo. Le acaricié más los huevos. Y al momento salieron chorros de semen de su polla. Se estaba corriendo un montón no me cabía en la boca, empecé a tragar pero no bastaba. Me la saqué y empecé a tragar mas tranquilamente, aun así le salió el último chorro que me cayó un poco por mi cara y mi cuello. Con la ayuda mi mano me lo tragué todo. También había caído bastante al suelo.

Yo: joder con mi hermanito que se corre mas que yo, en esos huevos tan gordos tienes mucha leche.

Adrián: jejeje, si. Joder Jaime ha sido lo mejor, creía que esto nunca me iba a pasar. Gracias.

Yo: de nada hermanito, tu también lo has hecho genial.

Limpiamos lo que había caído al suelo, y nos fuimos cada uno a su cama a dormir.

Adrián: Jaime, esto lo repetiremos?

Yo: si, si tu quieres claro.

Adrián: claro que si.

Luego nos dimos las buenas noches y nos dormimos. Me costó dormir pensando en lo sucedido, pensé si había hecho mal, pero los 2 estábamos felices así que no creo que estuviera mal.