Hermanos adoptados (2)

Continuación de Hermanos adoptados. Gracias por vuestros comentarios y animarme a seguir. Recuerdo que es un relato inventando.

Me desperté por los rayos del sol, y poco a poco me fui despejando y acordándome de lo sucedido. Miré la cama de Adrián y ya se había levantado. En eso que entra por la puerta. Al verme, se le puso cara medio de saber que decir y medio de felicidad. Y tampoco sabia que decir, pensé en hacer como un día normal aunque no me pude resistir a poner cara de alegría también. Adrián vino a mi cama, destapó un poco la sabana que me cubría y se metió al lado mía y me abrazó.

Yo: Adrián y ahora porque te metes en la cama.

Adrián: Es que nunca he estado abrazado a un chico en la cama.

Yo: y si entra mamá o papá.

Adrián: Mamá se esta duchando y papá ha bajado a comprar el periódico.

Yo: Bueno pero solo un ratito.

Pasé mi mano por detrás de su cabeza y él apoyo su cabeza en mi pecho y paso su mano alrededor de mi cuerpo. Me sentía muy bien, notando su cuerpo pegado al mío.

Adrián: Jaime.

Yo: Dime.

Adrián: y mamá que piensas de que seas gay.

Yo: pues nada, le pareció bien. Si es lo que a mi me gusta en teoría no tiene que a ver problema.

Adrián: yo es que me da miedo, y me gustan los chicos pero a veces me gusta alguna chica, estoy un poco confuso.

Yo: bueno es normal, a mi también me paso al principio. Tu no te preocupes, poco a poco iras sabiendo que te gusta de verdad y no tienes por que decirle nada a mamá. Ya llegará el día en que se lo querrás decir.

Adrián: Te gustó mi polla?

Yo: claro y ahora porque dices eso?

Adrián: No se, como la encuentras.

Yo: bien ni grande ni pequeña, es normal, ya te crecerá más seguro. O tus amigos la tienen mas grande?

Adrián: Mas o menos como la mia. Lo que hay uno que la tiene mas grande que tú. Pero bueno ese es repetidor.

Yo: bueno siempre hay alguien que la tiene mas grande pero eso a mi no me importa, ni te tiene que importar, bueno a no ser que te gusten grandes jejeje. (reímos los 2). Ya has desayunado?

Adrián: no aun no.

Entonces Adrián me empezó a acariciar la barriga y de pronto puso la mano en mi paquete y empezó a sobarlo. Mi polla sin remediarlo se empezó a poner dura.

Yo: Adrián ahora no.

Adrián: Por que no me das mi desayuno.

Yo: ahora mejor que no, en otra ocasión.

Adrián: Venga quiero de tu leche. (metió la mano dentro y la empezó a pajear despacio)

Yo no me pude resistir, me estaba poniendo a mil y no quería defraudar a mi hermano, así que lo deje hacer. Siguió masturbándome dentro de la ropa interior. Después me la sacó y la pajeaba ya con más decisión. Yo empecé a gemir, aunque miraba de no hacerlo muy fuerte. De pronto se acerco a mi polla y empezó a besar mi punta. Era maravilloso. Hasta que por fin se metió todo el capullo dentro y empezó a chupar sin parar.

Yo gozaba y gozaba mientras él me la chupaba. Cada vez le iba entrando más polla en la boca. Yo le cogía de la cabeza para acariciarle el pelo mientras lo hacia. Esta vez se llegó a tragar la polla entera. Miraba como su boca subía y bajaba con mi polla dentro. A veces se entretenía a acariciarme los huevos.

Empezó a meterse mi polla con más rapidez en su boca, parecía que estaba desesperado que quería mi leche ya. Yo no le iba a defraudar, lo empecé a sentir muy bien. Mi hermano cada vez la chupaba mejor. Mi polla se endureció lo más posible. Él se dio cuenta y chupaba como nunca había chupado de rápido a la vez que me acariciaba los huevos. Mi cuerpo se arqueó, empecé a gemir como un desesperado hasta que mi polla rebentó dentro de su boca. Empezó a salir chorros de leche en su boca y él lo empezó a tragar. No le cabía todo pero cuando se tragó lo que tenía en la boca fue lamiendo lo demás. Luego siguió chupando mi polla para lamer los restos que quedaban.

Adrián: que tal lo he hecho?

Yo: muy bien, ha sido genial. Que tal la leche?

Adrián: un poco como agria pero estaba buena.

Acerqué mi mano hasta su paquete, y pude notar que su paquete parecía una tienda de campaña. Su polla ya estaba dura. Metí la mano dentro y la empecé a sobar.

Yo: mmm que polla que tienes, ahora la probaré yo.

Adrián: me gusta mucho como lo haces.

Estuve un rato más toncandola, hasta que oimos a mi madre salir del cuerto de baño, tuvimos que parar por si nos pillaba. Cuando se nos bajo la erección fuimos a la cocina a desayunar.

Yo: que no se te olvide me debes tu leche.

Adrián: Tranquilo no se me olvidará.

Desayunamos tranquilamente. Yo lo miraba y no podía creer que hubiera ocurrido todo esto. Que él fuera gay también y de hacer lo que hemos hecho. Ahora me fijaba más en él, en su cuerpo, el su cara, en su forma de moverse.

Mientras desayunábamos, nuestra madre nos dijo que nos teníamos que ir todos a casa de unos amigos a comer, y que nos teníamos que preparar. Un poco sin ganas la verdad, acabamos de desayunar y nos fuimos a la habitación. Haciendo tonterías se nos paso el tiempo sin darnos cuenta y en seguida vino nuestra madre a meternos prisa de que nos ducháramos y nos vistiéramos. Yo me fui a duchar, y le dije a Adrián que dijera que se duchaba conmigo para ir mas rápidos. Algunas veces nos habíamos bañados juntos pero hacia mucho tiempo que no, y eran otros tiempos.

Yo estaba en el baño y entró él. Yo ya me había quitado la camiseta.

Adrián: Espera déjame quietarte la ropa me hace ilusión.

Yo: Bueno como tu quieras.

Me quitó los zapatos los pantalones y los calzoncillos y me dejo desnudo. Me empezó a sobar el paquete otra vez.

Yo: espera que ahora me toca a mí.

Le quité la camiseta, luego los zapatos, los pantalones, y por ultimo sus calzoncillos. Su polla ya salió un poco dura. La acaricié un poco junto con sus huevos. Abrí el agua de la ducha y nos metimos dentro. Una vez dentro le apoyé en la pared, y yo me arrodillé frente a su polla. La empecé a pajear, y a chuparle los huevos. Él gemía de gusto mientras yo le hacia esto. Luego le lamía su polla desde abajo hasta arriba y luego solo su punta. Mas tarde me metí la punta en la boca y empecé a chupar. Cuando estuve un rato chupándole la punta me metí de golpe toda su polla que ya estaba durísima. Era muy suave y me encantaba su sabor. Mientras se la chupaba le apretaba un poco los huevos y eso le gustaba porque gemía más. Empecé a chupar con rapidez y locura. Cada vez más.

Adrián: Jaime que me vengo ya, no aguanto. Me corro me corro.

Al decir eso, empezó a correrse en mi boca. Yo empecé a tragar y tragar pero de esa polla no paraba de salir leche. Con 16 años y se corria un montón. Tragué como pude. Después le chupe otra vez la polla para limpiársela como había hecho él antes.

Adrián: ahh, ahh, joder que bien, ha sido lo mejor.

Yo: me alegro. Te corres un monton tio.

Adrián: eso te molesta?

Yo: no, tranquilo.

Se me abrazó y yo le abracé a él. Nos empezamos a acariciar un poco.

Adrián: espero encontrar algún día un chico como tú.

Yo: seguro que lo encontrarás. Con lo guapo que eres y ese cuerpazo que tienes.

Adrián: En serio.

Yo: si ya lo verás.

Me abrazó un rato y estuvimos así un rato. Yo le cogí del culo, tan redondito y apretadito que lo tenía. Nunca me había parado en pensar como sería tocar su culo y la verdad era fantástico. Con una mano en cada nalga se lo iba acariciando. Me dejé llevar por la emoción y poco a poco fui metiendo una mano en su raja, hasta que uno de mis dedos llegó a su ano. Cuando se lo toqué Adrián dio un gemido pero no dijo nada mas. Seguí tocándolo y dando vueltas con el dedo en su ano. De pronto oímos la voz de mi madre diciendo que no tardáramos tanto. Así que dejamos lo que hacíamos y nos duchamos.

Pasó el día en casa de nuestros amigos. Llegamos a casa un poco cansados la verdad. Estuvimos por casa haciendo cualquier cosa. Vino un vecino de la edad de mi hermano y estuvieron los 2 entreteniéndose en la habitación. Me empecé a fijar en el amigo de mi hermano y la verdad nunca me había fijado de esa manera en él. También tenía la suyo. Parecía tener un buen culo, era un poco más alto que Adrián, más o menos igual de delgado y se le notaba un paquete normal y corriente. También empecé a observar a Adrián a ver si se fijaba mucho en él. Alguna que otra vez veía que Adrián le miraba mucho, pero tampoco le di mucha importancia.

Cuando se fue el vecino, le fui a preguntar.

Yo: Dime, te mola?

Adrián: Quién? Javier (así se llamaba el vecino).

Yo: si

Adrián: es guapo si, digamos que si, jejeje.

Yo: ehhh, miralo, y has intentado algo con él?

Adrián: que va, me da mucha vergüenza.

Yo: bueno pero siempre esta la excusa de la paja y luego os la hacéis entre vosotros.

Adrián: ya pero nose.

Yo: y lo has visto desnudo?

Adrián: si, esta muy bien, tiene un buen culo, y su polla es un poquito más grande que la mía no mucho mas.

Yo: y hay alguno que te guste mucho?

Adrián: si uno de mi clase.

Yo: quién lo conozco?

Adrián: si, Pablo.

Yo: ah vale, si si jeje, es muy guapo. Pues ya sabes lo invitas a dormir un día.

Adrián: bueno ya veremos.

Llegó la noche, cenamos. Después de cenar nos fuimos a nuestra habitación a ver la tele. Estuvimos viendo una película mientras Adrián estaba en el ordenador hablando con amigos suyos. Al rato se viene a mi cama donde estaba yo tumbado viendo la película y tumba al lado mía.

Adrián: Ya he quedado con ese chico para pasado mañana.

Yo: Vendrá aquí?

Adrián: si, aun se lo tengo que decir a mamá.

Yo: no creo que haya problema.

Adrián se me abrazó un poco y me empezó a acariciar. Yo le pasé la mano por detrás y le acariciaba la espalda.

Adrián: Jaime.

Yo: dime

Adrián: Tu me la meterías?

Yo: Y ahora porque preguntas eso. Porque no esperar a un chico que te guste de verdad.

Adrián: es que no me importaría que tu me la metieras por primera vez. Es más me gustaría que fueras tú.

Yo: no lo se Adrián. Ya veremos.

Me empezó a acariciar la barriga y el pecho. Luego a besarme los pezones. Y puso la mano encima de mi paquete y lo empezó a sobar.

Yo: Adrián, que pueden entrar en cualquier momento. Espérate al menos a que se vayan a dormir.

Paró de tocarme, y nos pusimos a ver acabar la película. Nos quedamos en la misma cama pero sin hacer gran cosa. Nuestros padres se fueron a dormir. Yo estaba tumbado de lado y Adrián estaba en frente mía también de lado dándome la espalda. En eso que él hecho el culo para atrás hasta tocar mi paquete con su culo. Cada vez fue empujando más y restregándolo más por mi paquete. Yo pase la mano y le agarre de la cintura y me acerqué mas a él y pegué toda mi polla en su culo. Adrián empezó a moverse para sentir mi polla en su culo.

Adrián: Jaime me encanta tu polla, no pares por favor.

Yo: y a mi tu culito que tienes.

Adrián: por eso Jaime métemela por favor, quiero sentirla dentro.

Yo: Bueno pero antes chupamela un poco.

Adrián se giró, y me quitó mi ropa interior. Salió mi polla ya lo más dura posible. Y seguidamente se la metió directamente en su boca. Al poco tiempo ya se tragaba toda mi polla. Había aprendido rápido, se notaba que le gustaba chupar polla, y por lo que veía le iba a gustar que se la metieran. Siguió chupando como un desesperado, como si se la fueran a quitar de la boca. Le dije que parase, y le quite sus slips. Le dije que se pusiera boca abajo. Y le puse una almohada debajo de su barriga para que su culo quedase un poco para arriba y abierto.

Yo: si te duele o quieres parar avisame.

Adrián: vale.

Le abrí las nalgas, y pude ver su ano con algunos pelos. Me acerqué a ese ano y lo empecé a chupar. Primero con la lengua dando vueltas e intentándola meter un poco. Luego fui metiéndole un dedo. Se notaba que le gustaba porque empezó a gemir. Cuando ya lo tuve dentro, le metí otro. Los mantuve dentro un buen rato y moviéndolos para que se acostumbrara. Luego me puse mucha saliva en mi polla y me dispuse a metérsela. Le levante un poco más el culo, y coloqué la punta de mi polla que estaba erecta al máximo en su ano.

Cuando la tuve colocada, le dije que ya iba y empecé a empujar muy lentamente. Adrián se empezó a quedar un poco, pero me dijo que siguiera. Poco a poco iba entrando la punta de mi polla en su culo.

Conseguí que entrase la punta y paré allí para que se fuera acostumbrando. Le pregunte que tal estaba y me dijo que bien. Seguí empujando y ya entró del todo la punta y fue entrando mas polla cada vez. Se notaba que le estaba gustando aunque a veces se quejaba, no paraba de soltar gemidos. Yo mientras iba empujando mi polla dentro de su culo. Cada vez iba entrando más en ese culito redondito y prieto que tiene. Mi polla no podía estar más dura de lo que estaba y a mi me estaba encantando metérsela.

Ya había entrado como media polla y allí pare un rato. La movía un poco y cuando lo hacia Adrián gemía de gusto. Al rato empecé a meter otra vez y ya hasta que se la metí entera. Me quedé encima de mi hermano. Con mi polla metida dentro de su culo. Era fenomenal, tenia un precioso culo y mi polla estaba dentro. Mientras yo estaba encima le empecé a besar el cuello y los hombres y a acariciarle un poco.

Adrián: Mmm me gusta como me besas, sigue.

Yo: que tal lo llevas?

Adrián: bien, se siente mucho gusto con tu polla dentro, ves así de lento que duele poco.

Yo: vale, sigo.

Moví mi polla un poco y mi hermano ya empezó a disfrutar. La fui sacando poco a poco, no me costó mucho, dejé solo mi punta dentro y luego la fui metiendo lentamente pero sin parar otra vez, y luego a sacarla otra vez, así todo el rato poco apoco. Adrián empezó a gemir un poco sin parar. Yo entendí que le estaba gustado, así que fui un poquitín mas deprisa, adrián me decía que siguiera, yo poco a poco iba acelerando el ritmo. Él estaba disfrutando un montón, al igual que yo, ese culo era una maravilla. Nunca pensé que me follaría a mi hermano.

El ritmo de mis penetraciones llegó a un buen ritmo, él disfrutaba como nadie, gemía desesperadamente si subir demasiado la voz, y yo disfrutaba como un niño pequeño. Decidí que quería ver la cara de mi hermano disfrutando así que pare y le dije que se girase. Se dio la vuelta y me puse las piernas en los hombros. Le abrí el culo y le fui metiendo otra vez mi polla. Poco a poco fue entrado y empecé otra vez con el mete y saca sin parar. Ahora tenía también la polla de mi hermano a la vista, así que se la cogí y la empecé a masturbar. Ya la tenía durisima. Adrián estaba mirando al techo, disfrutando, gozando, estaba en otro mundo. Su polla se puso tensa y empezaron a salir chorros de semen encima suya. Encima de su pecho y barriga, el cuello, incluso llego un poco a su cara. Lo más que se llenó fue la barriga y el pecho. Si ya se corría bastante ahora se había corrido descomunalmente. Yo nunca me corría así. Dejé la polla de Adrián y me concentre más en la penetración.

Aceleré un poco más el ritmo y los 2 estábamos en exatisis.

Yo: joder Adri menudo culito que tienes, esta es lo mejor.

Adrián: no pares sigue, me encanta, sigue.

Yo: Adrián me vengo ya, no aguanto mas.

Adrián: Correte encima mía por favor.

Y así lo hice, cuando noté que me iba a venir saqué la polla de su culo y empecé a soltar chorros encima suya, los míos si que llegaron a su cara ya que me acerqué un poco. No me había corrido tanto como él pero había sido una de mis mejores corridas. Estaba todo lleno de leche y chupaba lo que tenía por la cara. Adrián estaba como medio ido, gozando y respirando muy profundamente mientras se tragaba el semen. Me puse a su lado.

Yo: que tal estas?

Adrián: como muy cansado pero ha sido lo mejor, lo mejor.

Yo: si tio me ha encantado, ha sido genial, no tengo palabras.

Adrián: me ha encantado que me la metas.

Yo: jejejej te gustan que te la metan ehh.

Adrián: bueno si, pero un día me tienes que dejar metertela ehh.

Yo: bueno vale.

Estábamos los 2, descansando, había sido lo mejor y estábamos cansados. Fui a por papel para limpiar a mi hermano, y luego me quedé al lado de él tumbado. Nos tapamos un poco con la sabana y nos quedamos medio abrazados.

Yo: te duele el culo?

Adrián: lo noto raro, ahora lo tengo como vacio. (nos reimos)

Yo: bueno ahora a descansar.

Adrián: si.

Nos quedamos dormidos medio abrazados en la cama. Al día siguiente nos despertó mi madre. Menos mal que no estábamos abrazados ni nada y no pensó nada raro, ya que alguna vez habíamos dormido juntos.

Adrián ese día tuvo el culo un poco dolorido, pero decía que con lo que había disfrutado esa noche no le importaba si le dolía un poco.