Hermanos

Dos jovenes hermanos, van al sur con sus padres, ven a su primo mayor teniendo sexo con una empleada, y terminan por experimentar cosas nuevas.

H E R M A N O S

Fuimos los cuatro de viaje al Sur, mis padres, mi hermana y yo. Dentro de nuestro viaje, íbamos hacer una parada en la hacienda que de una hermana de mi padre. La hacienda era hermosa y muy grande. Contaba con muchas cabezas de ganado y grandes plantaciones de todo tipo de frutas y hortalizas.

Apenas llegamos nuestra tía nos dio un cuarto para mi y mi hermana y otro para mis padres. La casa era tremenda y al fondo de esta había un establo y un poco más allá un granero. Yo en ese entonces tenía unos doce años y mi hermana diez. El único hijo de mi tía, mi primo Carlos, era mucho mayo que nosotros, calculo unos 19 años a si que muy poco nos pescó a nosotros, incluso nos cayo mal con mi hermana, cunado estábamos viendo televisión y el llegó y nos la cambió.

Pero no le dimos importancia, yo y mi hermana éramos muy buenos amigos, ya que siempre nos criamos en un condominio, donde éramos los únicos niños chicos y estábamos acostumbrados a jugar siempre los dos juntos

Una tarde, mientras íbamos a recorrer los dos el campo, entramos al granero y nos subimos a jugar al segundo piso, donde había un montón de heno. Nos podíamos tirar de una buena altura siempre cayendo muy blandos.

Estábamos en eso, cuando escuchamos que alguien entra al granero. Era nuestro primo Carlos, que comenzó dar vueltas por abajo, y a mirar por la puerta del granero. Nosotros pensamos que si nos pillaba ahí de seguro nos echaría, a si que haciéndonos gestos con mi hermana, nos quedamos callados y nos ocultamos entre el heno, para no ser sorprendidos.

En eso estábamos, cuando entra la sirvienta de la casa, la señora Rita, una mujer de unos 35 años que hacía las cosas en la casa de mi tía.

¡Por que demoraste tanto!

Es que tu madre me mando a limpiar unas cosas y no se iba nunca a dormir la siesta

Bueno .. pero ya estamos acá

Me esperabas

M si .. tengo muchas ganas de estar contigo

Yo también .. ¡ven acá mi niño!

Se fueron al fondo del granero y comenzaron a besarse apasionadamente y a tocarse sus cuerpos mutuamente. Ambos con mi hermana del lugar donde estábamos podíamos verlos perfectamente y si no nos movíamos ellos nunca se darían cuenta que estábamos ahí.

La Sra. Rita se saco la parte de arriba y mi primo le comenzó a besar los pechos, mientras su mano se metía dentro de su falta, entre sus piernas. Luego de un rato, el primo Carlos se coloca de espalda y se baja los pantalones, mostrándole su gran pene duro a la Sra. Rita.

Ahí la Sra. Rita lo tomo con su mano y se lo comenzó a acariciar, para luego metérselo en la boca y comenzar a chupárselo. Mi primo Carlos tomándole la cabeza, al parecer disfrutaba mucho de sentir la boca de la Sra. Rita en su pene.

Luego de un rato, la Sra. Rita le dijo que quería que se lo metiera, y arremangándose la falda, se montó sobre mi primo y comenzó a moverse de arriba abajo sobre el.

Yo miraba la escena sin perder ningún detalle y con un miedo increíble que mi primo se fuera a dar cuenta que estábamos ahí. Miraba a mi hermana que también estaba asustada y le hacia señas con el dedo que se quedara callada.

Al rato de estar la Señora Rita montada sobre mi primo, mientras este le besaba sus pechos, ella comienza a gemir y a decir que estaba "acabando" … a lo que mi primo le respondió … "Yo también" …. En eso se mueven muchos más rápido y se quejan mas y mas hasta que ella cae rendida sobre mi primo que siguió acariciándoles sus nalgas. Luego la Sra. Rita se coloca acostada al lado del primo y con su mano le sigue haciendo cariño sobre el pene de Carlos, pero ahora ya no tan duro y muy mojado.

Luego se levantan y se visten rápidamente. Ella se va y le dice que tiene que ir a terminar las cosas antes de que su madre despierte. Se dan otro apasionado beso y sale ella primero. Carlos se queda un rato dentro del granero, viendo a través de la puerta como se va la Sra. Rita, y cuando pasan 5 minutos, salé detrás de ella.

Yo sabía perfectamente lo que había pasado, había visto algunas revistas pornográficas en el colegió, pero era la primera vez que veía una tetas en vivo y en directo, y menos del tamaño de las que tenía la señora Rita.

Nos dio un ataque de risa con mi hermana al darnos cuenta que ya nos encontrábamos solos.

Te diste cuneta de lo que pasó

Obvio que si , pos tonta , si estaba mirando

¿Eso es hacer el amor?

Si po’ , eso hacen los grandes .. ¡ pero no se te vaya a ocurrir decírselo a los papas!

Nunca … me da vergüenza … yo nunca pensé que era así como lo hacían

Y como pensaste que era

No se .. distinto . … pensé que eran muchos besos acostados y sin ropa, pero no como eso

Bueno, yo mas menos sabía que era así ..

¿Si?

En eso escuchamos que mi padre nos llamaba de la casa, por que íbamos a dar una vuelta.

Al otro día íbamos nuevamente al granero cuando vimos que Carlos entraba nuevamente a el, antes que nosotros y cerró la puerta tras de el. Nos quedamos bajo un gran árbol y vimos como por la puerta de atrás de la casa, la Sra. Rita nuevamente, mirando hacia todos lados, volvía a entrar al granero.

A nosotros nuevamente nos dio un ataque de risa, ya que sabíamos exactamente a que iban.

No pusimos a caminar y nos internamos detrás de la casa, a un gran bosque donde corría un arrollo. Nos fuimos por la orilla de este hasta un lugar muy alejado de la casa.

Tengo ganas de ir al baño

Y anda

Pero no tengo papel

Ah .. vas hacer del otro

No , pero igual me seco después

Ah toma … ( le pase una servilleta que andaba trayendo en el bolsillo)

Mi hermana, como éramos de confianza, al lado de un árbol se baja los calzones y se coloca a mear. Muchas veces lo había echo, pero la imagen de mi primo con la Sra. Rita, el cuerpo desnudo de la Sra. Rita, me habían dejado caliente y mire detenidamente a mi hermana.

¿Que me miras?

No, nada , es que al verte a mi también me dieron ganas de hacer ( y me fui al mismo árbol y me puse a mear, mientras mi hermana se subía los calzones )

Oye … a ti … también se te coloca como al primo Carlos?

Si , pero no la tengo tan grande … mira ( y se la mostré descaradamente. Ella la miró de lejos y se rió )

Si se que no … ¿pero por que se les coloca a si?

Cunado te tocas ahí, se te agranda

Pero ahora te la tocaste y no se te agrandó

No , cunado te la tocas muchas veces, como se la tocaba la Sra Rita a Carlos

¿Y te crece mucho?

Mucho mas de lo que viste

Ahhh .. a ver .. hace que se te ponga mas grande

No tengo ganas ahora

Ya po .. déjame ver cunado te crece

Hagamos algo … áseme tu igual que la Sra Rita y seguro se me agranda

¡Que me la meta en la boca! .. ¡estas mas loco! .. mas encima recién hiciste pipi

No po con la mano

No … Igual esta manchada con pipi

Y si me la limpio en el agua

No se

No espere que mi hermana me dijera que no y sentándome en una piedra, me la lave con harta agua.

Ya , quedó limpiecita

No, mejor que no

Ya po’ .. si tu dijiste que si

Yo no te dije que si … te dije que solo quería ver cuanto crece

Por eso te digo … veamos cuanto logras que me crezca

No se … ¿ y si nos pillan?

No , si no pasa nada … acá no anda nadie

Y si pasa alguien por el cerro y mira hacia abajo

Ven , mira coloquémonos atrás de estos árboles

Detrás de los árboles la vegetación era mucho mas intensa aun y se formaba una especie de caverna, con los arbustos y zarzamoras. Mi hermana muy dudosa me siguió hasta ese lugar, pero me decía que mejor no y que nos devolviéramos. Pero a mi la idea ya me había gustado y quería a como diera lugar sentir la mano de otra persona en mi pene que no fuera la mía.

Mi hermana, miraba para todos lados y no quería hacerlo. Yo me baje los pantalones y deje mi pene ante su atónita mirada. Hace unos minutos lo había visto, pero había sido cosa solo de segundo. Ahora no, estaba ahí, delante de sus narices, a la espera de recibir su mano. Ella pensaba en hacerlo o no hacerlo, mientras yo le insistía en que nadie lo sabría, y que nadie no pillaría. A las finales estiró su mano y apenas lo toco, la volvió a retirar. Nuevamente le insistí, pero ya solo el roce de su mano había comenzado a hacérmelo crecer.

Mira como se te esta parando

Ves .. pásame tu mano … eso así .. para que crezca mas ( tomando su mano, la coloque sobre mi pene y este ya inmediatamente se agrandó aun mas )

Se siente raro

A mi me gusta … mira como me crece .. áselo mas rápido .. así

Te gusta sentir como te toco

Mmmmm mucho .. apriétalo mas que no me duele

Que grande se te puso

Sigue … se siente muy rico … mmmmm

Ya parece que no crece mas

Tu sigue tocándomela así … mmmm

Te estas poniendo medio raro

No me la sueltes

Ya no quiero seguir mas

Ya po .. un poquito mas nada mas

No, ya no quiero .. me cansé

Un ratito mas , y nada mas

No, ya te dije que no

Hagamos una cosa … yo te doy los 1.000 pesos que me dio mi papá

¿Si sigo? … ¡Ya!

Ya pero no con la mano ….

¿Como entonces?

Como le hacía la Sra. Rita al Carlos

¡Con la boca! .. ¡estas loco!

Anda …… di que si

No .. me da cosa

Pero viste como le gustaba a la Sra. Rita

Si …..pero no se ….

Son 1.000 pesos … por 5 minutos

¿Pero de verdad me los vas a dar?

Si oh .. si no los tengo acá , por que se me pueden perder .. si no te los hubiese pasado

¡Pero me los pasas!

Te lo prometo

Mi hermana lo pensó un poco y se arrodillo delante mió. Yo me eche el cuero para atrás y me dijo que así no, que le daba cosa. Lo dejé tal cual como estaba y nuevamente me lo tomo, moviéndolo un poco, pero no se atrevía a metérselo a la boca.

Luego de mucho pensarlo a las finales lo hizo.

Vi como mi pene se iba metiendo a su boca, dejándolo adentro. Le dije que lo hiciera igual como lo hacía la señora Rita y ella me hizo caso. La verdad se sentía mucho más rico que en su mano, sin importar que de repente sintiera sus dientes.

Ella quiso parar varias veces pero yo, que era el que tenía reloj le decía que no habían pasado los 5 minutos y la tuve ahí como unos quince. Cunado ya se quejo que le dolía la mandíbula, tuve que parar y guardármela.

Antes de llegar a casa nos prometimos que nunca se lo diríamos a nadie, le pase su plata. En los días siguientes quite que me la volviera a chupar pero no pude, según ella no le gustó. Solo conseguí que me la jalara un par de veces a cambio de unas cosas mías que tendría que regalarle al llegar a casa.