Hermanitos (13)

¿Te cogiste a papi, hermanita? –Umhu. Se súper calentó, se me echó encima y me cogió violentamente, me contagió su frenesí, me violenté y todos sudados por los movimientos tan vigorosos, llegamos juntos a un gran orgasmo

REMENBRANZAS CON PAPI,

DESCUBRI UNA HERMANA.

Antecedente: Hermanitos (12).

Desperté. Papi vigilaba mi sueño. Agradecida, me abracé a él, a la vez que le decía: Papi, cuánto te quiero, te amo, no sabes lo feliz que me has hecho. Bien dicen que el incesto es el manjar de los dioses. –Sí mi hijita para los espíritus fuertes, pero supe de dos casos terribles: 1º Cuando estudiaba la secundaria, mi amigo más cercano, era a su vez muy cercano y tal vez único de un tercero, de suyo taciturno, al que un buen día ya no lo vimos más. Al preguntarle a mi amigo, me platicó el drama del muchacho.

Era de una familia acomodada, falleció el padre y quedaron al garete, su madre, él y su hermana, que se vieron precisados a dormir en una sola cama y mi amigo, me platicaba que tenía sueños vergonzosos. Poco antes que desapareciera, despertó en medio de uno de esos sueños, resulta que su hermana estaba montada en él, fornicándolo y su mamá estaba despierta. La botó, se vistió y se salió de su casa, decido a no verlas más, pues llegó a la conclusión de que sus sueños que tanto lo avergonzaban eran realidad y que su madre y su hermana se lo turnaban.

El 2º lo leí en la red. Un hombre maduro que confesaba que tenía incesto con su hermana desde que eran muy jóvenes, pero que, se trataba de un acto puramente lujurioso, durante el cual nunca se dirigían la palabra, que el primero que terminaba, dejaba al otro botado y se alejaba corriendo del lugar y luego no se atrevían ni siquiera a verse la cara, hasta que la lujuria los vencía nuevamente y toda su vida andan cargando con esa culpa y la enorme vergüenza que conlleva.

En cambio tú, mi hijita, nos has enseñado, cuando menos a mí, pero a tu hermano lo veo también muy feliz, que el incesto es un acto de amor, de amor sublimado y hoy, te amo más que en el pasado, con ser que, siempre has sido la luz de mis ojos. Y siento que los dos lo hacemos con la mayor de las lujurias, con la morbosidad que implica la perversidad de que un padre se coja a su hija, pero con mucho, mucho amor. Así las cosas mi hijita, en efecto es el manjar de los dioses que nos atrevemos a saborear.

-Por respuesta, abracé fuertemente a mi papi y me di cuenta que su verga estaba parada y palpitante por lo que dije, un poco sorprendida: ¡Estás listo para otro papi! –hace muchos años que estoy listo para ti Nayeli. Pues tú fuiste una “nínfula”. ¿Habías oído esa palabra? –No papi, contesté sin dejar de pajear su hermosa verga que ya quería tener adentro. -Se trata de un novelista célebre y exitoso de mediados del siglo pasado, Vladimir Novokok, quien en su novela cumbre, “Lolita” define a la nínfula como una niña pre púber que comienza a ovular con escasa o casi nula menstruación, antes de que se le manifiesten las características sexuales secundarias o sea pelitos, tetas y amplias caderas. La película por cierto, desvirtúa  este tema, que a mí me parece que es el central de la novela. No menciona a la nínfula y la protagonista es una mujer joven de enormes tetas y exuberante en todo lo demás.

-Sí papi a mí me pasó eso, tendría yo diez años o tal vez nueve, cuando me salió de ahí como un espumarajo de sanguaza. Madre me dio un calendario para que anotara cada vez que me ocurría y así, podría prevenir para usar un protector. No ligué entonces que estaba relacionado con lo otro que me pasó: en tu presencia papi o con el contacto físico con mi hermano, yo sentía cosquillitas en mi puchita. La primera vez que me pasó contigo, pensé que tenía ganas de hacer pipí, por lo que me disculpé y fui al baño y nada, pero me di cuenta que mi cosita estaba húmeda, toqué, sentí muy bonito y me di cuenta que no era pipí, sino algo resbaloso, como una mielecita, la olí, la probé y me gustó. Me toqué más y salió más. ¡Vaya maravilla! Me dije y fue entonces cuando comencé con lo que madre llamó “mi locura” de querer casarme con mi hermano.

No había dejado de masajear la verga de papi, así que le dije: Papi quiero que me cojas como a ti te gusta o como te guste más. Papi atendió mis senos, primero con las manos, luego con la boca, dándome leves mordiditas en los pezones, que me hacían vibrar. Me pidió que me acostara de lado, luego flexionó mi pierna que tenía arriba, la levantó un poco y me la metió. Ouh, ouhh, ouhhh que gran placer. Entonces, me pidió que apoyara la espalda en el colchón y esa torsión, hizo que se apretara mi vagina, se disparó el perrito. Papi me besaba a la vez que efectuaba el mete saca, palpe y me di cuenta, que en el caso de máxima penetración, entraba tal vez la mitad (postura ideal para mi monstruo, pensé), pero él ejercía un dominio total sobre mí, de modo que la sensación era de plenitud y yo me entregué a mi papi con mucha pasión.

Cambió de pose, me puso en la orilla de la cama y se puso en postura, “Armas al Hombro”, otra posición de dominio del macho. Yo trataba de cooperar lo más posible, apoyé codos y antebrazos sobre la cama y así pude realizar un movimiento de rotación, acoplado a los movimientos de papi. Ahora, me tendió boca arriba, abrí y flexioné mis piernas, papi entro y lo abracé con pies y manos y nos movimos, nos besamos, hasta que nos envolvió el frenesí, cuando vi que papi estaba a punto, agregué el movimiento de rotación de mis nalgas, a la vez que le decía. Papi te amo, te adoro, me encanta que me cojas, que me hagas tuya y nos venimos los dos en medio de gemidos, convulsiones, espasmos, gritos y temblores. Se salió papi y se dejó caer de lado, de inmediato fui y lamí su pene para limpiarlo. Me acosté a su lado y le dije al oído; Te amo papi. Gracias por la vida, por la crianza, por mi carrera, por las acciones, pero sobre todo, por compartir conmigo el manjar de los dioses. Percibí como se iba regularizando su respiración y me quedé dormida.

Me despertó el celular de papi. Ya estaba contestando. Me dijo –buenos días hijita. ¿Cómo amaneciste? Tenemos desayuno con Manolo a las 9:00. –buenos días papi. Este ha sido mi mejor amanecer papi. Le di un beso fugaz en los labios, me levanté, me puse una bata ligera, y le dije: te preparo el baño y me voy a bañar al otro baño; pues el padre caliente y la hija más, capaz que no salimos a tiempo. Tomé mi celular, marqué, buenos días Sara. ¿Quién está en el coche del ingeniero, aquí en mi casa. –Buenos días Nayeli, están Soco y Tomás. -Gracias Sara, nos vemos más tarde. Marqué a Soco. Buenos días Soco ¿En dónde estás? –Buenos días señorita. Estoy en el garaje de su casa, en el coche de su papá. -¿Quieres por favor traer la ropa del ingeniero? –Seguro señorita, en seguida la subo. –regresé a la recámara, recogí la ropa sucia de papi y bajé con ella. Llegó Sara, en cuanto la vi, le dije que bonito uniforme, le llegaba a media pierna y lucía muy bien sus hermosos y esculturales muslos mulatos, que se me antojaba acariciar.  –Me lo dio ayer la Srta. Brenda, espero le guste. Te queda muy bien, luces muy hermosa, señalando con la vista sus piernas y le acaricié la mejilla. ¿Te molesta si te abrazo? –Creo señorita que me agradará mucho me contestó. La abracé, jalé un poco mi bata para sentir sus muslos desnudos en los míos y la besé, Soco besaba delicioso. Acaricié sus nalgas y ella las mías. Muy a mi pesar, rompí el beso. Ya tendremos oportunidad de hacerlo con calma.

Intercambiamos la ropa; subí la limpia, la acomodé en una silla y pensé: tiene buen gusto Brenda para seleccionar la ropa de papi y me fui a bañar. Cuando regresé, bañada, vestida y con los dos jugos de naranja frescos, papi estaba terminado de vestirse. Tomé mi celular y escribí: Buenos días. Dile a Palma que descubrí una nueva postura que nos será muy placentera a los dos.  Le acomodé el nudo de la corbata, entre beso y beso, tomamos el jugo y salimos. Papi me detuvo antes de llegar a la puerta y me comento: -Nayeli, mi hijita, si las circunstancias resultan propicias ¿Estarías dispuesta a que juntos cogiéramos con Brenda? –Claro que sí papito, lo haría encantada. Le dije otra vez, te amo y lo besé en la boca.

En el camino me dijo -¿Sabes hijita los meses de noviembre y diciembre los pasaré en Europa con tu mamá. La Navidad y Año nuevo los vamos a pasar con unos amigos en España. Me gustaría que me ayudaras estos meses –Seguro papi cuenta conmigo. –Verás, tengo la facultad que nunca he usado de nombrar un Subgerente  General para el Corporativo, quien absorbería mis funciones cuando yo no estoy. Tengo presente lo de tu tesis, esto no te quitaría mucho tiempo. Brenda estaría trabajando contigo. La puedes nombrar Coordinadora del Corporativo y delegarle algunas de tus funciones y ayudarla, pues se haría acreedora a una compensación. –Papi, sólo una pregunta: ¿Por qué no nombras a Brenda directamente? Nayeli… Brenda es tu media hermana, pero no puedo reconocerla oficialmente, por muchas razones que ya te platicaré, entre ellas que eso provocaría muchos celos en el Corporativo que se desbalancearía en trabajo en mi ausencia y Tú no podrías hacer, ni decir absolutamente nada. Está bien papi, ya te dije cuenta conmigo para todo y le acaricié la verga sobre el pantalón, que para mi sorpresa, estaba parada. –Entiendo –me dijo –que así sellas tu compromiso, ¿Verdad mi hijita? –Te amo papi.

Llegamos con Manolo, nos esperaba en la puerta, fuimos a un privado en el restaurante y platicó así: -resulta que me ofrecen el 85% de las acciones de la Cava, estas, todas son preferentes el otro 15 está en bolsa. Yo cuento con la mitad para adquirir el paquete del 85. Requiero socios para la otra mitad. Como veo que a Nayeli lo gustan los negocios, pensé Ingeniero, que quizá les pudiera interesar entrarle conmigo. -He visto Manolo que eres un negociante hábil, pero sobre todo, un ejecutivo muy trabajador con mucha visión y tienes muy buena experiencia en la rama restaurantera. Por lo que sí es viable nuestra participación Manolo. Además hijita a ti y a tu hermano les gusta bastante ir a comer ahí y a partir de hoy, creo que regresaré con mucha frecuencia, de modo que la forma de lograr que de lo mucho que vamos a gastar en ese restaurante, regrese algo a la familia, pues  es teniendo acciones del lugar, je, je.

Pienso también mi hijita que es muy saludable que las tres bellezas están unidas en otros negocios, como éste que no les consuma mucho tiempo, aparte del principal que es el de las Veigas, y en forma independiente a sus maridos. {-Aquí pensó Nayeli. ¿Sera que papi nos quiere coger a las tres? Si es eso, yo le ayudo con o sin acciones}. -De modo Manolo que Nayeli tomará un 14.16%, Kalena otro y si Cesarito piensa como yo, que supongo que sí, Verónica el otro 14.16%. Mi hijita habla por favor con Kalena y dile que le debo mi regalo del día de la presentación que este es el adecuado. En este momento hablo con Huberto y con Cesarito.

-Marqué el cel de Kalena, luego de los saludos y las salemas de uso entre nosotras, le dije que estaba desayunando con mi papi y Manolo, me interrumpió para decirme: -¿Supiste que Manolo va a comparar la Cava? Qué ganas de entrarle con él, pero tú sabes cómo andamos ahorita de lana. Ah por cierto, tú y Carlitos comen seguido ahí ¿Verdad? –Sí Kalena a mi hermanito y a mí, nos encanta. También sabemos lo del  negocio. Te llamo para darte un recado de papi, dice que te debe tu regalo del día de la presentación y que este es el que le parece adecuado. -¿Qué, me regala participación del negocio con Manolo? –Sí Kale, papi te regala un 14.16% de acciones, otro tanto para mí y ahorita está hablando con César para que Vero compre el otro 14.16 y Manolo llevará el 42.5% que es la mitad de paquete de acciones a la venta. Sí, sí Kale, lo que pasa es que papi te ve como a una hija, porque Carlos ya te considera su esposa. – Volvió a interrumpir Kalena: -Dile a papi que muchas gracias. Que lo amo, que me lo comería a besos si lo tuviera enfrente. -Se lo diré Kale, ya tendrás la oportunidad de hacerlo. Manolo nos avisará, cuando debemos estar aquí las tres. Podemos hospedarnos en la casa, o las tres solas nos hospedamos aquí con Manolo.

Entró Brenda como un bólido a mi oficina. Me levanté para saludarla, le besé la boca, respondió y me dijo al oído: -el que me debes, tendrá que ser en donde yo quiera ¿Estás de acuerdo? –Claro que sí y se me humedeció la vagina al pensar en donde lo quería. –Te vengo a avisar que a la 11:00 tenemos junta en la oficina del ingeniero. Aplaza por favor tu peinado para las 12:00, tal vez terminemos antes, pero te dará tiempo, no será muy larga la junta. Desde hoy Na, puedes entrar a la oficina del ingeniero cuando lo necesites. -Se fue y Seguí en el repaso de mi presentación.

Me dirigí a la oficina de papi, faltando 3 minutos para las 11:00. Al salir me dijo Sara: –ya llegó la peinadora –que me espere por favor, voy a estar en la oficina del ingeniero. Seguí el protocolo establecido, entré, papi se puso de pie y nos fuimos a la mesa redonda, nos sentamos y me dijo. Ya firmé tu nombramiento, en este momento Brenda está pasando la información a tu tableta. Vamos a abrir una nueva cuenta de la empresa, en donde tú puedas firmar indistintamente conmigo. De ahí tú tendrás que hacer transferencias a varias cuentas para el gasto corriente, a la de Brenda para los gastos de oficina y de la familia que incluye la mesada de Carlos. Tú ya estás en la nómina. En esa cuenta estarán los fondos para el negocio con Manolo. Haces la transferencia directamente al vendedor, sin triangular y delante del notario.

Tocó Brenda la puerta, abrió, se asomó y dio el paso a tres individuos. Dos eran del Banco y otro era el contador de la empresa. –Señores –dijo mi papi –les presento a la Licenciada Nayeli Valencia, quien acaba de ser nombrada Subgerente General del corporativo. Los he llamado porque vamos abrir una cuenta para el manejo de sus funciones. Brenda, por favor entrégales copia de la escritura en donde vienen las funciones del Subgerente General y el poder que tengo para nombrarlo. Mientras la revisaban, papi nos jaló a Brenda y a mí a su escritorio y dijo en voz baja. Nos regresamos juntos los tres después de la comida. –Mirándome  a mí, agregó: -En cuanto terminemos esto, Brenda se va a la Cava para coordinar todo allá.

-La revisaron, dijeron que todo estaba bien. Nos dieron el número de la cuenta, los nicks y números confidenciales. Brenda trajo una note-book. Papi hizo la transferencia. Nos entregaron una chequera y nos dijo que a partir de mañana podíamos girar.

Brenda se fue, mirándome pícaramente me dijo –me llevo a Soco, ustedes se van con Tomás. Te prometo que a partir de mañana ya te la dejo. -Gracias Brenda contesté. Me fui a peinar. Sara se metió conmigo. La peinadora estaba lista. La saludé y le dije, será mejor que me cambie de una vez ¿Verdad? –Sí es mejor –me contestó. Comencé a sacarme el vestido, ella me ayudó y gocé su cara de sorpresa al notar que no traía nada debajo del vestido, venía Sara con el recambio y comenté –voy primero al baño y así, completamente desnuda fui y vine. En realidad lo que quería hacer, era cambiarme el tampom que absorbía mis jugos lubricantes.

A las 13:00 menos diez, marqué por el interfono y dije, estoy lista papi, a la hora que digas. –Paso por ti a tu oficina hijita –me contestó y a mi vez respondí: gracias papi te espero. Llegamos a la Cava al cuarto para las dos de la tarde. Sara se metió corriendo con mi tableta, Soco vino a abrirme la puerta y Tomás lo hizo con papi. Entramos. Papi comenzó a saludar gente, vi que Brenda estaba en el pódium y fui a alcanzarla. Nos saludamos de beso en la mejilla, me explicó las conexiones. Brenda era una mujer muy bella, menor que Carlos, mayor que yo, tenía mucha clase, era esbelta súper sensual. Mirándola a los ojos le dije, me urge pagarte, no me gustan las deudas. Sonrió muy coquetamente y me dijo –el ingeniero ya está en su lugar, te llama.

La comida fue un éxito. Dicen que mi presentación también. El rector me felicitó en público pidió a todos los involucrados que participaran con mucho entusiasmo en este proyecto interdisciplinario, que le veía un futuro promisorio a este tipo de proyectos. Me citó mi asesor para el día siguiente.

De regreso a la oficina, yo iba en medio de papi y Brenda. Papi dijo: -Nayeli, Brenda, aunque ya lo saben, quiero hoy decirlo en conjunto, ustedes son hermanas. –Me abalancé y abracé a Brenda y le dije, me va ser muy fácil quererte hermanita. Volvió a hablar papi. No es conveniente que por ahora se comente en la oficina. De modo que ahí, seguimos todos con los protocolos vigentes. Brenda ¿Podemos hacer un desayuno mañana a las 8:00 para todo el personal, luego de la toma de posesión de Na? -Seguro que sí Ingeniero. –Bien, vamos a casa de Nayeli.

-Una vez en la casa, pasamos a la recámara. Subí una botella de champaña, puse música para mi papi, Glen Miller, ya saben. Brenda comenzó a desvestirme, mientras me decía -ven hermanita, vamos darle a papi un hermoso espectáculo. -Desnudas las dos en la cama nos besamos las bocas en las más diversas posturas, juntando nuestros senos, enlazando nuestras piernas. Me encantaba la boca de mi hermanita recién descubierta, era insaciable como la mía, le encantaba hacer saliva y pasarla a mi boca con su lengua, yo la saboreaba con especial gusto, me encantaba chupar sus labios y cuando los succionaba, ella metía su lengua para jugar con la mía. Por fin soltamos el beso y Brenda se abalanzó sobre mis tetas. Wauuu que placer me daba mi hermanita, besando mis senos, lamiéndolos, pasando la lengua sobre mis areolas, succionando mis pezones. Cada figura me producía un estremecimiento  Luego me dijo: -hora de pagar deudas hermanita. –Se sentó a la orilla de la cama, por el lado en donde estaba papi sentado, flexionó las piernas apoyando los pies sobre el borde de la cama, el cuerpo ligeramente hacía atrás, descansando los antebrazos sobre la cama; era maravillosa la vista que le ofrecía a papi. Llegué, casi pegando mi nariz olí una y otra vez su embriagante aroma.

Besé su hermosa vagina por todos lados, saboreando sus líquidos. Pasé mi lengua a todo lo largo y lamí una y mil veces tan suculento manjar. Hasta que me dijo: -deuda saldada hermanita. Me avisas cuando quieras una tableta para Soco. -Y reímos. Se colocó al medio de la cama y me puso sobre sí, juntando nuestras tetas y me besó, saboreando la presencia de sus jugos vaginales en mi boca. Hicimos el 69, ella acostada en la cama como estaba, me giré y le ofrecí mi vulva, mientras yo retomaba mi deliciosa labor en su vagina rasurada. –Aquí hubo una inundación –dijo, mientras lamía mis abundantes jugos que escurrían por mis muslos.

Cambiamos la postura, me puse transversal a la cama  en cuatro y le pedí chúpame. Lo hizo, de modo que ella también en cuatro quedaba mostrándole a papi su hermosa vagina y papi vino y la penetró, eso la volvía loca. Cambié la postura a modo de que ella pudiera chuparme la vagina y lo hizo. Luego, papi se acostó boca arriba, así que fui y me clavé, me quedé quieta un rato y se disparó el perrito. Brenda vino y se sentó a horcajadas sobre la cara de papi, yo podía oír el chapaleo de su lengua y los sorbidos que le daba. En tanto Brenda y yo nos acariciábamos las tetas mutuamente y nos besábamos de lengüita. Papi se acostó transversal a la cama, con las piernas por fuera de la cama,  me clave en él, dándole la espalda, con las piernas abiertas y los pies en el borde de la cama; así Brenda, podía chupar los huevos de papi y mi vagina ocupada. Me resultaba tan erótico y morboso que a la vez que papi me cogía, mi hermanita Brenda me estuviera mamando la vagina, que no pude más y tuve un poderoso orgasmo líquido. Vi la cara de Brenda sonriente y escurriendo que me preguntaba: -¿Qué es esto hermanita, las cataratas del Niagara o la fuente de la eterna juventud? –A la vez que regresaba a beber los charquitos que se hacían junto a las ingles y papi se vino y Brenda captó todo el licor derramado y a su vez tuvo un gran orgasmo.

Al otro día, se realizó el trabajo de acuerdo a lo planeado, tanto en la oficina, como en la escuela y tuve la oportunidad de encargarle a Sara varias investigaciones para mi tesis. Llegamos al garaje, le pregunté que si tenía en donde guardar el coche en su casa, me contestó que sí, pero que estaba prohibido llevarse los coches de la oficina a su casa. Bien le dije, llévate el mío. La vi dudar, saqué de mi bolsa las llaves del mini Cooper y la jalé para abrazarla, nos abrazamos, nos besamos, nos frotamos los cuerpos, estaba a punto de decirle sube conmigo, cuando oímos la puerta de garaje, así que nos despedimos.

Entré a la casa y la gran sorpresa ahí estaba Carlos. Grité hermanito, solté la bolsa y corrí para alcanzarlo. Me aventé a su cuello, me cachó con ambas manos y rápido descubrió que no traía calzones. Nos besamos y así colgada de su cuello y besándonos nos fuimos a la recámara. Llegamos, lo desvestí, me saqué el vestido, nos metimos a la cama y le dije, pues con la novedad hermanito de que papi se quedó aquí. Un tanto extrañado me preguntó: -¿Trajiste a papi a la casa? –Umhu. Vino, se sentó en tu silla para ver las noticias, se bebió tu champaña y tu coñac, cenó en tu lugar y tus platos, se acostó en tu cama y se cogió a tu mujer. –Muy sorprendido y con sonrisa malosa me preguntó: -¿Qué…? ¿Te cogiste a papi, hermanita? –Umhu. Se súper calentó, se me echó encima y me cogió violentamente, me contagió su frenesí, me violenté y todos sudados por los movimientos tan vigorosos, llegamos juntos a un gran orgasmo. (Continuará).