Hermanito IV

Bonita experiencia de sexo oral

Hermanito IV

Hola mis amores preciosos, les mando muchos saludos y besos, el día de hoy les traigo una entrega más de su serie favorita, que espero les guste mucho.

Ese segundo día después de desayunar, fuimos a conocer varios lugares así como en un tipo tour en donde me la pasé muy bien al lado de mi familia, pero hubo uno en especial que recuerdo a la perfección, en el recorrido pasábamos a conocer un exfabrica abandonada, obviamente no íbamos solamente nosotros también iban otras familias, parejas, etc..

Cuando íbamos en recorrido había lugares donde podíamos mi hermano y yo a escondidas tocarnos, incluso besarnos de piquito, pero estando en la fábrica con tantos lugares tan buenos para esconderse, a mi hermano se le ocurre decirme.

  • Acompáñame a ver si hay un baño

  • Si hermanito.

Nos separamos tantito del grupo, avisándole a mi papá hacia donde nos dirigíamos, entramos a un tipo cuarto semi obscuro, donde había demasiado eco porque estaba vacío.

Ahí el me tomo de la cintura, me gira y me atrae hacia el me comenzó a besar super rico, de esos besos que no demuestran amor sino calentura, esos besos tronaban tanto de la desesperación de quererme coger.

  • Tranquilo hermanito.

  • No, yo te quiero coger ¡Ya! Aquí.

  • Estás loco aquí no se puede.

Me tomo del cabello e intento bajarme hasta la altura de su pelvis para que se la mamara, pero yo me negué, no quería arriesgarme a qué nos cacharan en el acto.

  • Vamos por favor hermanita, solo un rapidin.

  • ¡No! Eso es muy arriesgado, yo paso.

Inmediatamente el se abalanzó sobre para comenzar a besarme nuevamente, Me agarraba de las nalgas, las apretaba, en eso sí estaba de acuerdo en besarlo era un poco más fácil reaccionar y disimular si escuchábamos a alguien.

El me besaba con mucha lujuria y desesperación, me comenzó a tomar de la cintura, bajo sus manos hasta llegar a tocar con una mis nalgas y la otra la intentaba meter en mi pantalón para así poder tocar mi vagina se le dificultaba un poco, por lo apretado que me quedaba.

Se le notaba la desesperación por tocarme tanto que por ello me mordía los labios, me daba ternura esa desesperación, así que para ayudarle me desabroche mi botón para que pudiera explorar con tranquilidad.

Sin perder el tiempo el introdujo su mano, comenzaba a acariciar mi vagina por arriba de mi tanga, yo de placer lo abrazaba con más fuerza y ahora era yo la quien le mordía los labios para ahogar mis gemidos.

Se animó a más y metió su mano por debajo de mi tanga y acariciando mi labios vaginales, me besaba tan rico, nuestras lenguas jugaban, sentí como resbalaba su mano por mis nalgas hasta llegar a mi ano lo frotaba y frotaba con delicadeza, yo sabía que su objetivo era meter su dedito en el, así que le tomo la mano, me separé de él y metiendo su dedo en mi boca para lubricarlo.

  • Ya puedes meterlo hermanito.

Sin pensarlo, rápidamente metió su mano por debajo de mi pantalón acarició mis nalgas, se abrió paso entre ellas y metió su dedo suavemente.

  • Aaah que rico

Nos besamos el me tocaba y dedeaba tan rico, que mi calentura cada vez aumentaba más y más, metí mi mano en su pantalón, el no llevaba boxer así que se me hizo fácil tomar su pene y comenzar a masturbarlo de una forma lenta, les juro que estuve apunto de hincarme para mamarsela pero....

  • ¡Niños! ¡Hijos!

  • Mierda es papá.

Rápidamente nos acomodamos e intentamos controlar nuestro ritmo cardíaco.

  • ¡Amor¡ ¡Aquí están! - le decía a mamá.

  • ¿Que paso papá? - dijo mi hermano.

  • ¿Que diablos hacen aquí?

  • Entramos a explorar un poquito papi.

Tuvimos que unirnos nuevamente al grupo, yo ardía en calentura, la manera en que mi hermano me había tocado en un lugar entre comillas "público" me daba demasiado morbo.

El recorrido termino, lamentablemente no se nos presentó otra oportunidad de seguir tocandonos a pesar de que disimuladamente el me tocaba el culo, al llegar al hotel.

  • Partimos hoy a media noche al siguiente destino - Dijo mi papá.

  • Si pa

Ya eran por eso de las 9:20 de la noche así que entre junto a mi hermano a acomodar nuestras cosas, ropa, zapatos, cosas nuestra higiene personal, tardamos un poco ya que también queríamos dejar limpia la habitación una costumbre que nos enseñó mamá.

Ya faltaban menos de una hora para salir del hotel, estaba recostada sobre mi cama viendo algunas fotos de lasirena69 me encanta esa actriz nopor, ella se come unas vergas enormes así que la calentura regreso a mí pero sabía que sería imposible coger con mi hermanito, me llegó por detrás me abrazo.

  • ¿Que haces hermanita?

  • Nada - pagando rápidamente mi celular.

  • Crees que no ví, era obvio que veías una verga enorme. ¿Sigues calientita verdad?

Cómo terminó de formular esa pregunta puso su mano sobre mi vagina, la cuál estaba comenzando a segregar mis jugos vaginales.

  • No sé el porque pregunto si es más que obvio, tu sola te delatas.

  • Si, si lo estoy me dejaste muy cachonda en la fábrica y ver esas fotos me calentó a un más.

Mi hermanito se alejo de mi, se puso de pie al lado de la cama y saco su pene apuntando así mi boca.

  • Hagamos algo hermanita para bajar esa calentura.

Yo sin pensar en que podrían atraparnos, me metí su verga de una se lo mamaba rápido, sabía que no teníamos mucho tiempo, lo metía hasta mi garganta, mi saliva comenzaba a manchar un poco la cama así que opte por hincarme ya que sería más fácil limpiar el piso secar las sábanas.

Sus testículos los masajeaba, con mucha delicadeza para no lastimarlo, por momentos los metía en mi boca, yo creo que la rapidez con la que se lo mamaba y la excitación que le provocó el masajeó en los huevos que ya no pudo más y se corrió, haciendo que me tragara su semen sin poder esperarlo.

  • Lo siento hermanita pero es que hoy tu mamada fue de otro mundo, no pude aguantar más.

Sabia que difícilmente podríamos coger ahora y no porque no se le pararía nuevamente sino porque tardaría aún más en venirse y el tiempo era poco, creo que el noto mi agobio de no poder coger y bajar mi calentura.

  • Tranquila hermanita no te dejare así - decia mientras me levantaba del suelo y me recostaba en la cama.

Me bajo el pantalón, abrió un poco mis piernas y metió su cabeza en medio de ellas para comenzar a comerme el coño, movía en círculos su lengua para estimular mi clítoris.

  • ¡Ay! Que rico sabes hermanita.

Me puso una almohada en la cara para que con ella pudiera ahogar mis gemidos, lo cuales comenzaba a expresar, comenzó a meter sus dedos dentro de mí vagina, yo me sentía en la gloria por fin estaba desahogando toda esa cachondes que traía desde la tarde.

Me giro me puso en cuatro y seguía comiendo el coño yo sentía que quería correrme pero faltaba algo que me hiciera explotar, que me llevara al éxtasis, mi hermano noto todo eso e hizo algo que me llevo a la gloria, ensalivo su dedo y lo comenzó a hundir en mi culo, esa pequeña decisión me hizo correrme en su boca tan rico.

  • ¡Aaagghh! Hermanito

Estaba apunto de terminar mi órganos cuando...

  • Hijos ya es hora.

Era hora de partir, mi órgasmo fue interrumpido, en ese momento odie a mi padre.

Continuar.....

Hasta aquí el relato de hoy espero lo disfruten mucho y esten atentos a la continuación.

Les mando muchos besos y ya saben si quieren escribirme está mi correo y Twitter, aún que se me hace más fácil responder en tw.

Besos amores míos