Hasta el día de hoy 58

Ana rompe con su novio que la insulta delante de mi… Yo le rompo la crisma… Las chicas me dan explicaciones… y suma y sigue… vaya añito.

Hasta el día de hoy 58

Llevaba una temporadita de aúpa, para continuar con los problemas a finales del mes de Abril, justo antes de la Semana Santa paso lo de Ana, que era ya el remate. Para esas fechas ya se me había curado por completo el corte de la polla, pero seguía esquivando lo de las chicas, no sabía qué hacer exactamente, y tampoco quería complicarle la vida a Ana, más cuando eran tan buenas amigas suyas. Entonces paso lo suyo, me entere por casualidad porque llevaba un mes liado de narices con ambas carreras. Estaba cerca de la uni para entrar a un bar que había cerca, cuando andando despistado me arrime sin darme cuenta al novio de Ana, os aseguro que no me di cuenta que era él hasta que estuve encima, iba metido en mis cosas sin prestar atención. Confieso que me hice el despistado para evitar tener que saludarle, ya que me caía como el culo por ser tan imbécil como era.

Tenía una pinta y unos aires de chulito de tres al cuarto que me daba repelús, era superior a mí, desgraciadamente era el novio que Ana había ido a elegir, en fin. Pasaba por detrás suyo sin que él me hubiera visto tampoco, afortunadamente, cuando le oí decir a las dos chicas con las que estaba hablando que había roto con la "putita" a la que se estaba follando porque ya le aburría..., que si alguna de ellas quería salir con él esa noche... Vale de acuerdo, era patético y las otras dos se le estaban descojonando en la cara pero había una cosa que me hizo frenarme en seco. Fijaos que estupidez, imaginad que me había parecido oír al llavero del novio de mi prima que había roto con ella y que además la estaba llamando puta... delante de mis narices, tenía que ser solo fruto de mi imaginación.

Me coloque detrás suyo con una sonrisa la mar de amistosa y le di un golpecito en el hombro...

- Yo : Hola... ¿perdona pero me puedes repetir a la cara lo que has dicho de mi prima?

- Llavero : Mira niñato he dicho lo que es tu prima, una puta...

- Yo : Mira llavero tienes diez segundo para pedir perdón y disculparte, antes de que me enfade de verdad...

Después de eso debió de pensar que el imbécil del primito necesitaba que le pusieran en su sitio, así que tuvo la mala ocurrencia de sacudirle un guantazo en toda la cara a alguien que le sacaba dos cabezas y como mas de 20 kilos en músculos, que además estaba muy, pero que muy enfadado, de echo podríamos decir que echaba humo por las orejas y todo, aunque supongo que el que le hablara con suavidad sin alterarme le debió de confundir algo... puede también que el ver durante su relación con Ana lo "calzonazos" que era con las chicas también ayudara, porque lo reconozco, tratándose de mis primas, hermana, Eva y Teresa calzonazos es el termino adecuado. Tubo encima la mala suerte de que me partió el labio haciéndome sangrar, cuando me lo limpiaba con el dorso de la mano mirando como esta salía llena de sangre mientras se me iban inyectando los ojos en sangre... todavía el muy imbécil me dijo mirando a las dos chicas en tono de machote superior que me fuera a llorar a mi mama... o a las faldas de la puta de mi primita.

No medie ya ni palabra, no dije ni mu mientras los tres se reían la mar de alegres, sobre todo él, simplemente saque el puño a paseo contra su nariz, le metí con todas mis fuerzas, rompiéndosela en el acto... después de eso dado que estábamos junto a unas escaleras que tenían como unos 20 o 25 peldaños le cogí por el cuello y le lance de cabeza por ellas, haciendo vuelo sin motor. Cuando llegue abajo para seguir saludándole me di cuenta que me había pasado, debía de haberse roto como mínimo un hombro, las dos chicas habían desaparecido como por ensalmo en cuanto vieron mi reacción. El llavero estaba gimoteante en el suelo, me agache le cogí el móvil y llame al 112 con él para que le mandaran una ambulancia, no sin antes avisarle de que si decía algo de mí la próxima seria menos divertido que ahora. Después le explique amablemente mientras le apretaba del hombro que creía que se había roto, que si oía cualquier rumor sobre mi prima, y averiguaba que había salido de él me iba a encargar de que no volviera a poder hablar de nadie más, porque le arrancaría la lengua de cuajo... no sé si fue mi cara, el hecho de haberle roto la nariz sin inmutarme, el tirarle por la escalera a riesgo de haberle matado, estar apretándole el hombro con mala hostia cuando quería que respondiera o que simplemente estaba tan acojonado en ese momento que no encontró otra que asentir a todo lo que le dije, jurándomelo por su madre y todo lo que se le ocurrió.

Como podéis comprender después de eso me fui para casa, principalmente para ver a Ana que hacía casi una semana que no la veía, ya que salía por la mañana antes de que lo hiciera ella y después regresaba a las tantas cuando cerraba la biblioteca. En el portal me fui a encontrar con Claudia que al verme llegar de esa guisa, con el labio partido y con restos de sangre puso el grito en el cielo haciéndome acompañarla a casa para curarme ella, fue lo que me falto ya, entrar y que Ana me viera en ese estado. Al final mientras me curaban las dos me sacaron que había sido el ex de Anita el que me había hecho eso, lo que desde luego no sirvió para hacerla sentir mejor... de hecho salió corriendo a su habitación a llorar... genial.

Cuando fui a su habitación para calmarla e intentar consolarla volví a meter la pata, como no hacía más que decirme que por su culpa encima me habían pegado tenía un disgusto que ni os cuento, ni Claudia que se vino conmigo era capaz de calmarla... al final mientras la abrazaba contra mí se me escapo que no había sido para tanto, solo le había dado tiempo a darme un guantazo. Las dos a dúo me preguntaron por lo que había pasado, les metí una bola preciosa que no coló ni por un momento con Ana, de hecho se la paso la llantina haciéndome salir al salón y sentarme en el sofá, para ella sentarse enfrente mío y "exigirme" que le dijera la verdad ante la atentísima mirada de Claudia que la dejaba hacer, entre otras cosas porque parecía que se había olvidado de llorar para centrarse en mi. Siguió pidiéndome que le contara qué coño era lo que había pasado. Se lo conté casi todo, explicándolas mas o menos como fue... solo omití que le destroce la nariz, también se me paso contarlas lo de tirarle por las escaleras como un fardo, lo de apretarle a lo bestia el hombro para joderle más tampoco creí que tuviera relevancia, por supuesto tampoco lo de las amenazas, creo que también me olvide de comentarlas que le había dejado allí tirado luego con la cara llena de sangre y el hombro roto tras haber llamado con su propio móvil a una ambulancia. Les explique el puñetazo en la cara por pegarme a mí y llamarla puta a ella... y una bella película de como vistas las diferencia de envergadura decidió retirarse sabiamente. Después de eso se calmaron las dos, yo me quede con Ana para hablar con ella y que me contara, al principio se negó pero como a los diez minutos se desmorono abrazándose a mi llorando, contándome todo sobre su ruptura y sobre el imbécil de su novio... por primera vez sentí muchísimo no haber seguido machacándolo y haber llamado a emergencias... ¡¡si lo llego a pillar en ese momento otra vez..., la del pulpo es poco, le meto la de media docena de pulpos juntos y algún que otro calamar!!!.

Esto la calmo hasta el viernes, justo hasta la noche, en el momento en que Ana entro en mi casa sobre media noche para ir a buscarme a mi habitación donde estaba estudiando. Ni os cuento el cabreo que llevaba encima conmigo, por lo visto salió con algunas amigas de la uni, estas le explicaron el terrible accidente que había sufrido su ex, aunque según le dijeron las malas lenguas acusaban a su "primito" de haber hecho el desaguisado al pillarle hablando mal de ella... y suerte que se conformo con eso, porque según parece estaba como enloquecido. Como podéis imaginar me pidió todo tipo de explicaciones, como contestación la dije que eso ultimo era falso del todo, que yo estaba la mar de tranquilo... esta vez me callo la del pulpo a mí, no veáis como se puso la niña conmigo por ser tan bruto y animal, todo según ella por unas palabras estúpidas dichas por un gilipollas, que no merecía que por defenderla me hubiera arriesgado a una denuncia al hacerle eso.

Dado que por lo visto era el año de los problemas y de andar metiendo la pata... pues la metí hasta la medula. Me levante de la silla, dejando las gafas encima de los libros, para dirigirme a continuación a por mi prima, la cogí ambas manos llevándomelas a los labios, besándoselas... para después decirla que si volviera a pasar tuviera por seguro que seguiría haciendo lo mismo, que era mi prima favorita, mi chiquitina y que desde luego no iba a permitir que ningún imbécil de medo pelo la insultara delante de mis narices. Después de eso nos quedamos mirándonos fijamente a los ojos justo delante de mi cama... Ana se empino un poquito para plantarme un suave beso en los labios y darme las gracias. Después de eso se abrazo a mi... me dijo que se quedaba conmigo a dormir como cuando éramos niños aunque la ultima vez... en fin, dijo que así podríamos hablar los dos.

Yo estaba en pantalón corto con una camiseta de manga corta nada mas, sin ropa interior ni nada, no suelo llevarla cuando estoy solo en casa, así estoy mas cómodo, Ana se empezó a quitar la mini, la blusa para quedarse solo en ropa interior... la carita que tuve que poner viéndola desvestirse para que me preguntara sonriendo si me gustaba lo que veía. Eso me saco de mi ensimismamiento, la pedí perdón y me di la vuelta para no mirarla, me quite la camiseta ya que siempre duermo en pantalón corto únicamente. Cuando me dijo que ya estaba lista me di la vuelta y casi me da un infarto al verla... estaba completamente desnuda, se acerco a mi dándome un beso en los labios otra vez. Se separo a los tres segundos, mirándome con los ojos brillantes, para a continuación echarme los brazos al cuello y empezar a besarme de una forma intensa, de una forma en que se supone que no se besan dos primos. Acto seguido me derribo sobre la cama, quedando encima mío, llevando su mano por dentro de mi pantalón hasta sujetarme con ella la polla, que después de dos meses sin sexo podéis suponer en qué estado se encontraba de alegría.

La vez anterior fue ella la que me consoló de esta misma forma y por lo visto ahora pretendía lo mismo, pero esta vez desde luego pensaba ser yo el que hiciera que se olvidara de todos sus problemas durante esa noche. Le ayude a bajarme los pantalones, después de lograrlo se bajo a chuparme la polla, parecía que estaba con un chupa chups por cómo me la trataba, por lo golosamente que la lamia... La quise quitar pero me dijo que quería que me corriera en su boca lo primero, acepte con la condición de que luego fuera toda mia, que se limitara a dejarme hacer a mi sin ponerme pega ninguna, algo que acepto para después volver a meterse mi polla en su boca del todo. Estuvo casi cuatro minutos mas lamiéndola como una piruleta, o metiéndosela entera, tratándola con la lengua como su fuera un chupa chups, hasta que logro que me corriera en su boca, intento tragárselo todo sin lograrlo. Después de dos meses sin poder masturbarme siquiera por culpa de los puntos no os imagináis la cantidad de leche que solté en su boca.

La hice tumbarse boca arriba y abrir bien sus piernas para poder trabajar tranquilamente con su coñito... previamente me había levantado corriendo a por una plumita que tenía preparada siempre de antemano para cuando se quedaban Eva o Teresa a "dormir" conmigo en mi casa cuando no estaba Natalia. Decidí empezar fuerte con ella... empecé a lamerla lentamente su rajita, acariciándola los labios con la puntita de la lengua, para después llevarla al culito, introduciéndola un poquito la punta de la lengua mientras movía la lengua dándola un sentido rotatorio haciéndola saltar al sentirlo. Me sujetaba la cabeza a ratos, a ratos se agarraba a la cama... a ratos se metía una mano en la boca para evitar los gemidos y gritos que soltaba al sentir mi lengua trabajando en ella. Lentamente la deje alcanzar el orgasmo sin parar en ningún momento de trabajarla pese a sus espasmos, gritos al correrse y la inundación de jugos que sufrió mi boca mientras intentaba seguir trabajándola sin parar.

Después de eso la lleve otra vez a un nuevo orgasmo, justo antes de que la llegara por primera vez en todo el tiempo la trabaje el clítoris, y fue para ensalivarlo bien, para sujetar su garbancito son los labios e iniciar una succión leve en inicio para ir progresivamente aumentando la intensidad. Mientras tanto con un dedo la penetraba el culito haciéndola saltar al sentirse invadida, mientras con mi otra mano la sujetaba para evitar que sus involuntarias contracciones me afectaran al tratamiento. Se corrió otra vez, esta vez soltó muchísimos mas jugos que la vez anterior al correrse, jugos que me trague con autentico deleite, igual que ella hizo con mi leche anteriormente.

Enseguida decidí probar mi último invento con ella, la plumita sobre su clítoris directamente. Primero tuve que lubricárselo bien, después ponerme sobre ella para que no pudiera moverse de su posición aprovechando mi peso para ello, una vez bien situado empecé mi tortura fueron cinco minutos en los que lo intento todo para que la soltara como fuera, incluso se lio a puñetazos con mi espalda, pero ni fuerzas para hacerme daño tenia, principalmente debido a las sensaciones que le trasmitía la plumita… era un avance permanente hacia el límite del orgasmo pero sin que este llegara nunca, no era capaz de alcanzarlo… para llevarla a él le retire la pluma y le volví a hacer la succión sobre su clítoris… quedando sobre mi cama completamente devastada por la experiencia… solo tuvo fuerzas para decirme que era un cabròn hijo de puta por hacerla eso a mi prima.

Una vez termino su orgasmo espere hasta que se recupero quedando totalmente relajada, aunque seguía todavía medio muerta. Entonces trepe por su cuerpo lamiéndolo, deteniéndome sobre su ombligo, para seguir lentamente por sus pechos, pasando por su cuello, sus orejas, terminando en sus labios, unos labios que me recibieron con glotonería, parecía que me quería devorar vivo por cómo me empezó a besar mi primita.

Una vez se hubo recuperado del orgasmo a que la sometí me situé encima de ella, colocándome en su entrada, penetrándola con suavidad, lentamente, delicadamente. Una vez estuve completamente en su interior empecé a moverme de forma suave y lenta, disfrutando de sus labios y su cuello... de sus labios sobre mi propio cuello también. Me empezó a pedir que aumentara el ritmo, negándome a ello, seguí con mis movimientos lentos, acompasados y suaves... continuamente, sin dejar de comérmela a besos mientras me movía sobre ella. Era un autentico placer poder contemplar la cara de Ana disfrutando... gozando... gimiendo. Logre retenerme hasta que sentí sus primeras contracciones, hasta sentir como empezaba a entrar en la espiral de un nuevo orgasmo, momento en que acelere un poco para llegar mientras ella todavía estaba disfrutando, llenándola su gruta de leche, lanzando los chorros en su interior, alcanzando su más profundas intimidades... Después de quedar por fin tranquilos tras el orgasmo empezamos a besarnos suavemente mientras me retiraba de su interior, pero sin romper nuestro abrazo.

Después de eso nos quedamos dormidos... aunque todavía estuvimos un buen rato besadnos con cariño, sin hablar. Después simplemente ella se puso de lado y yo a su espalda abrazándola contra mi... dándola besitos en el cuello y su espalda de vez en cuando, así nos venció el sueño y así amanecimos el día siguiente, los dos juntos en la cama abrazados. Nos levantamos jugueteando, haciendo el desayuno juntos, bromeando entre nosotros, sin mencionar para nada lo que paso por la noche entre los dos. Al final supongo que Ana no pudo evitarlo, me pregunto por Eva y Teresa, sobre qué era lo que pasaba y lo que pensaba hacer al respecto. Pese a todo Ana era mi confidente y mi mejor amiga desde siempre, antes incluso de aparecer Erika en mi vida, tenia muchísima influencia sobre mi y ella lo sabia tan bien como yo. Otra cosa es que decidiera usarla o no.

Empecé a hablar de lo inseguro que me encontraba con mi relación con ambas, sobre lo de que no participaran las dos entre ellas cuando querían algo parecido a un trió, que las notaba raras, etc... en ningún momento hice mención a lo que vi aquel día en casa de Eva, cuando acabe de hablar espere a que Ana me dijera algo... lo que no me esperaba de ninguna de las maneras es lo que me fue a soltar mi linda primita.

- Ana : Quizá no debería de decirte esto Luis... pero Eva y Teresa mantienen una relación desde hace un año, no una relación sentimental como la de Erika e Ingrid, pero para que lo entiendas digamos que es algo similar... Creo que deberías hablar con ellas antes de decidir nada, contarlas lo que me has contado a mí, creo que te pueden sorprender.

- Yo : Cuanto hace que lo sabes Ana... me refiero a lo de su relación o semí relación, o lo que sea eso...

- Ana : Casi desde que empezaron con eso... me pidieron consejo sobre ello, lo siento Luis, pero era algo entre ellas nada mas...

- Yo : Ya...

- Ana : Luis lo siento muchísimo, pero entiéndeme, por favor, yo...

- Yo : Déjalo Ana, lo he entendido perfectamente, hay cosas que nos incumben y cosas que no... Todos tenemos nuestros propios secretos.

Esto último se lo dije sin darme cuenta, estaba pensativo con lo que me había dicho mi prima y no preste atención, lo que más me había molestado en todo esto no es descubrirlas en esa situación entre ellas, era algo que a estas alturas no tenía ningún problema en entender, joder que yo estaba liado con cuatro fijas y mi prima ocasionalmente. Fue más lo que las oí decir a las dos, aunque pensándolo ahora detenidamente después de hablar con Ana, mas lo que me había dicho e insinuado, quizá, y solo quizá lo había sacado fuera de contexto por la situación, o no lo hubieran dicho en el contexto que yo interprete en ese momento. Puede que fuera mejor hablar claramente con las dos antes de decidir nada de nada al respecto... pero desde luego con mis reglas, no las iba a permitir manejarme más. Desperté de mi mundo cuando Ana chasco los dedos delante de mi cara para que la atendiera, ya que había estado preguntándome sin que la hiciera caso, estaba en babia.

- Ana : ¡¡¡¡Ahhh!!!, ¡¡¡¡Despierta!!!!

- Yo : Perdona Ana, ¡dime!

- Ana : Que querías decir con eso de que todos tenemos secretos...

- Yo : Pues está claro no, que todos tenemos nuestros secretos que nadie más conoce... cosas que solo nos incumben a nosotros o a otros, tal y como tú has dicho antes.

- Ana : ¿Esto es como venganza o algo así por lo de no decirte nada de los de Eva y Teresa?

- Yo : No, ni mucho menos, simplemente me has dejado mucho más tranquilo al saber que tú también tienes tus propios secretos.

Después de eso último la di un beso en la mejilla y al poco me volví a hundir en mis pensamientos otra vez. Pese a todo me di cuenta de la mirada especulativa que me lanzaba después de oírme decirla eso de que yo tenía mis propios secretos... no creo que la hiciera la menor gracia descubrirlo, justo la misma que me hizo a mi lo suyo, empezaba a verme a mí mismo no hace mucho en esa mirada de Ana especulando. Desde luego entre todas estas me estaban obligando a espabilar a trompazos, a dejar al chico en el pasado y empezar a ser un hombre, menuda camada de lobas que me había echado de "amigas". Después de todo esto con mi prima simplemente me fui a casa a estudiar, por lo menos hasta que llegaran Eva y Teresa avisadas por Ana, porque si la conocía bien no podría evitar avisarlas a las dos ahora que en cierto modo la había liberado de su promesa de no decirlas nada... Si no era ese sábado, seria al día siguiente, domingo, pero uno de los dos tenía claro que si podían explicármelo de forma satisfactoria se darían prisa antes de que me encabezonara con ellas, así que aparecerían las dos por mi casa, o por la de Ana, según donde eligieran enfrentarse a mí, si querían contar con el apoyo de Ana o no... Esa decisión me diría también si la cosa me iba a gustar o no. Si era en casa de Ana entonces estaba claro, algo no me iba a gustar lo mas mínimo en todo esto, pero nada.

Ese momento llego a medio día, Ana me llamo para ir a comer a su casa en un par de horas con ella, Eva y Teresa, me prepare y fui en ese mismo momento. Cuando llegue a casa de Ana no me esperaban todavía, entre otras cosas me había adelantado para echarlas una mano a preparar la comida y de paso dejarlas un poco fuera de juego haciendo algo que no esperaran. Las salude con toda normalidad a las tres, las di un beso a cada una sin dejar entrever nada de nada y seguí a lo mío, las note inusualmente tensas para lo que suele ser normal en ellas, no perdían detalle del menor gesto que hiciera... estaban las tres esperando a que fuera yo el que hablara, algo que desde luego no tenía la menor intención de hacer, ser yo el que iniciara la conversación, solo lo haría si veía que podía sacar ventaja. Yo no le había prohibido explícitamente a Ana decirlas nada a ninguna de ellas, pero la deje sobre entender que no quería que se metiese, ahora si alguna de las tres era la que iniciaba la conversación mi primita iba a quedar francamente mal conmigo después de eso... estaba deseoso de ver cómo se las apañarían para evitarlo.

Durante la comida me estuve divirtiendo con ellas enormemente ya que cada vez estaban más nerviosas las tres esperando a que yo rompiera el fuego, veían como el tiempo pasaba y yo no decía nada, estaba de lo más normal del mundo, la mar de tranquilo, estaban empezando a darse cuenta de que si no hacían algo me iría a casa otra vez a estudiar sin aclarar nada de nada con ellas.  Digamos para intentar explicároslo que lo que pasaba era que estaba dejando de ser "previsible", o por lo menos tan, tan previsible como antes, de vez en cuando ya no sabían bien por donde entrarme o cogerme, y esta era una de esas veces. Conociendo a Ana esta las habría puesto en conocimiento de todo, lo que sabía por mi y lo que ella me había dicho de ellas dos, así que sabían por donde iban los tiros, pero dado que no me estaba comportando como hubiera sido previsible, que es montando el zipitoste padre por habérmelo ocultado... ahora no sabían por donde entrarme, ni como entrarme y menos cuando no daba señales de estar pasando nada de nada conmigo.

Viendo que no iríamos así a ninguna parte, viendo ademas que en ese momento tal y como estaban podía suponerme controlar la situación, al final decidí iniciar yo el fuego como querían, pero desde luego lo que no pensaba hacer era seguírselo, lo haría si, pero a mi modo. Después de terminar de comer, recoger todo y ponernos con el café, justo cuando mas presionadas se empezaban a encontrar por el tiempo fue cuando me repantigue poniéndome la mar de cómodo y entonces decidí que era el momento perfecto para hablar...

- Yo : Bueno creo que ya podemos hablar si queréis, como Ana os habrá puesto ya al corriente de todo sinceramente pienso que sois vosotras las primeras que debéis decir algo...

- Eva : No se a que te refieres con lo de Ana...

- Yo : Vale, de acuerdo, no hay problema... si me disculpáis chicas… (me levante con mi café dirigiéndome hacia la cocina, dejándolas allí sentadas)

- Ana : ¿Donde vas?

- Yo : A dejar el vaso en el lavavajillas para irme a estudiar...

- Teresa : Pero si has dicho que querías hablar

- Yo : Si, y después de eso lo primero que ha hecho Eva es mentirme o tomarme por idiota, que no se que será peor. Desde luego para perder el tiempo no estoy con todo lo que tengo encima... solo he aceptado comer con vosotras por eso, así que o habláis con claridad, o me voy a lo mío y que pase lo que tenga que pasar con nuestra relación, ¡vosotras decidís!.

Efectivamente el toque de atención fue milagroso en las tres. Ana me pidió perdón por decírselo, pero me dijo que tenía que hacer algo antes de que lo estropeáramos todo... Teresa la lanzo una mirada de advertencia, mientras Eva rápida y atropelladamente se disculpo por haberme mentido y no haber admitido que Ana se lo había dicho, pero según me dijo solo intentaba evitar a Ana problemas conmigo por decírselo. Y si, no creáis que me paso desapercibido lo de "antes de que lo estropeáramos todo...", ni la mirada de advertencia de Teresa, ni las prisas repentinas de Eva, pero de momento no tenía tiempo para ponerme a pensar en ello, por mucho que viera en ello cierto regusto a la visita de Alemania, pero me estoy desviando del tema. Lo resumiré para no hacerlo todo excesivamente largo.

Lo primero que hice fue preguntarlas si deseaban que Ana se quedara para apoyarlas, que me daba igual, ya que si no se enteraba luego por mi lo haría por ellas, así que las pedí que decidieran. Eligieron que se quedara, porque así podría quizá aportar una visión desde fuera, ni se dieron cuenta de lo que dije de Ana de los nervios que tenían, entonces empezaron a darme tibias explicaciones sobre lo de su relación a espaldas mías, explicaciones que desde luego después de lo que oí no me estaban sirviendo para nada de nada, salvo para perder el tiempo. Se lo dije tal cual lo he expresado, añadiendo que si querían a mi prima allí para cuando me dijeran las cosas que claramente no me iban a gustar y que ella se encargara de "controlarme" no sabía a qué coño estaban esperando las dos... que solo me hacían perder el tiempo.

Ni os digo como salto Ana al oírme hablar de esa manera a las otras dos, me intento meter una bronca del quince. La hice callar de malas maneras sin hacerla caso, cuando se cayó solté la bomba sobre las tres... primero les dije a las tres que me tenían hasta los cojones ya y no habían empezado todavía con la parte que me tenían que contar en que me iba a cabrear de lo lindo y que Ana supuestamente me tendría que calmar, así que las dije que les iba a ahorrar saliva a las tres, fue entonces cuando les conté lo que paso ese día, lo que vi y lo que oí, para después decirlas a Eva y Teresa que si la explicación a lo que oí no era lo bastante buena se termino todo entre nosotros, allí y en ese mismo momento, acto seguido me acomode recostándome en el sofá, cruce las piernas, cruce de brazos sobre la rodilla, y me quede mirándolas fijamente con cara de pocos amigos a las tres esperando.

Ellas dos se quedaron pálidas al oírme contar eso, Ana por primera vez creo que se dio cuenta de la magnitud del cabreo que arrastraba con las dos, por primera vez la vi replegar velas y dejarlas solas a las dos para que se explicaran, sin intentar ayudarlas en lo mas mínimo, esperando como yo. Teresa con la cara pálida la pidió que dijera algo. Ana las intento mandar un último aviso cuando la dijo que lo sentía, pero que en este caso cualquier cosa que ella pudiera decir solo lograría cabrearme más de lo que ya estaba, que desde luego mas las valía ser lo más concretas, sinceras y explicitas posibles con todo, me gustara lo que oyera o no, pero que estaban en la cuerda floja, sin pértiga y sin red... las dijo que así de serio se había puesto el tema para las dos.

Me lo explicaron de forma más que satisfactoria, creedme, pero desde luego no me gusto en lo más mínimo lo que tuve que oír. Me resulto muy duro de asumir la situación y lo que me contaron... pero que bastante duro de digerir además. A ver como lo intento explicar, porque creedme que tiene tela marinera. Lo primero que me dejaron claro es que no me querían en medio de "su" relación para nada... que les resultaba cada vez más duro el compartirme con otras mujeres, incluyendo a la otra, que eso era una forma de escape, algo solo de ellas, entre ellas y no querían a nadie por medio, incluido yo, que esto las servía para aguantar. Si ya, lo sé, lo mismo me pregunte yo, ¿aguantar... el qué?... ni os penséis que a eso me contestaron cuando se lo pregunte, se quedaron bloqueadas mirándose las tres, al final Ana intervino para sacarme de esa zona... lo deje marcado como campo de minas en ese momento y lo uni a la frasecita anterior que me choco... había una peste en todo esto a la visita a Alemania cada vez más fuerte. Bueno sigo que pierdo el hilo sino.

Según me contaron, y creedme que apreté los dientes de una forma que no me partí la mandíbula al oírlas de milagro, y la mira a Ana fue asesina del todo, además de una clara advertencia de que no se marchara muy lejos que tendríamos que hablar sobre lo que me estaban contando, hasta Ana se encogió cuando empezaron a hablar previendo la que la esperaba conmigo. Resulta que a finales del primer año de carrera fueron a la despedida de soltera de una prima de Teresa las dos, pues según me conto Eva, entre Teresa y ella se follaron a cinco Boys en la despedida famosa... las dieron de todo y por todos los lados, llegando incluso a estar con tres ocupando sus agujeros y pajeando a los otros dos restantes... vamos una orgia en toda regla, aun así no quedaron satisfechas para nada... según me dijeron por culpa mia. Mi reacción fue la obvia, levantarme alterado a más no poder y cagarme en todos sus muertos, en su tía y en todo lo que se movía por delante de mí. Afortunadamente había aprendido ya a no decir según que palabras por muy enfadado que estuviera, así que de mis labios no salió el término putas, zorras o cualquier otro equivalente... gracias a dios, porque entonces sí que no sé como habríamos acabado los cuatro... Les costó más de media hora calmarme antes de poder seguir, pero la cosa cada vez sabían que pintaba peor para las dos… no había más que verlas la cara a las tres.

Según ellas los Boys no las aguantaron ni tres asaltos... uno de ellos tenía una polla descomunal que las hizo ver a dios, y los demás estaban armados magníficamente, pero aun así las dejaron con las ganas, igual que el resto de chicos con los que habían estado antes... lo que fue un shock, después de como se habían comportado (y no dijeron la palabra que se insinúa, y yo desde luego como dije antes ni se me ocurrió) no habían logrado nada de nada. Para acabar de rematar la faena me contaron encima también que después de eso, lo intentaron también con dos tíos que tenían fama de ser unas maquinas follando, pero que fue otro fiasco, porque si, eran buenísimos, mejores que nadie con quien a quien se hubieran follado antes, incluido yo, pero el resultado final era el de siempre, ellos se agotaban y ellas se quedaban con ganas de mas. Al final se sentían fatal por todo ello, por ocultármelo, pero claro, haber como coño me contaban a mi luego algo así, al final decidieron que necesitaban consejo sobre qué hacer, y se decidieron a hablar con Ana que las dijo que no me dijeran ni media de todo ello sino querían liarla parda conmigo y perderme, en ese momento posiblemente es lo que hubiera pasado, pero joder… ¡¡Anita, Anita…!! (Entendéis ahora el porqué de querer hablar después con mi prima, ¿verdad?). Según parece el problema era culpa mia... tooomaa ya, yo las había acostumbrado a quedar desechas... a que pese a correrse conmigo pocas o muchas veces, invariablemente terminar destrozadas físicamente, sin poder ni con su alma, y en estas otras ocasiones disfrutaban, pero no llegaban nunca a ese nivel de destrozo físico con que yo las dejaba...

Cuando Erika se fue esta fue una de las charlas que tuvimos, cuando me advirtió sobre lo de las mujeres mientras estudiaba y los líos a los que me podía ver arrastrado. Ellas me intentaron explicar lo que me explico Erika anteriormente, gracias a eso me entere de lo que decían porque se explicaron de fabula.

Erika me dijo que cuando empezamos los dos, conmigo sucedió una cosa curiosa, en ningún momento intente imponerme a ella, nada de orgullo de machito, simplemente me dejaba llevar intentando acompasarme a sus necesidades, disfrutando viéndola a ella disfrutar. El resultado es que fui ingeniándomelas para poder aguantar su ritmo, ella era una mujer enormemente caliente y yo un crio, estaba claro que no aguantaría ni diez minutos. Sin embargo para su sorpresa me fui poco a poco buscando las mañas para ir aguantándola… superando todas sus expectativas y poco a poco ir enganchándola a mí sin que se diera cuenta, lo que empezó como un rollito morboso nada mas, se la acabo yendo de las manos. Lo que evidentemente no podría lograr jamás con mi polla por falta de resistencia a mi edad y muscularmente, lo compense con el sexo oral, haciendo e intentando cosas que como nadie se molesto jamás en decirme que era imposible yo lo intente y ella no sabía ni cómo pero lo más asombroso es que lo lograba. Cosas como el torturarla durante media hora sin dejarla correrse… Todo ese cumulo de sensaciones suponía una constante tensión para ella o para quien se lo hiciera, el resultado era que la cansaba más que media docena de polvos… y el orgasmo la remataba, la dejaba casi lista solo con eso por toda la intensidad sufrida durante tanto tiempo, al final cuando acabamos folladas incluidas, resultaba que alguien que debía de haber durado minutos había reventado a su pareja o parejas en ese momento porque no intentaba ser más machote que nadie, solo intentaba darlas placer e inconscientemente, sin proponérselo y lo más gracioso de todo, sin siquiera saberlo, se había convertido en una maquina de “destrozar” mujeres.

Aun así, no me había estancado sino que también había logrado mejorar en todo lo posible, por ejemplo mi aguante a partir de mi primera corrida en muchísimo, lo que me permitía alternar eso con una o dos folladas largas, pudiendo ofrecer un par de orgasmos por cada uno mío. Para colofón final había probado una estupidez que nadie diría que podría funcionar y ahora tenía la putadita, algo que ella no se explicaba cómo era capaz de hacer con la lengua, pero que sin embargo lo hacía… siendo su talón de Aquiles el que me dejaba la lengua tonta por lo que solo lo podía hacer lo que esta me aguantara… después soltó un “gracias a dios”. Según me explico para que entendiera la sensación que eso provocaba, me dijo que aun teniendo consecuencias distintas en cada una, pensara en algo similar a meter los dedos en un enchufe durante todo el tiempo en que se lo hacía, pues me dijo que imaginara eso en placer, llegándoles por todas las terminaciones nerviosas del cuerpo… las zonas más sensibles terminaban intocables por un par de días, clítoris, pezones, etc… pero el resto del cuerpo acababa como si le hubiera pasado una hormigonera por encima.

Me explico que si unía todo esto a mi personalidad tan “curiosa” para casi todo, debía de entender que el conjunto me hacia algo único, algo que podía hacer que una mujer se enchochase en serio conmigo y ser capaz de llegar donde normalmente no lo haría, para bien o para mal, por ello debía de dosificarme y jamás de los jamases si quería evitar problemas debía de dejarlas muertas por el placer, y de lo de la putadita de marras, eso Top Secret con cualquiera que no tuviera intención de volver a ver, porque eso por mucho que luego pensaras que nunca más, era de lo mas adictivo, el rechazo te duraba lo que las molestias, según ella después querías mas de ello, sobre todo si preveías unos días sin sexo, entonces ya era la hostia lo que se antojaba sufrirla.

Como me dijeron Eva y Teresa bajándome los humos considerablemente... follando soy normalito, lo hago bien, pero ellas han estado con gente mejor, mi polla tiene un buen tamaño, pero también las han probado mejores y mucho mas grandes... sin embargo cuando llegan al resultado final este es siempre el mismo, no se me puede comparar. Conmigo llegan irremediablemente destrozadas al día siguiente... sin ganas de mas, porque literalmente es que no pueden ya mas, sin contar con que si las hago la cosita esa que sé hacer las dejo listas para días... con los demás se quedan muchas veces con ganas de mas, según ellas por culpa a lo que yo las he acostumbrado siguen con energía listas para mas guerra. Por eso su relación es algo tan especial para ellas, según dijeron tenían miedo de que las pasara algo parecido también si me incluían con las dos... con otra distinta no las importaba interactuar, pero no entre ellas. Habían comprobado ya de primera mano la situación con las dos y Erika… ese día eran tres y quedaron satisfechas las tres, así que pensaron… en fin, que manda cojones la cosa, ¿no?.

En otro momento habría montado la de dios, mandado a las tres a tomar por el culo y quedándome tan ancho, por lo menos hasta darme cuenta de la metedura  de pata, luego vendrían los problemas de cómo solucionarlo. Esta vez me levante dándolas un beso en los labios a cada una, lo que por cierto vi que no sorprendió a Eva y Teresa el beso a Ana... decidí mejor no pensar tampoco en eso que bastante tenia en que pensar, sin contar con mis estudios. Después del beso las pedí tiempo para poder digerirlo todo...

- Eva : ¿Entonces...?

- Teresa : ¿Vas a romper con nosotras?

- Yo : (Lance un suspiro) Ni loco... chicas por favor dadme tiempo para digerirlo todo, ¿vale?. Desde luego no pienso cortar con vosotras, no diré que no estoy enfadado, porque lo estoy y muchísimo... por eso, ¿podríais darme algo de tiempo?

- Teresa : El que quieras... todo lo que quieras Luis.

- Eva : Como digas... no tengas prisas cielo..

Después de esto se me echaron encima medio llorando para besarme. Cuando se calmaron un poco las deje de abrazar, si que debían de haberlas pasado putas las dos, si, más de lo que yo me había pensado pensando que las dejaba por lo que las dijo Ana. Una de las razones para no cortar por lo sano, es que en ningún momento ninguna de las dos saco a colación que yo me estaba acostando también con Erika e Ingrid siempre que podía, sin mentar a Arantxa, Merche, Maite, Patricia, Inés… y mejor lo dejo ya aquí, que para lo que quiero que se entienda pienso que vale. Se justificaron y defendieron pero sin atacarme a mí, algo que si hubieran hecho no hubiera podido en conciencia negárselo, yo hacía siempre lo que ellas en una sola ocasión. Ellas se tenían mutuamente y yo parecía que tenía un harem… así que a ver con qué cara… en fin que considere todo y sus explicaciones, como fueron, como las dieron, me convenció que merecía la pena luchar por las dos.

Cuando se fueron, Ana me dijo que el problema real que tenían las dos, es que se habían enamorado del mismo chico... que no querían compartirlo, pero tampoco arriesgarse a perderlo... viéndose además encima envueltas en algo que escapaba a su control y que las atraía como una llama a la mariposa... sin poder, ni querer dejarlo además. Cuando la dije medio de broma que menos mal que a ella no la pasaba igual, me miro fijamente y me dijo que había veces que la daban ganas de darme de guantazos hasta hartarse por ser tan gilipollas... Preferí no pensar en lo que me dejaba sobreentender esa salida de todo de Ana. Lo de Ana lo deje pasar, solo iba a quemarme la sangre y en ese momento era ella la que tenía razón al no habérmelo dicho porque hubiera sido drástico a mas no poder.

En Junio mi relación con las chicas estaba casi normalizada, aunque manteniendo nuestras "particularidades" personales, por decirlo de algún modo. Cada vez me parecía mas todo una conspiración en la que estaban metidas mi primita, Eva, Teresa, Ingrid y por supuesto la cabecilla de todo, Erika... Empezaba a ponerme paranoico con ellas en cuanto me daba por pensar en todas las piezas del tetris que tenía en la cabeza... el problema es que cuando parecían encajar me salía tal gilipollez que... en fin, a este paso al sicólogo. Este mes volvieron mis padres y tíos de vacaciones, pero se metieron en la sierra... de allí no hubo forma de moverlos, según ellos querían tranquilidad. Otra buena noticia fue que mi hermana volvía también de vacaciones, acompañada de su novio y su cuñada para presentarlos oficialmente a la familia...

El curso acabo, sacándolo con una media de 9.6 y 9.7 respectivamente, con una mejora notable en el dominio del Ingles, Francés pero sobre todo el Alemán, que era con el que más ponía el callo, ¿porque sería?. Por cierto que las chicas poco a poco nos iban también alcanzando a Ana y a mí con los idiomas, y sus notas también eran de aúpa, sus padres estaban locos con ellas. Ana 9.9, Eva 8.6 y Teresa 8.9 de notas medias finales. Y no, todavía no se acabo el añito para mi... todavía me quedaba añito para seguir divirtiéndome mas... joder, que año.

CONTINUARA