Hasta el dia de hoy 3
De vacaciones al pueblo y empiezo, como no podía ser menos, a meter la pata....
Hasta el día de hoy 3
Por fin había terminado el año escolar, Ana había sacado de media 9.7 y yo 9.6, increíble de verdad, nuestros respectivos padres estaban como locos de alegría, y todo esto gracias a las clases que nos estaba dando Erika en gran medida (yo no voy con segundas, mal pensados).
La parte mala es que nos íbamos de vacaciones todos lo que suponía alejarme de Erika. Al día siguiente me iba con mi madre donde mis abuelos, como el año pasado, mi hermana se había ido con sus amigas de viaje por Europa y no iría hasta dentro de al menos 10 días, por otro lado mi padre se nos uniría 15 días después, estando con nosotros el resto del mes que estaríamos allí con ellos, para luego regresar a Madrid toda la familia junta y permanecer así hasta que mi hermana tuviera que volver a la universidad.
Ana se iba a ver a los suyos con sus padres y Claudia, mi otra prima y hermana suya. Erika en 20 días se iba de vacaciones de vuelta a Alemania, mi gozo en un pozo, un mes y medio solo, sin mi chica y sin mi prima. Para dejarlo claro, más de un mes sin follar con Erika y sin mi confidente, genial.
Este ultimo día subí donde Erika para despedirme de ella a lo grande use ase, follando, pero en vez de eso me hizo sentarme en el sofá para darme algunos consejos para evitarme problemas. Me pidió que por favor si me acostaba con alguna chica este verano no se me fuera a ocurrir hacerle el amor si conocía a esa chica porque podía meterme en problemas, que me limitara solo a follàrmela, que aunque no entendiera lo especial que yo era, lo de hacerle el amor me podía salir caro.
Yo evidentemente le prometí que sí, que haría lo que ella me pedía, lo que la basto aunque vi dudas en su cara y me recalco que si seguro había entendido a lo que se refería. Por supuesto se lo volví a confirmar con un sí rotundo.
A ver, si me llega a decir que había un burro volando en su ventana, en un 7º piso, y que por favor le diera de comer también le hubiera dicho que si para poder irnos los dos a su cama a follar, que es lo que más deseaba en ese momento.
Cuando termino de hablar me limite a besarla y acariciarla la espalda, mientras la llevaba al dormitorio. Nos desnudamos y lo primero que hice fue colocarme entre sus piernas para degustar por última vez hasta el fin de las vacaciones sus calditos. Empecé a lamerla con ansia, le metía la lengua de forma rápida, como si fuese la de una serpiente en su rajita para que empezara a humedecerse, algo que logre a los pocos segundos. Acto seguido empecé a trabajarle el clítoris con mi boca mientras con dos dedos que previamente había lubricado con sus propios jugos inicie mi trabajito de dilatación de su culito. Ella me paró en seco e incorporándose mientras jadeaba me pidió que por favor no se lo dilatara, que quería que se lo rompiera antes de separarnos. Levante la cabeza la mire, me acerque a su boca y empezamos a besarnos mientras levantaba sus piernas por encima de mis hombros para lograr una posición perfecta.
Acerque entonces mi pija a su coñito y se la introduje lentamente para que fuera disfrutando de su entrada, ella empezó a gemir, yo la dije que cuando considerara que deseaba que la rompiera solo debía de decírmelo, pero que mientras quería follàrmela despacito. Empecé a realizar penetraciones profundas y lentas, cuando veía que estaba casi en puerta de un orgasmo paraba y le cambiaba el ritmo a otro más suave para contenerla.
Me pidió que por favor la rompiera de una vez para poder correrse ya, así que bajándola las piernas la hice colocarse a lo perrito, se coloco con el culito en pompa para recibirme y la cabeza sobre la almohada para poder morderla y no gritar, no fuera que la oyeran en mi casa, la jodia empezó a moverlo de un lado a otro mientras torcía la cabeza hacia mí y hacia guau, guau .. me puso como una concentración de motos.
Le puse la punta del pene en el orificio de entrada a su culito, cuando vi como ella mordía con fuerza la almohada se la metí de golpe hasta tocar su culo con mis huevos. No la deje recuperarse, inmediatamente empecé un mete-saca frenético mientras con una de mis manos la masturbaba frenéticamente, sentía perfectamente como ella gritaba de dolor, sus gemidos eran apagados casi por completo por la almohada que estaba mordiendo a lo bestia. Cuando vi que se le empezaba a pasar el dolor acelere mi masturbación y prácticamente cuando empezaba a disfrutar sin dolor le llego un orgasmo brutal, demoledor, se vino completamente abajo arrastrándome tras ella. Quedamos así jadeando por el esfuerzo, ella debajo y yo encima con mi polla en su interior todavía, dado que no me había corrido.
Se incorporo y nos pusimos en un sesenta y nueve, poco después me corrí en su boca tragándose Erika la totalidad de mi esperma, y ella también en mi boca, bebiéndome sus deliciosos jugos. Después volvimos a la posición del misionero logrando llegar al orgasmo a la vez. Cuando nos relajamos un poco me volví a colocar entre sus piernas para volver a degustar esta vez sí, por última vez sus caldos. Se puso la Almohada en la boca porque era consciente de lo que la iba a hacer y así fue, justo cuando estaba alcanzando su orgasmo le encerré el clítoris con mi lengua frotándolo y manteniéndolo así por algo más de un minuto. Cuando la deje acabar de correrse me subí rápidamente para ver como se recuperaba poco a poco e ir besándola suavemente.
Cuando nos despedimos después estar así toda la tarde fue muy emotivo, cansados pero enormemente satisfechos. Me hizo prometerla que tendría cuidado si me follaba a alguna chica, como ella lo tendría si se enrollaba con algún chico, yo se lo prometí. Os recuerdo a todos que habíamos quedado como amigos con derecho a roce y era lo bastante inteligente, quien lo diría visto lo visto después, como para saber que si hacia una escenita de celos o de tipo romántica con un "nunca te engañaría con otra" o similar, podía dar por terminada mi relación prohibida con Erika, la conocía lo bastante como para poder apostar mi vida a ello.
Al día siguiente por la mañana partimos para el pueblo de mis abuelos donde llegamos por la tarde porque mi señora madre paro veinte veces en el camino por . Bueno que más da, lo cierto es que se hizo eterno.
Cuando llegamos al pueblo las primeras personas que vimos nada más llegar fueron Arantxa y su madre, ellas vivían unas casas más arriba de mis abuelos, por lo que la madre de Arantxa y la mía se llevaban muy bien las dos. Cuando mi madre me llamo para saludarlas pues yo estaba liado con las maletas pude ver en la cara de Arantxa un gesto como de fastidio, de "ya está otra vez aquí el pesado este", y la verdad es que no la culpo porque el año anterior mis amigos y yo habíamos sido una plaga para ella y sus amigas.
Me acerque le di dos besos a la madre de Arantxa y luego otros dos a ella, después de que ambas madres nos sometieran al típico interrogatorio a los dos sobre estudios, novios/as, etc me pude escaquear alegando que tenía que entrar las maletas a casa, despidiéndome de las dos con un gesto de la mano. En ese momento salieron mis abuelos que se unieron a la fiesta, pero me seguí escaqueando hacia el coche para coger las maletas tras los besos de rigor a mis abuelos.
Estaba tan a mi bola que ni siquiera me entere de que Arantxa me había seguido hasta el coche, solo me di cuenta cuando al coger dos de las maletas y girarme casi choco contra ella. La pedí disculpas por la torpeza y pasando a su lado metí en casa las maletas, cuando las deje y me gire para terminar de sacar las cosas me volví a tropezar con Arantxa que había entrado detrás mío metiendo algunas otras cosas del coche.
Detrás nuestro entro mi madre, la madre de Arantxa y mis abuelos con el resto de las cosas. La primera en la frente del verano me la dio mi madre que me hizo ver que no le había dicho a Arantxa lo guapa que estaba este año. En seguida y sin ni siquiera mirarla se lo dije a Arantxa, le solté un "sí, ya me había fijado, Arantxa estas preciosa, de verdad".
La carita que puso Arantxa cuando mire para ella después de contestar eso era un poema, ella estaba entre todos los demás y mi posición, así que solo vi yo como me miro, si las miradas matasen en ese momento me habría descuartizado. La verdad es que estaba guapísima, llevaba un vestidito negro de tirantes que dejaba entrever su sostén y le llegaba hasta por encima de medio muslo, como digo estaba preciosa, todavía más buena que el año anterior, pero que queréis que os diga . Si no me lo dicen ni me entero, automáticamente la compare con Erika y se me escapo un "Phssss, bueno", menos mal que fue en bajito porque creo que si me llega a oír me salta al cuello directamente sin importarla quien estuviera delante.
Lo que son las cosas, cuando me vio y me llamaron para saludarlas a ella y a su madre me puso mala cara pero sin embargo cuando pase, o más bien, ni me entere de que existía me puso mala cara por no mirarla, y eso que la halague y todo, ¿pero alguien entiende a las mujeres?, yo desde luego no, y creo que nunca lo conseguiré.
Al día siguiente me reuní con mis amigos y empezamos como el año anterior a divertirnos, con una diferencia, que si el año anterior era uno más presionando para ir a ver a las chicas este año pasaba como de comer, prefería jugar al futbol, o a cualquier cosa antes que ir a hacer el primo con ellas. Tres de ellos ya tenían novia formal, pero se habían quedado en sus ciudades de origen, así que eran conmigo los que pasaban de las chicas. Del grupo solo dos vivían en el pueblo, los demás vivíamos fuera.
Al final como dice el refrán, "tiran mas dos tetas que dos carretas", acabamos detrás de las chicas como el año anterior. Pero con una diferencia, y es que tanto los tres que tenían novia como yo estábamos a nuestra bola hablando entre nosotros o con Neli, se llama Analia pero todos no sé porque la llaman Neli, y su novio, que aunque iban con las chicas también pasaban de tonterías.
Como en el pueblo había poco que hacer, todos los años hacíamos lo mismo, o bien estábamos en la piscina, o en los parques, o jugando a algo, generalmente al futbol. Eso si los fines de semana había discoteca, vamos como un pueblo cualquiera de la geografía española. Los grupos de chicos mayores por lo general siempre conseguían que alguno les llevara en coche a otros pueblos que estaban de fiestas, pero tanto nosotros como las chicas teníamos que jodernos y quedarnos en el pueblo. Nosotros porque no teníamos quien nos llevara y las chicas porque sus padres no las dejaban irse con cualquiera a otros pueblos en fiestas por si las pasaba algo, lo de siempre.
Yo concretamente este año no iba a la piscina, cuando ellos iban yo me quedaba en casa leyendo algún libro, el motivo de esto era que me daba vergüenza enseñar mi cuerpo, según mi apreciación no era atractivo y todo porque como estaba yendo al gimnasio por consejo de Erika para aguantar más su trote, empezaba a tener un torso con los músculos definidos, simplemente se me empezaban a notar un poco. Habéis visto alguna vez semejante idiotez, de lo que podría presumir resulta que me daba vergüenza enseñarlo, si cuando yo digo que a veces parecía gilipollas .
Una semana después de llegar estábamos prácticamente como el año anterior, casi todas las noches acabábamos detrás de las chicas y ellas pasando de nosotros como siempre. Si era fin de semana y habrían la discoteca nosotros haciendo el tonto y las chicas bailando con chicos mayores, porque como digo de nosotros pasaban, o eso me parecía a mí, porque estaba a mi aire. Solo permanecían con nosotros hablando Neli y su novio. Yo cuando me daba por salir a bailar me ponía a mi bola a bailar solito, pasando de chicas.
No sé quien me miraba más raro si ellas porque no entendían de que iba o mis amigos porque veían que directamente pasaba de ellas olímpicamente, no hacia ni la menor intención de nada con ellas.
Una noche después de la discoteca, sobre las 4 de la mañana o por ahí alguien había conseguido unas botellas de Ron y tequila, así que nos pusimos a jugar a chupitos, con la tontería del juego ese de verdad o prueba. Dimos varias rondas hasta que me toco, y elegí verdad, me pregunto una de las chicas que si ya me había estrenado con mi novia . Dado que técnicamente Erika no era mi novia dije que no, que no tenia novia, así que no me había podido estrenar con ella.
Cuando vi como me miraban todos supe en el acto que había metido la pata al contestar, debí de decir simplemente que no. Había dejado abierta la veda sobre mí sin darme cuenta, por listo.
La siguiente vez que me toco volví a elegir verdad, no elegí prueba porque eran capaces de mandarme cualquier barrabasada para que me pasase a verdad con obligación de contestar, ya que así era como jugábamos nosotros. Si te mandaban algo y no querías hacerlo tenias dos opciones, bebías o contestabas, pero si elegías contestar estabas obligado a responder con la verdad.
Me preguntaron si me había estrenado con alguien ya . Ni me lo pensé en lugar de contestar directamente me bebí el chupito. Si decía que no mentiría y si decía que si entonces apaga y vámonos, el interrogatorio del juego, y si me escapaba de este mañana con mis amigos no me libraba ni dios.
La tercera vez que me toco la pregunta fue que si alguna vez había tocado a una chica, y todos entendemos a que se referían por tocar. De nuevo ni conteste, cogí el chupito y me lo volví a beber de nuevo. Podía ver perfectamente las miradas especulativas de todos ellos haciéndose preguntas. El problema es que cuando a alguno de mis amigos le preguntaron después de mi si se habían estrenado simplemente habían contestado que no, colorados como tomates eso sí.
La cuarta que me toco me la hizo Arantxa con toda la mala ostia del mundo, me pregunto si ya había besado o acariciado a alguna chica, aunque no hubiera llegado hasta el final con ella .. de nuevo cogí el chupito y hasta el fondo. Los chupitos me empezaban a hacer efecto, cuando mire, y creo que fue solo la segunda o tercera vez en toda la noche, hacia donde estaba Arantxa vi que me miraba pensativa, supongo que mi actitud la estaba encontrando rara por decirlo de alguna manera suavecita.
Una de las veces que le toco a Arantxa, eligió prueba y uno de mis amigos la dijo que sería darse un beso en la boca conmigo durante dos minutos, ella protesto pero no la sirvió de nada y como no quiso beber chupito se puso delante mío para darnos el beso, no sin antes advertirme que las manitas quietas. Arantxa tenía fama de facilita en el pueblo, de besarse con cualquiera y de enrollarse con el primero que se la camelase un poquito.
Yo con mi habitual eficacia para evitarme problemas y sospechas intente por todos los medios que no se hiciera esa prueba alegando a favor de la pobre Arantxa, fui un genio, "casi ni se dieron cuenta de mis intentos de escaquearme", menos mal que el que un chico de 16 años sin compromiso quiera evitar darse el lote con la tía mas maciza de todas es lo más normal del mundo ni les extraño. Lo dicho, un genio.
Como digo el alcohol empezaba a pasarme factura, recordad que tenía 16 años y de alcohol poquito, de forma que con cuatro chupitos seguidos iba ya encaminadito al desastre.
Cuando me quise dar cuenta vi que había metido la pata hasta el fondo, mis amigos me miraban como si fuese imbécil, las chicas con caras raras y Arantxa juraría que me miraba de forma especulativa, como preguntándose exactamente el porqué la rechazaba una y otra vez, cuando el año anterior había estado babeando por ella, mas cuando no tenia novia como ya había dicho yo mismo.
Cuando empezó a darme el beso note enseguida la diferencia entre ella y Erika, era como la noche y el día, empecé a pensar que facilita no sé si seria, pero que de besarse más bien poquito. El problema vino porque como empecé a pensar me olvide del beso, y supongo que ayudado por el alcohol reaccione como normalmente lo haría si hubiese sido Erika, le metí la lengua hasta las amígdalas y le empecé a comer la boca.
Obviamente no era Erika y metí la pata hasta el cuezo, me di cuenta cuando sentí sus manos en mi pecho, sujetándome del jersey, si bien en un principio cualquier observador podía pensar que me estaba intentando separar, lo que realmente hacia era tirar hacia ella para evitarlo. Mi amigo nos dijo que ya valía que llevábamos tres minutos, que no fuese tan abusón, que solo me faltaba violarla, desde fuera parecía que era yo el que había prolongado el beso por todo el morro.
Todos se empezaron a reír, sobre todo cuando Arantxa hizo una broma quitándole hierro al asunto, porque las chicas habían empezado a mirarme mal y a los chicos solo les falto aplaudirme.
Cuando nos separamos me quede mirando fijamente a Arantxa que me devolvió la mirada mientras jadeaba un poco por el beso, recuperando el resuello, sin quitarme la vista de encima mientras soltaba su broma y mirándome con los ojos muy brillantes. Sinceramente no me gusto nada su mirada, se me pusieron los pelos como escarpias. Durante el resto de la noche hasta que nos fuimos a casa estuve haciéndome el loco evitando mirarla o coincidir con ella en las pruebas o cualquier otra cosa.
Una de las consecuencias del besito de marras fue que Arantxa se acerco mucho a mi y pudo darse cuenta de mi realidad. Yo siempre vestía ropa muy ancha lo que me daba un aspecto como si estuviera rellenito, pero al pegarse tanto a mí, como primero me puso una mano en el estomago para mantenerme alejado, había notado perfectamente mis abdominales. Después subió la mano al pecho como para aumentar la presión y que no me acercara tanto con el beso, pero disimuladamente estuvo palpando un poco para luego cogerme por la camiseta y mantenerme pegado a ella. Como digo, visto desde fuera por lo que me contaron mis amigos felicitándome por haber "aprovechado la ocasión" se vio de forma diferente a como paso.
Arantxa se dio cuenta que de rellenito nada, que tenía mi tabletita y tal, además de que el beso le había demostrado que de pardillo poquito, con lo que me debí de convertir en una especie de incógnita para ella, lo que unido a que pasaba soberanamente de hacer nada para ligarme a cualquiera de ellas aumentaba su interés repentino por mí. Seguro que si lo hubiera planeado todo esto para despertar su interés me habría dado de morros.
En la semana siguiente me empecé a tropezar con ella o sus amigas en cualquier sitio al que iba, ya fuese solo o con mis amigos, era igual que el año anterior pero al revés, el año anterior éramos nosotros los que nos encontrábamos con ellas de forma "fortuita" y este eran ellas con nosotros.
La diferencia era que el año anterior eran todas ellas las que pasaban y nos esquivaban, este año en cambio solo pasaba yo y los que tenían novia, los demás encantados de la vida, con lo que estábamos atrapados. La única ventaja es que como Neli y su novio estaban encantados de estar con nosotros. Los de las novias y yo, al no tener interés en ligar no les dejábamos tirados si se nos cruzaba un tío/tía para irnos detrás haber si teníamos suerte como el resto de mis amigos y sus amigas. De forma que me servían de parapeto. Creo que a Arantxa esto no le hizo ni la más mínima gracia.
Después de ese día de los chupitos estuvieron intentando que me fuera con todos por las mañanas a la piscina, que mis amigos me presionasen no me extraño ya que lo hacían siempre desde que llegue, pero que de pronto también me lo dijeran ellas . En fin, no hice ni caso, yo en mi mundo, les decía lo mismo a los dos grupos, que era de secano, todo por mi complejo. De una u otra forma siempre encontraba alguna excusa, lo que a las chicas parecía que empezaba a mosquearlas.
De mucho de todo esto en ese momento casi ni me enteraba, yo vivía en mi mundo, mi principal preocupación era que se terminara el verano de una vez para poder volver con Erika. La posibilidad de ligarme a alguna de estas ni se me pasaba por la cabeza, no podía ser mas simplón.
Ese fin de semana estuvo Ana, llego el viernes por la mañana con mi tía de camino a donde sus abuelos porque mi tía tenía que hablar unas cosas con mi madre, y se iban el domingo por la tarde. Evidentemente me pillo en casa leyendo. Me pregunto qué hacía allí encerrado y en vistas que le di largas le debió de preguntar a mi madre directamente la razón. Mi madre como siempre, enormemente colaboradora cuando menos se necesita, se la conto de pe a pa, incluyendo sus apreciaciones personales sobre mi inteligencia por pensar de esa forma tan estúpida.
En cuanto mi madre acabo Ana subió corriendo a mi habitación, me puso de vuelta y media, me hizo enseñarle de lo que me avergonzaba y me llamo de todo. Me dijo que no fuera imbécil, que iba al revés del mundo, que mi cuerpo no era para dar asco, sino para cogerme meterme en los vestuarios y follarme vivo de lo bueno que estaba. Mi querida Anita siempre tan bestia.
Como todavía era pronto Anita me cogió de la manita y me llevo a la piscina, porque según ella tenía ganas de darse un chapuzón y como yo era su anfitrión iba justo delante de ella. Cuando llegamos, presente a todo el mundo a Ana, pero no dije que era mi prima, solo Ana. Pensé que si veían a semejante tía ir a visitarme podrían suponer que estaba interesado en ella y me dejarían en paz.
Cuando Ana se quito el pantaloncito que llevaba y la camiseta enorme que vestía, ropa que le quedaba exactamente como a mí la mía, mis amigos se quedaron boquiabiertos con el cuerpazo de Ana ya que antes les había parecido una chica monilla del montoncito.
Mi querida Anita me miro en clara sugerencia a que mi ropa estaba sobrando para bañarme con ella, de forma que hice lo que ella y según me dijo luego Ana, alguna de las chicas cuando vio lo que ocultaba mi camiseta abrió los ojos como platos por un segundo de forma instintiva y no me quitaron ojo de encima desde que me quede solo con el bañador hasta que me volví a plantificar encima la camiseta, que fue solo el tiempo que estuve bañándome mientras jugueteaba con Ana en la piscina.
Cuando llegamos a casa a comer lo primero que Ana me dijo es que ya podía tener cuidado que había visto a tres o cuatro lobas de las que no me habían quitado ojo de encima, que si hubieran podido me habrían saltado encima en la piscina cuando me quite el jersey, que incluso a alguna de ellas no le había hecho gracia su presencia junto a mí, dado que no nos separamos en todo el rato y no sabían nuestra verdadera relación.
Arantxa vino a casa justo después de comer a hacer un encargo de su madre para la mía, traía una cara larguisimaaaaaaaa. Nos miro muy seria todo el tiempo hasta que mi madre le presento a mis tíos y a Ana como mi prima, entonces empezó a sonreír, a mí se me pusieron los pelos de punta solo de verla sonreír. De momento a tomar por saco lo de que me dejaran en paz, ahora Arantxa sabía que éramos primos, como se suele decir, la jodimos, viva mi madre.
Cuando se fue Ana me dio un golpecito en el hombro y me dijo al oído "primo, ya puedes tener cuidado con esa loba, en cualquier momento te salta encima". Lo malo fue que al día siguiente me toco ir también con Ana a la piscina, por lo que ya no me pude escaquear y termine en la piscina sin camiseta también ese sábado. Desde ese día iba con ellos a diario ya aunque me quitaba la camiseta y solo me quedaba con el bermudas no os penséis que todavía no me daba algo de reparo, mas cuando veía que algunas no me quitaban ojo, eso además de reparo me ponía de los nervios por la vergüenza que me hacían pasar o al menos eso pensaba yo.
Ese día me di cuenta de que nadie sabía que Ana era prima mía, de hecho me lo dijo Ana por lo bajito cuando volvíamos por la noche a casa desde la disco para acostarnos, ella y yo habíamos estado bailando juntos todo el rato, además la cabrona se vistió lo más sexy que pudo con lo que dejo un reguero de babas de los chicos y una ristra de caras larguísimas en las chicas. Lo que según ella la hizo notar que por algún motivo Arantxa no había dicho esta boca es mía sobre nuestro parentesco.
Me dijo que de hecho era casi la única que no tenía cara larga, bueno ella y Neli, pero que en cambio había visto a dos lobas en el grupito que no la mordían porque no podían, pero que les hubiese encantado que la cayese un altavoz en la cabeza. Eso me empezó a poner más nervioso. Lo que hizo que empezara a evitar a Arantxa con más ahincó todavía que la noche de los chupitos, incluí en esto a las dos que me dijo Ana, esto a su vez hizo que ella y las otras dos me buscaran todavía con más ganas . Una locura.
Ana se fue al día siguiente, diciéndome eso de "haber que haces, que me parece que te espera un veranito de lo más entretenido con esas tres lobas". Dos de las lobas como decía mi prima tan contentas cuando supieron que se había marchado, la tercera no lo pareció tanto, esta era evidentemente Arantxa. En esto me fije porque aunque viviera en mi mundo cuando Ana me decía algo tendía a poner atención en ello .. y esto que veía estaba empezando a ponerme muy, muy nervioso.
Lo de esquivar a Arantxa y sus dos amigas, Maite y Merche no se me dio mal pese a la poca ayuda de mis amigos que estaban encantados de que de pronto las chicas estuvieran casi todo el tiempo con nosotros sin tener que perseguirlas, mi gozo en un pozo.
CONTINUARA