Hasta el día de hoy 23

Cuando llega Erika la explico lo que ha pasado con Eva… Se muestra contenta y a la vez rabiosa… joder, joder. Eva y Teresa empiezan a conocer cómo se las gasta Erika… Erika marca su territorio

Hasta el día de hoy 23

El domingo nos levantamos pronto primero para desayunar y que Eva se fuera pronto a su casa para asegurarse de estar allí cuando regresaran sus padres, y yo para dejarlo todo en perfecto estado de revista, porque seguro que a mi padre no le hubiera importado en lo mas mínimo que su niño se hubiera llevado una amiguita a casa, pero mi madre me mata... para ella yo seguía siendo su "chiquitín".

Esa misma tarde regresaron mis padres, mis tíos, y Ana, Erika regresaba por la noche. Lo primero que hice fue ir a ver a Ana para contarle lo que había pasado con Eva, ella me escucho atentamente para acabar diciéndome que ya era hora, que ya solo me quedaba Teresa para completar el "harem"... Si hubierais visto mi cara os hubierais podido dar cuenta de la gracia que me hizo el chistecito... Que cara no pondría para que Ana en vez de atacarme por soso o algo similar, optara por cambiar a toda prisa de tema.

Bueno pues hablamos de multitud de temas distintos sin volver a mentar a Eva, hasta la hora en que llego Erika. Unos quince minutos después de que ella llegara nos subimos los dos a verla entre las miradas reprobatorias de mi madre y mi tía, que opinaban que aunque Erika nos quisiera mucho, nos estábamos pasando de pesados con la pobre chica, que no entendían como nos aguantaba sin echarnos a patadas por plastas. Después agregaron que era una santa... Sin comentarios la hilaridad de Ana escaleras arriba con chistecito incluido, según ella si Erika era una Santa yo debía ser la paloma del espíritu santo con preservativo para no embarazarla... Menuda cabrona que esta echa, le saca punta a todo, más graciosa la chica...

Cuando llegamos donde Erika nos sentamos en el sofá con ella y le preguntamos qué tal por Alemania, ella nos estuvo contando un rato lo que hizo, a quien vio, etc... Después nos toco a nosotros contarla, lo de Ana bien, lo malo fue cuando me toco a mí el turno. Ni me lo pensé, de sopetón y a bocajarro le solté un "me he acostado con Eva este fin de semana"... Mi prima se me quedo mirando con la boca abierta por la forma de contarlo y enseguida miro a Erika para ver como lo recibía. Erika no dijo ni media, ni dejo translucir nada, es mas se levanto y me clavo un morreo felicitándome por haberlo hecho y haber cumplido con mi palabra. Vi como Ana respiraba tranquila, poco después ella se bajaba para que Erika y yo pudiéramos hablar tranquilos y de paso quitarse de en medio por si las moscas.

Erika me pregunto por cómo había sido la cosa, la verdad es que se la conté de pe a pa, no le oculte nada de lo que había hecho, eso sí por mucho que preguntaba sobre si tal o cual cosa lo que no entraba en ningún momento era en detalles escabrosos, esos me los guardaba para mí. Erika se alegro sinceramente de que por fin me hubiera decidido a hacerlo, sin embargo hubo un pequeño problema en todo esto, sin querer y a base de todas las tortas que me había dado con Erika, hasta cierto punto de manera inconsciente, había aprendido a la fuerza a interpretar las sutiles señales que dejaba escapar y si bien se notaba que se alegraba, también recibía señales cruzadas de cabreo, y no de un cabreo pequeño precisamente. Pero la verdad es que también había aprendido a no forzar la situación, sobre todo cuando el candidato a llevarse los palos era yo, de forma que no dije ni media más de lo necesario. En cuanto pude me baje a dormir a casa, con la vista puesta a hablar con Erika en serio de eso cuando considerara que había pasado un tiempo prudencial.

En el instituto desde luego a Eva no se la noto nada, no movía ni medio musculo que antes no moviera. Al final del día respire tranquilo porque por lo que había visto Eva no tenía problemas en ser tan discreta o más que yo, lo que me tranquilizaba en gran medida. Ese lunes, el martes y el miércoles estuvimos estudiando los cuatro con Erika, pero el jueves Eva, Teresa, María, Esther y yo teníamos reunión de trabajo en casa de María. Se decido por casa de María porque estaríamos solos por la tarde, yo ingenuo de mi pensaba que era para estar tranquilos, y si era para eso, pero porque así no había peligro que ningún padre escuchara las explicaciones de María y Esther sobre sus novios, de esa forma podían ponerse al día tranquilas, sin contar con despellejar a todas las que se les pasaba por la imaginación en ese momento... que joder que conversaciones tenían las cuatro, y claro como no les importaba que les escuchara la "quinta chica"... pa matarlas, que corte pase, joder, que corte. Me puse de todos los colores, cosa que como además notaron se burlaron de mi cosa fina, afortunadamente Eva no metió baza con lo del fin de semana que si no me muero, parecía que solo tenía confianza en Teresa, y no tanta en María o Esther, desde luego tome buena nota del detalle.

Cuando llego la hora de irnos, Teresa se fue por su cuenta porque tenía cosas que hacer, Ana ídem de ídem, Esther se quedaba con María porque luego irían a ver a sus respectivos, de forma que nos quedamos solos Eva y yo para irnos juntos a casa. Acompañe primero a Eva a la suya, por el camino Eva me dijo que estaba un poco mosca, que en estos días que habíamos estado estudiando en casa de Erika parecía como si ella la vigilara... No os hacéis a la idea del vuelco que me dio el corazón, por un momento pensé que nos había pillado a Erika o a mí en algún gesto o algo y estaba tanteando el terreno... Pero afortunadamente no, solo estaba un pelín asustada con Erika, me eche a reír cuando entendí lo que pasaba, ella me empezó a dar su versión del porque se sentía así. Según me explico entre mis risas, en Nochevieja mi hermana y Erika parecían dos perros de presa cuidándome, le dio la impresión de que si a alguna se le hubiera ocurrido acercarse a mí de más seguro que las dos la muerden... que parecía que Erika estaba si otra vez conmigo, vigilándola a ella... vamos que no estaba nada tranquila después de lo del fin de semana. No os hacéis a la idea de mis risas y del mosqueo que ella empezaba a tener conmigo... Al final la logre tranquilizar, la comente que todo lo maja y simpática que era Erika se convertía en un cardo muy chungo como profesora, mientras ella estaba intentando explicar algo las tonterías mejor guardárselas si no querías tener pesadillas esa noche con ella y lo que podría llegar a pasarte si se enfadaba, que si la había visto con chufletas de cría conmigo aun no pillando de que iban… para ella que se estaba molestando en darnos clase y con su carácter, la aconseje que si quería sobrevivir las dejara de lado… creo sinceramente que eso la tranquilizo en cierta forma, y a mí no os digo lo que me calmo...

Después y para salir de semejante terreno me fui hacia lo que nos habían contado María y Esther, la comente a Eva que esos dos que se habían buscado de novios en mi opinión además de gilipollas se los iban a poner de palmo y medio cada vez. Eva me dio la razón pero para mí más absoluta sorpresa me dijo que Esther y María ya lo sabían, pero que confiaban en enderezarlos o "cortarles los cojones" si las engañaban antes de darlos la patada en el culo... Si me pinchan no sangro, me quede atontado, no entendía ni papa. Eva me comento que no me extrañara, que esas dos siempre han ido por libre, pero que pobres de ellos como las engañen... Además que las dos cambiaban de novios como de ropa interior, igual, cuando se cansaban patada en el culo y otro. Joder que dos... y encima esta lo veía como algo normal, ver para creer...

El viernes después de estudiar Eva y Teresa se fueron a una fiesta de cumpleaños de una amiga y Ana se fue con nuestros amigos, yo me quede con Erika, aunque evidentemente ni Eva ni Teresa lo sabían. Cuando nos quedamos solos directamente la pregunte por lo que la pasaba, que tenía claro que lo de Eva la había afectado, por muy contenta que pareciera la notaba la realidad, y estaba contrariada, así que la pedí explicaciones ya que había sido idea suya, de hecho la pregunte si quería que dejara el tema con Eva...

Erika cuando vio que iba completamente en serio me dijo que me sentara con ella, se puso de frente a mí y me empezó a largar un sermoncete, sermón que la corte en seco. Con gesto serio y ante su "asombro" la dije que se dejara de rodeos y fuese al grano, remarco lo de "asombro" porque aun siendo así, notándose claramente que no se esperaba eso de mi rápidamente se insinuó en sus labios una sonrisita de triunfo... si os digo que entendí la sonrisita mentiría, pero me puso en guardia instantáneamente.

Erika me dijo que estaba contenta por mí, porque por fin había dado el paso de buscarme otra amiga con derecho a roce, pero que me recordaba que todavía me faltaba Teresa, y esta no tardaría en echarse sobre mi dado que se había dado cuenta de cómo me miraba cuando creía que nadie la miraba durante las clases. Me aseguro que antes o después yo terminaría con Teresa igual que con Eva y con ella, una amiga mas con derecho a roce, me dijo con guasa que mas me valía racionarme y tomar muchas vitaminas... No me reí ni media, además la mire con gesto muy serio, la dije que todo esto estaba muy bien pero que seguía sin responderme.

Erika lanzo un suspiro y me dijo que de acuerdo, que me contestaría sin intentar salirse más por la tangente. Me dijo que efectivamente estaba enfadada porque me hubiera liado con Eva, y que seguro que también se enfadaba cuando me liara con Teresa, que debía de entender que era por mi culpa, la había mal acostumbrado a ser solo ella, ella y excepcionalmente alguien a quien ella me buscase para un día concreto como Ingrid o Kara. Me aseguro que ahora mismo ya no pasaba nada, porque ella misma era consciente de la situación, pero que de verdad que el domingo tenía ganas de estrangularme, y más por la forma en que se lo dije, me soltó que también me podía haber esforzado mas en decirlo con suavidad y no como un animal de bellotas... Creo que se dio cuenta de que empecé a pensar en lo de Teresa, en la conveniencia de liarme con ella también o no, Erika sonriendo me saco de dudas, me aviso que el cabreo que se pillaría cuando me liara con Teresa no sería nada comparado con lo que pasaría si dejaba escapar la ocasión... me dijo toda sonriente que si se me ocurría incumplir mi palabra más me valía no caer en sus manos...

Resumidas cuentas, quería que me liara con Eva y Teresa para después cabrearse conmigo cuando me lie con Eva la primera vez, y ya me había advertido que posiblemente también se cabrearía conmigo cuando me liase con Teresa... Pero para colmo cualquiera no se liaba, Erika era muy capaz de partirme la cabeza si intentaba alguna tontería del estilo de esquivar a Teresa, bien clarito me lo había dejado... No entendía nada de nada... Solo que de una u otra forma acabaría enfadada conmigo... genial.

Lo que más me sorprendía era la extraña habilidad de Erika para cambiar de registro, de repente había pasado de una tía seria dándome una leccioncita y haciéndome advertencias sobre mi futura salud a otra persona completamente diferente. Ahora sin embargo su rostro y sus gestos habían cambiado, poco a poco empezaba a parecer una gata en celo, relamiéndose mientras me mira, enturbiándosele poco a poco los ojos, respirando algo agitadamente... se levanto y me tendió la mano. Evidentemente se la cogí, me guio hasta su dormitorio donde se dio la vuelta y se lanzo sobre mí, me empezó a besar, a quitarme la ropa a tirones... a besarme por todos lados... por el pecho, el cuello, los hombros, los labios, el ombligo, para terminar una vez me desnudo del todo empujándome sobre la cama, terminar de desnudarse ella y lanzarse sobre mi pene, totalmente erecto, metiéndoselo en la boca y devorándomelo. Debo de decir que me corrí en su boca a los pocos minutos. Después de eso se acerco a mi cara y me beso, su boca tenía un cierto regusto a mi propio semen pero no me importo, nos comimos la boca de forma apasionada.

Aprovechando que estaba tumbado y mi pene había recuperado ya su dureza se monto sobre mi empalándose rápidamente, no se detuvo para nada, empezó a cabalgarme completamente enajenada mientras la sujetaba por la cintura para evitar que se callera hacia algún lado o hacia atrás. Cuando digo que estaba enajenada es porque creerme, lo estaba. Tardo unos minutos en alcanzar el orgasmo... le llego brutal, se derrumbo sobre mí, me dijo que lo necesitaba, que sentía haberse comportado así, yo la respondí que no se preocupara pero que no necesitaba marcar el territorio... que si el territorio era explorado por otras era por consentimiento suyo... que ella era la dueña y señora.

Para mi sorpresa vi como se le saltaron unas pocas lagrimas de los ojos, calendo por sus mejillas. Sin molestarse en limpiárselas me beso, se tumbo sobre mi sin permitirme salir de ella y me dijo que me quería, que era alguien muy especial, alguien ideal... No dije ni mu, porque no entendí ni media... después así abrazada a mi empezó a mover las caderas, haciendo rotaciones y levantándolas y agachándolas levemente... sentía como sus músculos vaginales estrujaban mi polla de forma deliciosa, estaba empezando a alcanzarme la sensación de ir de nuevo a correrme... era increíble, con lo que duraba siempre la segunda vez esta me era imposible controlarme, era como si me exprimieran, como si me succionaran la voluntad. Según le llego el orgasmo a Erika me llego a mi también, un orgasmo increíble, cálido, suave, prolongado... vaciándome en su interior, llenándola de leche, soltando unos pocos chorros de leche contra el final de su gruta. Cuando nos recuperamos intente moverme para empezar a trabajar en ella, para darla más placer... me sorprendió pidiéndome que me quedara quieto, que solo quería permanecer así por un rato largo, que perdonaba el polvo por estar así conmigo y dormirnos...

Asombrado de su reacción no me atreví a decir nada salvo abrazarla con mimo y acariciarla la espalda, el cabello, darla besitos... Sentí como se inclinaba un poco y nos echaba la sabana por encima para taparnos, después hizo un ruidito como de ronroneo y se acomodo sobre mi quedándose dormida... A mí me costó bastante pensando en lo que había pasado... estaba alucinando, no entendía nada de nada, por un momento estuve tentado de preguntarle si era por el periodo o algo así, pero había visto demasiadas películas donde preguntaban eso, o algo por ese camino y siempre acababa la cosa mal para el que preguntaba, en este caso yo, así que sabiamente opte por guardarme la preguntita. Pero desde luego si con estar así ella era feliz yo también lo era, sin problemas, así que me dispuse a descansar un poco, teniendo claro que al inicio lo que Erika había intentado era marcar el territorio pero después... lo de después... En fin, mejor no darle vueltas a algo que no entendería por mucho que lo intentara, así que a dormir.

El sábado nos levantamos tarde, desayunamos y todo volvió a la normalidad, ahora sí que era la Erika de siempre. A la hora de comer se presentaron Teresa y Eva invitadas por Erika, así que comimos los cinco en casa de ella. Eva y Teresa nos preguntaron a Ana y a mí que esa noche a donde pensábamos ir, Ana les dijo el local al que iríamos con nuestros amigos, pero Erika dijo tranquilamente que yo no podría salir, que tenía que quedarse con ella porque no había dado la talla ayer con la tarea. Eva y Teresa nos miraron curiosas, dado que ellas no recordaban que durante la clase de Erika pasara nada, entonces Erika recurrió al socorrido tema del idioma, según ella no había dado bien con el Alemán así que me tocaba doblar los codos... mirándolas especulativamente las pregunto si no querían también unas clasecitas de Alemán que si querían hablaba ella con sus padres para que pudieran quedarse algo más de tiempo por las tardes... no os digo como se disculparon de rápido las dos, dijeron que no, que el ingles y el francés a medio pelo que llevaban les valía, que lo agradecían pero que no podían...

Sinceramente creo que por parte de Erika fue una maniobra magistral el ofrecerse a ensañarlas... en lo que resta de tarde no volvieron a sacar el tema de estudios o de salir esa noche ni por asomo, de hecho tire yo medio de guasa un dardito sobre salir para ver quien lo recogía y me lleve una patada por debajo de la mesa que me dolió de narices, no sé si fue Eva o Teresa, pero fue una de las dos, así que lo deje pasar, o eso, o me quedaba sin espinillas porque la cara de mala ostia que pusieron las dos me lo dejo muy claro, como siguiera por ahí... muy malo para mi salud. Erika tenía una sonrisa beatifica, creo que estaba disfrutando la cabrona como una enana a nuestra costa. Cuando se levantaron Ana, Eva y Teresa para irse por ahí dejándome tirado como una colilla Erika las recomendó a Eva y Teresa con respecto a algunos temas que llevaban renqueantes que se pusieran las pilas o la próxima me hacían compañía, que seguro que se lo pasarían pipa conmigo y con ella estudiando, que sus padres le habían dado permiso para decidir esas cosillas cuando hablo con ellos sobre lo de las clases con Ana y conmigo... No sé si fue un efecto óptico o de verdad las dos se pusieron pálidas...

Cuando se fueron todas le pregunte a Erika si lo de sus padres era verdad o no... se limito a mirarme con cara inexpresiva... decidí de repente con muy buen criterio, inteligencia e instinto de conservación por mi parte, que no me interesaba el asunto en lo más mínimo, ya que los míos " si" lo sabían y " si" le habían dado esa posibilidad que había dicho. Aunque desde luego por dentro estaba seguro que la muy cabrona de verdad había hablado con sus padres y así asegurarse de que podríamos jugar ellas y yo con calma en cuanto se liaran conmigo... y de paso que estudiaran en serio, solo por si acaso, que sabía de buena tinta que la jodìa mucho que la toreen en algo que haga, incluido enseñar algo... y claro si a sus padres les puso de ejemplo mi mejoría y la de Eva... Joder, y yo pensando que algún día me podría poner a su nivel... ostias si parecía el diablo en persona... cuando te cubrías de una te daba con cinco más para que espabilaras.

Erika se disculpo conmigo por lo de la noche anterior, según ella había venido de Alemania baja de moral por separarse de su familia y para rematarlo había ido yo con lo de Eva, además con la sutileza con que lo solté, lo que acabo de machacarla un poco, pero que la noche anterior me había redimido con creces. Dicho esto me pego un morreo de escándalo, morreo que la devolví con muchísimas ganas... estaba a mil y ella creo que igual o más que yo. Me abrazo, y con sus brazos alrededor de mi cuello, pegados como lapas y besándonos lentamente Erika me dijo entre beso y beso que esta noche quería que por favor fuera todo lo ardiente y fogoso que quisiera, que le hiciera de todo lo que se me ocurriera, que si quería sexo anal también pero que sin piedad, que quería terminar desecha esa noche. Me advirtió que ella no tendría piedad de mi así que mas me valía ponerme a trabajar en serio...

Nos fuimos a su habitación donde nos desnudamos y nos tumbamos en la cama, rápidamente me baje a comerla en coñito. Use la lengua a discreción sobre su rajita y su clítoris mientras con dos de mis dedos la trabajaba el culito, para cuando le llego el primer orgasmo, uno brutal ya tenía tres dedos en su culito perforándola. Estaba aprovechando la circunstancia para dilatárselo en lo posible y que no la doliera tanto. Cuando se recupero del orgasmo la hice ponerse a cuatro, ensartándosela a lo bestia por el culo, pero gracias a la dilatación anterior entro bastante suave para lo que podría haber sido, rápidamente empecé a trabajarla el clítoris con una mano mientras con otra la tironeaba de los pezones. Estaba apoyado por completo sobre ella, que usaba sus manos sobre el cabecero para sostener nuestros pesos, estaba preparado para cuando notara que ella se empezara a correr rápidamente sostenerme por mi mismo para no caer con ella. Empecé a bombearla con rapidez y fuerza, en ningún momento pare lo más mínimo para que se acostumbrara, la estuve dando tan fuerte como era capaz mientras ella gemía y chillaba, primero de dolor y poco a poco de placer, hasta terminar en un orgasmo intenso y prolongado... se derrumbo sobre la cama, como me dio tiempo a sujetarme por mi mismo con mis brazos al ella caer contra la cama me salí de su culito, quedando mi miembro enhiesto al aire.

Mientras se recuperaba empecé a tallarla entre los cachetes con mi miembro mientras la besaba y pasaba la punta de mi lengua a lo largo de toda su espalda, empezando otra vez a gemir suavemente ante mis caricias. Se intento volver pero se lo impedí, la pedí que permaneciera así y me dejara hacer a mí, se quedo quieta completamente. Me puse a su lado tumbado, mientras que con mi lengua le trabajaba la espalda con caricias mi mano se encontraba entre sus piernas masturbándola... al poco tubo otro orgasmo mas, este muy suave y corto, pero según ella muy placentero. Solo después de él la deje darse la vuelta, pero para inmediatamente ocupar sus labios, besándola con pasión, devorando su lengua, jugando con ella con la mía...

Me volví a meter entre sus piernas volviendo a trabajarla el clítoris y con dos dedos jugando con su coñito, lentamente empezaba otra vez a gemir, a jadear y a lanzar grititos, a pedirme que no parara, que siguiera... esta vez sin embargo recurrí a lo habitual, a prolongarla la agonía del orgasmo, a negárselo, a mi juego habitual en el que estaba convirtiéndome en un experto... al final cuando le deje alcanzarlo fue como es habitual en estos casos, brutal... su cuerpo llevaba mucho tiempo esperando por él, así que cuando llego, llego intensificado por su propia espera, quedando derrengada, pero tenía claro que no había terminado todavía, ni yo, ni ella.

Cuando se recupero me hizo ponerme sobre ella, en la posición del misionero, la dije si no prefería otra pero me dijo que no, que me quería exactamente donde estaba. Lentamente la penetre, esta vez el coñito. Empecé a bombearla lentamente, profundo y fuerte... ella empezó a gemir pronto, pero empezó a pedirme más fuerza, que lo hiciera más fuerte... la hice caso y empecé a darla con todas mis fuerzas, ella empezó a abrazarme con mucha fuerza, cada vez con mas, a medida que yo aumentaba la fuerza de mis embestidas... de pronto sentí un dolor agudo en la espalda, entendí que me acababa de arañar presa de su descontrol, por lo que para intentar calmar el dolor un poco empecé a embestirla de forma cada vez más dura, pero como cada vez según aumentaba mi fuerza ella aumentaba su fuerza y sus arañazos eran más fuertes, en pocos minutos la estaba embistiendo de forma bestial... EL choque de mis caderas contra las suyas sonaban como si fuesen guantazos, la cama pegaba unas ostias contra la pared impresionantes, mientras Erika más me clavaba las uñas más fuerte y brutal la embestía yo. Por un momento pensé que la iba a sacar mi polla por la garganta de la fuerza con que la penetraba, pero a ella eso solo parecía sacarla más de quicio, gustarla más, hacerla gemir mas, jadear mas fuerte...

Tenía sus piernas completamente rodeando mi cintura, como un cepo dejando su coño expuesto para que las penetraciones fueran lo más profundas posibles... Cuando sentí sus dientes en mi hombro no me lo pensé, baje una de mis manos a su cintura y la metí de golpe cuatro dedos en el culo, a lo bestia... se soltó de mi hombro soltando un aullido de dolor... y acto seguido para mi posterior asombro tubo un orgasmo que la hizo literalmente perder el sentido... Digo posterior asombro porque solo me di cuenta de ello cuando me recupere, en el momento concreto no pensaba, solo la embestía. Cuando note que se corrió y que no respondía comprobé que estuviera bien, y según se recupero lo suficiente la ayude a ponerse de espaldas a mí, con el culito en pompa y en esa posición la penetre otra vez el coñito. Una vez más la empecé a embestir a lo bestia, pero esta vez cuando la llego el orgasmo estuve a punto de correrme yo también por primera vez, sin embargo logre aguantarme como pude, para haciéndola darse la vuelta pedirla correrme en su boca, cosa que acepto.

Me tumbe sobre la cama y ella se coloco en la posición del 69, empezó a chupármela para lograr que me corriera enseguida, mientras yo la punteaba el coñito con mi lengua, recogiendo su rico néctar, tenía el coñito completamente encharcadito. Evidentemente no tarde mucho en correrme de forma abundante en su boca, debo decir que esta vez no fue capaz de retenerlo todo, desbordándosele bastante por las comisuras de los labios, calendo sobre mi piel, de donde lo lamio lenta y golosamente. Una vez que estuve satisfecho la "obligue" a tumbarse ella en la cama, mientras yo me colocaba en posición cómoda para destrozarla del todo con mi boca, debo de decir que eso era lo que ella esperaba porque empezó a pedirme que la reventara con el orgasmo, que quería estar el domingo para el arrastre todo el día... Eso hice, juguetee como siempre con su orgasmo, reteniéndoselo todo lo que pude, esta vez cuando lo solté llevaba más tiempo del habitual, acabo completamente derrengada del todo, no podía ni con su alma. Solo quería descansar y dormir...

Me levante y le prepare la bañera, la casa de Erika tiene en el servicio de su habitación una enorme bañera redonda en la que entran cómodamente dos personas, pueden incluso entrar cuatro si se tercia, pero en este caso una vez prepare la bañera la ayude a llegar a ella y meterse dentro, estaba destrozada de verdad. Me senté yo y luego la hice sentarse delante de mi, con su espalda apoyada en mi pecho. Cuando su cuerpo dio muestras de relajarse, la empecé a masajear con suavidad los hombros, arrancándola gemiditos de gozo... Estuvimos casi 20 minutos en la bañera, cuando salimos en un periquete cambie la ropa, después vacié la bañera y nos acostamos juntos. Erika se durmió enseguida conmigo abrazándola... Se acurruco contra mí, lanzo unos suspiritos, ronroneo y se quedo frita... La verdad es que estar así era una gozada...

Ya veríamos al día siguiente que tal tenía el cuerpo, entre los arañazos y el mordisco no os digo el escozor en la bañera con las sales y el gel que eche en el agua, desde luego a esto sí que es "marcar el territorio" y lo demás son tonterías, solo la falto poner clavos y colgar carteles... Lo malo es que conocía a Erika y sabia que al día siguiente cuando mira mis marcas de guerra la daría algo por habérmelas hecho... sin contar que tenía que tener medio cuerpo cubierto de chupetones... menos mas que todavía era invierno, los jerséis de manga larga con cuello alto eran una gozada para disimularlos... aunque pareciera todavía más friki... no pude evitar soltar un suspiro.

Poco después me quede frito también, abrazando a mi valkiria particular.

CONTINUARA