Hasta el día de hoy 20
Subo a dar la cara por lo de mis corridas sobre ellas con más miedo que vergüenza... Kara e Ingrid regresan a Alemania... Regreso al instituto... Algún problemilla con Erika...
Hasta el día de hoy 20
Cuando me levante al día siguiente estaba destrozado, me dolía hasta el alma. Tenía todos los músculos pidiéndome tregua, tenia agujetas hasta en la lengua. El pene lo tenía algo escoriado, no tuve mas remedio que darle otra sesión de cremita de bebe para las rozaduras después de ducharme. Dentro de la ducha pensaba en lo de la noche anterior y la que me esperaba en cuanto estas tres me echaran el guante encima, estaba un poco extrañado de que no hubiera bajado ninguna, aunque realmente para que molestarse si de todas formas tendría que subir yo a desayunar con ellas.
Cuando subía hacia el piso de Erika no podía evitar pensar que en vez de invitarme a roscón de reyes, me invitarían a "tortas Alemanas" y por triplicado, en fin tocaba apechugar con mis actos, que remedio. Cuando entre en casa de Erika me lleve la primera sorpresa, me encontré de frente con Erika que llevaba los cafés a la mesa, me dio un piquito y me dijo algo así como
- Erika: Estaba a punto de bajar a despertarte cielo. Anda pasa y siéntate a desayunar, tenemos chocolate y roscón de nata.
Pase al salón si terminar de creérmelo y me lleve la segunda sorpresa, cuando Kara e Ingrid pasaron por mi lado para sentarse también me dieron un piquito cada una de ellas. Os juro que no salía de mi asombro... Estuve desayunando con los nervios de punta, esperando a ver qué era lo que me tenían preparado esas tres en represalia por lo de la noche anterior. Sin embargo todo el desayuno fue normal, sin incidentes ni nada que hiciera pensar que estuvieran enfadadas por lo de la noche anterior...
Pensaba decir que no os lo creeríais, bueno, la verdad creo que a estas alturas sí que creeríais que era idiota. Como no pasaba nada y estaba de los nervios pues directamente les pregunte... Sinceramente ni se me ocurrió pensar que quizá no se habían enterado por estar casi dormidas, así que les pregunte. Al principio me miraron extrañadas como no sabiendo de que hablaba... por mi cabeza paso lo que dije antes que quizá no se habían enterado y estaba metiendo la pata... me puse pálido, lo que provoco que las tres se empezaran a reír a carcajadas, siendo Erika la que dijo que si era por lo de llenarlas de semen al final que no me preocupara, entonces salto Kara con cara de vicio para decirme...
- Kara: No te preocupes por eso, cuando te fuiste nos lo lamimos unas a otras, y debo de decir que era delicioso...
Encima se relamió mientras me miraba como con ganas de comerme a mí y no al roscón, cuando mire a Ingrid la jodìa hizo exactamente lo mismo que Kara solo que ella empezaba a poner los ojos como turbios, así que pase de estar pálido a parecer un pimiento morrón, entre las chuflas de las tres, menos mal que debían de estar agotadas que si no me violan visto el percal. Hay que ver lo bien que se lo pasaron ese día las tres a mi costa, dándome puyazos de todas clases y por todos lados. Ingrid me dijo que no me preocupara por eso, que cierto que ninguna pensó que pudiera hacer algo así, pero que ciertamente solo había hecho lo que ellas mismas me pidieron que hiciera. Kara además añadió que de hecho, eso que hice de correrme encima de ellas asi, al final me hubiera podido costar un serio disgusto de no estar las tres destrozadas físicamente, ya que por lo visto no estaban dormidas, sino con los ojos entrecerrados mirándome y según ella las puse otra vez a cien. Las deje a las tres con ganas de saltar a por mi y ordeñarme, textual, me lo soltó tal cual tan pancha ella, pero desgraciadamente para ellas, no estaban para seguir por lo que decidieron seguir haciéndose las dormidas. Según ellas se hicieron las dormidas entre otras cosas por si me daba por seguir queriendo fiesta... que no estaban para ni un solo "trote" mas.
Creedme que respire aliviado al oír todo esto, evidentemente ellas no podían saber que de haberme pedido más en ese momento hubiera salido corriendo porque no podía ni con mi alma, con que mucho menos con tres tías con ganas de mas marcha. De la que me libre, joder de la que me libre , casi la cago por mi estupidez... Joder con las tres, como las iba la marcha a las señoras, para haber muerto en el intento. Puedo decir que gracias a dios que se me ocurrió el truquito de la lengua, suerte que las dejaba para el arrastre de forma automática, sino a estas alturas me habrían matado a polvos.
Ese día descansamos los cuatro tranquilamente, sin hacer tonterías, estuvimos hablando de multitud de cosas distintas. Kara me hizo la misma oferta que en su día Ingrid, o más bien me exigió lo mismo que Ingrid la vez anterior, y con la misma pinta de sargento. Si iba por Alemania tenia irremediablemente que avisarla para quedar. Ella sería mi guía turística y además me ofrecería otras ventajas que no tendría con ninguna empresa dedicada al turismo... Mirándome con pinta de loba salida me soltó así en crudo, que con ella tendría golfa a mi disposición las 24h... Entonces salto Ingrid, recordando a Kara que serian dos las golfas de las que dispondría las 24h... Para rematarlo Erika me dijo que el único problema que veía si aceptaba era que salvo la cama de la casa de una de las dos solo vería el aeropuerto... y que había un error, serian tres putas las que tendría a mi disposición, su cara expresaba todavía mas vicio que la de las otras dos juntas. Las tres se empezaron a descojonar de risa y yo... pues como siempre, como un tomate, colorado, colorado, colorado. Ni que decir tiene que me empalme y en el estado que tenia la polla imaginaos la gracia que me hacia el roce
Una de las consecuencias de esto es que todo lo que quedo de día era raro que no estuviera un ratito comiéndome los morros con una o con otra, entre tres no os digo como se me puso el aparato... lo malo como ya he dicho es que escocía de narices y no había nada que hacer, ni siquiera una miserable paja, porque incluso con algo así, todo suavecito dolía. Para mí que esto fue en represalia por lo de las corridas de la noche anterior por mucho que ellas digan que no pasaba nada.
En una de las que Erika se despisto y me dejo a solas con Kara e Ingrid, esta ultima me dijo que si quería hablar en serio con Erika del tema de mis compañeras de estudios que dejara de ser un crio y por primera vez fuera un hombre. Que cuando quería era todo un hombre y no se refería a la cama. También me dijo que no temiera llevarle la contraria a Erika, que de hecho ella estaba esperando que por fin abandonara mi pose de crio consentido para mostrarme yo... Kara se limito a asentir con la cabeza, dijo que entendía lo que Erika intentaba hacer y porque, pero que yo no acababa de terminar de arrancar, que me decidiera de una vez por todas. No creo necesario decir que no entendí nada... qué raro, ¿no?.
Por fin llego el domingo día siete, ese día me fui con Erika a acompañar a Kara e Ingrid al aeropuerto a coger el avión que las devolvería a Alemania. En el aeropuerto ambas me repitieron la oferta por si visitaba Alemania por la zona donde ellas estaban, aunque más que oferta creo que fue un ultimátum. Antes de despegar Kara me llevo un poco aparte mientras Ingrid y Erika se despedían, me dijo que todo lo que Erika intentaba era por mi bien, pero que debía de hablar con ella y sincerarme de una vez por todas, dejar de ser un crio y aceptar las cosas tal y como son de verdad. Me dijo también que no sabía lo especial que era, que aprovechara todo lo que Erika me estaba enseñando en todos los aspectos y que en unos años dejaría de ser un niño y sin duda seria un hombre temible con las mujeres... Me quede como... ¡¡¡Pos vale, me alegro!!!.
Cuando el avión partió decidí intentar lo que me habían estado aconsejando estas dos con Erika, ser sincero del todo. Dejar de escudarme en mi edad y echarle valor... que falta me iba a hacer. Cuando llegamos a su casa la dije de preparar café, que quería hablar detenidamente con ella. Nos pusimos un café y empecé a hablar, rogándola que por favor no me interrumpiera, que bastante difícil me iba a ser dar la cara... Erika me lanzo una mirada indescifrable y acepto.
En resumidas cuentas le dije que para mi ella no era solo una amiga con derecho a roce, que era mi primera mujer, mi primer amor, mi maestra.... Que si bien aceptaba que no podíamos estar juntos y por consiguiente sabía que no podríamos pasar de ser los mejores amigos del mundo. Que debía de entender que me resultaba muy difícil liarme con otra persona estando ella, ya que era un hecho le gustase o no el que con ella me sobraban todas las demás, fueren quienes fueren. Que si quería considerar que era monógamo al extremo, que lo hiciera, pero que así estaba la cosa. Con respecto a mis compañeras de instituto le dije que obviamente había rechazado a Esther y María porque ellas querían relaciones estables, que de hecho sabía que tenían otra vez a alguien en mente las dos, mientras que Eva y Teresa no, ellas en estos momento estaban concentradas en los estudios para cuando llegara la selectividad. Que entendía porque quería que me liara con las dos, pero que entendiera que me estaba forzando a algo que no deseaba y que además no veía nada claro (esto es más o menos lo más importante que la dije en ese momento). Finalmente la pregunte si me entendía...
Erika asintió, se disculpo por lo de mis compañeras pero me dijo que quería una promesa mía de que si la situación se daba no la rechazaría por pensar en ella, ya que me gustara o no solo éramos amigos con derecho a roce, aunque entendía lo que la había explicado. Naturalmente acepte, me quede más ancho que dios, ¡¡¡por fin...!!!, ya era hora, haber si después de haberme sincerado del todo y dejar de lado cualquier resquemor de explicárselo a Erika se arreglaba esa manía suya de manejarme como una marioneta (entended que la conversación fue más compleja, pero para simplificarla creo que vale así). Erika se levanto y me metió un morreo de escándalo, me dijo que tenía ganas de estar conmigo, que esta conversación le había despertado el morbo, pero que estaba desecha... Joder que cambio de tercio que tenia la jodìa, otra vez en plan tablero de ajedrez, a cuadros. No pude evitar pensar si de verdad me había hecho caso o solo me había dado la razón para que dejara de decir tonterías...
El día ocho empezamos las clases y lo de la cenita de navidad tuvo sus primeras consecuencias para Ana y para mí. De repente nos saludaba gente con la que no nos habíamos dicho ni hola en todos los años de instituto que llevábamos, a mi chicas y a ella chicos, ver para creer. Os juro que parecíamos miss y míster popularidad, con deciros que en el primer descanso entre clase y clase me fue imposible moverme del sitio porque literalmente me acorralaron, tuve a toda la caterva habitual de chicas alrededor de Eva y Teresa, pero si normalmente me dejaban espacio para que ahuecara cuanto antes, en esta ocasión era todo lo contrario, se pusieron de forma que me impedían moverme. Además empezaron a preguntar sobre mí, pero para tener apoyo las preguntas las hacían hacia los tres, Eva, Teresa y yo, de forma que me metieran ellas en la conversación para que no escurriera el bulto. Deduje que pensaron que si me preguntaban a mi directamente lo mismo me daba por irme, pero si las preguntaba a ellas para que ellas se dirigieran a mí, me meterían en la conversación evitando que me pudiera escapara para no hacerlas un feo a ninguna de ambas. Desde luego joder con las niñas...
Además había determinadas chicas que parecían excesivamente interesadas en mi, luego estaban las que ni Eva ni Teresa tragaban, a las que ponían cara de perro cada vez que veían alguna acercarse a mí. Ni que decir cuando se acerco el diablo en persona, Almudena (la de la cena de navidad, la que se llevo todos los cortes habidos y por haber), si a la pobre ya la dieron en la cena todo lo que quisieron y mas no os cuento esta vez, desde "Almu cariño, que es el pardillo de siempre", pasando por "nena, que chorreas, que estas dejando un laguito entre tus piernas..." . En fin, que se pasaron pueblo y medio con ella. Pero con todo esto Eva y Teresa empezaban a recordarme a mi hermana, estaban en plan guardia pretoriana. Quien me hubiera dicho a mí el año anterior que estaría así, en este plan con las dos tías mas buenas del instituto, y pensar como trate de escaquearme cuando me sentaron con ellas y después con lo de los trabajos Aun así en general era pasable, salvo con algunas excepciones como las anteriormente descritas, con esas daba miedo de que se liase gorda.
Ese día fue el primero que Ana y yo no pudimos estar solos ni un solo minuto sin tener a alguien pegado como las lapas. Cuando llegamos a casa cambiamos impresiones y nos dimos cuenta que habíamos tenido un día calcado, a ella le hicieron lo mismo que a mí con Eva y Teresa, pero con sus amigas y amigos, les metieron a ellos para que ella no se escapara del tercer grado al que la intentaban someter los chicos. Cuando cambiamos impresiones sobre lo que habíamos estado hablando nos empezamos a reír a carcajadas, habíamos hablado mucho sin llegar a decir ni mu. Habíamos estado dando vuelta sobre vuelta con sus preguntas, si no se fueron frustrados en unos pocos días mas se irían.
Subimos a casa de Erika a estudiar con ella como siempre hacíamos. Llevábamos casi media hora cuando sonó el portero, Erika hablo un momento y luego oí como decía que entrasen. Al poco entraron por la puerta Eva y Teresa que por lo visto se unirían desde ahora a nuestras clases con Erika... por lo visto habían estado hablando con Ana y esta le pregunto a Erika si se podían unir, esta lo vio genial, obviamente. Así que aquí estaban mis compañeras, tendría el placer de su compañía durante casi todos los días el resto del curso... manda cojones la cosa. Y no, nadie se preocupo de consultarme a mí, total para que... ¡¡¡a mí que me jodan!!!. Y pensar que por un momento creí que Erika había aceptado lo que la dije... ¡¡¡No me hizo ni puto caso!!!.
No os hacéis idea del cabreo que tenia, pero por fortuna para mí como idiota del todo no soy algo había aprendido sobre tratar con Erika... aunque casi siempre acabara haciendo al final lo que a ella le daba la real gana... pero bueno. Durante el resto de la semana fui la cordialidad personificada con ellas y Ana, mientras que con Erika era el respeto personificado. Cuando acabamos las clases me iba a mi casa y no volvía a subir más. Incluso ese fin de semana me fui con mis padres y tíos a la sierra sin mediar explicación ninguna a Erika. Si algo había aprendido en todo este tiempo es que una pataleta no me llevara más que al desastre, así que decidí probar otra táctica diferente. Aunque tampoco es que tuviera muchas esperanzas de que funcionase, no os creáis...
El domingo según llegamos Erika se las apaño para que yo tuviera que subir a su casa, nada más entrar me guio al salón y de pidió que me sentara, vi que parecía preocupada por la situación. Según termine de sentarme me soltó de sopetón que narices era lo que me pasaba, que a qué demonios venia mi comportamiento... yo la dije que a nada, que creí que cuando hablamos había quedado clara mi posición sobre mis compañeras, que ella me dijo que dejaría de meterse en eso y que por si no se había dado cuenta no lo había hecho. También la dije que si se pensaba que yo era un juguete estaba muy equivocada, que la prometí algo que tenía pensado cumplir aunque no me gustara pero que en vista que seguía con las mismas pasaba... Ni me dejo terminar, se echo a reír y salto sobre mí, sentándose sobre mis piernas, de frente a mí, liándose a comerme a besos en el acto, pegando sus senos contra mi pecho... En fin, me puso como a una moto... y mis padres en casa, genial, si ya que había perdido por lo menos pudiera follar...
Erika se separo y me dijo que era idiota, que efectivamente me entendió y que lo de estas dos era anterior a eso, pero no lo había hecho con vistas a que me liase con ellas. Entonces me explico la situación real tal y como ella la veía. Eva y Teresa querían llegar a la selectividad con posibilidades de llevarse unas notas altas para optar a las carreras que querían sin problemas. Habían visto como Ana y yo habíamos mejorado de forma exponencial, y se enteraron en las fiestas que era desde que Erika nos ayudaba por las tardes de forma que la preguntaron si podían ir también ellas. Según Erika no vio problema ninguno y dado que ambas la caían genial no puso pegas, pero sin segundas intenciones en ese momento... aunque reconoció que bueno, que ya que estaban...
A continuación me explico porque su interés en liarme con ellas, según me comento Ingrid estuvo hablando con ellas y ambas llevaban cinco meses desde que rompieron con sus novios, con el tema de la carrera estaban preocupadas y no querían líos con tíos, querían centrarse en sus carreras que para lo otro tendrían tiempo. Según parece le dijeron a Ingrid que el problema era que lo de enrollarse con un tío cualquiera en un local no les iba, y lo de alguien de su entorno lo de siempre, se irían de la boca y acabarían con fama de putas. Resumiendo que Ingrid las logro sacar que habían pensado en mi, para ellas era evidente que me estaba tirando a alguien y no había forma de sacarme nada, de hecho en cuestión de sexo era imposible sacarme cualquier cosa referente a nadie, era como una tumba. Yo les gustaba muchísimo, sobre todo después de ver lo del servicio con Ingrid, pero según parece tenían el mismo problema que cualquier persona que cree que el otro está fuera de su alcance, no se atreven a dar el paso. Además según Ingrid por lo que había podido ver hablando con ellas desde luego cuando se lo montaran conmigo se llevarían una agradabilísima sorpresa que ni se imaginan, se iban a llevar una sorpresita muy agradable y luego Erika dijo algo que no entendí, dijo que después de estar conmigo tendría dos amigas que se encargarían de evitar que ninguna lagarta me intentara llevar al huerto por propio interés, lo que sea que eso signifique. Según Erika yo pienso que ellas están fuera de mi alcance porque están como están y son quienes son, y siempre ha estado en un pedestal altísimo en el Instituto aunque podía ver que eran chicas normalitas. Sin embargo ellas por su parte creen que yo estoy fuera de su alcance por liarme con quienes me lio, me dijo que sabían que me había hecho un trió con Ingrid y otra que estaba como ella el día de lo del servicio, y estas fiestas me había tirado otra vez a Ingrid y posiblemente también a Kara, por lo que piensan que a ellas las veo como unas crías y no las hare cuento, así que somos la pescadilla que se muerde la cola y ella solo intentaba darnos el empujoncito, pero por lo que parece con mi charla había decidido dejar que pasase lo que tuviera que pasar, aunque según ella por fin yo estaba despertando y todo acabaría como debía de acabar... y dejo caer un, "haber si así dejas de lado esa tontería de solo una amiga..., aunque sea yo y me halague".
Según me dijo ahora tenía 17 años pero en unos cuatro o seis años seria un cazador implacable, me las llevaría de calle, si lograba dejar de lado mi manía de la monogamia, que debía de ser el único tío que pudiéndose pasar por la piedra a quien quisiera, y además con permiso de mi "pareja" iba y ponía pegas... según ella era para matarme por idiota, pero que sin embargo eso era lo que me hacia tan atractivo para ellas.... Joder, si es que era surrealista del todo, como digo siempre... ¡¡¡¿Pero de verdad alguien es capaz de entenderlas?!!!.
Pues sí, me pareció algo así como una telenovela, me perdí en el segundo capítulo, digamos que el tener a Erika frotándose contra mi polla encima mío no era de mucha ayuda para prestar atención a lo que decía, así que dije a todo que si mientras la acariciaba... Fijaos que creo que lo hizo a posta para que no diera pie con bola y tragara con lo que me dijera...
Al final ni mis padres, ni ostias benditas, acabamos haciéndolo en el sofá. Erika se subió la falda echándose la braguita a un lado mientras me sacaba la polla. Me la saco guiándola hacia su entrada, poco a poco fue sentándose encima, empalándose lentamente, ahogando sus gemidos en mi boca, metiéndonos la lengua mutuamente hasta las amígdalas. Mientras me cabalgaba suavemente no paraba de retorcerla los pechos por encima de la camisa. Camisa que al final le quite como pude, soltándola el sostén y recogiendo esos globos de turgente carne con mis manos, acariciándolos, amasándolos, pellizcando sus pezones que cada vez parecían más duros. No me atrevía a dejar sus labios escapar para evitar que se oyeran sus gemidos. Mientras tuviera sus labios contra los míos todos sus jadeos y gemidos salían muy amortiguados. Erika cabalgaba delicadamente, sin prisas, rotando las caderas, empalándose una y otra vez mientras mis manos atendían constantemente sus pechos y pezones, cada vez se movía mas, y mas rápido sobre mi hasta que al final logramos alcanzar ambos un orgasmo prácticamente simultaneo, el rugido que dejo escapar Erika en mi boca fue increíble, si no la llego a estar besando la hubiera escuchado medio barrio. Cuando terminamos se intento levantar pero no la deje, no pare en ningún momento de besarla, al final permaneció donde estaba sentada, con mi polla ya fuera de ella recuperándose lentamente mientras nos comíamos a besos. Al final tuve que bajar para casa otra vez, dejando a una Erika satisfecha del todo, según me dijo ella.
Esa noche me acosté mas agosto que dios. Por un lado había solucionado lo de Erika... aunque no se qué era lo que había logrado, pero bueno había echado un polvo genial, que ya era algo, digo yo ¿no?.
CONTINUARA