Guía práctica para chupar una polla
Con el ánimo de que mamemos cada vez mejor un pene os dejo una pequeña lista de consejos que, deseo, os sea de utilidad en este año 2022 que está a punto de comenzar
Sería muy bonito que empecemos 2022, que pronto llegará, aprendiendo a relajarnos, y que mejor forma de relajarse que comiendo, o dejándose comer, la polla.
Antes de comenzar, quiero decir que hay otra guía en esta web que me ha parecido estupenda, la de la usuaria Irene ( https://www.todorelatos.com/perfil/1469020/ ) que viene siendo esta: ( https://www.todorelatos.com/relato/153980/ ) Recomiendo su lectura porque es breve, simpática y contiene varios puntos muy útiles.
Pretendo, pues, solo enriquecer, expandir humildemente nuestros recursos en esta estupenda práctica. Dar unos pequeños “tips” para mejorar nuestra vida. Un pequeño grupo de puntos prácticos para mejorar este noble arte de la succión. Vamos a ello.
A) ENVOLVER EN LA MADRIGUERA DE MAMÁ CANGURO
Algo que genera mucho placer en un comienzo, tanto para quien se le chupa la polla como para la persona chupadora, es meter toda la polla a mamar, aun relajada, completamente dentro de la boca. Con los labios rodeando la raíz. Dejarla ahí un rato. Da mucho placer dejar que la polla, por si sola, vaya creciendo dentro de la boca de la persona chupadora. La sensación de envolvimiento total, en humedad y calor, sin hacer nada más, es muy buena. Según se vaya notando que la espada de poder va emergiendo, se puede empezar a complementar esto, poco a poco, con ligeras lamidas en la punta. Dentro de la boca. La polla no solo nota que está metida en la bolsa de mamá canguro, si no que, además, dentro, hay vida. La combinación de ambos factores es especialmente agradable.
B) PRIMEROS MOVIMIENTOS DEL ENGRANAJE
Un tema crucial, y que nos ha dejado regueros de tinta, es como iniciar los movimientos. Si deben ser lamidas externas, o succiones, ya sean lentas o frenéticas. En mi opinión, no son prácticas excluyentes, pero si hemos empezado con el punto A), creo que lo más coherente es comenzar con succión lenta. Si vas a acelerar el ritmo en algún momento, piensa en alternar las velocidades para aumentar el tiempo de mamada. Acelerar, decelerar, acelerar… y así consecutivamente. Si vas a sacar la polla de la boca, y vas a pasar la lengua a lo largo, recuerda la siempre positiva práctica de mirar a los ojos directamente a la persona mamada. Eso genera una conexión de ofrecimiento e intimidad que aumenta la excitación.
C) MOVIMIENTOS HORIZONTALES, LA ESPIRAL MÁGICA
No es muy habitual, pero es muy recomendable. Mientras se está chupando, no solo se puede mover la boca de manera vertical, sino, además, girando levemente la cabeza, se pueden dibujar círculos y succionar con movimientos horizontales. Para entendernos, sería como dibujar una espiral en el aire. Esto multiplica las sensaciones. No hay mucho más que añadir a este punto.
D) LA ENORME IMPORTANCIA DE LA PUNTA
Aunque la persona que chupa está deseando meter toda esa polla en su boca, tengamos en cuenta que la zona de mayor sensibilidad del pene es el glande. La punta. Se puede sacar provecho de este conocimiento si detenemos un poco la mamada y, sin sacar el glande de la boca, lo lamemos dentro de la boca como si fuera un caramelo. Esto se ha mencionado muchas veces, y es conocido, pero me parecía importante incluirlo. Si no se quiere detener el movimiento de la mamada, se puede masturbar con la mano, sin sacar la punta de la boca, pero un matiz importante: en este punto lo mejor es no apretar mucho la polla. Solo una masturbación suave. La sensación más relevante debe seguir siendo la de la punta. Si se aprieta demasiado, el cerebro de la persona mamada entiende que esa es la sensación más relevante, y la excitación global disminuye.
E) EL TEMA DE LOS HUEVOS
Aquí no suele haber un consenso, porque hay gente a la que le gusta que se los chupen, y hay gente que tiene los huevos tan delicados que les genera, incluso, cierto dolor. Creo que la persona que chupa debe ser prudente, y si quiere, probar a lamerlos mientras mira fijamente a la persona mamada. Posteriormente probar a meterse uno en la boca e irlo sacando lentamente de la boca sin apretar. Si acaso moviendo la lengua en su interior. Si la persona que chupa detecta placer en la persona mamada, se podría llegar al último punto típico, e intentar chupar con cierta fuerza, pero ese es el punto que, creo, genera una división de opiniones. Hay quien pregunta, en mitad del proceso, si a la persona mamada le está gustando. Existe el riesgo de que, preguntar en ese momento, rompa el clímax. Es un tema delicado el de los huevos. Personalmente recomiendo actuar con prudencia. Dejarlo en una lamida, y si acaso chupada suave, y continuar con el pene. Dejar la recopilación de opiniones para después de la mamada, y aplicar las sugerencias de la persona mamada para la siguiente ocasión.
F) ARCADAS
Si estás mamando una polla de dimensiones relevantes (por cierto, enhorabuena) controlar las arcadas es importante. La arcada es una reacción automática del cuerpo que quiere impedir que la garganta se obstruya. Detecta un obstáculo y quiere expulsarlo, para que la persona no se ahogue. El gran detector en este asunto es la campanilla. Una manera de reducir la sensación de arcada es pegar la polla lo máximo posible a la base de la garganta, evitando el techo, para evitar precisamente la campanilla. Sin embargo, esto es difícil de evitar si la mamada es mínimamente profunda (cosa no muy difícil) y si la polla tiene unas dimensiones mínimas. Este consejo sirve para las fases iniciales. Se pueden combinar varias prácticas; dejar las chupadas más profundas para las más rápidas (al entrar y salir más rápido al cerebro no le da mucho tiempo de mandar la señal de arcada) e intentar respirar solo por la nariz y relajarse lo máximo posible (los nervios y la necesidad de respirar por la boca incentivan al cerebro a mandar la señal de arcada).
G) LA GESTIÓN DE LA CORRIDA
Aquí hay una diversidad enorme de cosas que se pueden hacer. Me centraré en dos pequeños consejos que son aplicables a varias prácticas. Primero; durante la corrida, y unos pocos minutos posteriores, lamer la zona del frenillo. Me refiero a la zona inferior. Ya esté el glande dentro de vuestra boca o fuera (mejor dentro), pasar toda la superficie de la lengua acariciando la zona inferior del glande de la persona mamada. Si nunca habéis probado a hacerlo, hacedlo. La sensibilidad en esa zona, justo en esos momentos, es tal, que la persona mamada alucinará. De hecho, hay personas que no soportan esa sensación y acaban apartando la cabeza de la persona que mama porque no lo pueden soportar. Me refiero a que no pueden soportar el placer, porque puede provocar escalofríos. De hecho, es gracioso porque hay personas a las que les provoca cierto temblor de cuerpo, como si les estuviera dando un ataque. Si no lo creéis y nunca habéis probado, probad. Segundo consejo; después de que la persona mamada se ha terminado de correr, sin sacar la punta de la boca, es muy placentero volver al punto A); meter lentamente otra vez toda la polla en la boca, y dejarla ahí un rato. Acabar como se empezó es la mejor forma de cerrar la mamada. Curioso, pero cierto.
Espero que esta pequeña guía os sirva para disfrutar mejor de chupar una polla, y que podáis disfrutar más con vuestras parejas sexuales.
Feliz 2022.