Gracias Maricarmen
Dedicado a maricarmen.
Mi amiga Maricarmen me había comentado sobre el placer de probar lo nuevo en el sexo y buscar la pareja ideal para hacer realidad esas fantasías que todos conservamos, a veces hasta reprimidas en nuestra mente. Les cuento Desde hace un tiempo compartía con dos hermosos machos en el bowling y nos habíamos hecho buenos amigos, siempre manteniendo la distancia porque el equipo donde yo juego es de la asociación del colegio donde estudia mi hijo y por supuesto debo de mantener un recato. Aún así mis deseos podían más y me dije un día: - Marie pero si lo deseas no te reprimas y más si te lo recomienda Maricarmen. De manera que les pregunte directamente y a solas que cuando volvían a jugar y me dijeron que el miércoles. Perfecto, ese día la asociación tiene reunión y ninguna de las viejas las iba a encontrar en el bowling. Acorde con los chicos en vernos el próximo miércoles. Para ese día decidí ponerme una falda rosada corta, de tela de lycra de esas que se te suben cuando vas caminando como una franela muy ajustada. Una franela ancha para que mis senos sin sostén pudieran moverse libremente. Para simular, un pequeño suéter que cerrado ocultaba lo que llevaba abajo. Dudé en que pantaletica ponerme y decidí por una bonita tanga de esas de tiras muy delgadas para que no se notara debajo de mi estrecha falda. Quizás algo pequeña porque se me metía algo entre mis labios depilados, pero las cosquillas eran exquisitas y me gusta la sensación. Mis mediecitas muy infantiles en unos zapatos deportivos cerraban mi vestimenta. Me eche una última mirada en el espejo y la imagen que me devolvió era de una señora vestida muy juvenil sin rayar en el ridículo ni obsceno. Es muy importante para mí. Ahí estaban, ya practicando y llegué rápidamente a su lado. Los saludé con un bonito beso a cada uno y sentí las manos de Jorge apretarme por la cintura y estrecharme contra su cuerpo. El siempre me pareció el más efusivo y descarado. Louis, su amigo no se quedaba atrás pero se notaba menos atrevido. Se podía notar la alegría de ellos y al principio la competencia que se genero para ver quien se quedaba con el premio es decir conmigo. Desde ayudarme a ponerme los zapatos y descuidadamente mirar entre mis semiabiertas piernas, hasta el de quitarme el suéter y apreciar mis senos libres bailar debajo de la tela de la amplia franela, la tensión sexual parecía aumentar en el trío. Para mantener el equilibrio comencé a agarrarlos por parte iguales cada vez que hacían algo bien en la línea. De nuevo Jorge más atrevido, me nalgueaba con descaro, como hacen los peloteros si yo hacía algo bien a su vez. Louis por el contrario, le gustaba abrazarme por detrás y apretar su bulto contra mis nalgas. A veces dejaba que la falda se subiera de manera que cuando me tocaba jugar y me inclinaba se subiera hasta la orilla de mis nalgas dejando ver mi bultito cubierto por la tanguita blanca. Luego de lanzar mi bola me volteaba y con la mejor de mis sonrisas los miraba a ambos alternativamente y me bajaba la faldita nuevamente. Así estuvimos un buen rato, y luego de jugar cuatro líneas ya me estaba cansando y los chicos cada vez eran más atrevidos. Jorge me agarraba las nalgas y me las separaba haciendo que el delgado hilo se me metiera más entre mis labios vaginales. Louis metía sus manos debajo de mi ancha franela y me agarraba las tetas, entonces pensé que era el momento de mi movimiento y les dije: Cambiemos esto por más comodidad. ¿Qué les parece?. Inmediatamente Jorge propuso su apartamento que no estaba muy lejos y quizás pensando en que Louis se rajaría pero antes de que dijera algo le dije: - Ven Louis, que somos un trío y quisiera así terminar la noche. Mis palabras causaron el efecto y ambos se miraron y se estrecharon las manos en señal de triunfo. Bueno, ya habían soltado el toro y me tocaba a mí agarrarlo por los cuernos. Me monté en el carro con Jorge mientras Louis nos seguía en el de él. El muy vagabundo no dejaba de meterme mano entre las piernas y yo entre risas le decía que se quedara quieto. En una luz roja no se contuvo y me dio un beso muy húmedo. Sentía la rugosidad de su lengua recorrer la mía con deseo y devolví el beso con la misma pasión. Dejé que su mano llegara a donde quería y buscaba meterme sus dedos en mi cuquita pero no lo dejé. Acaricié su bulto por encima del pantalón y su erección era inmensa. Estaba incomodo por la presión y mis administraciones solo empeoraban su situación. Me separe de él riéndome y le pedí que parara en una licorería para comprar algo de beber. El no quería y me decía que tenía licor en casa pero le pregunte por un Baileys y tuvo que rendirse. Llegamos a la licorería y entonces le dije que seguía el resto del camino con Louis y sonriéndome me cambie de carro. Louis pareció ver un ángel y su cara se iluminó inmediatamente. Descuidadamente me senté de manera que mi falda la tuviese muy arriba y pudiera ver mi tanguita metida entre mis labios. Sin mediar palabras fui yo quién se abalanzo sobre el y me toco a mi besarlo con mucha lengua. Sus manos automáticamente se fueron a mis tetas y metiéndolas debajo de mi franela comenzó a agarrármelas y a pellizcarlas. Mis pezones estaban erectos y sensibles y él lo podía notar. Quería mamármelas pero le dije que ahí no. Que se apurara para llegar a casa de Jorge. Me miro y me pregunto: ¿De veras que quieres hacerlo con los dos? Y solamente le respondí mientras le acariciaba el bulto: - Claro que si y apúrate!. Me tomó un ratito controlar a los chicos y poder tomarme un trago mientras estaba sentada en el sofá entre ellos dos. A los pocos minutos, mi franela salió volando y ambos chicos los tenía en mis tetas devorándoselas con placer. Louis era un hombre de tetas y Jorge parecía disfrutar más con los culos, de manera que mientras uno me besaba y me acariciaba las tetas el otro procedía a quitarme el resto de la ropa solo dejándome el pequeño string que le encantaba a Jorge como me lucía. Podía oír sus expresiones obscenas que más que ofenderme contribuía a aumentar mi excitación. Sus manos me separaban con fuerza las nalgas casi con dolor y al instante tenía su cara besándome y mordiéndomelas. Temía que dejara alguna marca muy difícil de explicarle a Pablo. Pedí un descanso y les dije que era mi turno de desvestirlos y así poder tomar un poco más de aire Comienzo a desnudar a Jorge como premio por su control y aprovecho para acariciarle su pecho muy velludo. Me fascinan los hombres con pelos en el pecho, cosa que mi Pablo no posee, y sumerjo mi rostro en ellos aspirando el aroma varonil de su pecho sudado. Louis no se aguanta y se desnuda sin esperar y cuando me agacho para quitarle los pantalones a Jorge, siento como me levanta las caderas y de nuevo su rostro se sumerge en mi cueva a lamérmela, chupármela y realmente disfrutar de mis aromas. Siempre me he preocupado de mantenerme muy limpia de manera que mi cuerpo solo emane aromas muy femeninos. Los suspiros de Jorge son intensos mientras mamo su verga y contempla a su amigo comerme mi almeja. Las acciones son rápidas y Jorge parece querer acabar con tanto jaleo, pero de nuevo me separo porque mi fantasía es otra. Los tomo de las manos y los llevo desnudos a la cama donde se acuestan uno a a cada lado. Puedo admirar sus cuerpos y pollas erectas. Los huevos de Louis son más grandes que los de Jorge....pero la polla de él, es más gruesa y un poco más larga. Tiene la polla un poco curva con venas muy salientes.....La verga de Louis es diferente...toda recta sin pelos con pocas venas salientes. Tiene una polla bonita linda blanquita y unos huevos grandes sin pelos que puedes meter en la boca divinamente. En cambio Jorge tiene una polla negra curvada....se depila pero siempre encuentras pelos, sus huevos suele tenerlo sin pelo, pero uno más arriba que el otro. Después de deleitarme mirándolas y acariciándolas mientras las describo, les planteo mi oferta y les digo: Chicos quieren que me penetren juntos los dos Jorge me coje por el culo mientras Louis me lo mete en mi cuquita. Los dos se quedaron sin habla pero inmediatamente Jorge reaccionó y le alegró que lo hubiese seleccionado para que me sodomizara le pedí que se acostara y luego de untarme bastante lubricante anal que siempre cargo en mi cartera, me monte encima de él dándole la espalda y me fui metiendo su hermosa verga mientras dilataba el esfínter poco a poco. Hacía días que no me penetraban analmente y temía lastimarme, pero resulto y al minuto estaba ensartada completamente como un helado de paleta y mis intestinos parecían protestar pero el calor en mi recto era delicioso, me moví un poco para disfrutar de la tensión sexual del momento. Louis no perdía vista de lo que hacíamos e inmediatamente se posiciono entre las piernas nuestras y se acomodo de manera tal que logro también penetrarme la cuquita. Lentamente fuimos tomando el balance y el ritmo y mis palabras de aliento los mantenían realmente excitados. Jorge parecía el que estaba gozando más, pero Louis se movía y disfrutaba mi rostro y mis tetas. Para mí era una fantasía hecha realidad y la sensación de estar poseída por ambos huecos al mismo momento fue encantadora. Quería controlar mi orgasmo pero no podía. Por suerte soy multiorgásmica y coño! como los gozaba. Jorge no aguanto más y sentí como su verga pulsaba en mi recto y descargaba su chorro caliente dentro de mi. El semen actuaba como lubricante y su verga se movía con más facilidad y mantenía su erección. Louis se dio cuenta que su amigo había terminado y me levanto en sus brazos manteniendo su penetración y me coloco a un lado del cuerpo de Jorge, y elevando mis piernas por encima de sus hombros comenzó a bombearme con una fuerza descomunal. Parecía una ametralladora y a pesar de causarme gracia, sus movimientos lograron que me viniera de nuevo, del culito me chorreaba el semen de Jorge y ahora con la explosión de Louis dentro de mi, se unieron los chorros en un encuentro de viejos conocidos. La intensidad del momento nos dejó agotados y me dirigí a la ducha a asearme y realmente me sentía satisfecha en mi mente recordaba solo a mi amiga virtual que me convenció de que probara la experiencia Un beso Maricarmen.