Gracias a la lluvia

Estaba dirigiéndome a mi casa cuando una fuerte lluvia empezó a caer, trate de apurarme pero no conté que me quedaría sin combustible a medio camino, ya no pasaban muchos automóviles así que la verdad estaba algo sola y no sabía que hacer había dejado el celular en casa, era un mal día para mi. Me quede dentro del auto ni pensar en salir pero como pediría ayuda? Decidí bajar y cubrirme con lo que tenía a la mano por suerte al momento pasó un coche y se detuvo - de todas formas es peligroso también- pensé de pronto alguien bajo una mujer de mi edad con un abrigo ella podría ayudarme a llevarme mi auto a tiradas, lo que no sospeche es que fuese alguien que conocía, mi ex.

• Reí? Pero que haces aquí?

• me detuve a ver la lluvia - le dije sarcastica-

• ey no hace falta el sarcasmo.

• entonces no preguntes eso!

• está bien pero tranquila no te alteres.

• discúlpame dulce no quise decir eso es que no fue un buen día.

• bien te entiendo pero sube a mi coche ya estas empapada yo me arreglaré con lo demás.

• gracias

Ella sólo me miro y fuimos al coche yo ya estaba toda mojada por la lluvia.

• trataré de hacerlo rápido tú manejas mientras mi coche para jalar el tuyo.

El proceso duro sólo un par de minutos, ella se había metido a mi auto para ir moviéndolo tras del suyo, y la verdad me había encantado verla, oler su aroma y oír su voz. Cuando faltaba poco por llegar algo se removió dentro de mi esas cenizas apagadas avivaron y encendieron en pasionales llamas. Tenía que invitarla a casa al fin y al cabo me había ayudado y yo quería algo más.

• gracias denuevo dulce

• no hay de que

Hubo unos segundos de silencio.

-Quieres entrar a mi casa? Así nos tomamos un café y nos secamos.

• este es algo tarde Reí

• sólo serán unos minutos, vamos

• vale sólo unos minutos eh

Yo le sonreí y abrí la puerta para entrar, como era mi costumbre a cuando estaba sola empezé a sacarme la ropa obviamente está vez para provocarla, saqué mis prendas hasta quedar con mi conjunto de color negro, me incliné mostrándole mi trasero pero en verdad estaba recogiendo mi blusa. Sabía que me miraba algo atontada, yo sentía como mi intimidad empezaba a reaccionar al preciado instinto.

• Reí yo...

• sácate la ropa así se secara.

• no yo mejor...

Me acerqué a ella y comenze a sacarle la ropa húmeda por la lluvia, ella me miraba sorprendída pero no hacia nada, tocarla me hacia recordar cuando deliraba entre sus brazos, cuando tocaba mi piel y sentía su aliento contra mi cuello, su lengua recorrer el camino hasta mis muslos.

Me quede a la altura de sus caderas abrazandolas ella sonrojada evitando mi mirada.

Me levante y tome sus cosas para colocarlas cerca de la estufa así se secarian más rápido.

• lo siento, este ire a ponerme algo mientras, te traeré ropa.

Ella asintió y fui a mi habitación para sacar algo de ropa seca para ella y para mi, me senté unos momentos en mi cama pensando en las tonterías que estaba haciendo, ella ya no me quería quizás y hasta tenía novio.

Bajé rápido con mi ropa puesta y le entregue a ella.

• gracias.

• le sonreí- pontela mientras yo hago un poco de café.

Fui a la cocina a prepararlo como a ella le gustaba.

Me había acostumbrado a ese café por tanto tiempoque se me había hecho imposible dejarlo.

• ni tan entero ni tan molido

Escuché su voz en la puerta de la cocina me volví y la mire sonriendole.

• lo se cachorra

Ella rió supongo que hace tiempo que no lo escuchaba.

• quieres que te ayude?

• no dul está todo bien

.

• bueno

• de todas formas gracias, y como te ha ido?

-

• bien, bastante bien.

• eso es muy bueno - terminando de moler el café-

• y a ti?

• pues muchos clientes y casos, sería bueno estar de vacaciones.

• me lo imagino.

Me ayudó a colocarle agua a las tazas, le ofrecí azúcar y nos sentamos, hubo silencio nuevamente.

Era incómodo, silencio, silencio el sonido del reloj tic tac tic tac en mi cabeza evitando su mirada dios mío que desesperada me sentía quería besar sus labios sentirlos devorar mi boca quién los reclamaba como suyos, todo esto era como una bomba de tiempo absoluta, empecé a temblar del nerviosismo llevando la taza a mi boca la cual resbaló y se derramó en la mesa.

• mierda!- me levante rápido buscando un trapo-

• estas bien?!-

• sí, sí no te preocupes.

Limpie todo sonrojada.

• debes tener más cuidado, no será que tú azúcar este baja?

• no, no es eso.

• entonces?

• te necesito - dije entre dientes-

• como?.

• nada, nada...

• escuché lo que me dijiste Reí.

• sólo son tonterías mías.

• no lo son.

Dulce fue a mi lado y tomo mis manos.

• yo también te necesito.

Ella me abrazo y yo la abraze también, que rico era sentir su calor apegado a mi cuerpo, de pronto sentí su boca junto a la mía fundiendonos en un apasionado beso, busque su lengua y jugué un rato con ella, mordi su labio y la mire a los ojos.

• te amo

• yo también te amo

Volvimos a besarnos está vez con más pasión, quería quitarme la ropa allí mismo no aguantaba el calor que me provocaba. Jugamos con nuestras lenguas dejando un hilillo de saliva uniéndonos al separarnos unos centímetros, ambas reímos.

• deliciosa - me dijo -

• tú más - le respondi.

No demoramos ni 30 minutos en llegar a mi cama entre besos y caricias. Empezó a besar mi cuello con ganas y descontroladamente.

• calmate - reí -

• a pasado mucho tiempo!

• está bien, está bien sigue

Siguio dándole besos a mi cuello empezando a quitarme la ropa. Acariciaba cada centímetro de mi piel la cual se erizaba a su contacto.

Cuando sacó mi sujetador colocó ambas manos en mis pechos y los apretó un poco, con sus dedos aprisionó mis pezones endurecidos por la excitación, solté un suspiro, sentí la humedad de su lengua recorrerlos, su boca atrapar uno de mis pezones y succionar, hizo lo mismo con el otro. Estuvo así un rato yo ya estaba toda mojada sintiendo como su mano bajaba por mi abdomen ya cerca de mi intimidad la acaricio por fuera.

Gemí en su oído y mordi su lobulo.

• tocame más amor.

• sí preciosa

Empezó a acariciar mi clitoris con sus dedos y eso ayudó mucho a que mi humedad creciese, con el pulgar siguio tocando y metió 2 dedos dentro moviéndolos rítmicamente.

Gemia insesante llegaba el mejor orgasmo, me beso para callar mis quejidos y empezé a contraerme en sus dedos, los retiró y se los llevó a la boca, siguio con su mano acariciando mi humedad, después puso su rodilla en mi entrepierna, yo me comencé a frotar.

Estaba por venirme nuevamente está vez apreté los dientes de tan potente orgasmo.

• eres fabulosa - le dije -

• tú también cariño, recuerda que esto es cosa de dos.

Yo sonreí y la besé me fascinaba estar con ella me hacia sentir muy bien. Estuvimos dándonos besos y caricias hasta que yo ya tenía suficientes fuerzas para seguir, cambie de posición con ella y la deje bajo mi cuerpo, fui directa iendo rápido a saciarme de sus pechos los mordi con dulzura, los succione y lámi a mi antojo, recorrí con mi lengua un camino desde su abdomen hasta ese lugar tan preciado, seguí bajando y le di una lámida a su intimidad, luego otra haciendo que mi preciosa se aferrase a las sábanas, hundi mi lengua entre sus pliegues deleitandome con su sabor, chupaba su humedad cual fuese ambrosia de los dioses, amaba ese líquido que me otorgaba mi princesa.

Movía mi lengua de un lado a otro escuchando los gemidos.

Llegó con ganas y yo lo recibí con gusto, subí con ella nuevamente y la abraze besándola.

• Te amo

• yo también.

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Espero que hayan disfrutado del relato, espero que me disculpen por no subir todavia capitulo de Entre Amigas pero sinceramente no se me a ocurrido nada :S y mi mente esta en otro lado, me siento un poco vacia de cabeza este ultimo tiempo...

bueno sin nada mas que decir me despido y gracias por leer ^^