Gracias a la champions league.

El culo caliente de mi madre

  • Ya llegué -era mi madre que avisaba desde la sala su entrada- uff que frio.

Yo estaba echado, bien tapado porque en esta pequeña casa entraba mucho aire, con el clima de lima era muy jodido estar así, una casa pequeña, alquilada. Es una mierda ser pobre, me levante para ver que me había traído de la calle.

  • ¿Tú papá?

  • No está, se fue a arreglar la tele ma.

  • Pero ya son las ocho a que hora va llegar.

Era cierto, ya era de noche, mi viejo se había ido a eso de las dos de la tarde cuando la tele dejo de funcionar. Se fue furioso la tele fallaba justo a tres días de la final entre PSG vs Bayern. Mi padre es fanático al futbol, aunque no tanto de los partidos de Europa, pero era una final, y en estos tiempos no había mucho deporte que ver, no sé iba a perder una final menos en estos tiempos. Por eso llevo la tele hasta el centro de lima, donde tenia un amigo que arreglaba televisores, para que le cobre más barato.

Mi madre lo llamo a su celular, oí que discutieron, ella me conto que mi padre seguía en el centro, que todavía su amigo no había visto la tele, ya era muy tarde para llegar a casa por el toque de queda impuesto hasta las diez de la noche. Le tomaría por lo menos tres horas llegar a casa, sería mejor dormir donde su madre que vivía por el centro con una de sus hermanas, renegando mi madre preparo algo para cenar, hablando de la imprudencia de mi padre que siempre hacia las cosas sin pensar.

Después de cenar nos echamos a dormir no había nada que hacer en la casa. Al solo a ver un dormitorio, a veces escuche a mis viejos cachar, pero hacia mucho tiempo que no los escuchaba casi ocho meses creo, siempre estaba pendiente de eso porque me excitaba escuchar los quejidos de mi madre, ana mi madre mide 1.60, tiene cuarenta años, unas tetas medianas, un poco de panza, lo que más me atrae de ella es un gran culo que cuando usa pantalones se le marca bien el poto.

A eso de las doce me despertó los llamados de mi madre.

  • Hijo… hijo… Luis...

  • ¿Qué ma?

  • Hijo tengo mucho frio.

  • Quieres que prenda la calefacción jaja.

  • Baboso, hace mucho frio sabes que no aguanto el frío.

Era cierto el frío estaba jodido por eso yo estaba bien tapado con mi colcha.

  • Bueno que quieres que haga ma.

  • Pásate a mi cama para dormir juntos.

  • No ma, no me quiero mover, estoy bien abrigado.

  • Vamos ven, tengo frío, acá nos podemos dar calor como cuando eras un bb.

  • Pero ya no soy un bb, tengo diecisiete años.

  • Si ya eres todo un hombre, deja de joder y pásate a la cama.

Me pase a la cama renegando, me metí debajo de sus sabanas, grave error. Mi madre no estaba con un pantalón para el frío, si no con un camisón, por eso tenia tanto frío. Cierto ese día había lavado la ropa, yo tampoco tenia polera para dormir solo un polo y un pantalón.

  • Hijo pégate a mi dame calor.

Me daba la espalda para ponerme de cucharita, al acercarme mi pinga encerrada por mi pantalón quedo a ala altura de su gran culo cubierto por su fino camisón.

  • Así vamos a dormir bien mi hijito, abrázame.

La abrace y no movía un solo musculo, paso una hora yo no podría dormir tanto tiempo pensando en tocar ese culo y ahora lo tenia justo ahí, tenía miedo de que se me parara, luche contra esos pensamientos, pero se me empezó a parar y empecé a puntearla un poco, mi madre roncaba levemente, eso me dio valentía para ser más descarado acomode mi pinga para puntear su culo por debajo de mi pantalón, sentía el calor que desprendía el culo de mi madre, empecé a moverme lentamente punteando ese culo, decidí ir más lejos empecé a mover mi mano por encima de su pecho buscando una teta, su pezón. Lo encontré palpe su teta era gorda, seguía roncando, metí mi mano por debajo del camisón empecé tocando su panza suavemente una caricia como no mostraba señales de despertar subí hasta su teta la palpe suavemente, acaricie el pezón era grande, empezó a endurecerse la agarre firmemente y la acaricie descaradamente, sus ronquidos dejaron de ser tan fuertes. Seguía punteándole el culo, estaba muy arrecho me jugué el todo por el todo, me baje el pantalón mi pinga salto la dirigí hacia sus nalgas, ese culo quemaba sentía el calor, le pase mi pinga por todo su culo, mojándole el culo mientras le amasaba una teta. Empezó a gemir levemente, no aguante mucho y me vine en todo su culo. Un orgasmo sobre el poto de mi madre. La abrace fuerte y me quede dormido. Con la pinga por afuera del pantalón y una mano en su teta con toda mi leche en su culo.

Al despertar estaba solo con la pinga por fuera y una mancha en la cama, de mi leche. Me levante a desayunar, mi madre actuaba normal desayune y el día paso como si nada.

En la tarde mi padre llamo era sábado estaba trabajando con el carro por el centro mientras arreglaban la tele.

Al llegar la noche mi padre volvió a llamar, iban a demorar en arreglar la tele resulta que al final su amigo no tenia las piezas que necesitaba para terminar la tele. Cenamos y nos fuimos a acostar. A eso de las doce mi madre volvió a insistir con dormir juntos por el frío. Al meterme en la cama seguía con camisón con el clima húmedo la ropa no había secado bien.

Una hora después mi madre roncaba, empecé con las mismas caricias, ahora fue más descarado, me saque la pinga bien parada y empecé a pasárselo por ese culo caliente está vez no fui a sus tetas. Baje por su vientre y al llegar a su calzón sentí sus pendejos, baje más la mano una gran maraña de vellos tibios. seguí bajando hasta llegar a su concha caliente empecé a tocarla, estaba húmeda busque el hueco y metí mi dedo soltó un gemido.

  • ah…

Metía y sacaba mi dedo de su concha, mientras le pasaba la pinga por el culo. Esta vez no me quería venir un su culo, quería cachar. Le baje el calzón y apunte mi pinga a su concha, busque su agujero lo encontré y empuje. Soltó un gran gemido. Su concha quemaba. Empecé a bombearla fuerte.

  • Ah… ah… que… que paso… ah.. Luis que mierda haces!.

Mi madre despertó, estaba sorprendida trataba de quitarse, la agarre fuerte y empecé a bombear todo lo que daba.

  • ah suéltame carajo, que te pasa.

  • Ah mamá solo déjame acabar se que también te gusta.

  • ah… Luis esto está mal ah…

  • Dale mamá estás mojada solo déjame cacharte.

  • ah… esto esta mal Luis hijito… esta mal, ah… por dios que buena pinga tienes… siento que me abres toda… ah… que rica pinga tienes…

  • Ponte de perrito mamá.

  • no Luis es mucho… mejor ponte encima mío ven con mamá bb.

Me puse encima y le hundí mi pinga en su concha caliente mojada y llena de pelos.

  • ah… así Luis… sigue… cachame así hijito… mierda de donde sacaste esa pinga… me llegas al fondo… que rico… vamos sigue… cachame bien.

  • ah mamá que buena concha tienes.

  • sigue así carajo, me tienes abierta… sigue cachándome fuerte… ah que rico… vamos termina ya hijito… llénale la concha a mamá de leche.

  • ah… mamá me vengo.

  • si asi hijito lléname de leche hace mucho no me dan leche, ah… cuanta leche votas, me llenaste toda bb.

Me levante a observar a mi madre que respiraba agitadamente su pecho subía y bajaba, tenia una sonrisa en la boca. estaba abierta de patas, entre todos esos pelos de su concha brotaba mi leche me agache a pobrar su concha llena de mi leche.

  • ah que haces hijito… eso está mal.

Baje un poco la lengua y pobre el sabor salado de su culo. Antes de adentrarme de cara a chuparlo agradecí a la champions por darme este gran partido.