Gozando con mi prima
La vez que hice el amor con mi prima en una construcción.
Para empezar les diré que mi vida sexual empezó desde los 12 años y sucedió con una prima de 11 años, nos gustaba jugar con los demás primos a las escondidas y todas esas cosas y siempre buscábamos escondernos en el mismo lugar y aprovechábamos para toquitearnos un poco, en ocasiones disimuladamente metía mi mano por debajo de su blusa y acariciaba suavemente sus pechos que ya por esas fechas empezaban a crecer, y ella me dejaba hacerlo sin tomarle importancia aunque se que ella también lo disfrutaba, en ocasiones cuando ella usaba faldas cortas me tiraba al suelo para escondernos y ella se quedaba de pie dejándome verla desde abajo y a la hora de levantarme le tocaba las piernas y a veces hasta las nalguitas.
Así era casi todos los días en que jugábamos. Después pasamos a otras cosas, en una ocasión que nos escondimos en una casa que estaba en construcción, para que nadie nos encontrara nos fuimos hasta el fondo de la casa, estaba muy oscura pues ya eran cerca de las 7:30 de la noche y en Octubre a esa hora ya oscurece bastante.
Como no se veía bien dentro de la casa nos tomamos de la mano y nos recargamos en una pared esperando que nos fueran a buscar, pero pasaron los minutos y nadie llego por nosotros, nos dio gusto estar en ese lugar a solas y nos abrazamos al mismo tiempo, nuestros labios se buscaron suavemente y las lengua se trenzaron maravillosamente, era la primera vez para los dos, las caricias no se hicieron esperar, mi mano exploro por debajo de su falda hasta llegar a su pantaleta que la sentí húmeda, en ese momento pensé que se estaba orinando, pero lleve mi mano hasta mi nariz y me encanto el aroma que tenia, ella a su vez ya me había metido su mano en mi pans y me acariciaba suavemente mi pene por encima de mi trusa.
No hubo mas contemplaciones y decimos no detenernos más, a una mirada ella acepto y urguí mi mano dentro de su pantaleta y busque en seguida su rajadita, metí un dedo y empecé a acariciarle su clítoris que se empezaba a hinchar en esos momentos, ella se retorcía de placer y emitía unos gemiditos que me enloquecían, yo sentía que la sangre se me agolpaba en todo el cuerpo pero mas aun en mi pene que a esas alturas tenía una gran erección, después de un buen rato de esas caricias, ella se volteo y su culito quedo a mi disposición así que no lo pensé más y metí un dedo por su hoyito, poco a poco ella se fue relajando y después volvió con esos gemidos, ella por su parte me acariciaba con más fuerza mi miembro, pasaron más de 15 minutos en esa posición cuando decidí bajarle su pantaleta e introduje mi pene desde atrás en su vagina que estaba súper lubricada, no hubo dolor para ella solo placer sentimos claramente cuando se reventó su himen y como mi pene entraba hasta el fondo , en esos momentos se había agachado un poco para darme mejor posición de entrar y así terminamos al mismo tiempo con un orgasmo fabuloso, después de terminar nos quedamos en esa posición y empecé a acariciar su trasero que era suave y sedoso.
Mi miembro se volvió a hinchar y ya estaba listo para volver a trabajar, pero esta vez lo saque de su vagina y sin preguntarle nada se lo metí de un solo golpe en su anito que estaba muy caliente por cierto, ella se retorció un poco por el dolor, pero al poco rato ya estaba gozando al igual que yo, seguí bombeando por unos minutos hasta que termine una vez mas en su interior y ella tubo otro orgasmo mas.
Terminamos abrazados y nos sentimos felices de lo que habíamos experimentado, salí de ella y me acomode la ropa, mi prima hizo lo mismo pero en esos momentos se le doblaron las piernas y no se pudo sostener más, cayó al suelo y yo me espante, pensé que quizás no se volvería a parar, me dijo que solo era como un gran cansancio y que estaba ya pasando, cuando se pudo levantar salimos de la construcción y fuimos a buscar a los demás primos y amigos que debían seguir jugando, nadie había notado nuestra ausencia y volvimos al juego como si nada hubiera pasado.