Gotas de sangre 21

Alba leyó nerviosa los resultados de las pruebas de embarazo de Manuela, su corazón casi se le salia por la garganta cuando vió que estaba embarazada, no dudó en besar a las sirvientas y en darles la noche libre, llamó a una modista para preparar el vestido de novia de Manuela y envió a su amada al taller de la modista.

Ahora Alba estaba sola, pero feliz, habia visto en los humanos tantas cosas sobre sus bebes.

Los primeros pasos, las primeras palabras, su desarrollo, su primera caida en bicicleta, su primera pregunta sobre el sexo, su primer amor.

En ese momento los cristales de la ventana se rompieron y una luz azul inundo la sala donde estaba Alba.

La vampira notaba como su piel ardia, como sus celulas en una reaccion alergica empezaban una combustion espontanea, fue corriendo hacia la otra habitacion.

Tras ella alguien la perseguia bañandola con la horrible luz UV, Alba cerró la proxima puerta tras ella y la bloqueó.

-¡¿Quién sois?! ¡identificaos! – dijo Alba.

No respondia nadie y de repente la puerta voló em pedazos, proyectando a Alba hacia atrás, notó un horrible dolor en uno de sus pechos, tan intenso que no notó el brutal impacto contra el suelo, al ver el origen del dolor, vio que un trozo de madera se clavó en su seno derecho.

Apretó los dientes y se sacó el trozo, su herida sangró un momento, pero luego paró.

-¡muy bien cadaver! ¡estas ropas valen más que su miserable vida! ¡y estan manchadas!, hora de que me entregueis la vida – dijo Alba mostrando sus facciones vampiricas.

-vas a tener que ganartela – dijo Lupe sonriendo.

Los ojos de Alba se abrieron como platos, se relajó, no debia forzar su cuerpo.

No con ella.

-vaya vaya, la ex, ¿intentas recuperar a tu novia por la fuerza? – dijo Alba sonriendo.

-hasta una boñiga es más bonita que tu con todas esas quemaduras – decia Lupe sonriendo.

-tengo una buena selección de vinos, llevatelos todos y vete a un callejón a emborracharte – dijo Alba manteniendo la compostura.

-no, te quiero a ti, en una mesa de laboratorio con muchos cientificos, fenomeno de feria.

-¿Quién te creerá? Primate – dijo Alba riendo.

-¿recuendas la botella que rompiste? – dijo Lupe.

Las facciones de la cara de Alba cambiaron ¿Cómo pudo cometer un error tan grave? Esa sangre es prueba suficiente para demostrar que el vampirismo existe, nuevas cacerias de vampiros, solo que esta vez no los matarian, los enjaularian, los someterian a pruebas, serian poco mas que animales de laboratorio.

-no saldras con vida de esta casa – dijo Alba perdiendo el control.

-lo haré, concha muerta – dijo Lupe sonriendo.

Una de las cosas que caracterizaban a Lupe, era la facilidad que tenia para cabrear a sus enemigos.

Alba perdió los nervios, su sangre se inundo de adrenalina, sus facciones se volvieron de animal salvaje y su musculatura se tensó como nunca.

-ven monstruo – dijo Lupe bajando la guardia.

Alba se lanzó contra ella, pero la habitacion donde entró se inundo de luz azul de varias lamparas UV, Lupe agarró a Alba que peleaba por liberarse, al final, la fuerza superior de Alba la libertó de la presa de la policia y corrió hacia la puerta destruyendo una lampara a su paso.

Lupe fue a por ella con una lampara portatil y con el arma cargada.

Alba se calmó mientras huia, cogia aire, controlaba su sonoro corazon, llevaba dos minutos con el empuje vampirico, deberia reservarlo.

Al pasar por el espejo se vió, su cara, su piel, estaba quemada, podia verse los musculos de la cara y parte de su craneo, que error el meterse en esa trampa, unos segundos mas y no seria más que un esqueleto quemado.

Nadie, ni siquiera Sekhmet habia estado tan cerca de matarla y ahora huia, una cazadora convertida en presa.

Debia controlar su enfado, debia llegar a la armeria, contra Guadalupe no servian los trucos mentales, debia combatirla con armas.

Corrió hacia el sotano, hacia la armeria, tecleó los codigos y se armó, tambien cogió de un botiquin de emergencia una bolsa de sangre rica en plaquetas y vitaminas y una barra de proteinas, tenia que regenerarse, no ser una presa facil.

La trampa de las escaleras se ha activado, Lupe se precipita en las escaleras convertidas en tobogan hacia una caida de 20 metros, pero ella salta al final del trayecto y evita la trampa.

No es como los soldados de ese traficante, ella sabe lo que hace.

Cogio una Ak 45 de su armeria privada y varios cargadores, tambien una desert eagle con cuatro cargadores y una sorpresa.

Una mina claymore.

Salió de la armeria cerrandola con su codigo y se parapetó en una esquina.

Bastó con asomarse un poco para notar una bala cortando su frente, Alba se escondió de nuevo.

-no seas timida, chupasangres, entregate y no te haré nada – dijo Lupe.

-una oferta tentadora, pero  no tengo mas remedio que declinarla, mi alegia a las agujas y otros elementos quirurjicos es un fastidio ¿sabe? Señorita cavernicola.

-ya veo que quieres regresar a tu estado natural, como fantasma, da igual, muerta sirves – dijo Lupe.

-tengo que discrepar, con mi muerte, se activa un proceso de combustion espontanea que destruye las celulas de mi cuerpo, lo unico que conseguiria de mi es un esqueleto chamuscado – dijo Alba colocando una mina.

-en ese caso, duda cruel, ¿cazarte viva para llevarte a los cerebritos y aprovechar tu vampirismo para avances cientificos? ¿o matarte y darme el gusto? – dijo Lupe.

-si vais a matarme, tened la decencia de dejarme redactar el testamento, he de dejar algo a Manuela y a nuestro hijo.

Hubo una larga pausa.

-¿esta….embarazada?

-si, tuve que atarla para que la preñasen, al principio lloraba, pero al correrse dentro suya el quinto hombre, ya se hizo la idea.

-¡¿QUE LE HAS HECHO CHINGANA?! – gritaba Lupe.

-mmm esos ojos llenos de terror, sus suplicas cuando veia la verga acercandose a su abierta e indefensa concha, el dolor que sufrió al ser penetrada, los piropos que le lanzaron los hombres mientras se la montaban, puta, ramera, agujerito caliente.

-¡TE MATAREEEEEEEEE!

Alba consiguió cabrear a Lupe con sus mentiras, pero vió que algo caia al lado suya.

¡una granada!

Con su impulso vampirico se fue a ponerse a cubierto, la granada y la mina explosionaron.

Lupe asomó la cabeza y oyó la Ak amartillarse, pudo cubrirse de los disparos.

-veo que usas una Ak, un arma demasiado facil de usar, yo prefiero el producto nacional como el Xiuhcoalt, echa para matar alimañas que empuñan Aks como tu.

-¿no es el Xiuhcoalr un plagio del rifle aleman g-36V?

-he de admitir que se parece ¿Qué opinas de su potencia de fuego?

Una rafaga casi vuela el pie que Alba dejo descuidadamente desprotegido.

-mmm potencia, buena, precision, no tanto, penetracion, mmmm penetracion, la cantidad de centimetros que se metieron en su utero.

Lupe furiosa, tiró otra granada, Alba usó el impulso vampirico para cogerla y luego lanzarla a la policia.

-¡joder! – gritó Lupe poniendose a cubierto.

La explosion sonó tan cerca y tan fuerte que ambas mujeres les pitaron los oidos, se levantó un monton de polvo que dejó sin visibilidad la istancia.

Alba no podia oir y habia demasiado polvo para usar el olfato, Lupe empuñó el arma y buscó en la niebla polvorienta a su enemiga.

El oido no servia, pitaba demasiado, ambas se acercaban pero no se vieron, alguna de las dos efectuaba varios disparos que solo vieron el vacio, pero el pitido hizo que no consiguieran oirlos.

Entonces se tocaron, ambas se encañoraron pero Lupe agarró el cañon de la Ak y pudo apartarla de su cara antes de que disparase sus ultimas balas, en ese momento, Lupe apretó el gatillo.

Manuela fue a coger sus compras, nerviosa ¿estará embarazada? ¿si lo está¿ ¿Qué nombre le pondria al bebé? Se dirigió a la mansion de Alba.

-¡joder! ¡no! – dijo Lupe que se le encasquilló el arma.

Alba aprovechó ese momento de suerte y cogió su pistola Lupe reaccionó y agarró el arma.

Alba intentó focalizar su impulso vampirico para acabar con Lupe, pero ella conseguia desviar la pistola el ultimo momento, un disparo, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete.

Alba sentia que estaba forzando la maquina, en ese momento, Lupe le dio una patada en el estomago que la impulsó hacia la pared.

-se lo que estas pensando ¿no tengo balas? ¿O tengo una o dos? La verdad es que estaba demasiado ocupada en mantener la cabeza en su su sitio para contar las balas, dime, ¿te sientes afortunada? Dimelo ¿te sientes afortunada?

Alba estaba sudada, sus ropas estaban tan pegadas a su cuerpo que parecian su piel, respiraba de forma exagerada, tan sensual, tan provocativa, que Lupe no pudo evitar mirarla.

Alba aprobechó la situacion y pateó la pistola de Lupe, cayendo en un lugar inaccesible, Alba, por pura fuerza de voluntad, huyó hacia el salon mientras que Lupe la perseguia, cuando llegó al salon, cogió una espada toledana de las espadas que tenia colgada y desenvainó haciendo que Lupe se pusiera en alerta.

Alba cogió otra espada, una katana y se la lanzó a Lupe.

-la diabolica polvora no nos ha matado, ¿nos matará el noble acero?

Alba lanzó un golpe a Lupe que torpemente pudo evitar, luego otro y otro, Alba estaba debil, pero su cuerpo contiene las experiencias de mil batallas con espada, desde la edad media hasta las guerras napoleonicas.

Lupe no sabia manejar una espada, solo pudo huir, hasta que vió algo y tiró la Katana.

-¿me la regalas? Gracias – dijo Lupe mientras arrancaba de una armadura un martillo de guerra.

Notaba su peso, su dureza, su fuerza, lo alzó y lanzó un aullido de victoria.

Alba notaba que estaba en peligro, Lupe lanzó un golpe que Alba esquivó, luego otro y otro que solo encontraron el aire.

Alba cambió su estilo de pelea por otro mas veloz, Lupe lanzó otro golpe, un golpe que Alba esquivó e intentó ensartarla.

Pero Lupe esquivó la estocada y golpeó a Alba en la cara con el mango del martillo.

Alba cayó al suelo, estaba debil por el impulso vampirico, abrió los ojos y vió a Lupe lista para descargar el golpe, un golpe que esquivó rodando, mientras rodaba, notaba como temblaba el suelo por el golpe, luego esquivó otro, el tercero, al esquivarlo agarró a Lupe y la lanzó por los aires con una tecnica de judo.

La vampira intentó coger su espada, pero algo la empujó contra la pared, al verlo, vió a Lupe, esta vez arrebatando un hacha a otra armadura.

-¿ya esta? Putita, ya era hora de que te quedases quieta.

Alba sentia que no podia moverse, su cuerpo no respondia, notaba como Lupe tiraba de sus cabellos y la tiró en el suelo, Lupe levantó el hacha y descargó el golpe frente a Alba que veia el hacha a dos centimetros de la nariz.

Antes Alba no tendria miedo, pero ahora… no queria morir, tenia una novia, un hijo de camino, queria tener a su hijo en sus manos, verlo crecer, ayudarlo en sus estudios, aconsejarle en las cuestiones del amor.

Alba empezó a llorar, empezó a suplicar a Lupe que sonreia ante su victoria.

-¡ALBA! - gritó Manuela.

Ambas miraron a la futura madre espantada con la escena.

-¡no te acerques Manuela! Ese engendro tiene que ser enviado a un laboratorio – dijo Lupe.

-¡dejala! ¡YA! – gritó Manuela.

-Manuela, esa cosa es…

-una vampira, lo sé ¿me importa? ¡NO! ¡sueltala!

-pero las cosas que te hizo….

-¿el que?

-hizo que varios hombres te forzaran hasta dejarte embarazada – dijo Lupe furiosa.

Manuela la miró extrañada, fue entonces cuando Lupe supo que Alba la habia mentido.

-¡sueltala y vete! – dijo Manuela furiosa.

-¿vas a salir con esa cosa? ¿vas a compartir la vida con eso? Y en el caso que te transforme ¿vivirias matando gente? ¿Qué será de la criatura que vive en tus entrañas?  ¿sabes que nunca mas volveras a ver el sol y el cielo azul? ¡piensa joder! ¿vale la pena?

Manuela iba a responder pero Lupe añadió.

-aun te amo, me preocupo por ti, no quiero verte ni a ti ni a tu hijo convertidos en monstruos, cuidare del bebe, no se si dare la talla, pero daré lo mejor de mi.

-¿lo juras? ¿juras que lo protegeras de todo mal? – dijo Alba con esfuerzo.

Lupe la miró con desprecio, respondió si.

Alba se sentia en paz, deseaba tener al bebé, pero ni siquiera lo verá nacer, al menos, la prueba fisica de su amor por Manuela vivirá.

Cerró los ojos y aceptó su destino.

Bueno chicas ¿Qué hará Manuela? ¿volverá con Lupe? ¿o protegerá a Alba? Catalogado como la pregunta más tonta de Todorelatos después de la pregunta ¿quieres ser violada?