Golpes Que Dan Vida ( Nunca Cierres Los Ojos)
Se situó atrás mío, me atrajo a su cuerpo y me pego a el, sentí como su calor me abrigaba como la más fina seda, y como sus brazos envolvía mi cuerpo como queriendo dejarme preso para siempre, era tan agradable esa sensación.
Me pare de mi cama y me dirigí al espejo que tenía en el baño, mire mi rostro y todavía tenía la mejilla roja de aquel golpe que me había propinado Johan, nunca paso por mi mente que el llegara a golpearme, después de esa noche cogí un taxi y me dirigí a su apto y saque alguna de mis cosas y me dirigí al mío, yo tenía mucho orgullo y no me iba a quedar ahí perdonándole toda la agresión física tanto como la verbal, yo lo conocía muy bien y sabia que él estaba arrepentido y que me iba a rogar que volviéramos pero yo no iba a caer tan fácil en sus redes, pero no podía negar que todavía estaba enamorado de él, que era el hombre que me movía el piso como dicen por ahí. Abrí el grifo del el agua y recogí un poco entre mis manos y las lleve a mi rostro para refrescarlo, en dos horas tenía que estar en la universidad, no podía darme el gusto de no ir sabía perfectamente que Johan apenas me viera iría a rogarme y suplicarme, tenía que ser fuerte eso mi mente se repetía pero tengo que ser franco yo decía que no iba a perdonarlo pero no sabía cómo iba a reaccionar al frente de el.
Me bañe, desayune y organice todos mis cuadernos y mi portátil en mi maletín para salir, pero en ningún momento deje de pensar en que le iba a decir a Johan cuando me lo encontrara, le hablaría o lo evitaría, no sabía qué hacer mi cabeza estaba hecha una tormenta de pensamientos.
Mejor dejo de pensar en eso y mejor veo como reacciono ante la situación- me dije a mí mismo.
Cuando iba saliendo de mi apto me atajo Johan como me lo imagine me iba a pedir cacao, y yo no iba a caer.
Yo no quería pegarte – me dijo con voz suplicante – es que me descontrole.
Pues gracias a tus “descontroles” – le dije con un tono irónico – me perdiste, a mi nadie me pega.
Déjame pasar para que hablemos tranquilos- me rogo.
Está bien – le dije de mala gana – sigue.
Siguió y se sentó muy cómodamente, y empezó a pedirme disculpas.
Yo se que hice mal pero tu también tuviste la culpa- me dijo algo enfadado.
Ahora échame la culpa a mi – le dije – tu fuiste el que me pegaste.
Ya no me recuerdes eso – me dijo haciendo una mueca de disgusto- ahora déjame hablar y no me interrumpas. Mira tanto tu como yo sabemos que nuestro amor es único y que va a durar para toda la vida, no eches a perder tantas noches de pasión y de mucho amor que pasamos, todos los meses que convivimos es armonía, toda las canciones que nos cantábamos las veces que me bailabas, que tanto me encantaban – el seguía con su discurso barato, mientras yo buscaba en mi celular una canción – por favor perdóname y yo no volveré a cometer ese error.
Yo me quede callado mientras seguía con mi celular en la mano presionando teclas.
Por favor di algo!!!- me dijo suplicante.
Pues lo único que yo te tengo que decir, lo dirá el – le dije mientras señalaba con mi dedo mi celular. El me miro incrédulo, cuando empezó a sonar la canción Oye de Beyoncé.
Oye, lo que tengo que decir
No puedo ya seguir viviendo así
Oye, como llora mi canción
Preciso tu atención debes oír
Hoy no sé quien soy, ni se adónde voy
Y encontrarme hoy es mi misión
De tu prisión, por fin ya soy libre…
Oye esto no tiene salida
Ya nada sirve que digas
Tengo que escapar
Yo tengo que escuchar a mi corazón
Hoy…
Buscare mi propia luz
No seas insensible
Salvaste lo que fui por ti
Llena de valor voy a por ti
Yo tengo que encontrar mi voz.
Cuando acabo de escuchar la canción, se quedo pensativo, seguro buscando una buena escusa.
Te quedaste sin palabras Johan? – le pregunte – pues mira que todo lo que te tenía que decir la canción solita te lo dijo, y tu la conoces muy bien, yo ya me estaba cansando de que no me dejaras salir sino era contigo, me celabas con todo el mundo estoy seguro que hasta con mi padre me celarías, eras muy impulsivo, nunca te dije nada porque te amo y siempre espere que cambiaras, pero siempre era peor, y aunque todavía este tragado de ti, es mejor dejarte antes que llegas más lejos, si hubieras cambiado todavía estaríamos en la cama acurrucados, pero como tú no quisiste no sabes cuánto me duele – le dije mientras las lagrimas empezaban a rodar mis mejillas- pero ya nada se puede hacer tu la embarraste, cosa que chao- le dije mientras me levantaba del sillón y me dirigía a la puerta.
Cuando quise sentir que me cogió fuertemente del brazo.
Tu nomas eres mío, y tu lo sabes – me dijo con un tono algo agresivo – no me puedes terminar.
Johan ya esta – le conteste- aunque me duela, te tengo que dejar porque quien sabe a dónde te lleven tus celos y tus rabietas.
YO NO SOY CELOSO!!! – me dijo gritando y se le notaba que estaba furioso.
Cálmate – le dije tratando de zafarme de su mano.
MALDITASEA COMO QUIERES QUE ME CALME SI ME ESTAS TERMINANDO – me dijo con los ojos ardiendo en rabia.
Yo mejor me voy – le dije mientras trate de salir corriendo.
El tenia mucha mas fuerza, me agarro de la camisa y me tiro al suelo, se me subió encima y me decía cosas como “Tu nomas vas a ser mío”, yo no sabía qué hacer nomas me levante rápidamente del piso y salí corriendo por el apto, Johan iba atrás mío con mucha furia yo lo esquivaba y también sus golpes, no sé cómo alcance a salir del apto y el nomas me perseguía, yo corría por las escaleras y el persiguiéndome hasta que llegue a la recepción y habían unos vecinos, y se percataron y lo atajaron gracias a Dios que uno de ellos iba a un GYM, Johan pataleaba y quería pegarme no sé como lo controlaron yo nomas lloraba al verlo así. Llamaron a un tío de el para que se hiciera cargo, el me comunico que Johan ya antes había tenido ese problema con los celos y que era muy peligroso, pero que el lo iba a mantener calmado, se lo agradecí y me dirigí a la universidad.
Cogí un taxi hasta la U, durante todo el camino pensé sobre lo ocurrido y todo eso. Cuando llegue empecé a recorrer pasillos cuando me encontré con marcela, se me lanzo en paloma a abrazarme.
Es un maldito – me dijo, con un tono de rabia con preocupación - Como se atrevió.
No te preocupes que fue un golpecito – le dije para tranquilizarla.
A esto llamas GOLPECITO!!! – me dijo tocándome la mejilla algo hinchada.
Ya tranquilízate – le dije tomándola suavemente del brazo - que lo pasado es pasado.
Que nose valla a repetir porque si no lo mando a pelar – me dijo con una sonrisa.
Le di un beso en la mejilla y empezamos a caminar por los pasillos, todavía me faltaba media hora para entrar a mi clase, obviamente marcela no se demoro en preguntarme porque comenzó todo y me toco contarle todo con pelos y señales para que quedara satisfecha y no me molestara mas con el tema, luego de un buen rato hablando con ella se hicieron la 9 am y me toco irme a clases, la jornada paso de lo más normal en ningún momento me encontré con Johan, ni mucho menos en el ascensor cosa que había agradecido, ya que no me tuve que enfrentar a el, no quería encontrármelo no me sentía preparado para hablar con él, así paso 2 semanas que nomas lo vía de lejos.
Estaba sentado en mi computador revisando mis redes sociales, cuando mi celular sonó, cuando conteste era marcela invitándome a un fiesta en una finca, para celebrar los cumple de una compañera de ella, yo no sentía tantas ganas de ir pero tenía que relajarme y respirar otro aire, además no podía quedarme en esta jaula no podía darle ese gusto tan grande a Johan de quedarme todo el día encerrado aunque me daba un poco de miedo con lo sucedido en la mañana pero el tio de el lo estaba cuidando y eso me dejaba tranquilo, además si no aceptaba mi amiga era capaz de venir a mi apto y me tumba la puerta a patadas. Me aliste lo mejor que pude, casi me hecho todo el frasco de loción, me dirigí hacia la fiesta. Cuando llegue me encontré con una fiesta tipo carnaval, me encantaba ese tipo de fiesta por la decoración y lo divertidas que eran, empecé a buscar con mi mirada a marcela hasta que di con ella estaba charlando con unas(os) amigas(os), me acerque inmediatamente donde estaban y los salude a todos, me sorprendió que uno de los chicos que estaba ahí era con el que intercambie miradas en la otra fiesta y Johan me pego, nuestras miradas otra vez se unieron por algunos segundos pero no soporte y retire mi rostro de esa dirección, era lo mejor no quería que todos se dieran cuenta que me atraía.
La fiesta continúo cuando salió Sofía (la cumpleañera) a hacer un baile sorpresa, pues calaba muy bien era como una mezcla de barios artistas, como Paulina Rubio, Lady Gaga, David Guetta, cuando pensé que todo había acabado cuando empezó a sonar la canción End Of Time de Beyoncé, me encanta esa canción cuando empecé a ver como hombre y mujeres hacían la coreografía, que me la sabia muy bien, cuando empezaron con un especie de jala-jala y pues ahí caí yo y pues me puse a bailar, la adrenalina recorría todo mi cuerpo, mientras mi cuerpo se movía en esa inmensa pista de baile con muchas otras personas, y ahí se desato la rumba y no hacía nada más que bailar y divertirme, luego de tanto bailar Salí de la multitud y fui a tomarme una cerveza bien fría y me dirigí al gran jardín de aquella hacienda, para recibir aire fresco y refrescarme para seguir la fiesta, siempre en cada fiesta que asisto acostumbro a hacerlo hace que me des estrese, me senté en una banca hecha de un gran árbol que estaba al frente de un gran lago, tome un trago de la cerveza la deje al lado mío y alce mi mirada al cielo, la noche era hermosa miraba como el cielo surcado de estrellas parecía un lo más profundo de una cueva pero con diamantes que la iluminaban, me sentía tranquilo todo se me olvido, Johan se me fue de la mente, y todo el mundo.
Perdóname – me dijo una voz.
yo me sobresalte, abrí mis ojos rápidamente y voltee a ver quién era, me sorprendí al ver que era aquel chico de la otra fiesta, estaba tan hermoso como siempre, vi en sus ojos culpa pero no entendía por qué y me hacia una mirada como la del gato de sherk.
Porque debo perdonarte – le dije algo confundido, es que realmente no sabía porque me pedía perdón.
Es que por mi culpa tu novio te pego- me dijo mientras corría una lagrima por su mejilla.
Ah…. fue por eso- atine a decir, me dejo desconcertado de la forma en la que me lo dijo- tranquilo que si el me pego fue cosa de el no tienes que llorar por eso.
Pues lloro por eso y por otra cosa- me dijo, sintiendo como vergüenza, no entendía por qué.
Porque se puede saber- le pregunte, estaba ansioso por saber.
Si se puede saber- me dijo tragando algo de saliva- es que me gustas.
Yo no sabía como reaccionar, se me declaro de frente nomas así, pero pude ver que para el fuese como quitarse un gran peso de encima, podía ver perfectamente en sus ojos que era cierto que yo le gustaba, pero que hacia tenía que ir despacio, además tenía todavía la herida de Johan abierta no se había cerrado del todo y lo seguía amando después de todo, pero una cosa era cierta que yo también sentía algo por aquel chico que me parecía tan místico, pues tenía que darle una oportunidad de eso estaba seguro.
Pues me has dejado sin palabras – le dije – pero no puedo mentir al decir que no me atraes de algún modo, porque no comenzamos presentándonos y hablando de nuestras vidas, te parece- estaba muy nervioso.
Mi nombre es Ignacio pero me dicen nacho – me dijo, podía ver que era muy seguro- me puedo sentar – me dijo mientras se acercaba a mi.
Pues yo me llamo Diego – le dije mientras estiraba mi mano.
La tienes muy fría – me dijo con una media sonrisa.
Es que estoy algo nervioso – le confesé, con una sonrisa nerviosa.
Tranquilo que conmigo no te pasara nada – me dijo muy coqueto picándome un ojo.
Huy cuidado que vamos a hacer con el niño tan convencido – le dije mientras los dos explotábamos en risas.
Nos quedamos mirándonos, enserio a mi me parecía tan hermoso, y sus ojos alumbraban con el reflejo de la luna.
Pero tengo algo de miedo – le confesé.
Porque? – me pregunto
Es que Johan mi ex – le empecé a contar – en muy celoso apenas terminamos ayer se descontrolo y me iba a pegar otra vez y me decía que yo nomas era de el.
A mi no me da miedo el – me dijo con un tono serio.
Enserio? – le dije algo sorprendido, se le notaba que no lo conocía.
Enserio – me afirmo- yo tengo lo mío y yo te defenderé te lo prometo.
Pues me sorprendes – le dije – pero de maneras ten cuidado con el que está tocado contigo.
No te preocupes que yo me se cuidar – me dijo con una sonrisa – y a ti también – me dijo picándome un ojo.
Ya dejemos de hablar de eso – le dije sonriendo -A ver cuéntame de ti .
Pues yo estudio medicina, voy en el 4 semestre y me conozco con marcela desde hace unos meses- me dijo.
Pues marcela es mi amiga desde que teníamos unos 5 años de edad – le dije.
Oye que horas tienes – me pregunto.
Son la 3 de la mañana – le dije – porque.
No por nada – me dijo con su sonrisa tan bella.
Oye creo que está muy tarde- le dije – mejor me voy para mi apto.
No te vayas – me dijo suplicante – yo sé que es algo tarde pero quiero pasar más tiempo contigo.
Pero es que… - trate de decir pero el me interrumpió.
Nada de peros – me dijo haciendo un no con su dedo índice – tu me dijiste que me ibas a dar una oportunidad.
Está bien – pues tenía frio pero no me resiste a sus encantos.
Me senté en el pasto, y empecé a ver el reflejo de la luna llena en el lago, el se me sentó al lado y empezó a mirar el lago al igual que yo, yo estaba perdido en ese reflejo tan perfecto que daba el lago de el cielo y de Ignacio, yo tenia mucho frio y mis dientes empezaron a chocar débilmente, el se dio cuenta inmediatamente.
Mira toma mi chaqueta- dijo haciendo amague de quitársela.
No tranquilo que no es para tanto – le dije, mis labios ya estaban hasta pálidos del frio – además si te la quitas a ti te ara frio, y no quiero incomodarte.
Esta bien – me dijo - pero la voy a compartir contigo
Se situó atrás mío, me atrajo a su cuerpo y me pego a el, sentí como su calor me abrigaba como la más fina seda, y como sus brazos envolvía mi cuerpo como queriendo dejarme preso para siempre, era tan agradable esa sensación. Yo me acurruque como un bebe en su cuerpo hasta que me sentí totalmente cómodo a su lado. Sentí como sacaba algo de su bolsillo, pude ver que era un iPhone le conecto los audífonos y me entrego uno mientras el se ponía el otro.
Te va encantar esta canción para este momento – me dijo mientras me daba un beso en la mejilla.
Cuando empezó a sonar Never Close Our Eyes de Adam Lambert, nomas había escuchado la canción una vez en una presentación en American Idols, y eso que fue una parte y no me acordaba muy bien de ella, empecé a escuchar como Ignacio me la cantaba en español, nose como le hacía pero caía perfecta con los tiempos de la canción, además que tenía una voz linda.
Deseo que esta noche no termine
Hay un montón de tiempo para dormir cuando morimos
Vamos a permanecer despiertos hasta que envejezcamos
Si por mi fuera nunca cerraríamos nuestros ojos, nuestros ojos, nunca.
No quiero dejar que un minuto se vaya
Porque no tenemos tiempo que perder
Ninguno de nosotros se comprometió a ver el mañana
Y lo que hacemos es nuestra decisión
Olvídate la puesta del sol
Combate el sueño en tus ojos
No quiero perder un segundo contigo
Quedémonos así para siempre
Solo se pondrá mejor, si así lo queremos
Sabes, Deseo que esta noche no termine
Hay un montón de tiempo para dormir cuando morimos
Vamos a permanecer despiertos hasta que envejezcamos
Si por mí fuera nunca cerraríamos nuestros ojos, nuestros ojos, nunca…
Me pareció tan hermosa la forma que se amoldaba la canción a la situación que estaba pasando, además decía toda la verdad tenía que disfrutar este momento al máximo, y mas con esa persona que me estaba haciendo sentir tan bien. El frio de mis manos ya se había desvanecido sin darme cuenta, nuestros cuerpos estaban a los mismos grados de temperatura, su cuerpo era como una cuna para mí, y no sé qué pasó pero perdí la noción del tiempo mientras miraba el reflejo de su rostro en esta y el nomas me susurraba un “TE AMO”. Y empecé a ver como los primeros rayos del sol se filtraban en el agua cristalina, y el reflejo de nuestros rostros se desvanecía en aquel lago que sirvió de espejo a nuestro amor.
Perdón por demorarme tanto, pero estaba muy ocupado, y apenas me desocupe, pero ya el lunes entro otra vez a clases y pues tengo muchos pendientes y me toca estudiar como un loco, pero apenas tenga un tiempito escribiré, tengo mi cuenta de Facebook que se llama Diego Rojas, allí yo escribo cuando publicare o cualquier noticia, también pueden chatear conmigo, gracias a todos son los mejores, esta va para uds besoos…