Gateando en la noche 3
Oscar en la posición superior de ese 69 podía ver los guevos de Fer y los tomaba en su mano para sentir la suavidad de esa bolsa grande que envolvía un par de triple A en su interior y con la otra mano acariciaba el orificio anal de su hermano mayor
Gateando en la Noche 3
Fer. y Oscar estaban enredados en besos abrazos y en conocer aún más el cuerpo del otro.
Tras su 69, Fer. Subió a las nalgas de Oscar y comenzó nuevamente a meter su lengua en ese agujerito que tanto le gustaba saborear.
Por parte de la familia de su padre todos eran unos osos peludos y eso lo sacó Oscar, tenía un traje completo de pelos y su trasero, pecho y piernas eran un mullido resorteo de pelos gruesos y suaves a la vez.
Pero Fer. Era lampiño como la familia de la madre, solo tenía bellos en las axilas y en la base del pene, pero aun así en la ingle su pelaje era muy poco, algo como si viniera saliéndole; esto causaba diferentes reacciones en quien lo miraba desnudo, a muchas les parecía mas bien como tierno y hermoso y a otras les excitaba y ponía cachondas, como si fueran a coger a un Príapo virginal.
Si he dicho LAS PONIA CACHONDAS porque a Fer. y Oscar solo le gustaban las mujeres y lo había hecho solo con mujeres, pero sería algo de la bebida o quien podrá saber pero entre hermanos se comenzaban a sentir y mirar de otra forma, como a hombres deseables y sensuales.
Fer. Era de esos machos de mirada tierna pero penetrante, sus caricias eran toscas y se volvían extremadamente sexuales y Oscar podía sentir como esas manos le estrujaban sus nalgas peludas y redondas.
Oscar sentía como su hermano mayor le pasaba su lengua en su fruncido ano y como con su dedo jugaba allí en su entrada posterior.
Era un juego de corrientes eléctricas que subían por su columna y lo hacían sentir como nunca pensó que ocurriría, pero estaba pasando y era brutal, fantástico; todo eso era nuevo para los hermanos que habían compartido chicas e incluso habían puesto de relleno a más de alguna entre ellos dos, pero nunca, nunca ellos se habían tocado en plano sexual.
Hay hermanito que rico estas, nunca había notado lo rico que es tocar tu culito peludo y lamerte todito papacito, decía Fer. A su hermano menor mientras este tenía su pene metido hasta la garganta haciendo que Fer. abriera más sus piernas para dar empellones con su verga y sentir ese ducto estrecho que es la garganta de Oscar.
Oscar, metía ese leño de carne en su boca, lamía la cabeza y lo colocaba en sus labios para succionarlo y pasar con una velocidad enorme la lengua por el frenillo causando escalofríos a Fer, eso era algo que ninguna de sus amantes había logrado.
Oscar en la posición superior de ese 69 podía ver los guevos de Fer y los tomaba en su mano para sentir la suavidad de esa bolsa grande que envolvía un par de triple A en su interior y con la otra mano acariciaba el orificio anal de su hermano mayor lubricando el dedo con la saliva que resbalaba y en esos juegos de succionar, besar y tocar a Fer, Oscar tiró de las piernas de Fer que eran lampiñas al igual que el resto del cuerpo de su hermano colocándolas de forma que las axilas suyas las aplastaran y el culo de Fer subió automáticamente quedando a la altura de su boca y su propio culo en la boca de Fer pudiendo darse ambos lengüetazos en los culitos vírgenes; sin estrenar por verga alguna.
Oscar metía uno de sus dedos, luego lo sacaba y metía otro y así jugaba en el culito de Fer., este a su vez metía su lengua en la frontera de la hombría de su hermanito y sentía como Oscar contraía el esfínter y a cada roce suyo este cedía y permitía la entrada de esa lengua larga y ancha de Fer. Que estaba aprendiendo a como sabe un macho de verdad y viendo a Oscar sentado a horcajadas sobre su cara, llegando de esta forma a sentir los guevos de Oscar en su barbilla.
Al lado, sus primos gozaban de lo lindo y podían escuchar como emitían sonidos de placer y como se confundían con los sonidos que él y su hermano Oscar hacían al acariciarse y lamer.
Cambiando de posición, Fer. coloca a su hermanito de espaldas en el colchón y lo besa tiernamente en la boca aprisionando sus vergas una encima de la otra rozando sus miembros y haciendo movimientos de estar cogiendo al tiempo que se besaban con pasión, besos de hombres con lengua y apretones de sus manos puestas en las caderas de Oscar para sentir como el cuerpo de su hermanito es cubierto de un sabroso pelambre que saboreaba al bajar a su pecho y morder y chupar sus pezones que aparecían como escondidos detrás de un arbusto de pelos de un color rosado oscuro con un botoncito bien paradito que invitaba a comerlos.
Oscar cerraba los ojos porque esos pezones eran su punto flaco, le causaba calosfríos de sentir a su hermano mamarlos y morderlos.
Oscar le dice a Fer. Al oído: hey brother, nunca pensé que esto de coger entre hombres lo iba a hacer alguna vez y menos con tigo, está gacho esto, sabroso; no se como lo tomas tu o que piensas pero me gusta un montón.
A lo que Fer. Responde: Jodido estoy Yo que me creía tan machín cogiendo cuanta chava se me cruza y ahora aquí mamando verga y culo de otro hombre y para colmo de mi hermanito, pero te diré Oscarin; esto está riquísimo y no me arrepiento y mejor que nos demos en el culo nosotros y no a otros pendejos que vayan a hablar de más.
Se besan con suavidad y ternura, sellando así esa unión de hermanos y amantes a la vez.
Fer. desliza suavemente las manos por los costados de Oscar que está boca arriba mientras lo besa y haciéndose campo con sus piernas abre a Oscar como escuadra para luego colocar sus talones en los hombros bajando desde los talones, acariciando las pantorrillas y besando una y otra pantorrilla llenas de bellos que guardan el aroma de jabón, aroma a macho limpio a hombre y sin usar las manos coloca su propia verga en la entrada del culo de Oscar mojándolo con los líquidos que de allí emanaban ese precum que hace las veces de lubricante natural y dando pequeños empujones que hacen que el glande tiente la entrada del culito de Oscar y que este a su vez tenga una sensación riquísima del pedazo de carne que se va a comer con su culito y que está por ser estrenado por primera vez.
Oscar siente en la entrada de su ano una riata ardiendo que a cada puyón va ganando terreno a sus esfínter que han guardado virgo ese orificio anal.
Oscar siente su pecho latir fuerte y sus pulmones casi no pueden darle el oxígeno para poder calmar sus nervios de ser desvirgado por su hermano mayor y estar allí, así como él mismo puso a mucha mujer para que lo recibiera y ahora era él quien estaba esperando ser ensartado por el ariete de carne y precum de su hermano Fer.
Fer. Por su parte iba sintiendo como su glande traspasaba cada uno de los esfínter de Oscar y estos a su vez intentaban detenerlo estrujándolo a medida se abre paso entre ellos para llegar a inundar todo el recto con su grueso leño sintiendo las paredes del ano de Oscar y sintiendo bajo su cuerpo el cuerpo de Oscar que se agita a medida va entrando en él.
Para Fer. Es indescriptible lo sabroso que es sentir como su verga es apretada por los músculos del culo de Oscar y este se siente en las nubes al sentir ese pedazo de leño que lo está penetrando y haciendo sentir un hombre nuevo, un hombre que ama a otro hombre y que recibe en su interior las caricias de ese pene al rozar su próstata en el trayecto hacia su interior.
Oscar está gozando como poseso, siente el peso de su hermano y como las caderas de Fer. Se bambolean para hurgar en sus cavidades más profundas y hacerlo sentir áreas hasta ahora nunca tocadas por nadie.
Fer. Por su parte siente que el culito de Oscar le está succionando la pija como pidiendo que lo ensarte fuerte y profundamente y así lo hará.
Oscar abraza el cuello de su hermano con sus pantorrillas haciendo que este se incline alcanzando a besarlo y poder tomar su cara entre sus manos y contemplar su cara de placer al ir invadiéndolo con esa hermosa verga que solo él tiene y sabe usar.
El cuerpo de Fer. Parece que imitara el movimiento de las olas del mar al entrar y salir de las entrañas de Oscar su hermanito y ahora su amante también.
Oscar siente como si su hermano estuviera pisándolo y al mismo tiempo masturbándolo porque sus cuerpos tienen atrapada la verga de Oscar entre sus abdómenes y con cada movimiento Fer. Golpea contra la verga de su hermanito haciéndolo gozar mucho más.
Fer. Cambia de posición bajando una de las piernas de Oscar y colocándola alrededor de su cintura y la otra siempre arriba, el culito de su hermanito está más expuesto ahora y Fer. Siente como si penetrara a Oscar hasta con la misma ingle, es fantástico todo esto que se ha estado perdiendo tantos años sin haber probado hombre.
A la altura del hombro de Fer. Está uno de los pies de Oscar y Fer. Comienza a besar el arco de ese pié para luego pasar su lengua y descubrir que se siente rico y sabroso poder besar un pié recio y bien marcado como el de su hermanito y continua haciéndolo al ver como Oscar se retuerce del placer con su nueva caricia bucal.
Oscar no supo nunca que fue lo que pasó o como comenzó ese sin fin de sensaciones nuevas que provenían desde su pié, sentía como Fer. Tomaba en su mano su pié y comenzó a lamer su arco y talón al tiempo que acariciaba con su mano la pantorrilla y pierna para luego con su boca buscar el dedo gordo de su pié y comenzar a succionarlo como si de otro pene se tratase.
Oscar sentía su verga crecer al tope y acelerarse a millón con ese nuevo órgano sexual descubierto por su hermano mayor Fer. Al besar y succionar ahora no solo su dedo gordo sino uno y cada uno de los dedos de su pié y meter la lengua en el espacio entre ellos haciéndolo retorcer de placer y lujuria con esa lengua y esos labios, el calor de su boca en su arco y talón que delicia.
Oscar sintiendo esto comenzó a mover sus caderas en círculos logrando así mayor fricción de la verga de su hermano mayor y apretando su esfínter y sentir como Fer. Le da estocadas mas profundas y sabrosas junto con la succión de su pié.
A Oscar le bajan el otro pié quedando boca abajo pero no por mucho tiempo ya que Fer. Lo jala de la cintura para colocarlo en posición de perrito y todo esto sin sacar un segundo su verga del culo de su hermanito.
El tiempo es efímero, no tiene importancia para estos amantes que gozan como felinos en celo y cada minuto que pasa quieren seguir más y más.
Oscar es tomado por las caderas y siente como la estaca de carne que tiene su hermano mayor lo penetra hasta el fondo, tocando su próstata a cada paso del glande por ella, su propia verga está que revienta de tanto estimulo y placer obtenido de Fer.
Fer. Se cae sobre la espalda de su hermanito para besar su nuca y mordisquear los lóbulos de las orejas y Oscar solo atina a decirle dame más, métemela más y más, si hermano mío dame verga que la quiero toda dame más.
El bombeo se vuelve más rápido y profundo y siente el cuerpo de su hermano en la espalda como comienza a subir de temperatura al igual que la respiración y los jadeos en uno de sus oídos.
Sus nalgas son aplastadas por el martillar de la pelvis de Fer., siente el rebote de ese par de guevos contra las nalgas y el sonido característico de la venida de su hermano.
Un jadeo más fuerte y seguido emite Fer. Así como los bufidos de Oscar al ser aplastado a cada empellón, se vuelven como un mar embravecido con un ritmo singular Fer. Rebota contra las nalgas de Oscar y ambos comienzas a lanzar su semen al mismo tiempo, sus cuerpos sudan, sus bocas buscan aliento y sus pechos se ensanchan, son dos animales apareándose salvajemente; el sonido de la verga de Fer. Penetrando a Oscar ya es más evidente por la cantidad de semen con que lo está llenando y Oscar está dejando bajo si una charca enorme de su propio semen en el colchón de la gran corrida que le provocó su hermano Fer. Sin siquiera tocarse.
Fueron momentos inalcanzables llenos de placer y ambos se desploman uno sobre el otro, sus cuerpos convulsionan aún, su piel se torna más brillante por el sudor emanado y en el hatico solo se logra escuchar unos suaves besos de los hermanos que acaban de follar.
Juan y Fabio que están a la par besándose y dándose cariños aún miran a sus primos reposar y en una fracción de segundo el ojo de Fabio logra distinguir una sombra en la ventana del hatico, parado en el pasillo pero no logra distinguir quien es, la luz está apagada, pero sabe que es un hombre el que los vio.
Rápidamente Fabio alerta a su hermano y primos y estos corren a investigar; al salir al balcón miran la silueta de un hombre que casi a gatas para ocultar su identidad corre escaleras arriba por fuera de la casa y pareciera que es el padre de Juan y Fabio pero no hay seguridad, su cuerpo sube casi a gatas las gradas y no para hasta entrar.
Los cuatro primos están desconcertados y un silencio cubre la estancia del hatico, sus cuerpos aún con restos de semen y sudor delatan lo ocurrido, ¿Quién será? ¿Qué tanto ha visto el intruso de la ventana? ¿Será Don Ricardo ó quién podría ser?
Estimados amigos, los nombres, lugares y esos detalles que ya saben se cambian para proteger a los involucrados…. Hasta la próxima vez con los 4 primos y el fisgón o podría esto involucrar a más.
LUDAVAGI
Piscis03ma66@yahoo.com