Gabriel , mi gordito compañero de cuarto - III
La traición.
Una noche de día viernes, justo coincidimos en el departamento los cuatro. Ordenamos un pizza , compartimos una grata velada, cuando comenzamos hablar de ejercicios y deportes, cuando salió el tema que Ignacio practicaba Paddle , un deporte parecido al tenis , pero que se juega con una pared. Yo antes le había hecho el comentario a mi novia que me gustaría probar ese deporte y cuando lo escuchó de boca de Ignacio, hizo el comentario que a mí me gustaría practicarlo. Ignacio me dijo que cuando quisiera el me invitaba a una cancha y me enseñaba. Entre mi novia y Gabriel me alentaron a que fuera, yo la verdad no tenia mucha confianza con Ignacio , no eramos tan amigos como para salir juntos, pero me convencieron y quedamos en la semana de ir a practicar.
Llegó el día miércoles, en la tarde , llegue a la dirección que el me indicó y nos pusimos a jugar. La verdad es un deporte muy entretenido y que requiere mucho esfuerzo físico. Yo soy bueno para los deportes, me gustan y este deporte es muy exigente y anduve bastante bien. Jugamos como una hora y media , terminando completamente sudados. Ignacio me felicitó, diciéndome que tenia habilidades para el Paddle. Nunca había compartido tanto con el y la verdad era un tipo muy simpático y agradable.
Entramos a los camarines y obviamente teníamos que ducharnos. Millones de veces me había duchado con otros hombres, no tenia problemas, pero hacerlo con la pareja de mi compañero, mas sabiendo que era gay, me daba un poco de recelo. Ignacio se desnudó como si nada delante mío y no me quedó otra cosa que seguirlo. Desnudos bajo el agua , uno al lado del otro , conversando de cualquier cosa.
Nos habíamos quedando solos, había otro tipo cuando entramos, pero el ya se había duchado y se estaba vistiendo. Sin poder evitarlo, mi vista se iba sola al cuerpo desnudo de Ignacio. Delgado, pero muy bien formado, pectorales bien marcados, piernas torneadas, culo redondo y una verga muy parecida a la mía colgaba entre sus piernas. Recordé los encuentros con Gabriel, me los imaginaba a ellos dos cogiendo y después me empecé a imaginar a el y yo y me empecé a calentar. Me daba pánico que se me fuese a levantar ahí, trataba de no mirarlo, pero era imposible, inevitablemente mi vista se iba a su cuerpo. A pesar de lo helada que estaba el agua, Ignacio tenía una verga de un buen porte y no sé si eran ideas mías , pero se le notaba una semi erección. Con todos esos pensamientos y la visión que el me daba, la mía también se fue levantando un poco.
La ducha duro más de lo que tenía que durar, conversando, enjabonando nuestros cuerpos y nuestras vergas semi despiertas, cuando me hace un comentario respecto a mi cuerpo, que lo tenía bien tonificado, notando su mirada directamente a mi zona genital. Yo también el hice el mismo comentario, preguntándole si iba algún gimnasio por lo marcado de sus pectorales, dándome cuenta que su verga ya comenzaba a levantarse. Me dijo que si , que hace poco había entrado a un gimnasio y que estaba notando los resultados, mostrándome , según el , el abdomen , yo solo veía su verga , que antes estaba todo suelto y ya comenzaba a marcarse. Fue un momento excitante, porque pude verlo directamente de frente , pero justo entraron dos tipos al camarín y tuvimos que terminar de ducharnos.
Salimos a la calle, íbamos en direcciones opuestas. Me dio la mano despidiéndose y me dijo que había pasado una tarde muy agradable, para luego marcharse. Para mi , también , mucho mejor de lo que yo pensaba.
Día sábado en la tarde, me encontraba solo en el departamento. Gabriel había viajado ese fin de semana a visitar a sus padres. Me estaba quedando dormido, cuando suena el cito fono , era Ignacio. Me dijo que venía a sacar de la Pc de Gabriel un trabajo que estaban haciendo. Le abrí la puerta de calle y mientras subía , sin saber porque , me arregle rápidamente para no estar tan desordenado. Toco a la puerta y me saludo con un fuerte apretón de manos. Lo invité a pasar, le ofrecí una cerveza, me la aceptó. Conversamos un poco sentados en el sofá , me ofreció un cigarro , me dijo que estaban haciendo un trabajo y que había unos archivos que no se había llevado a su Pc . Yo sabía que era verdad, porque hace rato estaban trabajando haciendo un programa , por lo que me comentaron era muy tedioso e importante.
Luego de terminar su cerveza, se fue al cuarto de Gabriel, encendió la Pc y comenzó a grabar en un pendrive lo que tenía que llevarse. Mientras estaba ahí, le ofrecí otra cerveza y me la aceptó, bebiéndola rápidamente. Era igual que yo, bueno para beber y para fumar. Sentado delante de la Pc , me dijo que tenía ganas de fumar otra vez , pero que Gabriel lo mataba si fumaba dentro de su habitación. Yo me reí y le dije que si , que de seguro lo mataba..
Salimos del cuarto, nos fumamos otro cigarro, en una amena conversación. Comenzamos hablar de mi convivencia con Gabriel , que era un buen tipo , sus mañas , etc . Me pidió si le podía ofrecer otra cerveza , pero lamentablemente quedaba solo una , que como buen anfitrión , se la ofrecí. Me dijo que no , que yo era el dueño de casa, que como se iba a tomar mi última cerveza , yo incitándole a que la aceptara y me dijo que mejor bajaría a comprar más.
Mientras bajó, a comprar, me daba vueltas por el departamento, pensando en lo que estaba sucediendo , que estábamos solos, alcohol de por medio, el recuerdo de nuestra ducha juntos , su verga , algo distinto , Grabriel … Al poco rato volvió con 2 packs de cervezas , diciéndome que más valía que sobrara que faltara. Destapamos otra mas y luego otra. Ya hace rato había terminado de sacar la información que necesitaba, pero de todas formas se quedó . Me preguntó si tenía planes para la noche y la verdad si tenía , iba a salir con mi novia.
Me dijo que había pensado que saliéramos a tomarnos algo por ahí, pero que si tenía compromisos, sería para otra oportunidad. Definitivamente me estaba coqueteando, y yo ya me estaba calentando. Recordaba su cuerpo desnudo, su verga , no sería mi primera vez y con un cuerpo completamente distinto , pero no , no podía , no podía hacerle eso a Gabriel , por lo que era mejor darle un corte. Yo creo que él lo notó , me dijo que se tomaba la ultima y se iría. Destapamos las últimas cervezas, conversamos del Paddle, recordando nuestro juego, pero nuestras miradas posadas en el cuerpo del otro, eran más que evidentes.
Ignacio andaba con unos pantalones cortos, tenía unas piernas peludas, bien formadas y a ratos se tocaba la verga disimuladamente, que comenzaba a notarse más en su pantalón, dándome señales. Yo también andaba vestido así y ya con varias cervezas en el cuerpo , mi verga comenzaba a traicionarme , marcándose , notando la mirada de Ignacio directo sobre ella.
Terminó su cerveza y se levanto, estirándose con los brazos hacia arriba, haciendo que se le notara más su verga en el pantalón. Lo acompañé a la puerta y en el pasillo, antes de abrir la puerta, me dice que tenía una confesión que hacerme, yo sabía lo que se venía pero no sabía cómo reaccionar, cuando se acerca a mí y me trata de besar.
Me asusté y lo detuve. Le dije que no podíamos hacerle eso a Gabriel, pero el tocándome la verga, por sobre el pantalón, me dijo que eso quedaría entre nosotros, que nos sacáramos el gusto, que sabía que no me era indiferente y que Gabriel, ni nadie , nunca se enteraría.
Trató de besarme de nuevo, corrí mi cara, pero no evité que me tocara. Me la apretaba fuertemente, apegándose contra mí y ya caliente, agarré yo la suya. Solos nos tocábamos apegando nuestros cuerpos , cuando trato de besarme de nuevo, me daba cosa hacerlo, entre mi pensaba que era lo único que me separaba de ser gay, pero y lo besé. Era extraño , a pesar de haber tenido tanto sexo con Gabriel , nunca hubieron besos de por medio e Ignacio besaba esquisito. Nos Estuvimos morreando en el pasillo , hasta que nos fuimos a mi cuarto. Nos desnudamos cada uno rápidamente y caimos a la cama besándonos y tocándonos por todos ladas.
Ignacio me acostó de espeldas y en cuatro patas comenzó a chupármela muy fuertemente. Yo le agarraba la cabeza y se la bajaba hacia mi verga , metiéndosela bien adentro. Luego se estiró y me comenzó a chupar los huevos , masturbándome , diciéndome que desde que nos duchamos no había dejado de pensar en tener eso en la boca. Luego se arrodilló a mi lado y me colocó su verga en la boca , para que se la chupara. Me la trague entera , era deliciosa , muy distinta a la pequeña verga de Gabriel , esta no alcanzaba a entrar por completo, más gruesa , más dura ..
Igual que él, lo coloqué de espaldas, yo me estiré entre sus piernas y ya más cómodo, me di el gusto de chupársela por todos lados , tal como me había hecho el , por largo rato.
No teníamos apuro , estábamos cómodos, sabíamos que nadie nos interrumpiría , intercambiando un rato cada uno , hasta que terminamos en un delicioso 69 con Ignacio sobre mi.
Me colocó de boca y me metió la lengua en el culo , separándome bien las nalgas parta poder tener mas acceso. Su lengua trataba de entrar , luego sentí su dedo , mientras yo con las piernas completamente abiertas lo dejaba. Luego quedo de boca , me monté sobre el , rozándole mi verga por el culo. EL mismo se abrió las nalgas y apuntando mi verga a su entrada , comencé a ejercer presión , entrando sin problemas . Me lo comencé a coger asi , apoyado sobre mis brazos , viendo hacia abajo como mi verga entraba en el cuerpo de Ignacio, escuchándolo quejarse , con gemidos mas rudos , no como los afeminados gemidos de mi compañero.
Luego en cuatro patas y luego ambos arrodillados , mirando hacia la cabecera de la cama , donde podía estirar la mano hacia adelante y masturbarlo mientras me lo cogía.
Me dijo que ahora era su turno . Me hizo pararme, me colocó en 90° sobre la cama, dispuesto hacerme suyo. Yo sabía que tremenda verga no me entraría , se lo dije y consiente, sabiendo donde estaba , fue a buscar al cuarto de Gabriel su lubricante. Me untó una generosa cantidad en el ano, otro en su verga y procedió a metérmela. Como se notaba la diferencia, de un principio me dolió, pero me aguanté. Le pedí que lo hiciera de apoco hasta que mi orificio se acostumbrara, de todas formas me dolía pero tenia que aguantar , hasta que el dolor comenzó a desaparecer y comencé a disfrutar de tener una verdadera verga entrando por mi culo.
Yo estaba acostumbrado hacer el dominante, pero en este caso no. Ignacio era muy brusco, le gustaba hacer sentir su hombría y me la metía fuerte, dándome nalgadas de vez en cuando. Sin poder evitarlo, mis gemidos salían sin parar de mi boca , gozando de la cogida que me estaban dando. Estiraba su mano y me agarraba la verga muy fuerte , apretándome las bolas , diciéndome que lo excitaba.
Se acostó de espaldas y me senté sobre el. Mas grande se la sentí , pero me encantó , me levantaba y me dejaba caer , enterrándome su pene hasta que me dolía un poco. Luego cambiamos, el se sentó arriba mío , besándome apasionadamente.
Habían pasado unos 40 minutos por lo menos, de estar gozando e intercambiando roles. Ninguno de los dos había acabado aun. Nos tomamos un descanso, fui a buscar unas cervezas, prendimos unos cigarros. Me alabo mi desempeño, diciéndome que era muy bueno para coger y que la tenía muy rica. Yo tuve que fingir que era mi primera vez , el pensaba que no , que ya había tenido algo , pero me hice pasar por un hetero curioso para evitar cualquier sospecha de nuestros encuentros con Gabriel. Cuando me pregunto si me había gustado pasarme para el otro equipo, le dije que sí , que había pensado que sería bueno , pero no tanto.
Volvimos al ataque, comenzó chupándome la verga y cuando ya me la puso dura , se sentó sobre mi. Al rato ya de nuevo estábamos dándonos con todo. Mientras le chupaba la verga , el me metía un dedo en el culo , luego yo a el , hasta que terminé sentado sobre el , dándole la espalda , apoyados sobre mis brazos para no cargarle todo mi peso y dejando que el se pudiera mover , me la metía rápidamente , hasta que boto hacia el lado sin sacármela, se apegó a mis espalda sin dejar de cogerme , estirando su mano, agarrándome la verga, besando mi oreja y masturbándome rápidamente , avisándome que estaba listo para acabar. Le dije que si , que me los echara adentro y metiéndomela mas rápido , comenzando a gritar me la dejó enterrada hasta el fondo y se descargó dentro mío. Al mismo tiempo, con la deliciosa paja que me hacía y sintiendo su verga explotando en mi culo, tampoco me aguanté y comencé a acabar deliciosamente, mientras Ignacio me mordía el cuello , sin dejar de mastúrbame. Quede de boca, sintiendo como su semen brotaba de mi ano , recobrando la respiración , todo agitado y traspirado igual que el.
Nos metimos juntos a la ducha , nos enjabonamos mutuamente , nuestras vergas flácidas eran acariciadas por el otro , comentando lo rico que había estado.
Luego de eso, el ultimo cigarro, Ignacio se vistió y se marcho, dejándome con un leve dolor en mi cola, pero completamente satisfecho.