Fútbol ó toros
Anoche mientras la parienta y yo estábamos en la cama recordé aquel viejo chiste Donde este una buena corrida que se quite el fútbol, y contesta el amigo, y los toros.
Fútbol y Toros
Anoche mientras la parienta y yo estábamos en la cama recordé aquel viejo chiste
"Donde este una buena corrida que se quite el fútbol, y contesta el amigo, y los toros".
En esos momentos jugaba nuestra selección nacional de fútbol la semifinal de la Eurocopa contra Rusia, después de un primer tiempo sin goles.
Yo reconozco que el fútbol lo soporto pero no es uno de mis deportes favoritos, y mi chica no es que no le guste, sino que creo que lo odia.
Estábamos en casa recién llegados, la perspectiva era clara, yo me sentaría en el sofá a ver la segunda parte, mientras Anna hacía algo por ahí, eso sí sabía que en cuanto acabase, tendría que ponerme las pilas y preparar algo para cenar, y ayudarle algo sino quería tener problemas.
Pero uno dispone y, ..
Fue sentarme en el sofá y Anna en contra de su costumbre se sentó conmigo, bueno más que sentarse se recostó mimosa contra mi y me fue buscando; primero una mano, un besito y al momento estábamos besando en condiciones.
Tengo que confesar que llevábamos más de una semana sin sexo, supongo que había sido una semana agobiante, reuniones familiares, trabajo, etc. total que para cuando nos podíamos meter en la cama, ninguno de los dos estábamos por la labor de dedicarnos al sexo.
Y claro eso se nota, porque poco a poco las ganas van saliendo y ambos sabíamos que ese fin de semana pesase a quien le pesase nosotros teníamos que darnos un revolcón y quitarnos el retraso
Pero claro tan mimosa se puso que después de un rato de besos y toqueteos, le dije si nos íbamos a la cama, su respuesta fue "¿Y el fútbol?, ¿Y la cena?, yo no dije nada, la incorporé del sofá y de la mano la lleve a nuestra gran cama, abrí las sábanas y para cuando Anna salió del baño yo ya estaba en pelotas, con mi herramienta en firmes y esperando su llegada; Ah! Y un detalle en la tele del dormitorio el fútbol.
Cuando entró Anna se rió, primero por verme tan dispuesto y luego por tener la tele encendida, pero enseguida me dio la espalda y se quito los pantalones y la blusa, mientras yo la tocaba el culo y mordía su espalda.
Ya desnudos nos metimos en la cama, creo que en ese momento alguien marco un gol para España, pero yo con mi miopía y sin gafas no vi nada y mi chica tampoco estaba por la labor.
Lo que sé es que se oía bullicio en la calle, y todas las teles del bloque parecían encendidas y a todo volumen.
Pero nosotros a lo nuestro, nos besamos y bien juntitos nos fuimos poniendo a tono, y cuando ya estaba que mordía, Anna se abrió bien de piernas y me pidió que la follase, como negarme ante esa propuesta, así que allí me tenéis empujando mi cosa en su coño, que a esas alturas estaba más que preparado para mis embestidas.
Primero bombeé despacio, y poco a poco fui acelerando el ritmo, y que coño me corrí bramando como un idiota, vacié toda mi leche en el coño de mi chica que todavía estaba en proceso de llegar a su propio placer, pero como estaba bastante caliente y pese a que mi erección bajo un poco, seguí entrando y saliendo para hacer gozar a mi chica.
En la tele dijeron que España ya había metido otro gol, y nosotros ni nos enteramos, yo al menos tan solo estaba pendiente de meter, pero unos buenos pollazos a mi chica.
Mi chica cuando se corre es bastante escandalosa; y cuando hacemos el amor, se tiene que controlar bastante para no dar un concierto de alaridos y que luego los vecinos sonrían cuando nos vean, así que cogí el mando de la tele y subí el volumen.
Entre nuestra tele y la de todo el vecindario parecía que nosotros estábamos también en el campo, y claro yo intentando recuperar mi dureza, y los locutores van a chillar y gritar que si "Sigue, sigue, dale, tira, entra, remata, " una pasada.
Y claro Anna chillando también, y cuando Anna se corría, España metió el tercer gol; y claro ella chillando como una loca, fue increíble pues con la tele a tope, todos chillando, en la calle tirando petardos y Anna gritando de placer. Nunca henos echado un polvo tan ruidoso.
Creo que yo también me anime y cuando Anna empezaba a decaer, con dos fuertes empujones me corrí otra vez y quede exhausto encima de ella.
Estuvimos un rato los dos abrazados, respirándonos el uno al otro, sintiéndonos y como no escuchando la tele, y evidentemente los que retransmitían el partido venga a repetir que el domingo con Alemania volveríamos a ganar y esas cosas que se dicen en plena euforia.
Anna se pegó a mi, con sus tetorras apretadas en mi pecho, me beso y mirándome a los ojos, me dijo que si el Domingo volveríamos a ver el fútbol, sonriendo me suelta que la final es la final y que le estaba empezando a gustar el fútbol.
Yo riéndome con ella le dije que si le cogíamos el gusto, igual hasta que nos teníamos que hacer del digital para cuando empezase la liga.,
Ah! Y este domingo Continuará . (por lo menos el fútbol)