Fuí violada por mi esposo

Tengo que confesarles algo que me sorprendió pero me gusto, lo llevo clavado en mi y cada que tengo relaciones con mi esposo lo siento a flor de piel.

FUI VIOLADA POR MI ESPOSO

Tengo que confesarles algo que me sorprendió pero me gusto, lo llevo clavado en mi y cada que tengo relaciones con mi esposo lo siento a flor de piel.

Soy afortunada, tengo un buen trabajo, un esposo que me llena de placer alcanzando los orgasmos mas ricos, como pareja somos el complemento perfecto, a el le gusta cogerme por todos lados, por mi boca, mi vagina y mi ano, también le gusta que le mame su ano, que meta todo mi dedo bombeándolo al tiempo que le mamo la verga, esto lo hace gritar y regalarme chorros de esperma, creí que ya habíamos hecho todas las locuras ocurrentes, sin embargo estaba equivocada.

Esa ocasión como cada tarde me dirigí a mi departamento, al llegar ahí estaba mi esposo sentado en la computadora, lo salude y me metí al baño, se me ocurrió desnudarme, salí y sin pensarlo me acerque a el y comencé a besarlo, el correspondió, se levanto y cuando me toco abrió desmesuradamente los ojos, contento de encontrarme así, comenzó a acariciarme, su beso me comía la boca y succionaba mi lengua, su mano buscaba ansiosamente mi tesoro, abrí ligeramente mis piernas para que lo encontrara, sus dedos tocaron mi sagrado botón para comenzarlo a acariciar, su boca ya bajaba por mi cuello y yo desesperadamente lo apuraba a llegar a mi bello pezón que estaba completamente duro esperando ser succionado, pare mas mis ricos melones, los cuales ataco ricamente, me esclavizaba su boca, su lengua era lo mas exquisito y recorría con encanto mis ricos melones, se desnudo y nos cogimos como unos perros en brama, el me decía un sin fin de palabras obscenas, sucias y aunque me incomodaban lograban humedecerme y excitarme, lo que me ayudaba a obtener los orgasmos que ansiosamente necesitaba sentir mi vagina, la ultima contracción anuncio mi satisfacción de ese momento, después de cogernos, casi sin energías escuche que me decía quedamente, "me encantaría ver como serias cogida..." yo como siempre alcance a decirle "disfrutarías mas si me ves penetrada por mis dos agujeros...", una estocada fue mas fuerte que mis palabras, mi ultimo orgasmo casi forzado, me quito poca la energía que termino por derrumbarme como nunca lo había hecho, no supe en que momento se salió de mi.

Al siguiente día me dijo que no estaría conmigo, así que quería ver que podía hacer por la tarde, me salí, daba vueltas porque aun no me decidía a donde ir, vi que un coche me rebaso y su velocidad era lenta, era una avenida de doble sentido, no tenía prisa, así que no me estorbaría, seguí lentamente aunque tenia la oportunidad de rebasarlo porque era una hora no muy transitada, de pronto pise el freno ya que el coche de adelante se había detenido, bajando unos hombres con pasamontañas, abrieron mi coche y me sacaron, trate de resistirme pero me taparon la boca e inhale algo que me hizo perder el conocimiento, en realidad no se cuanto tiempo paso, cuando desperté sentí que varias manos y bocas que se estaban comiendo mi cuerpo, mis ojos estaban vendados, sin embargo el olor que llegaba a mi nariz era muy agradable, me quede quieta, ellos no sabían que yo ya había reaccionado.

Escuchaba que me hacían preguntas como si en verdad les pudiera contestar, "te gusta mami...?" "tienes dos preciosidades riquísimas..." "mira lo que tenías guardado..." alguien toco mis labios vaginales con tanta sabiduría que me hizo brincar, en ese momento detuvieron lo que estaban haciendo, uno de ellos dijo "ya despertó" otro me ordeno que no intentara nada de lo que pudiera arrepentirme, que mejor disfrutara lo que seguía porque sino de todo modos lo iban a hacer, volvieron nuevamente a su tarea, me chupaban, me mordían ligeramente, de igual forma estrujaban suavemente mis pechos, no podría saber cuantas manos y bocas sentía, mis lagrimas comenzaron a asomarse, me daba miedo reconocer que lo que sentía era una mezcla de miedo y placer.

Esa boca mamando mi vagina, me abrió completamente las piernas y yo mas que colaborar lo hacía por instinto, esa boca era toda una experta, me estaba provocando un orgasmo que yo no dejaba escapar, así que tense mi cuerpo para que no se dieran cuenta lo que me estaban provocando, sabían exactamente lo que estaban haciendo, el orgasmo fue intenso, me levantaron la cadera mucho mas de lo normal y esa boca comenzó a lamerme el culo, introducía su lengua, me levanto y me bajo de la cama, me puso de rodillas y siguió chupando mi ano, me estaba electrizando, me abría mis nalgas y ya introducía un dedo, escuche que dijo "mira de lo que me estaba perdiendo" lo lamente cuando la boca se aparto de mi, casi me cargo y sentí que estaba encima de otro cuerpo, me enardecí cuando sentí como la cabeza de una verga hurgaba por entrar en mi cueva completamente húmeda, introdujo lentamente su cabeza esto era fabuloso, abrí mis músculos vaginales para dar cavidad a esa hermosa verga que fue entrando hasta que me senté con todo el peso de cuerpo sobre ella, otras manos me abrían las nalgas y le untaban algo húmedo a mi culito, enloquecí porque siempre desee sentir una doble penetración.

El comenzó a enterrar con suavidad su miembro, era un placer sentirme completamente llena de mis dos orificios, lo que me provoco otro orgasmo que ayudado con las manoseadas y mamadas de los otros fue totalmente intenso, comenzó lentamente la cogida, se amoldaron completamente a mi cuerpo, yo me movía para facilitar la penetración, amolde mi cuerpo al de ellos, los dos me tomaron de la cadera y comenzó la cogida tan brusca que no me permitió disimular mi placer, mis gemidos comenzaron a brotar de mi garganta, era el tercer orgasmo que me sacaban, alguien intento meter una verga en mi boca y una voz grito "dije que eso no..." al tiempo la cogida se detuvo, las bocas se apartaron de mi cuerpo, mi placer dio un giro tremendo, esa voz yo la conocía, otro dijo "que pendejo..." casi con miedo pronuncie el nombre de mi esposo, el silencio era eterno, trate de quitarme la venda pero unas manos me sujetaron, las vergas siguieron su brusca faena y los demás volvieron a tocarme y chuparme, grite nuevamente el nombre de mi esposo y alguien metió una verga en mi boca y comenzó la verdadera violación...

Utilizaron palabras sucias y altisonantes, las manos y las bocas que eran un placer se convirtieron en dolor porque me estrujaban tan fuerte que lograban lastimarme, me obligaron a mamar el miembro ya metido en boca, comenzaron a bañarme de esperma, la verga fue quitada de mi boca pero las otras aun me cogían, en medio del dolor y la humillación tuve mas orgasmos, de pronto los dos comenzaron a convulsionarse dentro de mi, eso indicaba que también estaban eyaculando, primero se salió de mi culo y el de bajo de mi me recostó y dio su ultimo ataque bombeándome y abriendo mis piernas a mas no poder lo que me arranco otro orgasmo.

Se salió y me tiro un trapo, me dijo que me limpiara y me vistiera, me llevarían a mi auto, en realidad estaba adolorida de mi cuerpo, mis senos, mi ano y mi vagina estaban ardiendo de dolor, estaban completamente rozados, sin embargo me sentía mas que satisfecha, como pude me vestí, me levantaron, me cargaron y se movían tanto que parecía que estaban bajando escalones, así me condujeron al auto, escuche la alarma, abrieron la puerta me subieron y me acostaron, alguien mas subió tras de mi y lo encendieron, no se que tanto recorrió, en mi cabeza daba vueltas la voz de mi esposo, mas adelante se detuvieron, con voz fuerte me indicaron que no dijera nada, que si alguien de ellos se enteraba de algo lo volverían a repetir porque habían quedado muy satisfechos, que no me quitara la venda durante 5 minutos porque alguien me estaría vigilando y tal vez sería lo ultimo que haría, se bajaron, escuche varios portazos y otro motor se ponía en marcha, se alejaban.

Creo que pasaron mas de 5 minutos para que reaccionara, casi con trabajo me incorpore y me quite la venda de los ojos, aunque acabaron lastimándome me provocaron varios orgasmos y estaba casi desmadejada, como pude me baje y subí al volante, trate de ubicarme, arranque el auto y me fui lentamente a mi casa, llegue como sonámbula, así baje y me fui directo a la bañera, con todo y ropa deje que me cayera el agua, no podía aceptar lo sucedido, en verdad lo había disfrutado y a pesar del dolor que me producían yo sentía un placer intenso, esa voz no dejaba de sonar en mi mente, era idéntica a la voz de el amor de mi vida, me quite la ropa y termine por bañarme, me recosté y me quede dormida.

A la mañana siguiente cuando desperté aun estaba sola, me incorpore cuando entró mi esposo llevándome el desayuno casi tartamudeando me dijo que llego tarde, pero me vio descansando y no me despertó, yo no le conteste tome el jugo de naranja apurando la bebida, el se metió al baño y comí todo lo que me preparó, me levante, y comenzó un domingo como todos, con la diferencia de que estaba callada y el no me preguntaba porque, no se como pasaron los días sin que nos diéramos cuenta que había algo diferente, después de tener relaciones por lo menos cada tercer día, se acabo la semana sin tocarnos, llegaba temprano a casa y me dormía temprano, así se fue la semana de mis manos.

El sábado que se acercaba se casaba Rodrigo mi amigo y ex-novio de la universidad, la recepción sería en la casa de el, era algo sencillo, casi como autómatas el sábado nos arreglamos, fuimos a misa y de ahí a la recepción, bebí mas de la cuenta, mi esposo estaba con los amigos, tuve ganas de ir al baño y Lucy me recomendó el tocador de la planta alta, subí escalones y al entrar a la habitación el aroma que percibí me era familiar, entre al tocador y el aroma era mas fuerte fue cuando lo recordé, era el mismo de la noche en que fui violada, salí a la habitación, recordé que me cargaron, se oyó una puerta y en ese momento comenzó el vaivén, la puerta estaba a un paso de los escalones, baje y me dirigí a la salida, me di cuenta que en frente estaba el estacionamiento...

Me regrese tome otra copa y recordé cuando mi esposo me decía "me encantaría ver como serías cogida" y yo siempre le respondía "disfrutarías mas si me ves penetrada por mis dos agujeros...", ese sábado había sido la despedida de soltero de Rodrigo, Rodrigo muchas veces me dijo que le gustaría cogerme nuevamente y yo solo sonreía, el tiempo que fuimos novios tuvimos relaciones pero nunca me cogió por mi culo y cuando me violaron dijeron "de lo que me estaba perdiendo", me deje manosear por Andrés, era novia de Rodrigo y estábamos pasados de copas, fue en un día de campo dentro de la alberca y me dijo "tienes dos preciosidades riquísimas", pero nunca supe si se refería a mis nalgas o mis tetas porque me toco las dos cosas.

Cuando me violaron me dijeron lo mismo entonces me violaron Rodrigo, Andrés mi esposo y alguien mas que no podré saber quien fue, en ese momento se acerco mi esposo y nos despedimos, en el trayecto a la casa después de una semana de no tener relaciones y fingir que todo marchaba bien me acerque a el, le desabroche el pantalón le baje el cierre, saque su flácido miembro y me agache a mamarlo, como pudo aguanto y llegamos a casa yo completamente mojada y el con su verga mirando al cielo...

Nos bajamos como desesperados, tocándonos y quitándonos la ropa a tirones hasta llegar a la recamara, solo faltaba por quitarme la tanga porque el ya iba desnudo, nos cogimos y a mi mente regreso la sensación de ser cogida por cuatro personas, me desborde en placer y goce como jamás lo había hecho en mi vida, me desahogue como una vil perra, cuando estuve satisfecha me acerque a su oído y susurré "me encantaría ver como serías cogido..." me baje a mamarlo, sabía que el cogerlo y mamarlo lo enloquecía, así no podría preguntar ni razonar mis palabras, le chupe todo mi liquido que mojaba su verga, a el le encantaba que su miembro llegara hasta mi garganta y ahogarme, eso lo excitaba mucho, así que lo no hice esperar, cuando metía su verga en la profundidad de mi boca me agarraba de la cabeza, elevaba su pelvis y me cogía en la boca, cuando supe que era el momento levante sus piernas y comencé a mamar su ano, mientras con mi otra mano lo masturbaba, lo chupaba, le gustaba que me comiera su ano, metía mi lengua hasta que me pidió que lo mamara, quite mi boca pero puse mi dedo, de un golpe metí uno y empecé el mete y saca, el estaba como loco, gemía gritando, aproveche el momento para meter dos dedos, no pudo mas y comenzó a eyacular, como siempre me trague su semen y seguí chupandolo hasta que su miembro regresó a su flacidez.

Me acosté haciéndome la dormida, con los ojos entrecerrados vi que tenía los ojos abiertos viendo al techo como perdido, a caso ya estaba razonando mis palabras? bueno entonces ya sabe lo que después va a suceder y tampoco dirá nada porque lo volveré a repetir, solo que yo no lo compartiré con las amigas.... siempre hay algo mejor...