Formentera en familia (2)

FORMENTERA EN FAMILIA (II)

Sábado 4 de junio por la mañana.

Esteban se despertó aproximadamente a las 9 de la mañana, después de dormir toda la noche de un tirón, tenía la polla dura como una piedra, se había quedado la noche anterior con ganas de meterle un buen polvo a Marta, pero la presencia constante de su hermano le cortaba. A Marta la oía dormir a su lado y de reojo vio a Pablo que también estaba durmiendo, y él con la polla bien dura comenzó a masturbarse pensando en lo atrevida que había estado Marta ayer, y también en la polla de Pablo. La verdad el cuerpazo de Pablo todo depilado y musculoso, y sobre todo su enorme y preciosa polla le tenían comido el coco, él no había tenido ninguna relación homosexual y le gustan las mujeres, pero a veces las fantasías no se pueden reprimir.

Se quitó el pantalón del pijama, que era lo único que llevaba, y continuó masturbándose, de pronto vio la polla de Pablo erecta, Pablo parecía seguir durmiendo, se armó de valor, se levantó de la cama, y se acercó al lado de Pablo que parecía estar durmiendo, a observar de cerca su polla. Esteban estaba de pie delante de Pablo, con una mano en su polla masturbándose, y con la otra haciendo una medida aproximada de la polla de Pablo en erección, medía mas de un palmo, mas de 25 cm., Esteban pensaba que daban ganas de comérsela y se relamía mirando y pensando en como se la comería. Estaba teniendo una fantasía sexual con otro hombre, su cuñado.

Cuando mas concentrado estaba en el asunto, se da cuenta que Pablo le está mirando y le dice "no te cortes, cómetela", y Pablo con una mano le agarra su polla y comienza a masturbarlo y con la otra le hace agacharse y acercarse su cabeza a la polla de Pablo. En vez de resistirse y negarse, se deja hacer y coge la polla y se la mete en la boca.

Esteban pensaba "es enorme no puedo cerrar la mano alrededor de su polla debido a lo gorda que es, y mi boca no llega a introducirse ni a la mitad de su polla, pero estoy disfrutando como nunca había pensado". De repente se le pasa por la cabeza la posibilidad que Marta se pudiera despertar y pillarlos, como se lo explicaría, la mira mientras sigue chupando y ve que esta durmiendo desnuda y además lleva depilado el coño. Esteban piensa "cuando me dormí anoche estaba con el pijama puesto y no llevaba el coño depilado", esto aumento su excitación y hizo que se corriera sobre el pecho de Pablo que seguía masturbándole, fue una corrida brutal, a la vez aumentó el ritmo sobre la polla de Pablo, haciendo que Pablo se corriera en su boca. No hizo falta que Pablo le aguantara la cabeza con la boca en su polla, Esteban no hice ningún intento de sacarla, con lo que se tragó toda su leche, que era mucha, cuando acabó de limpiarle con su lengua toda la polla, se dedicó a lamerle el pecho para limpiarle la leche que tenía sobre él.

Cuando acabó, Pablo se incorporó y le dijo "esto será un secreto entre tú y yo, tranquilo que no le diré nada a Marta", se levantó y se fue al baño.

Esteban que hasta ese momento pensaba que Pablo era un chico que llevaba locas a las chicas, dado que tampoco sabían si había tenido novia, y lo bien cuidado que llevaba su cuerpo, todo depilado, Esteban llegó a la conclusión que Pablo era gay.

Esteban volvió a la cama en la cual estaba Marta, permanecía dormida, entonces empezó a pensar en que hacía desnuda y completamente depilada, nunca se había depilado completamente, su pijama estaba tirado en el suelo. Cogió el pantalón del pijama y estaba mojado. Pensó "puede ser que estuviera muy excitada y se masturbó, cosa rara porque ella nunca se ha masturbado según me ha dicho, y nunca quiere tocarse, me dice que la toque yo, que tocarse ella no la excita. Bueno ya me explicará ella si quiere, que le ha pasado esta noche".

Se estira en la cama y al momento Marta se despierta, Marta le da un beso muy apasionado, y al no ver a su hermano, pregunta por él. Esteban le dijo que estaba en la ducha. Marta había notado un sabor a semen en el beso que le acababa de dar a su marido, y eso le hizo recordar lo pasado anoche, en que se tragó el semen de Pablo y Pablo le depiló el coño. Marta pensó "si que dura el sabor a semen, espero que Esteban no lo note", lo que Marta no sabía era que ese sabor venía de la boca de su marido. Con estos pensamientos Marta seguía excitadísima, Marta se sienta encima de Esteban y le dice "fóllame, necesito un buen polvo". Esteban acababa de correrse hacía 5 minutos, y notaba que su polla no respondía, necesitaba más tiempo, pero no podía decirle a Marta lo que acababa de pasar. Entonces se inventó una excusa para salir al paso, diciéndole "estas loca, tu hermano puede salir en cualquier momento y pillarnos, no te da vergüenza, una cosa es que te vea desnuda, y otra que nos pille follando. Ya encontraremos otros momento".

Marta: "No me importa, quiero que me folles"

Esteban: "No puede ser ahora, Pablo debe de estar a punto de salir, ya encontraremos otros momento".

Aquí quedo la cosa, al cabo de unos minutos, Esteban se vistió, le dio un beso a Marta y se fue a alquilar un coche y comprar pan y unas pastas para desayunar. Esteban le comentó que volvería en una 1 hora, dejándola a ella todavía desnuda en la cama, y a Pablo aún en la ducha. Esteban todavía no se había atrevido a preguntarle por la noche anterior, el pensaba que se debió de estar masturbando y acabaría depilándose en el baño debido a la excitación, mientras ellos dormían.

Al irse Esteban, Marta decidió que ella no se quedaba con ganas, y que si no la follaba su marido ya se buscaría a otro para este menester. Se fue directa a la ducha donde estaba su hermano duchándose, entró en la ducha y le dijo a su hermano "fóllame, hazme lo que quieras, pero necesito sexo".

Pablo: "Y Esteban"

Marta: "No vendrá hasta de aquí una hora, ha ido a alquilar un coche"

Pablo: "De acuerdo te daré lo que pides, pero vamos a hacer como cuando éramos pequeños, yo te doy lo que tu quieres y tu a cambio cumples tres condiciones".

Marta: "Vale trato hecho, cumpliré las tres condiciones que me pidas", durante la conversación Pablo estaba estimulando suavemente los pezones y el clítoris de Marta.

Pablo: "Vale hay va la primera, a partir de ahora y hasta que lleguemos a Barcelona, no llevarás ropa interior en ningún momento"

Marta: "De acuerdo", Pablo sigue estimulándole el clítoris y los pezones.

Pablo: "La segunda, mientras estemos en Formentera, no dejarás que Esteban te folle"

Marta: "De acuerdo, venga empecemos ya"

Pablo: "Espera antes la tercera condición. Si te digo que tengas relaciones sexuales con quien yo te diga mientras estemos en Formentera, lo harás".

Marta: "No eso no lo puedo aceptar", en esto Pablo para de tocarla y se separa un poco de ella.

Marta: "De acuerdo, de acuerdo, lo haré con quien tu digas, pero continúa, fóllame".

Pablo continuó excitando a Marta, le fue introduciendo dedos dentro de su vagina, para dilatarla lo suficiente para poder meterle su polla, Marta se retorcía de placer, mientras seguía Pablo calentándola bajo la ducha de agua. Ella tenía el coño totalmente empapado debido a la excitación que llevaba y a la estimulación que Pablo le estaba dando.

Cuando Pablo considero que ya estaba preparada le dijo "apóllate contra la mampara y ábrete de piernas", Marta hizo caso y observo la enorme polla de su hermano que tenía que engullir su coño, tenía miedo al daño que pudiera hacerle, pero la excitación y la necesidad que tenía por ser follada era superior.

Pablo le dijo: "hermanita vas a probar una polla de verdad", a pesar de llevar un buen rato preparándola, la polla no entraba, la cogió por las tetas y apretaba y ella chillaba de dolor, pero le pedía más "venga cabrón, que no eres suficiente hombre para metérmela, aun tendrá que venir mi marido a enseñarte", Pablo seguía apretando y con el mete y saca ganando centímetro a centímetro. Ya llevaba casi media polla dentro, cuando en una arremetida con más fuerza le acabó de meter toda la polla. Marta chillaba de dolor, le dolía muchísimo el coño, parecía que se lo hubieran roto, pero a la vez empezaba a notar placer, sus grandes y preciosas tetas las tenía doloridas de los apretones que le estaba propinando su hermano, además su hermano le pellizcaba sin piedad los pezones que los tenía durísimos y doloridos.

Una vez consiguió meterle toda la polla empezó un mete y saca con saña, el coño empezaba a ajustarse ante semejante polla y ahora Marta empieza a gozar, a pesar del dolor que notaba. Marta al poco tuvo su primer orgasmo, al notarlo Pablo, le regaló un fuerte pellizco en los pezones que la hizo retorcerse de dolor.

Pablo le introdujo sus dedos a Marta en la boca para que se los lubricara con su saliva, una vez estuvieron lubricados le empezó a meter a Marta los dedos por el culo, Pablo le dijo "eres virgen por el ano, está muy prieto".

Marta "por ahí nunca me la han metido, tu polla no me entrará, es enorme"

Pablo "hoy no entraría, te partiría en dos, pero en unos días te aseguro que te la meteré por el culo, de momento vamos a ir trabajándolo", y continuó metiéndole los dedos, al poco rato le introdujo dos dedos, y al poco más le logró meter tres dedos, cosa que provocó que Marta chillara de dolor. Pablo paró de introducirle los dedos en el culo, y volvió a arremeter el mete y saca con fuerza de su polla en el coño de Marta, todo ello acompañado de fuertes apretones a sus senos y pellizcos a sus pezones.

Al cabo de unos 5 minutos más Pablo se corrió dentro del coño de Marta, Marta para entonces ya había tenido 2 orgasmos más. Pablo sacó su polla del coño chorreante de Marta, la polla estaba pringosa de semen, fluidos vaginales y sangre de pequeñas heridas que se habían producido debido a la enorme polla y la violencia que había usado Pablo.

Pablo le dijo "chúpamela y déjala reluciente", Marta, que había quedado sentada en la ducha, empezó a chupársela, pero le entraba muy poco, a lo que Pablo le cogió la cabeza, y empezó a follársela por la boca con violencia, poco a poco la polla iba entrando mas adentro, parecía imposible pero Marta llegó a metérsela entera, al cabo de unos minutos de follársela por la boca mientras seguía aguantándola por la cabeza, Pablo volvió a correrse, dejándole la polla dentro hasta que Marta entre arcadas se acababa de tragar todo el semen.

Pablo le dio un beso profundo en la boca y le dijo "límpiate y refréscate en la ducha un rato, y nos vamos a la playa".

Marta: "gracias hermanito, nunca me habían hecho gozar así, de ahora en adelante haré lo que tu me digas". Marta estaba dolorida, notaba el coño totalmente dilatado, herido y irritado, solo de tocarlo veía las estrellas, el culo también lo tenía dolorido aunque no tanto todavía, los pechos estaban súper sensibles y lo peor eran los pezones los llevaba muy irritados, y al mas mínimo contacto era como si le clavaran agujas. La mandíbula la tenía desencajada, pero era llevadero.

Al cabo de unos minutos Marta salió de la ducha, fuera estaba Pablo sentado esperándola, le dijo "venga hermanita déjale una nota a tu cornudo maridito, que le esperamos en la playa, y no cojas nada porque nos vamos en pelotas sin toalla". Marta hizo lo que le dijo y se fueron cogidos hacia la playa, Marta le cogía de la cintura y él le metió los dedos en el culo, y los iba metiendo y sacando, y así se fueron a la playa. Por el camino se cruzaron con 4 obreros que estaban comiéndose un bocadillo, con lo cual pudieron vernos llegar de cara, no perdieron detalle, miraban con todo el descaro. Marta era un número por delante, el coño depilado y muy dilatado, los pezones en punta, además del cuerpazo que tiene que ya de por si llama la atención. En Pablo destacaba su físico de atleta, totalmente depilado y sobre todo su pollón en estos momentos en reposo. No dijeron nada posiblemente porque Pablo les imponía, pero lo mejor para los obreros fue cuando pasaron de largo y los vieron por detrás, ya que Pablo no paraba de meterle los dedos en el culo, y en ese momento ya le estaba metiendo tres dedos a la vez, se había tomado muy en serio lo de ir abriéndole el agujero del culo.

Marta en esos momentos estaba en la gloria, había tenido la mejor sesión de sexo de su vida, había recuperado una relación perdida con su hermanito, y todo lo demás le daba igual, estaba feliz, con unas vacaciones diferentes y totales.

Llegaron a la playa, y no se veía a nadie en ese momento, se metieron en el agua, se besaban, el seguía metiéndole dedos por el culo tan pronto podía, jugaban con sus cuerpos, jugando la cogió por la espalda, la levantó ligeramente y la dejó caer sobre su polla, esta vez no costo meterla, en dos envites entró hasta el fondo, Pablo la cogía por los pechos y la iba subiendo y bajando. Marta pensaba "vuelve a tener otra vez la polla totalmente dura, ya se ha corrido 2 veces en menos de 1 hora y vuelve a estar empalmado (no sabía que se había corrido una vez mas en la boca de su marido).

En pleno mete y saca vieron a Esteban venir a lo lejos hacia ellos, Pablo en vez de soltarla, siguió follándola con mas energía, de forma que cuando estaba a unos 25 metros Pablo se volvió a correr dentro de ella.

Paro el mete y saca pero dejo la polla dentro, mientras con las manos la seguía cogiendo por las tetas y apretándole los pezones, era como si le clavaran alfileres, pero la excitación y el placer la estaban haciendo tener un orgasmo más cuando ya tenía a su marido a unos cinco metros en la arena, mirándolos.

El agua era totalmente transparente, no había oleaje y yo no tocaba el fondo del mar, debido a que Pablo la aguantaba con su polla dentro de su coño, y sus manos en sus tetas, el agua le llegaba a la altura del ombligo, se estaba mordiendo los labios para no soltar ningún gemido de placer, no se explicaba Marta como Esteban no se daba cuenta.

Esteban pregunto con cara de sorpresa pero no de enfado "¿dónde habéis dejado las toallas y la ropa?, ¿Está buena el agua?". Esteban venía con el bañador y la toalla.

Marta "Si es muy convincente, y la toalla la puedes dejar ahí mismo porque nosotros nos hemos venido sin nada". Esteban puso cara de extrañado, pero no dijo nada, se quito el bañador y lo dejo junto con la toalla, se tiro al agua al lado de ellos con ganas de pasar un buen rato como ayer. No se daba cuenta que Pablo seguía con su polla dentro del coño de Marta, y no parecía preocuparle que su hermano le estuviera estrujando las tetas y los pezones, le parecía normal debido a lo bien que se llevaba con su hermano y los años que han estado juntos.

Esteban "está buenísima el agua, venga lánzame a mi mujer, que vosotros debéis llevar mucho rato jugando". Pablo la levanta con un brazo por la cintura, sacándole su enorme polla del coño, seguía durísima. Hace el gesto de lanzarla hacia Esteban, pero no la lanza sino que vuelve a llevarla hacia él, ensartándola de un golpe hasta dentro la polla. Esteban, que a pesar de estar a 2 metros, sigue sin darse cuenta, y eso que la cara de Marta se deshacía de placer, Pablo la vuelve a levantar y metiéndole con la mano que tenía libre tres dedos en el culo, la lanza hacia Esteban. Esteban la recibe en sus brazos, una de las manos de Esteban va a para a su coño, que esta totalmente dilatado y abierto, y está soltando el semen de Pablo que acababa de correrse, introduciéndole los dedos. Marta pensaba que Esteban se iba a dar cuenta, pero en vez de eso, le da un beso apasionado y le dice al oído "perdóname el no haberte follado esta mañana, pero tu hermano estaba a punto de salir de la ducha y nos habría pillado. Noto que te has debido de estar masturbando casi todo el rato porque llevas el coño súper dilatado, muy lubricado, yo a ti también te deseo mucho. Es muy duro estar tan excitada como estabas esta mañana y no poder follar. En la primera ocasión que tengamos te recompensare", y le vuelve a dar otro apasionado beso. Se cree que desde que la dejo ha debido estar masturbándose todo el rato, y no se da cuenta que el coño lo tiene tan dilatado por la enorme polla de Pablo y lo lubricado que nota dentro del coño es el semen de Pablo.

Marta dice "gracias cariño, creo que podré esperar hasta que lleguemos a Barcelona".

Esteban dice "voy a ir a preparar el desayuno, te dejo bien acompañada por tu hermano, pasároslo bien y en quince minutos os espero en casa". Esteban estaba pensando que ya que no podía en esos momentos satisfacer a Marta, y Marta estando tan excitada como la notaba, sería peligroso dejarla con cualquier hombre, pero dejarla con su hermano pequeño, tenía a Esteban totalmente tranquilo.

La vuelve a lanzar hacia Pablo, diciéndoles "seguir jugando un rato, voy a preparar el desayuno, en quince minutos os espero en la casa" y añade "Marta, el depilado que te has hecho esta noche te queda estupendo, ya te lo había comentado alguna vez, aunque hasta ahora me habías mandado a la porra" y vuelve a añadir "Pablo, tu que opinas, a que le queda muy bien".

Pablo dice "le queda de vicio, además es mucho más cómodo para follar y comérselo"

Marta dice "no seas grosero Pablo, que va a pensar de ti Esteban".

Esteban se ríe, se da la vuelta y empieza a salir del agua, Pablo la había vuelto a coger por la espalda, y le vuelve a introducir su enorme polla, que entra a la primera hasta dentro, la coge con una de sus manos en su cintura, vuelve a estar Marta sin tocar fondo, y con la otra le vuelve a coger una teta apretándole con fuerza el pezón, esto la sigue manteniendo en un estado de excitación máxima. Al momento, Esteban se da la vuelta hacia nosotros, está escasamente 1 metro, se va hacia Marta, le da un beso, a la vez que le acaricia la teta que tiene libre, la otra la mantiene cogida Pablo y no la suelta, y sin más se va recordándoles que sean puntuales. Parece increíble tanta confianza y que no se haya dado cuenta que Pablo la tenía penetrada mientras le daba un beso.

Esteban se empieza a alejar de la playa todavía a la vista de ellos, en la playa no se ve a nadie más, Pablo la saca del agua, se tumba en la arena boca arriba donde rompen las pequeñas olas que hay, y la invita a cabalgarlo. Marta no se lo pienso 2 veces y se sienta sobre él comenzando a cabalgarlo dominando ella el ritmo de la penetración. Marta observa como Esteban a unos 50 metros se aleja de ellos mientras aumenta el ritmo sobre la polla de Pablo, entonces Esteban se gira mientras sigue caminando, mientras se aleja sigue mirándolos. Marta no para de cabalgar sobre la polla de Pablo y decide levantar la mano para saludarle. Esteban le devuelve el saludo y definitivamente se va hacia la casa y desaparece de su vista.

Esteban cuando se ha girado, lo que realmente ha pensado, es que al ver a Marta sobre Pablo tumbado en la arena boca arriba, es que si no fueran su mujer y el hermano de ella los que estaba viendo, pensaría que serían una pareja follando salvajemente en plena playa, pero siendo ellos, Pablo supuestamente gay y además Marta le ha saludado levantando la mano seguro que estaban jugando.

En la playa Marta sigue cabalgando sobre Pablo hasta que Pablo se corre nuevamente dentro de ella. Marta se estira sobre Pablo y se besan prolongadamente. Detrás suyo entre las dunas y arbustos a unos 15 metros se empiezan a oír aplausos, el grupo de 4 obreros que habían visto cuando iban hacia la playa les siguieron y les han estado observando desde que llegaron a la playa.

Pablo "Ve a agradecerles los aplausos y comete sus pollas".

Marta "No los conozco de nada Pablo, y están sucios y sudados".

Pablo "No recuerdas nuestro pacto".

Marta que todavía sigue sentado sobre Pablo con la polla en su coño, se levanta ante la mirada de sus 4 admiradores, y se va caminando hacia ellos, por el interior de sus piernas va cayendo el semen que sale de su coño chorreante. Pablo se sienta mirando hacia ellos. Los obreros que la están viendo llegar se quitan rápidamente la ropa que llevan, Marta llega a ellos, se pone de rodillas en medio de ellos y les dice "¿Os apetece que os coma la polla?" y empieza a engullir una detrás de otra, mientras masturba otras 2 pollas con sus manos. Las pollas de estos hombres están sucias, huelen a orines, pero eso no impide que Marta se coma una detrás de otra. Marta no es ella, se ha transformado, se ha convertido en una ninfómana, no sabe como se lo contará a Esteban, si es que se lo cuenta. Pero en estos momentos solo piensa en satisfacer sus instintos más bajos.

Al cabo de unos 10 minutos de ir pasando de polla en polla, empiezan a correrse una en su boca, otro en su cara, otro en su pelo y el último en sus tetas. Cuando han acabado de correrse encima de ella, uno decide mearse encima de ella, dirigiendo la meada a su cara, Marta abre la boca y empieza a tragar lo que puede, los otros tres deciden hacer lo mismo, y empiezan a mearse encima de ella, en su boca, en sus tetas, por su espalda.

Los cuatro hombres cogen su ropa, y se van comentándole que el lunes vuelven a trabajar en la obra, y si quiere hacerles una visita estarán encantados de atenderla.

Marta vuelve con Pablo que ha estado observando todo el rato, se funde con Pablo en un largo abrazo, besándolo y compartiendo con él todos los fluidos que tiene en su cuerpo y en su boca. Se van al agua se limpian y deciden ir a recuperar fuerzas desayunando en la casa donde Esteban les está esperando.

Después de desayunar a eso de las 12 del mediodía, Esteban propone ir un rato a la playa hasta la hora de comer, Marta (que al igual que Pablo siguen desnudos) comenta que no ha dormido bien y que prefiere quedarse a descansar. Pablo acepta la propuesta de los dos y propone que él y Esteban se van a una cala próxima que conoce y de vuelta traerán algo para comer. A todos les parece bien, aunque Esteban hubiera preferido ir con Marta, ya que la deseaba mucho, pero entendía que estuviera cansada. Esteban se despide de Marta, coge las cosas de la playa y se va hacia el coche. Pablo coge de su cajón un tapón anal mediano (9 x 4 cm.) en forma de cono y se dirige hacia Marta, primero se lo introduce en el coño para lubricarlo, y al momento se lo introduce con delicadeza, aunque forzando un poco en el ano, quedando perfectamente encajado. Le da un beso y le dice "no te lo quites, tenemos que hacer mas grande este agujero. Descansa hasta que volvamos que el día será largo y entretenido". Marta se encontraba cansada, tenía todo el cuerpo dolorido y muy escocido.

Pablo se pone solamente un pareo en la cintura, y sale al coche donde le está esperando Esteban.