Follandome a mi cuñado
Trate de evitarlo pero al final caí, le hice de todo y me dejé
Ocurrió la semana pasada, yo tengo 37 años y mi cuñado 45; nuestra relación siempre había sido normal aunque yo siempre me he cortado mucho delante de él, le llamaba cuñadin, pero cuando ibamos a la playa por ejemplo, nunca hacía top less si estaba él; yo mantenia distancias, no sé muy bien por que. Como he dicho, la semana pasada estabamos todos en familia comiendo, normal, en el comedor; era un buen día y habíamos bebido un poco de vino en la comida y para los postres los hombre se pasaron al salón sentados en el sofá. Yo fuí repartiendo pedazos de un vizcocho que habíamos hecho, mi cuñado en el sofá tenía el ordenador y estaba mirando fotos familiares; me senté a su lado para darle su bizchocho y me acerqué para ver las fotos, casi sin darme cuenta, noté que tenia mis pechos en su antebrazo, el también lo notó y creo que los movió un poco para rozarse, sea como fuerá esos instantes me pusieron como una perra, sencillamente humeda y con mis pezones en punta, creo que mi marido se dió cuenta y eso me preocupó, nunca había pasado nada ni quería que hubiera problemas, pero no podré olvidar esos momento de roce. Estube casi toda la tarde obsesionada, hasta el punto de que al cabo de unas horas, me fuí al aseo y me masturbé, no suelo hacerlo y pocas veces había sentido tantas ganas de follar, pero no con mi marido.
Nos acostamos como cada noche, cada matrimonio en su habitación y nosotros tuvimos sexo, casi yo obligué a mi chico; el tiene una gran polla y tube un orgasmo bestial, como casí siempre, fué fácil. Eso además alejó de alguna manera el pequeño rictus celoso que me pareció haber observado en mi pareja.
Por la mañana me levanté la primera, como casi siempre. La casa es pequeña y solo tiene un baño, yo estaba orinando cuando de pronto se abrió la puerta y era mi cuñado, no sé si fué a proposito o casualidad, pero me observó orinando y sosprendido me pidió perdón, pero se quedó mirando. Yo no pude contenerme y en lugar de esconder mi vagina, abrí las piernas; no puedo entenderlo pero lo hice, el se acercó a mí con su pene tieso de la mañana y me lo insertó en la boca, casí con furia; yo era feliz mamando aquello y con la puerta abierta sin cerrojo, le comí la polla como nunca lo había hecho y en apenas dos minutos tenía todo su semén dentro, explosionó dentro de mí y me lo tragué. Nos besamos, nuestras lenguas penetraron hasta lo mas profundo, me levanto el gersey y el sujetador y dejó mis tetas al aire, me las sobó hasta hacerme algo de daño, me dió la vuelta, bajo mi pijama y mis bragas y me hizo inclinar un poco, no pude gritar, me acababa de violar analmente, fué un dolor tremendo, solo lo había hecho unas pocas veces por detrás y con mucho cuidado y vaselina; estaba rota, pero mi estomago seguia con hormigueo y cada vez iba notando mejor como aquello se introducia una y otra vez en mi ano, profundo, me golpeaba, me sentia terriblemente follada, salvaje; algún familiar podía entrar y vernos en cualquier momento, fué una estupida locura. Se corrió otra vez dentro de mí, noté la sangre y el semén bajando por mi muslo y mi pierna. Me subí las bragas y lo abracé, le comí la boca, su lengua, su oreja; si hubiera querido le hubiera dejado volver a penetrarme, le hubiera dejado hacerme lo que quisiera. Le cojí el pene y me agache, subcioné las últimas gotitas de semén y le introduje suavemente un dedo en su ano, abrió un poco las piernas y gimió, le seguí chupando unos momentos hasta que me levanté y le coloqué sus calzoncillos, nos miramos y reimos, toco mis pechos sobre la ropa y nos dimos un besito en los labios.
Me lavé y cambié de bragas, me metí otra vez en la cama y aún dormido le hice una mamada a mí chico, me dijo que estaba extraña, me lo tragué y le gustó, casi nunca lo hacía.
No se que pasará con mi cuñado después de esto, pero le necesito.