Follado en el Video Club

Como fuimos sorprendidos y mientras unos decían que somos parte de la publicidad del local, otros alardean de mi penetrador, mientras se las sacaban y se masturban.

Follado en el Video Club…

Muy buenas a todos, desde este medio os hago saber de mis experiencias, me gusta contárosla de tal manera que os imaginéis que estáis participando, ya me gustaría que fuera así… deseando de que podáis disfrutar conmigo. Siempre me he esforzado a través de los años a mejorar, aprovechándome cualquier oportunidad para satisfacer o que me satisfagan, no suelo hacer amigos pues en verdad no los busco, aunque finalmente la amistad surge del mismo roce.

Como bien sabéis mis preferencias son los hombres maduros… sesentones en su mayoría, hombres que buscan aquello que tienen dentro y como el presente se darlo. Como casado no cierro puerta al sexo femenino y como tal, aprovecho todo lo que se me pone a tiro, no importándome mantener sexo tanto con casadas como divorciadas, solteras o cualquier relación que mantengan. No busco relación con aquellas o aquellos que no me gusten, ya que si me atraen algunas o algunos no me importan que sean gordas o delgadas, aprovechándome como que he dicho de cualquier oportunidad aunque a veces sean muchos a satisfacer, pues cuando estás en plena faena no sueles decir no.

Bueno comenzare… vale, mirad… descubrí un sex-shop un tanto especial en la calle Marqués del Duero esquina con la calle Trastamara, local que encontré de casualidad y más por la publicidad que me dio un muchacho, muchacho que se ganaba la vida de esa forma. Bueno continuo, tras ver la publicidad me quede picado por saber de este local, local que no era otra cosa que un Sex shop, cuya presencia allí fue llevado por la curiosidad.

Tras presentarme en la puerta, no espere mucho más y entre en dicho local, nada más entrar… prácticamente te das con un muro, muro que hace que no veas nada más a no ser que entres por una de las dos puertas, dándome cuenta que en cada una de ellas te hace saber que una es de entrada y otra de salida. Tras entrar te das cuenta lo bien que está estructurado, estaba muy bien organizado y acondicionado.

Cuando entre por primera vez, me quede un poco sorprendido por lo bien dispuesto que estaba, estaba distribuido en varios pasillos como si fuera un laberinto, diferenciando ciertas partes. En cada una de estas había accesorios de y para parejas, lencería, artículos de despedidas de soltera, consoladores, bombas de succión, anillos, lubricantes, muñecas u muñecos hinchables.

También tiene dos partes importantes: una sección de librería especializada y otra el videoclub, tan importantes estos que cuando estas dentro no te sientes observado, tiene pasillos cuyas estanterías te cubren completamente, dándote una sensación de privacidad que no tienes en otros. De esos que piensas que te podrían follar allí mismo y nadie se daría cuenta, bueno darse cuenta sí al menos si aparece a ese lugar… mmm!!.

Como todos los sex shop que tienen cabinas, estas están situadas al fondo. Cuyo arco de entrada que separa la tienda y el pasillo de las cabinas, tras entrar encuentras un despensero o cambiador de monedas, dos aseos y una vidriera que te muestra las películas que visiona en los monitores. Atreves del pasillo accedes a una de las diez puertas, puertas que aquellas que están en los extremos eran para mi sorpresa cuarto oscuro, donde lógicamente no hace falta deciros lo que encuentras… mmm.

La zona de la vidriera es una buena zona de ligue, sobre todo cuando miras con detenimiento las películas gay, miradas que das a entender que vas caliente. Os puedo asegurar que cuando el calentón es muy evidente, estos te invitan directamente a compartir una cabina, cabina que sabes perfectamente que se va a compartir y no precisamente lo que se va a proyectar. Muchos de estos acaban por proponernos compartir estos momentos con otros, momentos que pueden estar bien siempre y cuando nos guste la otra persona. Pues aunque hay cabinas que no se caben más de dos personas, otras libremente cabemos hasta cuatro.

Os puedo decir que en el interior de las cabinas están perfectamente equipadas, tienen dos monitores… el principal que es donde se ve la película está en la parte superior y el secundario, esta debajo del principal en cuyo monitor se proyecta cuatro películas a la vez de modo alternativo, pudiendo escoger la escena que queramos en cualquier momento con los botones y cambiar el volumen hacia arriba o hacia abajo. Cada una de las cabinas dispone de dos ventanitas con puertas y pestillos, ventanitas que podemos ver al vecino y si este desea compartir algo más que la película. Y para finalizar disponemos de un cómodo sillón individual, un dispensador de papel higiénico, una papelera y un perchero.

En mi estancia en este Sex shop no hice nada más que explorar dicho local y comprar, tanto vaselina como pope. No hice nada más porque no tenía ni tiempo ni dinero, aunque supongo que lo último era lo de menos, pues cualquiera de los allí presente me lo hubiera prestado a cambio de… bueno ya sabemos a cambio de que… mmm!!!. No recuerdo bien cuanto tarde en volverme a pasar, ya que este no me caía precisamente cerca como el de la calle Sierpes, pero siendo mi segunda visita, me adentre en la zona del video club y comencé a ojear las películas que allí había. No había nadie al menos eso me pareció  a mí, recuerdo que llegue a inclinarme a modo de llegar a una cajas que estaña en las baldas inferiores. Cuando vez como una persona pasa detrás de mí, persona que no me había percatado y que en ese momento vi sus piernas al pasar, no me incorpore sino que continúe inclinado, tampoco deseaba que este pudiera ver lo que había cogido.

Esta persona no continúo caminando sino que se detuvo detrás de mí, pensé aunque sé que no es lógico… que estuviera viendo algunas películas de la parte superior. Pero cuando note como se pego a mí y hacerme notar que estaba empalmado… uuummm!!!, me incorpore y pude verlo mejor… era un maduro canoso, complexión fuerte aunque con barriga cervecera y velludo. Me quede mirándole al tiempo que le salude, esperando contestación alguna…

  • “Que pasa”, solté.

Este no me respondió y solo se contesto en mirarme, ante su falta de modales y más viendo que este continuaba caminando, pasado unos minutos volví a inclinarme a coger algunas cajas de películas anime XXX del último estante, estante que estaba a mis pies. No pasando ni varios minutos cuando volví a ver esas piernas tras de mí, sintiendo en esta ocasión no precisamente como restregaba su miembro contra mis nalgas, sino estaba vez fue más descarado pues coloco sus manos en mis caderas. Soltando…

  • “Perdona que no te haya devuelto el saludo, no sabía que decir y por donde ibas a salir tu”, dijo.
  • “No he podido contenerme ni antes y mucho menos ahora, no veas el culito que tienes. Te pones de esa manera y es prácticamente una invitación, invitación que no me he podido rechazar… mmm!!!”, soltó nuevamente.
  • “Perdona, no era mi intención provocarte”, solté.

La verdad es que no hice nada por quitarme y mucho menos por echarlo, me gustaba como este se restregaba contra mis nalgas, estaba disfrutando y este animado, comenzó a acariciarme el pecho sobre mi camisa. Para continuar tales caricias por debajo de esta… mmm!!!, una vez que introdujo su mano bajo mi camisa, sentí su rugosa y fría mano haciéndome sentir escalofríos… mmm!!!. Soltándome…

  • “Te gusta… eeehhh!!!”, dijo.

Lógicamente no respondí… solamente me deje hacer. No dejando de restregar su miembro por mis nalgas, tiro con su otra mano de mi cuello hacia atrás, tiro para poder besar y lamer mi cuello… ooohhh!!!. Llegue a proponerle…

  • “Vamonos a alguna cabina o mejor aún, vámonos a algún cuarto oscuro… uuummm!!!”, solté.
  • “Noooo… deja, aquí estamos muy bien… además hay más morbo”, respondió.

Ignoro el tiempo que llevábamos allí pero para nada se me hizo eterno, este estaba proporcionándome mucho placer no solo por las caricias, sino por el morbo de donde estábamos, lugar que estábamos a expensa de ser descubierto o sorprendidos, ya sea por el empleado del local como por otros clientes… aaahhh!!!. Este dejo de acariciarme el pecho, descendiendo su mano hasta mi entrepierna, comenzando a magrearme sobre mi pantalón mi miembro… ooohhh!!!.

Quizas no contento o porque en verdad me notaba incomodo, acabo por desabotonar los botones de mi pantalón y tirar de ellos, continuando por introducir su mano entre mi ingle y la tela de mi short, sacando mi miembro fuera… aaahhh!!!. Comenzando a masturbarme al tiempo que el restregaba su miembro por mis nalgas, sintiéndola ahora más gruesa que antes… uuummm!!!, sintiéndola caliente e incluso notaba como mojaba de liquido preseminal la tela de mis calzoncillos… mmm!!!.

No dejaba de gemir… pero eso sí en un tono bajo, alternaba obscenidades y borderías con deseos… todo al oído, pero eso sí… de ahí no pasaba y para nada deseaba que nos marcháramos. Llegue a sentir como introducía su miembro por debajo de la tela de mi bóxer, sintiendo ahora su miembro desnudo sobre mis glúteos, transmitiéndome su excitación… ooohhh!!!. Percibí como aceleraba sus movimientos e intuí que pronto se vendría… uuuffff!!!, deseaba correrme pero aun más deseaba que me follara, cosa que este no me pidió, acabando por soltarme…

  • “Desearía follarte… pero no tengo preservativos, no me atrevo a hacerlo a pelo”, soltó.
  • “Me dejarías masturbarme con tu culo”, pidió.
  • “Si… uuummm!!!”, conteste.
  • “Me dejarías correrme en tus nalgas”, pidió nuevamente.
  • “Siiii… ooohhh!!!, córrete…”, conteste sumisamente.

Lo primero que hizo fue soltar mi miembro y sacar su miembro del interior de mi prenda, continuando por tirar de mi prenda hacia abajo, coloco su dura polla entre mis nalgas de modo que su tronco quedara alojado entre mis glúteos, comenzando a moverse de arriba hacia abajo al tiempo que me tenia sujeto por una de sus manos por mi cadera, mientras con la otra me acariciaba la espalda una vez que subió mi camisa hasta mi cuello, beso e incluso mordisqueo mi piel llevado por el placer… ooohhh!!!. Yo estaba sumamente excitado, tanto que no pude evitar comenzar a masturbarme… aaahhh!!!.

  • “Si… si… siiiiiiiiii… aaahhh!!!”, gritaba.
  • “Ya… aaahhh!!!... uuuffff”…aaahhh”, soltaba aliviado.

Comenzando este a correrse… mmm!!!, sintiendo como los chorros de esperma caliente chocaban contra mis nalgas unos, mientras otros caían sobre mi desnuda espalda. Mientras este entre espasmos gemía, suspiraba y sollozaba, haciéndome saber…

  • “Joder, no te haces una idea desde cuando no disfrutaba… ooohhh!!!”, soltaba y continuaba.
  • “Uuuffff!!!, como hubiera dado por haber tenido un preservativo y haberte follado ese coñito… aaahhh!!!”, dijo entre gemidos.
  • “Cuanto siento dejarte de esta manera, pero no puedo más estoy hasta mareado… uuuffff!!!”, soltó nuevamente.

Bajo mi camisa, subió mis calzoncillos primero y luego mis pantalones, no cayendo siquiera en que quizás pudiera ir al aseo a limpiarme. Tras marcharse no supe que hacer, si ir a las cabinas y esperar que alguno me satisficiera o irme a casa a lavarme, eso sí… no veáis la sensación de tener su corrida en mi espalda, no veáis como de pegada tenia la camisa… uuummm!!!.

En mi segunda visita me acerque de casualidad, pues tras haber estado en la consulta de Marques de Parada a recoger unos resultado de mi madre. Me dio por acercarme al sex shop de la calle Marqués del Duero, dándome cuenta que había personas fuera pero que estas personas estaban fumando. Continuo, cuando entre me di cuenta por primera vez que el mostrador se encontraba bastante alejado de la zona “conflictiva”, me marche cogiendo uno de esos pasillos de forma de laberinto, pasillo que me llevo a la zona del video club.

Donde deseaba ver qué tipo de películas tenia y que géneros, dándome cuenta que había hasta Anime, Manga e Hentai cosa que me encanto. Me situé en esta zona, estaba solo y me agache al tiempo que tome algunas películas que había del último estante, no pude contenerme y comencé a masturbarme sobre mi pantalón, notando lo excitado que estaba. Cuando apareció un hombre, escuchándole caminar desde atrás de mí hasta pasarme, dándome tiempo a dejar algunas películas y escoger otras. No paso mucho cuando me doy cuenta como este, comienza a magrear su bulto sobre el pantalón, bulto que no puedo dejar de mirar… mmm!!!. Finjo que no miro y cuando crees que ha dado resultado, veo para mi asombro como este tras bajarse la cremallera del pantalón saca del interior su miembro, miembro que aunque flácido era de muy buenas dimensiones.

Aquel miembro le mediría entre los diecinueve centímetros y los veinte centímetros… mmm!!!, miembro que este comienza a masturbarse delante de mí sin tapujo ninguno, no pudiendo evitar mirarlo más por el olor a polla que dejaba… mmm!!!. Ante nuestro silencio y viendo este que yo no daba el paso, se acerco a mí lo justo para poder alargar su mano hasta mi nuca y hacerme acercar. Llevado por la “invitación” de este, tome su miembro con una de mis manos y comencé primero a pajearlo, siendo él quien tras hacerme apartar mi mano… me la hace meter en la boca… uuummm!!!.

Mientras trago aquella polla… polla que comienzo a notar crecer en mi interior, este suelta el botón de su pantalón y lo deja caer, mientras continua con una de sus manos acariciar mis cabellos… ooohhh!!!. Como para olvidar aquel momento tan morboso, allí me encontraba yo en ese sex shop en la zona del video club, zona que para nada pensé que buscaría lo que encontré, pensé que cuando este mandara, nos iríamos al reservado… mmm!!!.

Este sacaba su polla de mi boca y me la restregaba por mis labios, introduciéndomela una vez tras otra… mmm!!!, tomándome nuevamente por la nuca y hacerme saborear sus genitales, genitales grandes como pelotas de tenis… uuummm!!!. Lamia su tronco y descendía por su venoso tronco hasta su glande, abriendo toda mi boca y atragantándome con el… uuuffff!!!.

  • “Ooohhh!!!... ooohhh!!!... uuuffff!!!”, gemía.
  • “Vaya puta estas echa… como chupas, uuuffff!!!”, soltó.

Estaba disfrutando de lo lindo cuando apareció otro hombre, hombre de mi edad o entorno a ella, hombre que este llamo a modo de hacer un trió. Cosa que me negué yo a participar y tras hacérselo saber…

  • “Lo siento, pero me marcho…”, solté.
  • “Pero porque”, pregunto.
  • “No me gustan los hombre jóvenes, solo me van los maduros… maduros como tú”, conteste.

Veo como este finalmente echa al otro hombre, preguntándome…

  • “Te gusta que te coman el culo”, pregunta.
  • “Si”, contesto.

Tras darme la vuelta, me indica que me apoye con ambas manos sobre la estantería y me incline… cosa que hago, mientras veo como cae tanto mi pantalón como calzoncillo a mis pies… uuummm!!!. Acto seguido lo veo agacharse detrás de mí al tiempo que me agarra mis nalgas con ambas manos, separando mis glúteos y sintiendo su lengua entre estos… ooohhh!!!. Dejo que este me coma el culo a su antojo, sintiendo no solo su lengua sino hasta como sus dedos se introduce dentro de mí… uuuffff!!!. Escuchando al tiempo que siento sus escupitajos en mi orificio, aprovechando este para introducirme dos de sus dedos de forma brutal… haciéndome gemir…

  • “Aaahhh!!!... aaahhh!!!, despacio… despacio”, suelto dolorido.
  • “Calla puta… “, responde.

Mientras se dedica a chupar y lamer mi orificio anal… alterna con pajearme… uuummm!!!, proporcionándome mucho placer… ooohhh!!!. Acabando por soltar…

  • “Quiero follarte, pero no tengo preservativos. Follamos a pelo”, suelta.
  • “Uuuffff!!!... ooohhh!!!, vale…”, respondo.

Acto seguido se incorpora y toma su polla, colocándola entre mis nalgas… siento su glande arder… uuummm!!!, comienza este a restregarla entre mis glúteos… haciéndome de rogar… aaahhh!!!. Cachetea mis nalgas al tiempo que me insulta…

  • “Te gusta puta mi polla, te voy a romper tu coño”, suelta.

No comprendo por qué motivo gusta golpear o abofetear las nalgas, dicen que excita y que pone, aunque en verdad es cierto y sobre todo, excita aun mas que me insulte que me humillen y vejen… ooohhh!!!.

Siento como la restriega una vez tras otra alternando con golpearme con ella, simulando que es una fusta… uuuhhh!!!. Hasta que se detiene sobre mi orificio anal y comienza con su glande a restregarlo alrededor de este, impregnándome de liquido preseminal... mmm!!!. Moviéndola sobre mi agujero de arriba y hacia abajo… uuummm!!!, hasta que de su solo empujon me inserta su glande… logro callar mordiendo una caja, siento como este retrocede y acto seguido vuleve a presionar, sintiendo en esta ocasión como al menos me entra la mitad, tras detenerse no más que un minuto… aaahhh!!!, comienza a penetrarme… uuuffff!!!.

Comienza a embestirme cada vez más rápido hasta chocar sus grandes y peludos genitales contra mis nalgas, llevado por el placer… su mano derecha deja de sujetarse a mis caderas. Comienza a ascender por mi vientre hasta mi pecho… uuuhhh!!!, comienza a pellizcarme el pezón con fuerza al tiempo que me pide al oído…

  • “Grita puta, grita de placer, grita que sepa que estas disfrutando… ooohhh!!!”, dice.

Callo a pesar del dolor… pues sabiendo bien que si grito, tendremos no solo publico sino hasta una bacanal… aaahhh!!!. Este no deja de embestirme y gemir de placer, mientras su mano izquierda abandona como la derecha mi cadera, mano que asciende hasta mi cuello, mano que tras tomar de mi cuello hacia atrás… mmm!!!. Sintiendo la lengua de este lamer mi cuello, mientras me da placer… mientras me satisface… ooohhh!!!, soltándome nuevamente…

  • “Joder… puta, grita que quiero escucharte gozar”, dice.

Lógicamente permanezco callado, cosa que este muerde mi cuello… no me da un simple chupetón, sino me da un muerdo… dejándome literalmente marcado. Comienzo a sentir como acelera sus embestidas, embestidas que debo de gozar en silencio, embestidas que descubrimos que otros disfrutan… uuuffff!!!.

Animando este a que se nos acerque mientras escuchamos como dicen de todo, pues mientras uno dicen que somos parte de la publicidad el local otros alardean de mi penetrador, observando cómo uno y otros sacan sus pollas fuera y se masturban… uuummm!!!. Sintiendo como este acelera las embestidas mientras yo estoy cortado ante tanto público, aunque estos no eran más de cuatro, cuatro que de tres para nada me apetecía satisfacer dada su edad… aaahhh!!!.

Tras correrse este y echar toda su leche dentro de mí, quedamos unos minutos descansando, mientras éramos vitoreados, abochornado entre tantos comentarios, mientras observaban como de mi orificio salía restos de su corrida. Mientras yo me reponía mis ropas y me acercaba al aseo, este hombre se quedo allí continuando con la fiesta, fiesta que ignoro con cuantos seguiría. Pues bien recuerdo que cuando entre en el aseo para limpiarme, sorprendido me vi al abrirse la puerta y ver aparecer uno de esos cuatro, siendo precisamente al único que no negaría.

Como olvidar como ese hombre se me ofreció a comerme el culo y limpiar los restos del enculador, como negar tal gesto a esta persona, dejándome hacer y sentir como el tío me comía el culo. Fallóndome con sus dedos al tiempo que me masturbaba, acabando por correrme y verme en la necesidad de chupársela, chupada que le di con gusto, pero ante la tardanza por correrse, no tuve más remedio que dejarle que me penetrara también. Penetración que me dio tras ponerse el preservativo, penetración que para nada dolió por el menor tamaño y grosor que la anterior, no tardando este en venirse.

Tras vestirme y asearme un poco salí, nadie reparo en mí como yo creía, nadie me dijo nada ni vitoreo, cosa que agrado bastante. Volví a este sex shop pasado unos años, pase por la añoranza de la experiencias, cuando llegue a donde debía de estar, me encontré  a este cerrado, llevándome en verdad un tremendo desconcierto. Pues no comprendo cómo está desapareciendo, todo aquello que nos ayuda a satisfacernos, comenzando por los cines X y poco a poco los sex shop-

Bueno aquí os dejo hasta una nueva experiencia… vale, ya me contáis que os aparecido y aquellos que se habéis estado conmigo, hacerme saber si me he olvidado de algo, os dejo y hasta pronto. Me gustaría decir eso que muchos me dice…

  • “Joder… no tienes sitio, como me gustaría estar en una cama y hacerlo bien”.

Uno de mis últimos follamigos, me soltó…

  • “No hay nada como hacerlo en el Charco de la Pava, no hay nada que de más morbo que hacerlo de esta manera, mirar y ser mirado como disfrutamos. Invitar a otros a acompañarnos, disfrutar de ellos como ellos de nosotros”.

Palabras más que reales, no hay mayor satisfacción que hacerlo de esa manera, teniendo el riesgo de ser descubierto ya sea por unos u otros. Pudiendo tener la posibilidad de aumentar el número de follamigos, pues si no se quedan mirando… cosa que corta,

Como suelo decir… me da igual donde disfrutemos, mientras que mientras gocemos ambos, pues para el momento que lo hacemos el lugar es lo de menos, ya que busco encuentros esporádicos a conveniencia, pues… No hay maduro que no desee ser mamados y hacer posible, follarse un buen culo.

Espero que os haya gustado tanto como a mí contároslo, disfruto con ello tanto que volviendo a recordar aquella experiencia no puedo remediar masturbarme, llenando de leche calentita y espesa toda… mmm!!!. Obviamente habréis notado que soy pasivo e incluso algo sumiso, siendo mis preferencia hombre maduros y muy maduros, bueno os dejo ya… espero que no seáis muy crueles conmigo, aunque me deje hacer y como una buena putita que dicen que soy. Mi email es Jhosua 1970 @ gmail . com , lógicamente va todo junto, hasta pronto.