Follada encima de una yegua

Hola la siguiente vivencia que les contare sucedió en mi época de joven, en ese tiempo yo tenia 24 años, ella se llama Verónica en ese entonces ella tenia 22 años estaba casada con un millonario dueño de algunos moteles, hoteles de mi ciudad y tenia una hija con ese tipo. Con Verónica nos conocimos en una discoteca nos gustamos desde el principio, al inicio no quería creerle cuando me decía que era casada y que tenia una hija pues tenia un cuerpo que parecía top model, bueno la historia de cuando conocí a Verónica, y la vez que la hice mía en el baño de un cine se las contare luego. Ahora lo que les quiero contar es la siguiente:

En ese tiempo para vacaciones solía ir a una finca fuera de la ciudad donde visitaba a unos familiares, esa finca es muy bella, tiene lago, caballos, es genial. Bueno la cosa es que invite a Verónica para dicho Edén, la muy infiel le dijo al marido que se iría a la finca de una amiga(que también se llama Verónica pero para no ahondar en confusiones la llamaremos Verito ), justamente la casa de Verito queda unos cuantos kilómetros antes de la de mis familiares así que aprovechamos para dejar a su hija en dicha casa mientras nosotros hacíamos travesuras por otro lado.

Estando ya en la finca de mi Abuelo Daniel, aproveche para montar la mejor yegua que tenia mi abuelo(La princesa), era una yegua blanca, como Verónica no sabe montar los dos nos subimos en Princesa, ella delante de mi, nos fuimos al lago, quería mostrárselo, quedo fascinada, nos bañamos tuvimos sexo en plena agua, nos salimos y estábamos descansando, ella ya se había puesto su calzoncito negro, cuando le dije que una de mis fantasías era cabalgar junto con una mujer desnuda, ella se sonrió, se quito el calzón y accedió sin ninguna protesta.

La subí en Princesa, me subí yo totalmente encuerado y comenzamos a cabalgar muy despacio, con el movimiento me comencé a excitar con lo cual el sargento cabezón(así le llamo yo a mi verga) se puso firmes, naturalmente ella lo noto con lo cual estando de espaldas hacia mi, agarro mi verga y comenzó a realizarme una paja, yo me calenté mas, la quería penetrar, seguimos cabalgando hasta que llegamos a un árbol donde había una rama que estaba justo a nuestras manos, estando hay aproveche para decirle a verónica que se volteara, así lo hizo, se coloco de frente a mi con la ayuda de dicha rama, yo sujetaba con una mano las riendas de princesa y con la otra me sujetaba de la rama, después con la ayuda de esa bendita rama le metí la verga a Verónica, con lo cual ella pego un suspiro: Ahhhh

Comenzamos a movernos mucho con lo cual princesa se comenzó a poner arisca, yo me solté de la rama y comencé acogerle las tetas con mi mano derecha, mientras seguía agarrado de las riendas con la izquierda, estábamos apunto de acabar cuando princesa comenzó a cabalgar, esta vez mucho mas rápido, y no pude sostenerme de la rama, princesa comenzó a cabalgar mas aprisa con lo que Verónica subía y bajaba mas aprisa, comenzó a decir: ahhhh, si, que linda yegua, sigue cabalgando, sigue, guauuu, mi vida esto es lo mejor que he hecho en toda mi vida, finalmente acabamos, entonces aproveche para agarrar con las dos manos las riendas y frene a princesa, nos dirigimos hacia el árbol, allí de lo caliente que estaba Verónica comenzó a mamarme la verga, se chupo todo con lo cual me excité nuevamente, la cogi parado y la apegue hasta ese árbol allí la cogi con furia, con lo cual ella se corrio nuevamente, finalmente la acosté en la yerba y la penetre patas al hombro en eso princesa salió despavorida, no nos importo y seguimos en lo nuestro hasta que acabamos. Nos levantamos todos chicoteados, fuimos hasta el lago, nos lavamos, nos vestimos y caminamos hasta la casa de mi abuelo la cual estaba bien lejos en relación al lago, pero no nos importo, por cierto la espalda de verónica quedo marcada por el árbol, lo cual le ocasiono graves problemas con su marido.

Finalmente nos fuimos de la finca, pasamos recogiendo a la hija de Verónica y nos fuimos.

Tuve otras aventuras en dicha finca pero eso se los cuento después.