Flower by Kenzo
Mi primer relato... Una tarde de autosatisfacción diferente...
Llevaba varios días con una calentura que no se me quitaba con nada. Desde que había empezado a ser sexualmente activa no había pasado tanto tiempo sin tener sexo. Estaba totalmente desbordada. Ocupaba mi mente noche y día. Venía masturbándome leyendo algunos relatos, pero no me alcanzaba. Mi mente, criada en un ámbito demasiado puritano, estaba comenzando a reconsiderar la compra de un consolador y me avergonzaba de reconocerlo.
Ese día, como tantos otros me había encerrado a estudiar. Realmente no podía leer ni dos renglones, mis entrañas ardían. Comencé a masturbarme, primero por encima de la ropa, acariciándome las piernas, soñando con que mis manos eran otras manos… hacía movientos lentos, marcando el trazo por mi cuerpo. Colé mi mano por debajo de la remera y me dediqué a masajear mis generosos pechos. Los pezones no tardaron en responder. Estaban erectos, ardían. Una agradable sensación recorría todo mi cuerpo, necesitaba satisfacerme. Era imperativo. Bajé mis pantalones y mi tanga. Dejando mi conchita totalmente expuesta. Seguí con los ojos cerrados acariciándome, pensando en otras manos. Jugueteaba en el área de mi conchita, acariciando los labios externos, recorriendo hasta mi ano. Luego metía un dedo en mi raja… Mmmmm…. Sí… yo gemía, abandonada al placer que me estaba proporcionando. Poco a poco fui masajeando mi clítoris, despacio… más rápido, con un dedo, con varios…. Cada tanto introducía algunos dedos en mi vagina, cada vez más abierta, que derramaba generosamente sus jugos para facilitar el juego. Estaba ida… no tardaría en correrme…. Con la otra mano seguía acariciando mis pezones, de vez en cuando levantaba mis pechos y chupeteaba mis pezones con la punta de mi lengua…. Mmmmm primer orgasmo… una oleada de placer me invadió… los espasmos casi me tiran de la silla en la que estaba sentada en el borde… Seguí masturbándome, acariciando mi conchita… pero esta vez no me alcanzaba…. Busqué con la mirada en mi habitación con qué ayudarme… realmente necesitaba algo adentro mío, los dedos sólos ya no alcanzaban…. Fue entonces que lo vi… Mi cara se iluminó con la sola idea y de un salto lo fui a buscar.
Era un Flower de Kenzo, me lo había regalado hace años un ex- novio y estaba casi vacío. Perfecto. Su forma alargada y curvada era justo lo que estaba necesitando… Volví a mi silla y seguí masajeándome el clítoris, mientras con la otra mano apuntaba la base del perfume en mi cueva. Mmmm…. Estaba frío, no había tomado la precaución de templarlo…. Pero sin dudarlo fui introduciéndolo de a poco, estaba muy excitada y no quería esperar…. Mmmmm qué placer… realmente añoraba tener algo dentro mío… tantos meses sin sexo hacían que mi vagina tomara casi con cariño el frío envase. Una vez que estuvo todo adentro, seguí masturbándome, mientras bombeaba lentamente el frasco en mi vagina…. Luego ya era todo un frenesí… me correría de nuevo… y bombeaba cada vez más rápido. Ahhh… sí… justamente lo que necesitaba…. El orgasmo fue sensacional… sacudiéndome entera… los espasmos se sucedían unos tras otros, mientras yo seguía bombeándome con el perfume… Mmmm… indescriptible… mis ojos cerrados y mi cuerpo totalmente arqueado no daban crédito al placer que sentía… y sola… Otro orgasmo sucedió al anterior…. Y estuve un rato totalmente perdida en mi nube de placer… Finalmente, despacio quité el envase de mis entrañas… me fui hasta mi cama, donde mi tiré a descansar un rato, totalmente agotada por la sesión de placer que me acababa de dar…